YO 28 AÑOS. EL LICEANO DE 15 CON SU PARTNER (3@ parte)
Y continuo mi relato, real 100% con Ricardo, mi vecinito de 15 años. Pueden buscar en esta pagina las anteriores entregas para entender a carta cabal lo sucedido..
YO 28 AÑOS. EL LICEANO DE 15 CON SU PARTNER
Y acá sigo con mi relato, con los hermosos momentos que pasé junto a Ricardo, mi vecinito de 15 años que tuvo su primera experiencia sexual conmigo y muchas mas que se siguieron dando en los meses siguientes.
Ya era cosa diaria prácticamente que el joven adolescente me visitaba después de sus clases a fin que le “ayudara” con sus labores estudiantiles, lo que era muy bien visto e incluso agradecido por sus padres, puesto que, además, el chico había mejorado sus calificaciones dado que efectivamente le ayudaba a estudiar en los descansos de nuestra actividad principal, el sexo, además en un par de ocasiones los había acompañado al colegio para alguna actividad extraprogramática asi que ya casi me consideraban parte de la familia.
La amistad se fue haciendo mas sólida, los fines de semana íbamos al cine o a algunos sitios de entretención, todo bien y la confianza era mutua. Así pues, una tarde estando en la cama luego de la primera sesión de sexo, le pregunte a quien le había comentado lo que hacíamos, dando como seguro de que así era. Inmediatamente negó tal situación, me insistió que no era algo para comentar.
Pero, yo, hábilmente, le dije que yo estaba seguro que, si a alguien se lo había dicho, es porque hay la suficiente confianza con el o ella, y por ende no era mayor problema.
Ante esas palabras, ya cambió su actitud defensiva y se abrió a comentarme que efectivamente se lo había confidenciado a su amigo del alma en el curso, que es un chico que se conocen desde la infancia y que fueron vecinos por muchos años hasta que se mudaron al sitio actual pero que siempre habían tenido comunicación dado que estudiaban en la misma aula.
Era lo que yo esperaba oír.
Y, ¿me cuentas que reacción tuvo cuando se lo dijiste? Mmmm, pues nada, o sea le interesó saber que había sentido que le diera detalles y le hablara de la película, que se veía y que no…….
¿Yo le conozco? Jajaja, pues claro, si lo has visto cuando hemos ido al colegio, es uno rubio, algo rellenito que saludaste, pero se fue de inmediato que yo le pedí que no se quedara con nosotros.
Jajaja, vaya que hábil, así nadie se da cuenta de nada. Perfecto.
¿Oye Ricky, y no está interesado en ver la película junto a nosotros?
Ricardo abrió tamaños ojos ante aquella proposición, sorprendido, algo inesperado. Guardó silencio unos segundos y me dice que su amigo Sergio había mostrado bastante interés en los detalles y que él no lo consideró como que fuera posible que quisiera participar….pero que, si así fuera como haríamos los 3, y así un montón de preguntas.
Pues bueno, le dije, simplemente haríamos algo parecido a lo que fue nuestra primera vez, con la diferencia que el ya sabe a lo que viene y simplemente nos desnudamos de una y yo lo inicio alternándome contigo para que disfrutemos los 3 y ya. Oye Ricky, ¿tu amigo es virgen? Si, aun nada, solo pajas. ¡Wow! ¿Y me describes como es desnudo? Supongo lo has visto en las duchas. Pues sí, es muy blanco, lampiño entero que apenas tiene pendejos rubios, pocos que casi no se notan y en las axilas nada. Su pene es blanco casi rosado, mas grueso que el mío y de largo parecido. Sus cocos cuelgan en una bolsa mas grande que la mía.
“Todo un manjar, pensé yo”.
Bueno pues, si quieres le invitas, pero con harta discreción. ¿Él tiene tu edad cierto? Si, cumplió los 15 hace dos meses. Estupendo.
Y así, Ricardo comentó a su amigo que habíamos hablado de él y que si se atrevía podía ir a ver la película con nosotros. Obvio todos sabíamos que no solo se iba a tratar de ver la película y por tanto lo acordamos para un sábado por la tarde que hubiera tiempo para ello.
Y así, llegó el esperado día, para lo cual compre algunas gaseosas y algunos picadillos, una tabla de quesos y cosas ricas para amenizar el magno momento, en que de nuevo tendría la suerte de iniciar un liceano de 15 años en las artes del sexo (otro mas).
A la hora acordada sonó el timbre, y salí a abrir. Andaba cómodamente vestido con pantalones cortos y una delgada polera y sandalias. Todos elementos que se pueden sacar rápidamente. Ricardo sonriente me presenta a su amigo Sergio, un adonis de 15 años, rubio tal cual lo definió Ricky, de hermosos ojos celestes, su carita rosada con una hermosa sonrisa. De cuerpo algo rellenito que permitían notar unas tetillas un poquito levantadas que me imaginé lamiéndolas y chupándolas, uffffff.
Pasen chicos, les dije. Sergio algo nervioso, entró seguido por su compañero. Les invité a sentarse en el living a fin de distender la situación ya que lo menos que quería es que el nuevo chico saliera corriendo. Les ofrecí coca cola y algún picoteo, y le pregunté cosas banales a Sergio para entrar en confianza. Elogie la amistad con Ricardo, que el me contaba eran grandes amigos y de extrema confianza. Poco a poco el chico se fue relajando.
Y así entre la conversación, le comenté que Ricardo me habló de que sabia del primer video que habíamos visto juntos, y que se habían agregado otros más. También me mencionó que nunca has visto algo así y que quisieras hacerlo. ¿es así? Miró a Ricardo antes de responder, quien le sonreía, ante lo cual dijo, SI.
Sin mas pérdida de tiempo, les invité a subir al segundo piso, el video ya estaba preparado (era el mismo que vimos inicialmente con Ricardo). Llegados al dormitorio, Ricardo y yo nos sacamos las poleras quedando solo en pantalones cortos y nos estiramos en la cama, invitando a Sergio a hacer lo mismo, quedando yo al medio. Ricardo encendió la tv y le dio el vamos al video.
El dormitorio estaba adecuadamente preparado. Las cortinas cerradas que dejaban todo en penumbra salvo la luminosidad de la pantalla. Sergio con la vista pegada en la película que ya empezaba a surtir efectos en su anatomía que el pantalón se le empezó a levantar. Puso su mano para cubrir la erección, ante lo cual yo lleve mi mano, retiré la suya y agarre el bulto que seguía creciendo iniciando un pequeño masaje. Miré el rostro del chico que seguía absorto mirando las calientes escenas del video.
Ricardo no perdía el tiempo. Se sacó su ropa quedando desnudo y empezó a hacer lo mismo sacando mis pantalones y ropa interior, yo seguía masajeando el bulto del jovencito por sobre la ropa.
Me decidí y metí mi mano hasta alcanzar aquel miembro palpitante de calentura, simplemente se dejó por lo que di el siguiente paso que fue abrir el cierre de velcro y soltar el pantalón, sacando completamente su verga, y tocando sus huevos llenos de néctar juvenil. Acerqué mi boca y lo empecé a lamer, retrayendo suavemente su prepucio dejándome ver la cabecita húmeda de aquella virginal herramienta. Me lo metí a la boca y pude sentir ese escalofrío de placer acompañado de un leve gemido. Empecé pues mi labor de follar mi propia boca con el hermoso pene del chico, que tal como me había anticipado Ricardo, era algo mas grueso, absolutamente blanco de glande casi rosado y con escasos pelitos de color oro. Junto a mis lamidas y chupadas que arrancaban mas y mas gemidos al chico, amasaba sus huevos, grandes y ansiosos de derramar su contenido, sentía en mi nariz ese aroma cálido e intenso del sexo, aquel miembro nunca disfrutado salvo por la mano de su dueño.
Mientras yo estaba entretenido atendiendo a nuestra visita, Ricardo ya se acomodaba detrás mío y me aplicaba lubricante para empezar a penetrarme. Vi como Sergio echó una rápida mirada a lo que su amigo hacía, para reconcentrarse en el video y en lo que yo le estaba haciendo. En este momento ya le ayudé a que se sacara por completo sus pantalones, y aprovechaba además de tocar su abdomen y esas tetillas algo marcadas que me enloquecían. Metía mi lengua a su ombligo y retornaba a lamer y chupar. Le invité a sacarse la polera lo que hizo rápidamente. Fue en ese momento que Ricardo en un fuerte movimiento me ensarto por completo su pene arrancándome un quejido de sorpresa y algo dolor por la violencia, y ya la pasión quedo desatada.
Sergio no soportó demasiado la calentura de su primera vez, las imágenes del video, pero mas aún el ver y sentir como su amigo Ricardo me ensartaba casi con violencia, y se movía en un mete saca tal cual se veía en el video, y mi boca succionando sus partes íntimas, con una mano dando pequeños apretones a sus tetillas, llevó al inevitable derrame de su esencia juvenil en mi boca, acompañada de exclamaciones y jadeos, uno, dos, tres y mas chorros potentes de leche en mi boca directo a la garganta y que apenas alcanzaba a tragar cuando venía el siguiente.
Toda la situación apuró la follada de Ricardo quien también empezó a vaciar el contenido de sus huevos dentro de mi culo, apretándose fuertemente a mi espalda e incluso mordiendo uno de mis hombros como consecuencia de la angustia del placer. Sus espasmos poco a poco fueron pasando para quedarse quieto, en silencio, pegado a mi espalda y yo con el miembro ya fláccido de su compañerito de colegio en mi boca, sus huevos estrujados al máximo de aquella deliciosa leche.
Ricardo fue quien habló primero, ¿te gusto la película con efectos especiales? preguntó a su partner, quien algo sonrojado le respondió que sí, que estuvo rico. ¿Cómo para repetir? Mmmm, ¡podría ser!
Les recuerdo estimados amigo comentar en esta misma pagina y acordarse de premiar mi relato con estrellas segun su opinión.
Ademas me pueden escribir a mi correo [email protected], y visitar mi blog https://relatos-intimos-inconfesados.blogspot.com/
como sigue
Wow que suerte tienes amigo, ya quisiera Yo encontrarme un par de chicos así.
Felicitaciones
ufff
More please