A hija de mi prima de 4 años llamada Angélica. Parte 1.

Cuando la confianza de los padres te permite seducir a una niña hermosa, de tes blanca como la leche y cabello rubio como el sol, de 4 años. Esta historia es menos acelerada que otras de como seduje a una bebe paso por paso..
Yo ya tenia 16 años cuando observe fotos de una niña, hija de una prima que hace mucho no veía. Cuando la vi, me enamoré y me dije: Lastima que nunca podre tener a ese pedacito de tierna carne. Pero a la semana siguiente mi papa decide ir a visitar su familia y cerca de esa familia quedaba esa beba. Le insistí en visitar también esa prima mía y acepto. Yo siempre le caía bien a la gente adulta y me tomaban mucha confianza, y es por eso que llegue a poseer tantas niñas menores que yo durante toda mi adolescencia. Y bueno ellos no fueron la excepción. La niña se encanto conmigo de una vez, otra cualidad que tengo, muy dulce para las niñas. Y ella me jalaba de la mano para ir a jugar a su cuarto con sus juguetes. Yo me oponia y le decía en frente de sus padres que fuéramos afuera, pero en realidad quería meterme a su cuarto con ella. Al final me dejaba convencer.

Una vez en el cuarto empecé a jugar lo que ella quería. Mientras mi para hablaba con mi prima y su esposo. Ya venía preparado y traía recortes de mujeres y hombres mostrando sus penes y vaginas. Pero me asegure de que se vieran bonitos penes y bonitas vaginas. De pronto hice como que sacaba algo de mi bolsa e hice que salieran los recortes como por accidente. Ella de una vez los comenzó a ver y abrí la boca en forma de sorpresa sin decir nada y siguió viendo detenidamente una por una. Y dice mi mama y yo tenemos esto, mostrándome una imagen de vagina. Y le pregunto y tu para que tiene y se quedo pensando y me pregunta: Mi papa tiene esto? Mostrándome un pene. Y le dije: Si, adivinaste. Y yo que tengo le pregunte. Y respondió con la misma imagen del pene. Y le dije si adivinaste. Y dije weeeeeeeeee y ella se alegró. Luego le digo: Hay que guardar esto para que tus papas no se enteren que lo viste. Porque te van a pegar y no me dejaran venir más. Le pregunto: Quieres que siga viniendo? Y dijo que si. Entonces le dije que no dijera nada de lo que hablábamos o hacíamos para que los papas no le pegaran y me dejaran venir más. Y estuvo de acuerdo. Entonces guarde los recortes.

Ella llevaba una batita corta y al verle el panti, se le veía parte de la conchita pues le quedaba ancho. Después de guardar todo.

Yo: Como tu sabes que tengo aquí? Y le señale hacia mi verga.

Ella: No se.

Yo: Si quieres te la enseño, pero anda a ver que están haciendo tus papas para que no vean.

Y ella muy bien mandada fue y se asomo con cuidado y regreso.

Ella: Están en el sillón con tu papa.

Yo: Bueno quieres ver?

Ella asintió con la cabeza. Y procedí a sacarlo. Como mi pene es de carne y no de sangre ya tenia un tamaño que la sorprendió. Comencé a moverlo de un lado a otro. Y ella se rio.

Yo: Quieres jugar con el moviéndolo?

Ella: No

Yo: Y si te doy un chocolate, juegas con el?

Ella: Cual chocolate.

Y le saque uno de los 5 chocolates pequeños que había preparado por si acaso tenia que comprarla.

Ella: Lo muevo un poquito.

Yo: Esta bien, pero te digo hasta cuándo.

Y ella lo agarro con cuidado y comenzó a moverlo de un lado a otro. Y la detuve y la enseñé a masturbarme con su manita angelical. Se comenzó a poner duro y ella lo noto, lo cual le llamo la atención, pues me lo menciono.

Después de un rato me guarde la verga y le dije que fuera a ver que hacían los papas.

Ella: Siguen sentados en el sillón.

Increíble como hay padres tan confiados. En la actualidad aun los hay.

Yo: Ahora te toca a ti. Enséñame tu cosita.

Ella cerro sus piernas y esta vez le ofrecí dos chocolates.

Ella: Y si te toco el tuyo de nuevo.

Yo: No, porque ahora te toca a ti dejarme tocar.

Ella: Esta bien.

Y abrió las piernas. Yo metí mi cabeza entre sus piernas Y le dije que era para ver mejor y que cerrara los ojos si quería y solo sintiera y no viera. Le hice el panti a un lado y comencé a pasarle mi lengua e intento cerrar las piernas, diciendo bajito: Ya, ya, ya, ya. Inteligente la niña que recordó no hacer ruido por los papas. No deje que cerrar las piernas y comencé a pasar mi lengua por el clítoris y estuvo tratando de cerrar las piernas por unos minutos, pero en silencio hasta que aflojo y me dejo disfrutar de su conchita a mi gusto y seguía con los ojos cerrados y respirando fuerte. Lo disfrute tanto que se me olvido donde estaba hasta que escuche la voz de mi papa llamándome para irnos. Solté a la bebe y la levante y fuimos a la sala. Cuando me estaba despidiendo la bebe comenzó a llorar. Quede helado pensando que me iba delatar. Y los padres le preguntaron que le pasaba y dijo que no quería que yo me fuera. UFFFFFFFFF que alivio. Casi me da algo. Pero como no tenia ropa pues le dije que si los papas me dejaban venia a quedarme unos días y los papas estuvieron de acuerdo.

Y bueno hasta aquí la primera parte. Me dicen si les gusto para seguir.

A hija de mi prima de 4 años llamada Angélica. Parte 1.

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