VIGILANTE NOCTURNO
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Alonso70.
La hora llego las 6 pm, pacientemente espere a que todos se fueran y a que otros me preguntaran si me iba a quedar a trabajar un rato mas, una vez que nadie se quedo fui a la caseta de vigilancia para decirle al poli que me iba a dar un baño en las regaderas y que no apagara el calentador del agua, tenía el baño para mi nada mas, saque mis dildos, y como tienen ventosas los puse en las paredes de la regadera así pude sentirlos mientras el agua caliente me caía en el cuerpo, después de poco mas de 30 minutos por fin alcance el orgasmo, me termine de bañar, y salí del baño, una vez entando en el área de vestidores llego Ricardo el vigilante en turno, ya terminaste Alonso? me pregunto, si ya estoy listo, te puedo encargar los teléfonos en lo que me doy un regaderazo? Si claro descuida me fui a la recepción y ahí termine de vestirme, al estar guardando mis cosas, note que uno de mis dildos faltaba, ¡Idiota! Pensé para mi, lo olvidaste en el baños, Ricardo salió, con pantalón y camiseta puesta y con una toalla secándose el cabello, diciendo listo, ho creo que olvide cerrar mi locker le dije regresando al baño para buscar mi dildo.
Espera esto fue lo que olvidaste y ahí de la cintura saco mi dildo, vaya Alonso no pensé que te gustaran estas cosas, ho no, no es lo que tu crees, descuida Alonso guardare tu secreto, no es lo que piensas repetí, pues es una pena, porque creí que te gustaban estas cosas como a mí. Entonces me quede sin saber que decir, Ricardo por el contrario siguió diciendo, cuando lo vi, te imagine gozando con el dentro de di, y al mismo tiempo que decía esto se sobaba el pene por encima del pantalón, he buscado a un amante durante mucho tiempo, pero es difícil, tu me gustas mucho, pero ni modo de decirte no quería meterme en problemas laborales.
Yo lo escuchaba viéndolo a los ojos mientras él al mismo tiempo se acercaba a mi, y no me di cuenta cuando lo tuve frente a frente a escasos centímetros de mi cara, él seguía hablando pero de repente ya no hubo más que decir, dejo de hablar y puso su boca en mi boca, al mismo tiempo que sobaba mis nalgas con sus manos, después del beso, me miro y me dijo no sabía que te gustaba el sexo rudo, metiendo mi dildo detrás de mi pantalón, y volviendo a besarme, yo me separe de él diciéndole ya es tarde, no importa yo tengo toda la noche dijo, y si, era el vigilante nocturno, con sus manos tomo mis hombros obligándome a hincarme frente a él, al mismo tiempo desabrocho su pantalón dejando escapar un ejemplar hermoso, grueso, blanco, circuncidado, y aunque flácido se notaba de muy buen tamaño, tímidamente lo toque con mis manos, para después meterlo a mi boca en donde empezó a crecer, hasta que ya se me dificultaba meterlo por completo, así estuve un buen rato, sinceramente yo ya no me sentía tan encendido como lo estaba una hora antes, porque ya me había venido, pero aun así, me estaba prestando a lo que este tipo deseara, después de llenar mi boca con su enorme verga, se sentó en su silla, me levanto y me dijo bájate los pantalones quiero cogerte, me puso de espaldas a él, y con sus manos abrió mis nalgas, introduciendo su cara en mi ano, después separándose de mi dijo, mmmm chiquita veo que te lavaste muy bien ese culito tan rico que tienes, además me encanta que estés así de lisito no sabía que fueras lampiño, no lo soy, me depilo todo el cuerpo, y diciendo esto, termine de desnudarme quitándome el suéter y la camisa, y bajándome los pantalones con la ropa interior hasta los tobillos, Ricardo me tomo de la cintura y me acerco a su pene erecto, invitando a sentarme en él, poco a poco lo hice, dejando escapar gemidos de dolor y de placer, haa, haaa, papi, estas enormeee, que grande estas, despacito amor, él no decía nada solo sujetaba mi cintura y una vez teniendo por completo su herramienta dentro de mi, empecé a acostumbrarme a ella haciendo movimientos circulares, y después de tras para adelante, esto lo calentó, y empezó a subirme y bajarme de golpe, al principio dolió pero después era yo quien lo hacía, hooo papi, asiii asiiii que rico me tomas, siento que me vas a partir en dos, él solo decía que rica estas no sabía que fueras tan puta y que te gustara tanto la verga, no sabes cuantas veces me masturbe pensando en tu culo y que te tenia así ensartadita, te gusta mami, te gusta ser mi puta, siiii me encanta ser tu puta, me encanta tu verga, ya no dijimos mas, Ricardo se salió de mi, se quito el condón y dejo escapar un chorro de esperma caliente sobre mi espalda y mis nalgas, después, restregó su pene en mi piel, hasta dejarlo medio limpio, se sentó en su silla exhausto, yo me hinque y me volteé quedando de frente a él metí su verga aun de buen tamaño en mi boca para terminar de limpiarla, haciendo que él se retorciera y soltara hasta la última gota de su semen delicioso. Después de eso, me dijo, vas a tener que volver a bañarte, mmmm si pero en casa le dije, porque quiero llevarme tu semen en mi piel.
El fin de semana paso rapidísimo, y lo pude ver el lunes temprano cuando hacia el cambio de turno, nos saludamos como siempre que nos veíamos, sin hacer ninguna seña o gesto que delatara nuestra aventura, le pregunte si no le tocaba trabajar, y me dijo no, hoy descanso pero mañana llego temprano al cambio de turno y me gustaría darte una sorpresa mañana por la noche, ojala y no me equivoque con lo que te estoy preparando y te guste, bueno ya que tu te vas a arriesgar entonces yo también te tendré una sorpresa y haber cual de las dos le gusta más a quien, bien hasta mañana, nos despedimos y ese lunes paso como tantos, el martes me levante muy temprano, prepare dos mudas de lencería una blanca y una negra ambas con bodys que tenían ligueros incluidos y medias al muslo, llegue y nos saludamos de manera normal, a la hora de la comida pedí permiso de llegar una hora más tarde diciéndole a mi jefe que pagaría esa hora en la noche, quedándome a trabajar una hora más y que podía decirle al vigilante que me checara el tiempo, mi jefe accedió, en realidad no fui a comer si no lo contrario, me fui a casa a bañarme y lavarme el culo por dentro ya había desayunado fuerte en la mañana, una vez que mi culito estuvo limpiecito y mi estomago vacio, me puse la lencería blanca con una tanguita rosa pastel, regrese a la oficina y pacientemente espere a que dieran las 6 de la tarde, a las 6: 20 ya no había nadie en la oficina solo Ricardo y yo, le marque a su extensión diciéndole estas listo para la sorpresa? si, ok allá voy, me quite la ropa dejándome solo la lencería, abrí la puerta de la recepción y ahí estaba él, solo con la camisa puesta sin pantalones y sin trusa, con el pene totalmente erecto, cuando me vio, dijo, wowww, que rica te ves, te gusta le dije, es la sorpresa que te tenia, pero claro que me gusta ven acércate, me beso metiendo su lengua en mi boca al mismo tiempo que masajeaba mis nalgas de manera vigorosa, después bajo su boca apoderándose de mis tetillas, dejándome un par de chupetones muy sexys, después yo me hinque y metí su delicioso trozo de carne en mi boca, mmmmm papacito, que rico sabes, ya la quería probar de nuevo, te gusta mami, siii me encanta tu verga, la devoraba como si fuera un niño lamiendo una paleta de caramelo
El solo se retorcía y gemía diciendo lo rico que sentía, asiii asii putita, trágatela toda, hundiendo su enorme verga en mi garganta, del esfuerzo por tenerla dentro por completo, llore, y en varias veces me dieron ganas de vomitar, pero me contuve, después separándome un instante de su verga levanto mi cara diciendo, espera ahora me toca darte la sorpresa que te prometí, espero que te guste, ok, me levante, y me dijo que no tenía que ver, así que me vendo los ojos, y me llevo a uno de los sofás de la sala de espera, una vez acostado ahí, empezó a acariciar mi piel, besaba mis pies, con todo y las medias, yo estaba tan caliente que deseaba sentirlo mas, así que me desabroche el liguero de las medias, quitándomelas, esto le facilito la tarea quedando mis piernas desnudas, cuando sentí sus besos en mi piel, tuve ganas de venirme pero haciendo un esfuerzo, me contuve, sentí que se separo, y eso me dio la oportunidad de controlarme por completo, esa era la sorpresa le dije? tardo en responder y diciendo no, sentí su pene en mi boca, que ávido empecé a lamer, después sin sacar su verga de mi boca, tomo mis tobillos con sus manos alzando mis caderas y abriendo mis piernas al máximo, mi culito quedaba totalmente al aire y vulnerable para lo que fuera, yo no le preste mucha importancia a eso, e incluso lo ayude sujetando mis piernas con mis propias manos, el aprovecho eso para tratar de introducir un dedo en mi culo, yo respingue un poco, haaa te falta lubricarte dijo, yo asenté con la cabeza sin poder hablar por tener su verga en la boca, entonces sentí una lengua en mi culo, y unos dientes que mordizqueaban suave mente mis nalgas, wowww toque la cabeza de esa persona, y él dijo, tranquilo, esta es tu sorpresa
Después de dejar lubricado mi culo por las deliciosas lamidas, sentí un pene enorme tratando de entrar en mi culo, toque con mis manos el condón, y termine por relajarme y dejar que entrara, la verdad me incomodo porque si estaba algo grande, quise detenerlo pero el tipo se sujeto fuerte de mi cintura y termino por clavarme esa enorme verga dentro de mi, Ricardo solo acariciaba mis cabellos diciendo tranquila chiquita tranquila, ahorita se te pasa, retiro su verga de mi boca, y gemí como loca, haaaa haaaa me dueleee, quise quitarme la venda de los ojos para verle el rostro a mi cogedor en turno pero Ricardo me lo impidió, espera no, no lo hagas, de repente sentí el cuerpo de mi cogedor sobre mi, tomando mis tobillos con sus manos pegando su pubis a mis nalgas, se escuchaban ruidos como aplausos, y cada vez mas intensos, ya no pude resistirme, deje que me cogiera a placer, mientras tenia la verga de Ricardo en la boca, después Ricardo comenzó a tocar mi cuerpo, recorría mi piel con sus manos, lo extraño fue que después sentí mas manos, tocaban mi torso, mis tetillas, mis piernas, incluso otro pene en mi mejilla además del de Ricardo que tenía en la boca, pero aun así no oponía resistencia alguna, entonces Ricardo dijo, creo que ya es hora quitándome la venda de los ojos, pude ver a un tipo moreno y delgado, que sujetaba mis tobillos, y uno mas alto y blanco como Ricardo parado junto a mi esperando su turno, turno que se dio de inmediato, cuando Ricardo saco su verga de mi boca, de inmediato fue ocupada por este tipo, es cierto Ricardo se ve que le encanta la verga, cómo te llamas putita, y sacando un instante su verga de mi boca le respondí Aly, es un placer, amor, yo soy Ángel, y él tipo que te está cogiendo se llama Abel, después de eso, solo se limitaron a hacerme suya, después de un rato cambiaron posiciones siendo Ángel el que me puso hincada sobre el asiento del sofá recargando mi torso en el respaldo poniéndose él detrás de mi de pie metiendo su verga de un solo golpe, mientras Abel se paso detrás del sofá quedando frente a mi dando me su verga a lamer, después Ricardo nos interrumpió, sentándose junto a mi, toca mis piernas y me nalgueo varias veces, en cada azote me preguntaba si me gustaba la verga cosa que yo afirmaba de inmediato asentando con la cabeza por que no podía hablar por la verga que tenía en la boca, entonces Ricardo paro el acto, diciéndome ven, me paso a donde él estaba sentado, sentándome en su verga quedando de frente a él, Abel volvió a meter su verga en mi boca mientras Ricardo subia y bajaba mis nalgas sobre su deliciosa tranca, yo me sentía en la gloria, haaaa haaa mmmffmmm mmmmfmmm, Ricardo de vez en cuando jalaba mis cabellos separándome de la verga de Abel para que pudiera decir algo, o responder a sus preguntas, ¿Te gusta mami? te gusta como te cogemos? siiiii siiiii me encantaaa, cojanme rico asiiii, soy su puta háganme lo que se les pegue las gana.
No les hubiera dicho eso, Ricardo pego mi pecho a su pecho, y con sus manos abrió mis nalgas sentí la lengua de Ángel que lamia la verga de Ricardo y al mismo tiempo mi esfínter, wowwww, eso me calentó mucho, y yo me relaje aun mas, abrí por completo mi culo, sabía lo que pasaría, y aunque tenía un poco de miedo, lo deseaba, no tardo mucho en darse, la punta de la verga de Ángel se sintió en la entrada de mi culo, un grito de dolor se escapo de mi garganta, haaaayy haaaayyy te duele mami preguntaron, siiiii siiiii me duele, te la saco? noooo nooo me la saques, métela toda, rómpeme el culo dámelo todo, y así, entro poco a poco, después olvidaron las sutilezas, ambos me bombearon de manera salvaje, yo lamia la verga de Abel, pero ya no me la metía por completo en la boca, para poder hablar, wowww que delicia, que rico me están cogiendo, asiiii asiii no paren, me parten en dos cabrones, asiiiii asiiiii, después metía la verga de Abel en mi boca, y cuando tenía ganas de decir cosas sucias me la sacaba, ambos terminaron al mismo tiempo dentro de mi, afortunadamente ninguno de los condones se rompió, Abel se derramo en mi cara, y después limpie los penes de los tres con mi boca mi lengua, nos tumbamos en el sofá ya mas relajados, Entonces Ricardo pregunto, te gusto chiquita? hoo siii estuvo riquísimo, pero tu no te veniste nena, no importa lo disfrute mucho, yo seguía tocando las vergas que tenia al alcance de mis manos, aunque flácidas, me gustaba sentirlas, Ángel dijo, oye me dio hambre hay manera de ordenar algo? si aquí cerca hay una cocina que cierra tarde, después de las 11:00 apenas son las 8:15 seguro aun hay servicio.
Ricardo ordeno, me pregunto si quería algo y le respondí bromeando, una verga para poder venirme yo también, Ricardo tomo el teléfono y escuche que alcanzo a decir, siiii cabron, sé que no me crees pero es tu oportunidad, ya ves cuantas veces lo hemos platicado, siii aquí lo tengo encueradita y bien puta, no le preste mas atención, como tenia semen en le cuerpo, decidí ir a las regaderas, después de tres minutos entraron Ángel y Abel, y me dieron su vergas a lamer, cosa que acepte de mil amores, por lo caliente que aun estaba, no sé cuanto tiempo, estuve mamando esas vergas en el baño al final termine por ponerme en cuatro para lamerlas teniéndolos a ellos sentados en la banca de las regaderas, entonces Angel pregunto, que puta te ves mamando, yo alzaba la mirada y mas disfrutaba de esas vergas, volvió a preguntar te encanta la verga verdad? siiiii pues que crees las sorpresas no terminan, te buscan, y al voltear vi a panchito, el chico que hacia la entregas del lugar de comida rápido que acostumbramos a pedir a la hora de la comida, lo vi me miro diciendo mi nombre como incrédulo…¿Alonso?, note una fuerte erección en su pantalón, entonces le dije, ven él se acerco sacando su pene del pantalón, de inmediato lo metí en mi boca, entonces el me dijo, Ricardo y yo apostábamos a ver a quien de los dos se le hacia contigo, pero a ninguno se nos daba el valor de insinuarte algo, deje de mamarlo y le pregunte, ¿Desde cuándo querías tener sexo conmigo? huyy desde la primera vez que llegaste a comer al restaurant, tienes unas nalgas que se ven riquísimas, pero no soy obvio, por eso mismo no nos atrevíamos a decirte nada.
Haaa, bueno y ahora? sigue mamando lo haces riquísimo, después se desnudo, y me tomo ahí en el suelo de las regaderas, ya no me contuve grite como la puta que me sentía, asiiii asiiii cógeme duro asiiiii, al oír mis gritos los demás fueron a ver, alternaba sus penes en mi boca, Panchito, no dejaba de bobearme, hasta que dijo, me voy a venir me voy a veniiir, entonces saque su pene de mi culo y apenes le quite el condón, trate de meterlo a mi boca, parte se derramo en mis mejillas lo demás me lo trague, al ver eso, todos se empezaron a masturbar y a venirse en mi cuerpo, mi cara mi pecho, mis piernas, yo me embarraba el semen en donde pudiera, hasta que por fin terminaron, volví a quedar todo pegajoso, Panchito se fue pero regreso por ahí de la media noche, durante esa madrugada me estuvieron cogiendo en todas las formas habidas y por haber, llenando de semen mi cuerpo en varias ocasiones, y haciéndome que probara el semen de todos, yo solo tuve dos orgasmos, por ahí de las no supe a que hora se fueron hasta que por ahí de las 7:00 de la mañana Ricardo me despertó, diciendo Alonso, metete a bañar, porque en una hora empiezan a llegar todos, entre al baño y me reanimo, el resto del día lo pase con mucho sueño.
A Ricardo lo relevaron a las 8:00 el vigilante que lo releva es Don Braulio un señor ya grande mayor que yo, con el cual también tuve relaciones, pero esa…esa es otra historia.
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