Yo de 12 y mi novio de 37

La curiosidad de Mateo a sus 12 años lo llevo a hacerse novio de un ejecutivo de 37 años.
Mi nombre es Mateo, yo tenía 12 años cuando me hice novio de un hombre de 37 años que conocí por una app de citas. Desde pequeño me llamaban más la atención los hombres, en especial los hombres mayores y robustos. 

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Mido 1,60, supongo que es lo normal para mi edad, no soy ni gordo ni flaco, tengo una pequeña pancita que se disimula bien con mi ropa, de rostro y extremidades delgadas, tengo piel clara y cabello negro rizado.

Vivo solo con mi madre quien es doctora y casi nunca está en casa, por ello desde muy joven e tenido más libertades, cuando llegaba de la primaria me desnudaba y me masturbaba en mi cama mientras veía videos porno mayormente donde maduros tenían sexo con jovencitos, fantaseaba con tener a un daddy que me amara y me hiciera el amor tiernamente. 

Un día navegando por internet encontré una app de citas, creé un perfil y puse una foto mía discreta donde no se mirara tanto mi edad, y una descripción diciendo que quería un novio y perder la virginidad; rápidamente me llegaron mensajes de muchos hombres pidiéndome vernos y mandándome fotos de sus gigantescos penes, pero en especial me llamó la atención el perfil de un hombre de traje algo robusto de unos 37 años. 

Decidí mandarle mensaje y al poco tiempo me respondió, se llamaba Marcos, me comentó que era nuevo en la app y que no buscaba sexo a la primaria, prefería conocer gente y hacer amigos; yo le respondí que buscaba lo mismo y que era principiante.

-WooW de verdad eres virgen?- comentó sorprendido 

-Sii, la verdad tengo 12, espero no te moleste- decidí confesarle con medio a que me bloqueara.

-Vaya!, pues no tengo problema pero deberías tener cuidado, hay mucha gente aquí que solo busca saciar su sed de sexo- 

Seguimos platicando por un par de días, cada vez se hacían mayor nuestra confianza y parecíamos llevarnos bien. A la semana me propuso vernos en persona, nada sexual, solo conocernos y convivir un rato.

Lo pensé por unos minutos  y después acepté, quedamos en vernos un día saliendo de la escuela, mi madre llegaría hasta el siguiente día así que le dije si podía ir a casa de un amigo que vivía a un par de casas y sin problema acepto.

Saliendo de la primaria caminé unas cuadras donde Marcos me esperaba en su lindo carro, me subí de copiloto y al entrar lo vi, era mucho más grande en persona, robusto, alto, barba alineada, masculino y vestido de traje; me saludó de un tierno abrazo y me dijo que me veía más lindo en persona. 

Fuimos por unas hamburguesas y comimos en el carro mientras platicábamos, me comentó que dirigía una empresa de vienes raíces, que era soltero, vivía solo y era bisexual de clóset. 

Yo le dije que era gay y que estaba empezando a explorar.

-Debes tener mucho cuidado pequeño, hay mucha con malas intenciones- dijo con una voz amable 

Después de comer y dar varias vueltas por la ciudad me propuso ir a su casa, yo con más confianza acepte, manejo un poco y llegamos a un lindo residencial, entramos y el lugar era acogedor y grande, nos sentamos en su sala y vimos una película mientras platicábamos y comíamos helado, al poco tiempo terminé recostado en su pecho mientras me rodaba con su grande brazo.

Entre la calidez del asunto terminamos mirándonos a los ojos, y tiernamente nos dimos un pequeño beso, después otro y otro hasta sentado en sus piernas frente a frente besándonos de lengua. 

-Es la primera vez que besas a alguien?- preguntó risueño 

-Sii, lo hago mal?- pregunté apenado

-Tranquilo, yo te enseñaré a mejorar- después de decir eso seguimos besándonos, yo movía mi cuerpo sobre sus piernas rodando mi colita con su miembro que desde hace tiempo ya estaba duro. Poco a poco fui bajando mi mano hasta masajearlo por encima de sus piernas rodando pantalón 

-Puedo verlo- comenté separando nuestros labios

-Estás seguro? No quiero presionarte a hacer algo- respondió 

-si, estoy seguro- dije sonrojado, sentí mi cuerpo caliente y mi pequeño pene duro

-Okey está bien- dijo, entonces nos separamos y empezó a quitarse los pantalones por completo dejándolos sobre la alfombra, debajo de su bóxer negro se notaba su bulto duro, lo toqué un poco por encima para después sacarlo saliendo como un resorte de lo duro que estaba, medía unos 18 cm y algo grueso. 

Yo me quedé sorprendido, era el primer pene que veía en persona, y me encantaba. El pareció notarlo y carcajeo un poco 

-Parece que te sorprendiste, te gusta?- 

-Sii, es muy lindo- dije tomándolo con mi pequeña mano y haciendo que Marcos diera un pequeño salto. Empecé a masturbarlo torpemente mientras lo miraba fijamente con curiosidad, Marcos solo me miraba y gemia un poco mientras me acariciaba la espalda con sus gruesos dedos.

-Lo hago bien?- pregunté mirándolo a los ojos

-Lo haces perfecto amor- sonrió. eso último me cautivó nos dimos un tierno beso que se convirtió en uno apasionado mientras seguía jugueteando su miembro. 

Mientras seguíamos besándonos Marcos retiró mi camiseta y acariciaba tiernamente mis pezones.

Mi mano estaba mojada de todo el pre semen que sacaba Marcos, con curiosidad lo acerqué a mi boca y probé un poco, era un sabor raro, algo salado pero no feo, hice una pequeña cara de condición que Marcos pareció notar 

-jejeje tranquilo pronto te acostumbrarás, quieres chuparlo?-

-sí, pero eso sabe raro- dije un poco disgustado

-No te preocupes si quieres me limpio- tomó una servilleta y limpió su pre semen, me dio un tierno beso y después acerqué mi cara a su miembro, poco a poco sentí el olor más cerca, después abrí un poco mi boca e introduje la punta con torpeza, empecé a lamerlo y mover mi cabeza de arriba hacia abajo chupando hasta la mitad de su pene, cuando traté de meter más me ahogue un poco.

-Tranquilo Mati, hazlo con calma apenas es tu primera vez- entonces volví a introducirlo y chuparlo con lentitud, Marcos acariciaba tiernamente mi cabello sin empujar mi cabeza.

Me encantaba escuchar sus gemidos, había desabotonado su camisa y con una mano acariciaba uno de sus pezones, con la otra recorría desde mi cabeza hasta mi espalda con lentitud.

-Ven, vamos a mi cama para estar más cómodos- ambos nos levantamos y él guardó su pene mojado dentro de su bóxer, subimos las escaleras dejando atrás las pocas prendas que nos habíamos quitado, al entrar a su cuarto me tomó por la cintura agachándose un poco y besándome apasionadamente, lentamente bajo sus manos quitándome mi pantalón de la escuela, dejándome solamente en mi trusa y calcetas. Él se quitó  su camisa viendo ver su cuerpo algo velludo y dejándose su bóxer que contenía su erecto pene.

Lentamente subimos a su cama, él se acostó y yo estaba sobre el moviéndome apasionadamente y besándonos. Sus dos manos sostenían mi colita por encima de mi ropa interior, después ambas se introdujeron en mi trusa masajeándolas y apretándolas, sus grandes manos sostenían por completo mi trasero y lo separaban por momentos dejando mi ano expuesto. 

Después de un momento terminamos besándonos ambos sin ropa interior, me pidió que me pusiera en 4 sobre la cama, él se posicionó atrás de mí jugueteando con sus manos mi trasero, después lo separó y sentí su respiración acercándose a mi entrada. Su gruesa barba hizo contacto primero con mi piel, después su húmeda lengua tocó con calidez mi ano haciéndome soltar un fuerte gemido que calle rápidamente, sus labios empezaron a besar mi colita virgen y su lengua trataba de abrirse paso.

-Mm ahhh- solté un gemido que no pude contener- -Perdón- dije tapándome la boca con mis manos.

-No te preocupes amor, puedes gemir todo lo que quieras- dijo hundiendo sus labios entre mi trasero que separaba con una de sus manos y con la otra masturbaba mi pequeño pene duro.

Por un momento paró un poco y acercó su pene húmedo a mi entrada y lo rosó lentamente.

-Me la vas a meter?- pregunté algo emocionado 

-No amor, eso te va a doler no quiero lastimarte, solo quiero que mi pene conozca tu colita- dijo llenando de pre semen mi entrada para después seguirla chupando apasionadamente. Los movimientos de sus dedos que sostenían mi pene empezaban a acelerarse al igual que su lengua, sin ponerme contener tuve un rico orgasmo que me hizo gemir y soltar unos pequeños chorros de semen transparente. 

-Perdón, manches tu cama, dije preocupado- Marcos no contestó y siguió chupando mi colita.

-No te preocupes, ven aquí- dijo poco tiempo después sentándome al borde de la cama frente a su pene mientras él se masturbaba y gemía fuertemente.

-Aghh, quieres mi lechita amor?- dijo entre gemidos gruesos 

-Si papi- dije acercando mi boquita con mi lengua afuera. Segundos después Marcos se corrio sacando cuatro chorros de semen caliente en mi cara, pecho y boca. 

Yo la saboreé un poco y no me disgustó.

-Te gusta amor?- dijo Marcos con su veta goteando 

-Sii, mucho- respondí entusiasmado y excitado

-Ven tómatela toda, eres un niño muy lindo y tienes que tomarte toda la leche de tu papi- con uno de sus gruesos dedos recogió el semen que callo fuera de mi boca y lo metió dentro, yo lo recibí y chupe tiernamente su dedo, después me dirigí a su  pene y lo tomé por la base para meterlo a mi boca y terminar después tomarme toda su lechita 

-Me haces tan feliz- dijo besándome y abrazándome tiernamente juntando nuestros cuerpos desnudos y sudados

-jejeje estamos muy sudados, vamos a darnos una ducha- ambos caminamos desnudos hacia su baño y nos metimos bajo el agua, Marcos me ayudó enjabonando cada parte de mí cuerpo con delicadeza y besándome tiernamente cada que podía; me sentía tan bien junto a él.

-Marcos..- dije mientras él me tallaba la espalda 

-Si Mati, que pasa?- respondió 

-Me gustó mucho como me la pasé contigo, te quiero- dije, entonces Marcos paro por un momento y yo me di la vuelta para verlo de frente, me miró a los ojos y me dio un tierno beso

Después de ducharnos me vestí con mi uniforme que estaba por toda la casa y Marcos me llevó a mi casa, durante todo el camino estuve masajeando su bulto sobre su short y antes de llegar se estacionó en una calle solo para besarme fuertemente y tocarme mi colita.

-Nos podemos volver a ver otro día?- dije triste antes de bajarme del carro 

-Claro que si pequeño…-