wachiturros
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por doogiestyle.
Conocí a un chico por el chat tenia 15 años y me pareció muy agradable su conversación y lo morboso que resultó ser por la red a la edad que tenía, acordamos vernos y así fue, aparentaba esa edad o quizás menos, algo afeminado pero solo si él adoptaba esa actitud, se notaba lampiño, delgado y con cara de niño aun, tan alto como yo de 1.75. Blanquito y de bonito rostro.
Un amigo nos prestó su depa y fue ahí donde me lo culié como quise, en una pequeña cama, gocé de su hermoso trasero lampiño, limpio bastante abierto, su boca golosa chupaba con mucho deseo mi gran pene y lo que quiso, no hubo restricciones no hubo un NO a nuestro encuentro caliente, lo ensarté de muchas maneras y gemía como germa, traté de aguantar la leche que estaba por salir en muchas ocasiones por que ese culo estaba muy bueno; él por su parte gemía como si fuera su primera vez y eso era excitante, después de casi una hora de besos caricias y mucho deseo nos corrimos al mismo tiempo llegamos al orgasmo mientras se encontraba sentado en mi verga cabalgando como si en cada arremetida quisiera meterse hasta los huevos, me encantó recibir su abundante lechada en mi barriga, y otro tanto salpicó hasta mis tetillas y hasta mi cara la cual limpio con su lengua hasta quedar ensartados en un largo beso probando su manjar caliente aun y dulce como él.
El chico era fanático de mis relatos que escribo y me contaba que era un deseo hecho realidad haber gozado de esa experiencia y que la escribiera y plasmara en una historia, pero……. cuando todo se presta para un encuentro: una cama en un cuarto, pues no hay mucho que contar mas que el sexo en sí, y entre platica y platica le hice saber como logro escribir un relato morboso, entonces me contó una experiencia sexual muy rica y sabrosa que lo titulo WACHITURROS.
Este chico se llamaba Rodrigo tenia por ese entonces 13 años a días de cumplir 14, ayudaba en un pequeño restaurante por donde se ubican muchos talleres de mecánica en surquillo ahí vendía menú, su labor empezaba cerca del medio día por lo que desde las 8 ya debía estar aseando el lugar; resulta que un día empezó con su rutina diaria, ya se lo habían cachado desde los 12 y le gustaba usar y comportarse como una nena; él abría el negocio sólo y una de sus obligaciones era baldear el piso, para esto usaba unos short bastantes cortos como el que usan las mujeres; a dos casas de ahí se ubicaba una tienda donde vendían licor desde temprano y desde hace rato 3 chicos entre 18 y 20 años con el típico atuendo de wachiturros corte de pelo rapado a los lados un mechón al centro, sus pantalones pitillos a las canillas y polos pegados, estaban jalando trago y parecían “bien sazonados”, estaban en la calle en la misma puerta de la tienda hablando de mil cosas.
Rodrigo a pesar que le asustaba la situación no podía demorar su chamba por lo que procedió a limpiar como lo hacia todas las mañanas, ni bien comenzó a trapear notó que los 3 chicos dejaron de conversar y se le quedaron viendo, él seguía en lo suyo hasta que escuchó que lo cireaban y escuchaba lo rico que se le veía en ese short apretadito, Rodrigo no le daba importancia pero le gustaba tal situación hasta sonreía con el hecho; era una zona no muy transitada por lo que pocas personas y carros circulaban, uno de los wachiturros entonces casi frente al chibolo se saca la pìnga y comienza a mear, Rodrigo se ofende ante tal hecho pero no puede disimular ver que la verga del chico este estaba en semi erección y con tan potencia de chorro que casi le llega a mojar el piso del local, todo esto ante la risa de sus patas, el chico entre asado y excitado les dicen que; “ apunte para otro lado”, pero ellos le dicen que no tienen a donde orinar y si les podía prestar el baño, el chibolo los miró mejor, notó que estaban con un turrón bravo bastante mareados , eran mas altos que él y flacos y mientras le conversaban se tocaban las vergas; Rodrigo miraba con mas atención al pata que había orinado ya que aun le quedaba notoria la erección que tenia y se notaba en su pantalón, ya era evidente que estos sabían la nota del chibolo, quien les dijo que podían pasar al baño sin problemas uno por uno, se la estaba jugando.
Ya en el restaurante mientras hacían turno para miccionar le preguntaban entre otras cosas si le gustaba vestirse así, que le quedaba bien el short y que se le formaba un rico trasero, Rodrigo a todo esto contestaba halagado sin disimular su amaneramiento; uno de ellos mas directo le preguntó si le gustaba la pinga acercándose a él, pero a esto Rodrigo se alejaba diciéndole: “puede ser”, luego le dijeron: “a quien de ellos era mas simpático y a quien escogería su fuera germa?….. Los tres eran bastante parecidos pero Rodrigo escogió al que orinó frente suyo, todos rieron dijeron que lo había escogido por pingon pero a pesar de ser cierto el chibolo se hizo evidente y volvió a decir: “puede ser”. L a conversa se fue volviendo mas caliente hasta que uno de los flacos dijo que tenía un súper miembro y que si Rodrigo lo quería ver; él dijo: “normal” y ahí sin mas ni mas delante de todos se abrió la bragueta del cierre y sacó un pene semi flácido, todas las miradas se centraron en Rodrigo quien se le quedó mirando sin hacer nada, “agárrala pe” le dijeron, pero el chibolo no se animaba, “agárrala pes huevon” dijeron en voz mas alta casi ordenándole así el chibolo se acercó palteado, el wachiturro ahora estaba con la pinga algo erecto al presentir que una manitas pequeñas lo iban a coger, le dijo que se la pelara y se la corra, y eso hizo………. descubrió una gran cabezota rosada y su tronco comenzó a ponerse mas duro aun pronto ya tenia en su mano un gran pene largo y duro, “vamos a cacharlo” dijo uno de ellos, pero Rodrigo dijo que no que lo podían ver, así que uno de los wachiturros cerró la puerta levadiza y el lugar se quedó semi oscuro, abría que acostumbrarse a la oscuridad lo jalaron cerca del baño y sin mas lo hicieron arrodillar bajándole ala mismo tiempo su short; Quedando ahora a la altura de los penes de los chicos Rodrigo hizo lo que mas le gustaba, mamar pingas, comenzó a lamer tremendas lanzas de flacos pingones que olían a sudor, a trago, a orín, a leche de pajazos que se hubieran metido con anterioridad, ahí estaban con los huevos afuera sacudiendo sus pichulas para que se las mame, estaban como desesperados metiéndoles hasta dos pingas en la boca; Rodrigo pendejo ahora usaba sus manos corría unas y mamaba otra, podía sentir la leche que ya empezaba a lubricar los glandes, cada verga era diferente unas mas largas y otra muy gorda…………”ya suficiente” dijo uno………… y le ordenó ponerse de pie y ni mas comenzó a pasarle la pinga por el trasero redondo, lampiño y paradito de bebe. “Que rico culo” exclamó y dirigió su pinga ensalivada hacia el agujero pero no entraba… “mierda decía “nunca eh cachado por el culo y menos a un cabro” dijo que maldecía; “puta huevon es mas rico” habló otro y mientras decía esto lo apartó se bajo éste todo el lompa se metió un pollo de saliva en su cabezón y en el culo de Rodrigo y en una se la zampó hasta adentro, el chibolo gritó fuerte pero le taparon la boca; Rodrigo los había provocado ahora estaba recibiendo lo que le gusta pero a la manera de ellos, el wachiturro este lo tenia bien ensartado mientras se lo cachaba rápidamente como los perros, “a laaaaaaaa que rico”, Rodrigo lagrimeaba de dolor pero luego su culo se fue adormeciendo y luego de un rato ya no lo sentía, dejaron de taparle la boca y siguió chupando pingas que estaban ya bastante lubricadas por la agüita de coco que le salía al ver la escena erótica, este pata se demoraba un ratazo y no se vaciaba seguro de tanto trago que se metió sus patas ya querían comérselo también y mientras le chupaban se metían un porrito de grifa, el mete y saca había logrado en Rodrigo que se excitara y su pequeña verga se paró ya estaba medio asustado por que era una hora aproximada que llegara las demás gente del restaurante, y como buen pasivo había aprendido como hacer venir rápidamente a su cachero y comenzó a cerrar y abrir el culo para que se viniera rápido
Y así sucedió, éste dijo” este conchesumadre que rico se mueve mierdaaaaaaaaaa y al mismo momento se venia en una corrida larga y sabrosa para él, cuando dejó de moverse lo empujaron y entró el otro quien era su primera vez en el sexo anal, Rodrigo sabia esto y en una cuando se la metió no sintió mucho dolor y comenzó a abrir y cerrar el culo y este eyaculó mas rápido, el tercero quien tenia la verga mas gorda pero no menos grande quería metérselo al hombro y le hizo quitarse el short, lo subió a una de las mesas y así se lo clavó, “puta mare” requintaba “lo han dejado mas abierto y resbaloso” pero igual sentía caliente el agujero, ahí vieron que la verga de Rodrigo estaba erecta y dijeron que este chibolo era bien cabro por que le gustaba y comenzó a bombearlo bien duro hasta que también eyaculó y así de rápido se apartó del chibolo. Este atinó a decirles que se fueran rápido que esta por llegar los demás empleados, el olor del local respiraba a semen, sexo, humo, salieron mas rápido, Rodrigo apenas se puso de pie no pudo evitar que tanta leche depositada en su culo escurriera por sus piernas, aun así levantó nuevamente la reja y ahí mismo llegaba las cocineras y la dueña; le recriminaron acerca del olor y del porque echaba tanta lejía, Rodrigo sonrió entre excitado y asustado y se puso nuevamente a limpiar a lo lejos entre los carros escondidos veía a los wachiturros ahora sus cacheros que se reían y le hacían gestos….él solo se sonrojó.
Esta historia me la contó aun estando en la cama desnudos, ambos con una gran erección de lo excitado que fue escuchar su relato y él de contarlo, así que nuevamente me lo caché pero con mas ganas por perra, me pidió lluvia dorada y que le orine dentro, sus fantasías fueron cumplidas.
Espero sus comentarios para retomarla escritura de mis relatos que escribo con mucha emoción y excitación. Gracias.
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