Yo 13 y el 45 parte 2
Continuación de los encuentros que tuve con un señor mayor, a mis 13 años de edad..
Hola! Perdón por tardar tanto en subir la segunda parte. He estado bastante ocupado pero aquí se las traigo. Perdonen si la redacción no es tan buena, no quiero tardarme mucho en esto.
….toda esa noche no pude dormir por estar recordando lo que había pasado en el metro. Cómo les conté en el anterior relato, me masturbe varias veces recordando el tacto de ese señor sobre mi verga puber. Era la primera vez que tenía un encuentro de tipo sexual, siempre fantaseaba en cómo sería y creaba mil escenarios sobre mi primer encuentro sexual y ninguno se acercaba a lo que pasó jajaja, pero en fin, al día siguiente de lo ocurrido, iba otra vez para mí secundaria.
Durante el camino iba tranquilo, no creía que se fuera a repetir aquello. Pensaba que sería una experiencia única y listo. Sin embargo al llegar a la estación pude ver de lejos al señor recargado sobre la pared buscándome. Yo entre en pánico, mi corazón empezó a latir muy fuerte.
Aunque quería sentir de nuevo esa rica paja. Me daba miedo la situación.
Sin embargo la calentura me pudo más y fui hasta donde el señor. Me forme para subir al metro y rápidamente el tipo se puso detrás de mi. La adrenalina de saber que otra vez sería manoseado en el transporte empezó a erectar mi verga. Estaba sintiendo como se marcaba mi bulto en mi uniforme…y en eso llega el tren.
Como de costumbre fue una avalancha de personas y el ingreso fue a base de empujones. Pero ya no me molestaba, pues sabía que entre más gente entrara, más libertad había de ser manoseado. El señor se colocó cara a cara de nuevo y está vez no perdió ni un segundo.
Empezó a bajar mi cremallera, bajo mi boxer y de un solo movimiento saco mi verga. No teníamos mucho espacio, así que empujó a algunas personas para crear una pequeña separación entre nosotros y nos aseguramos de tapar nuestro acto con nuestras mochilas y brazos.
Empezo con la masturbación, bajaba su mano y la subía lentamente. Dejando al descubierto mi glande y volviendolo a cubrir con mi prepucio, aprovechaba mi líquido preseminal como lubricante y de vez en cuando subía su mano para chupar sus dedos discretamente.
Desafortunadamente llegue a mi estación, sin embargo una parte de mi no me dejó salir del tren…quería seguir disfrutando de sus dedos. Así que deje pasar mi estación sin importarme llegar tarde a la escuela. No quería desaprovechar esta oportunidad.
El señor seguía con lo suyo, exploraba cada centímetro de mi verga y me apretaba de vez en cuando haciendo que mi verga se hinchara más. Cuando de pronto siento su mano dentro de mi pantalón buscando algo más…mis huevos. Igualmente los sacó, dejando mi miembro cien por ciento al aire libre, los masajeaba y jaloneaba con cuidado. Yo simplemente estaba en éxtasis. De a ratos no podía controlar mis gestos y cerraba mis ojos del placer. Que la gente nos descubriera ya no me importaba tanto, sino que me excitaba aun más.
Pero en fin jsjs, para resumir. Esto se repitio muchísimas veces, con el mismo procedimiento. Ese señor me llegó a masturbar más de 10 o 15 veces. Nunca me vine porque desde puberto, sacó bastante leche y eso si no había forma de ocultarlo. Hubiera manchado mi uniforme y sería un desastre. A veces me daba dinero cuando me bajaba del tren, como una paga por dejarme manosear.
Y otras veces me seguía y buscaba platicar conmigo, pero yo siempre lo evitaba. Me daba miedo levantar sospechas.
Hasta que un día, la calentura rebasó de nuevo mis límites y le seguí la conversación. En resumen me ofrecia vernos después de la escuela y chuparme la verga en unos terrenos abandonados.
Acepté jsjjajajsjaa
Aunque me arrepentí al día siguiente porque no me dió tiempo de bañarme el día anterior y tenía restos de leche y sudor bajo mi prepucio. Y para variar había sudado ese día porque hice educación física.
Ya se imaginarán el olor que tenía mi verga, un puberto en pleno desarrollo y sudoroso. Pero en fin
Al vernos, le advertí de esto al señor y para mí sorpresa, eso parecío excitarle más. Me dijó que así le sabría más rico mi verga y que le prendían machín los olores masculinos y aún más si eran de un adolescente.
Al llegar al baldío, nos aseguramos de irnos al lugar más alejado posible y entre unos matorrales empezó la acción, el tipo se arrodilló. Bajó mis pantalones y empezó a restregar su rostro contra mi Paquete, haciendo que creciera mi pito. Mi boxer traía manchas de preseminal pero eso parecía no importarle al señor.
Después de un rato, bajó mi boxer de un tirón y mi verga salió rebotando. Bien mojada y lista para ser mamada. Era la primera vez que me chuparían la verga….
El señor se quedó un rato admirando mi verga y me morboseaba. «Que rica la tienes» «que huevotes» «ahora sí me vas a dar leche?»
Yo solo lo miraba y sentía mi cuerpo arder en calentura. El señor tomó mi verga, descubrió la cabeza y empezó a olfatear mi miembro.
Cada que olfateaba, cerraba los ojos y gemía o lanzaba frases sucias. «Que rico te huele cabron» «así debe oler una verga» «no te bañes más seguido»
Después de un rato, por fin sentí su lengua…. Empezó a dar lenguatazos en la cabeza de mi verga, limpiando los restos de leche de la noche anterior, el sudor del día y el líquido preseminal que había expulsado después de todo eso morboseo que se hecho.
Yo solo disfrutaba viendo cómo saboreaba mis fluidos pues se relamia los labios.
Ni dos minutos pasó y ya mi verga estaba impecable, bien brillosa por la saliva del señor pero limpia de cualquier fluido y olor.
Para no extenderme más, ese señor me dió una mamada increíble. Si gustan que les cuente con más detalles me avisan. Pero debo terminar con el relato de hoy.
Me hizó garganta profunda y después de unos 10 minutos no aguante más y gimiendo avise que me venía, que se esperara.
Pero el señor siguió mamando y me aprisionó con sus manos alrededor de mis piernas para que no me alejara.
Empece a jadear y mi cuerpo estaba temblando hasta que sentí una descarga por todo mi cuerpo, lanze un fuerte gemido, cerré los ojos y sentí como mi verga se hinchaba con cada disparo de leche. Fueron unos 3-4 lechazos. Los cuales cayeron directo en la boca del señor, pues no despegó su boca en ningún momento. Nos quedamos así unos segundos y sentía como mi verga se achicaba en la boca del señor. Hasta que por fin me soltó, y se trago mi leche de poco en poco. Después me chupo un ratito mas mi verga para dejarla bien limpia de mi leche recién expulsada. Y nos fuimos del lugar.
Muchas gracias por leer, si les gustaría más relatos díganme en los comentarios.
Igual si hay interesados en conocerme, estoy abierto ;). Soy de la CDMX y tengo 18 años actualmente
¡Qué rico lo cuentas! Mi mente y mis sensaciones (incluidas las tactiles que me di) oscilaban entre sentirme uno y otro. Ambas posibilidades muy satisfactorias.
Uff que rico te deslecho ese maduro, con solo imaginarme me he mojado puesto que yo también uso el metro de CDMX pero no me imagino lo rico que sabía tu dulce néctar y como te mojaba en el metro. Me gustaría que agregaras más detalles a tu físico y el del señor y cuéntanos sin duda las demás experiencias.