Yo de 7, mi tío de 35 (3)
Continúo con el relato de como mí tío abuso de mí desde los 7 hasta los 16..
Luego de ese día mí tío se volvió más unido a mí, debo aclarar que para todas las personas que lo conocían, mí tío era un ser amables, súper agradable, de confianza, muy querido
Al día siguiente, salimos en caballos con mis primos y mí tío, cada uno en uno, menos yo, que por ser el más chico debía ir con mí tío, el desde atrás y yo desde adelante, a medidas que avanzamos, sabíamos que iríamos al arroyo a bañarnos, mí tío le dijo a mis primos que se adelanten que yo debía ir al baño y el también, era mentira, solo se quería desviar.
Mis primos continuaron y nosotros nos adentramos al monte, en el que pensamos sería un lugar sin tránsito de personas.
Al llegar, mí tío me explicó que debía obedecerlo en todo, que desde ahora el era quien mandaba, y si me negaba a algo recibiría una paliza, golpes por rebelde, yo le respondí que no iba a hacerle caso, a lo que me tomo de los pelos, me dio una cachetada, me arrojó al piso y puso su pie sobre mí cara, era una señal que no estaba bromeando.
Luego me hizo levantar, me pidió que baje el cierre de su pantalón, lo obedecí, me pidió que lo desnude y empiece a chupar su verga, yo no quería, pero me obligó tomándome de los pelos.
Estuve chupando ese gran trozo de carne por varios minutos, mientras recibía insultos, en ocasiones apartaba mí boca de su verga y me escupía dentro de la boca, para luego ponerme a mamar nuevamente.
En un instante, me apartó de su pija, me giro, bajo bruscamente los pantalones y calzones, y me dijo:
Tío: ahora te voy a coger, no me importa que llores o grites, yo mando, vos sos solo una puta.
Me giro, empezó a chupar mí ano, metiendo la lengua muy profundo, luego metió un dedo, luego dos y tres, yo solo lloraba despacio, en determinado momento, me deja entrar su verga de un solo golpe, pegue un grito muy fuerte mientras le pedía que me la saqué.
Tío: las putas como vos se acostumbran rápido a la pija, mientras más grites, más sufras, más me gusta.
En ese momento se escuchó un ruido en los arbustos, se asoma un hombre mayor, muy desalineado con un caballo.
Señor: que hacen acá? Escuché un grito, que pasa?
Tío: perdón señor, es que siempre hacemos esto, el es mí sobrino y le gusta la verga.
Señor: pero es apenas un nene, como le va a gustar eso, vos sos un degenerado.
Tío: no señor, a el le gusta. Verdad que te gusta? Contale al señor
Yo con mucho miedo, sabiendo lo violento que era mí tío solo pude decir que si me gustaba, aunque por dentro estaba aterrado y muy dolorido.
Tío: ve que le gusta, es más, si quiere se puede unir, hace mucho que no coge?
Señor: hace muchos años, pero no creo que al pibito le guste.
Tío: si le gusta, bajese, venga .
El señor se bajó del caballo y se acercó, era un hombre muy sucio descuidado, con mucho olor . Se colocó delante mío.
Tío: bajarle la bragueta al señor, se va a pensar que no te gusta.
Obedecí al pedido de mí tío, bajé la bragueta, de su pantalón salió una verga gigante, pero muy olorosa, aún no estaba dura, me daba asco
Tío: acérquese más, vos ponete la pija en la boca y chupasela como te gusta.
Tire el cuero para atrás y vi que estaba cubierta por queso, mucho queso, me dió asco, pero mí tío empujó mí cabeza hasta la verga del señor, me dieron arcadas, pero sabía que por mí bien, debía obedecerlo.
Enseguida la pija del señor se puso muy dura, el señor pasó de no tener expresión a gemir mucho.
Tío: se la querés poner, cambiamos de posición?
Señor: hace muchos años que no la pongo, me gustaría, siempre y cuando el pibito quiera.
Tío: si quiere, le encanta la pija y que le llenen el culo de leche.
Me giraron, la verga del señor era bastante más grande que la de mi tío. Me escupió el ano, que ya estaba dilatado, y la fue metiendo, al principio lento, pero en un momento la metió de golpe, lo que hizo salir un gran grito de mi boca, el cual fue tapado por la pija de mi tío.
El señor estuvo solo unos minutos bombeandome, acabó enseguida, mi tío me gira, y hace que le limpie la pija con mi boca, era un asco, mezcla de sangre, semen y mierda, pero sabía que no me podía negar.
El señor subió sus pantalones.
Señor: espero que los vea de nuevo, pero tengan cuidado, a veces anda mucha gente por acá, si quieren pueden ir un día a mi casa, es la que está cerca, señalando el lugar, mañana pueden pasar, si es que el nene quiere.
Tío: creo que lo vamos a visitar seguido.
El señor nos saludo y se fue, cuando se alejo, mi tío me dió una cachetada por, según el, ser muy puta y dejarme coger por otro.
Me obligó a arrodillarme, me escupió la cara, me orinó, se masturbo, dejando mi cara llena de semen. Al acabar, me puso en posición de cagar para vaciar todo lo que tenía.
Fuimos a buscar a mis primos, en el camino me amenazo para que no cuente nada, de hecho era tan grande el miedo que le tenía que no iba a decir nada.
Al llegar al arroyo, nos metimos, el con la escusa de enseñarme a nadar me sostenía por atrás, en ocasiones me decía cosas, cómo que estaba celoso por haberme dejado coger por el viejo.
En un momento bajo mi ropa, me metió un dedo, luego otro, diciéndome que si alguien se daba cuenta de lo que hacía era culpa mía, y que sería castigado.
Luego me puso en posición con mis primas rodeando su cuerpo y me metió la verga sin lubricación, sin nada. Me dio varias embestidas, se me caían lágrimas, uno de mis primos se dió cuanta que yo lloraba.
Tío: vieron como llora, tiene miedo al agua, es un cagón, jejeje
Todos se reían de mí, mientras yo trataba de aguantar la verga dentro de mi y pasar desapercibido para no ser castigado.
Espero que les haya gustado. En próximos relatos les contaré más aventuras con mi tío, el señor, un amigo de mi tío y el debut de mis primos.
Espero sus comentarios.
Saludos desde Rosario, Argentina.
como sigue?
Me encanta la historia, como sigue?