YO 40 AÑOS Y …… PAPA SOLTERO. –(Primera parte)
De como me encontre en situación de hacerme cargo de mi hijo Javier Ignacio cuando faltó su madre y lo que ocurrió al vivir juntos.
Me presento, yo Ricardo, actualmente con 40 años, soltero, un hijo de 10 años, bisexual, arquitecto con oficina privada.
Desde que descubrí el sexo, aprendí a disfrutar de él tanto con hombres como mujeres. En mi lado homosexual preferentemente activo, con preferencia de gente menor, sean hombres o mujeres.
Hace unos años empecé a relacionarme con una guapa chica de nombre Nancy, con quien teníamos una excelente relación. Ella ejecutiva bancaria absolutamente independiente. Vivía sola en un departamento en la zona oriente de Santiago de Chile en una comuna acomodada y que quedaba relativamente cerca de mi domicilio.
Disfrutábamos de muy buen sexo, sin compromisos que era lo que me agradaba, nos juntábamos un par de veces en la semana, algunos fines de semana y luego cada uno hacia su vida como mejor le acomodara.
En una ocasión estando en la cama recuperándonos de una intensa sesión de sexo, me señala sin mayor aviso, que está embarazada, haciendo inmediata aclaración que no me pedía nada y que solo era a título informativo, que estaba casi segura de mi paternidad pero que quería hacer un examen de ADN para asegurarse, a lo que accedí.
El resultado del examen fue positivo, yo era el padre de la criatura en gestación, le dije que me gustaría ser un padre presente y que al menos lo quería reconocer y aportar en lo que sea necesario. Efectivamente al nacer, un hermoso niño de pelito rubio y ojos claros, muy parecido a su madre, y acordamos en llamarle Javier Ignacio.
Todo iba muy bien, el chico crecía sano, yo lo visitaba siempre y salía con él a pasear o a veces los 3 pero en las mismas condiciones de vidas independientes.
Cuando Javier Ignacio tenía 5 años, Nancy se involucra en un accidente automovilístico sacando la peor parte que a los pocos días la llevó a la muerte.
Y heme ahí yo, con un crio de 5 años sin saber que hacer.
Los padres de Nancy no eran opción que eran agricultores en la zona sur de Chile, pero ahí aparecen mis padres que se ofrecen a criarlo lo que me significó una gran solución.
Pero la mala suerte me seguía con el niño, un par de años después mi padre sufre un accidente cerebro vascular que lo dejo con ciertas incapacidades por lo que mi madre debía dedicar su tiempo a atenderlo y no podía con Javier Ignacio a su cargo. Ante ello simplemente decidí llevarlo a vivir conmigo, consciente de los problemas que me significaba, pero es mi hijo y no podía desentenderme.
Al principio fue complejo, pero de a poco nos acomodamos y empezó a caminar todo sin problemas.
El colegio al que asistía era de jornada completa, y yo lo dejaba en las mañanas y lo recogía en la tarde. Había contratado una chica para las labores de casa y que tenia jornada desde el mediodía, para que de ser necesario fuera a recoger a Javi al colegio si yo tenía algún inconveniente y mantuviera las cosas en orden en el hogar.
El chico es un buen estudiante, tranquilo y nunca tuve problemas ni con las notas o su comportamiento, por ello me inquietó cuando recibí una llamada que se me requería urgente en el colegio, y que en todo caso Javi estaba bien pero mi presencia era necesaria.
Al llegar al colegio, me llevan a la Dirección, en donde esta Javi con su profesora jefa, el director y otra persona que después supe era el psicólogo escolar.
Al entrar el niño me abrazó, le salude y le pregunte si estaba bien y asintió. El director me presentó al psicólogo mencionado y me dijo debía hablar algo con él en privado.
El psicólogo me empezó a hablar de la sexualidad, de la información que bombardea a los niños por todos lados. Yo no entendía nada y le pedí fuera al grano.
Asintió y me lanzó que Javier Ignacio había sido sorprendido teniendo relaciones sexuales con otros niños mayores. Me quedé de una pieza.
Me explicó que en una bodega lo encontraron siendo follado por dos chicos adolescentes de cursos superiores, en donde uno le follaba analmente y el otro oralmente.
Me explicó que el colegio iba a tomar medidas contra los otros chicos cuyos padres ya habían sido citados y que yo debía evaluar la situación y brindar ayuda a Javi dado que a sus 8 años no era normal tanta sexualización. Mencionó que en todo caso el colegio mantendrá la máxima discreción que se requiere dada la seriedad del caso. Para mí, un bombazo en la cabeza.
Salimos del colegio, Javi normal, ni atisbo de nerviosismo o algo que mostrara preocupación. Llegamos a casa y todo como siempre.
Inmediatamente llamé a mi primo Raúl, él es psicólogo de mi misma edad, casado con dos hijos a quien le pedí una reunión urgente sin adelantarle nada de lo ocurrido. Quedamos al día siguiente en su consulta a las 9 a.m. para lo cual avise en la oficina que llegaría más tarde.
Apenas llegué a la consulta le dije todo lo que había pasado. Raúl me explico que los niños están muy sexualizados y que la homosexualidad es algo natural y que si al chico lo era y le gustaba ser follado no había nada que hacer para cambiarlo.
Insistí, ¿Qué puedo hacer? Pues, enseñarle tu mismo me respondió……………….(¿era la respuesta que yo buscaba?
No me sorprendió, en nuestra adolescencia estudiábamos juntos y nos follamos a un par de chicos mas pequeños del colegio, nosotros 15 o 16 años, así que no era extraña la sugerencia.
Pues no se si me atreva, le respondí. Pues yo te acompaño, fue su respuesta, lo inicio yo y luego sigues tu.
Debo reconocer que ya se me había pasado por la mente tal solución.
Me levanté de la silla y le dije a mi primo que lo iba a pensar y ya le contaría.
Mientras viajaba hacia la oficina mi cabeza daba mil vueltas, el día anterior nos habíamos recostado en la cama con Javi y le pedí me contara sobre el tema. Con mucha soltura me señaló que hacia varios meses empezó todo con un chico de su misma edad, que hacían tareas juntos. Y claro yo mismo lo iba a dejar y a recoger cuando iba a su casa un par de veces a la semana, pero yo suponía iban a hacer labores escolares.
Me señaló que un día empezaron a jugar ambos de modo sexual, frotándose y penetrándose mutuamente, pero que el prefería ser penetrado más que hacerlo
Una tarde en que su amigo lo estaba follando fueron sorprendidos por su hermano mayor, de 13 o 14 años quien, a cambio de su silencio, pidió participar, y así empezó a ser follado por ambos, primero su compañerito y luego el hermano que obviamente tenia un pene de mayor tamaño y con abundantes pelos según detalló.
Así se hacía todas las semanas hasta que una tarde los chicos estaban solos y el hermano mayor llegó con otro muchacho, mas alto y flaco que según Javi, tenia un pene mucho mas largo que el otro niño, aunque era delgado, según me señaló creo mediría unos 18 cms. bastante grande para 13 años, de donde yo digo que son las hormonas que dan a los pollos que también hacen crecer a las personas.
Y así fue que fue follado por los tres, inteligentemente desde el mas pequeño al mas largo y dijo que le dolió un poco, pero le entro todo. Ahí me imagine la situación y disimuladamente toque el culo de mi hijo y me imaginaba como algo tan largo entró en ese culito tan pequeño. También mencionó que ambos chicos eyacularon dentro suyo, su amigo de la edad aun no eyaculaba (8 años).
Todo ello me producía un torbellino en la mente que no sabía como resolver…
CONTINUARA…
Interesante. Curiosamente yo también estoy pasando una situación parecida con mi hijo. También soy bisexual y su madre es machorra. Aunque estamos separados. Espero la segunda parte. Buen relato
Vas a tener entonces que enseñarle a tu hijo, empieza metiendole un dedito.
Vas a tener que enseñarle entonces a tu hijo, empieza miendole deditos
Wow me resultó bastante exitante, espero poder leer la parte 2
Part 2 please
No se lo puede iniciar, si yo lo iniciaron je je ahí hubo un gran desliz en tu relato
En realidad falto aclarar que me referia a iniciar CON ADULTOS, que era la idea escribir pero se me paso. Gracias por el aporte.
Interesante inicio. Ojalá lo continúes pronto.
Espero con ansias la segunda parte 😜