Actividades de la perra española por AMOSADICO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Ayer a ultima hora, antes de que llegara mi marido, me propuse cumplir la actividad que me pedias, carecia de mucho tiempo, pero eso tambien formaba parte de tu orden.

Tome una caja de M&M´s el tamaño es pequeño, por eso los cogi, porque no deseaba tomar demasiado dulce. Subi al atico con una bayeta para limpiar la zona del suelo en la que depositaria los dulces, me arrodille y comence a limpiar una amplia zona; Entonces me senti… humillada: Ahi estaba yo, de rodillas, como una vulgar fregona, limpiando el suelo como jamas habia hecho antes. te dedique este pensamiento y, cuando considere que era suficiente, me incorpore aunque me quede de rodillas, baje mi tanga hasta medio muslo y separe mis piernas hasta que senti la tension de la prenda en mis muslos. Esparci los dulces en el suelo y puse el cepillo recien comprado en mi boca, comence a arrastrarme a cuatro patas y fui juntando los dulces hasta conseguir un pequeño monton cerca del recipiente que habia colocado en el suelo.

Mire el reloj para comprobar como andaba de tiempo y me acelere puesto que sin darme cuenta habia perdido demasiado tiempo en los preparativos; los tres minutos estaban casi agotados y comence a tomar con mi boca los pequeños botones de chocolate recubierto de color, pero no habia calculado que, para coger unas piezas tan pequeñas, tenia que casi colocar mi rostro en el suelo.

Salto el aviso de los tres minutos justo cuando aun me quedaban siete por recoger.

Siete son los hombres que deberan entrever mi desnudez Amo, dame la libertad de no hacerlo de una manera escandalosa, no podria, dejame que solo sea una leve insinuacion de mi desnudez, por favor.

Esta tarde me propongo cumplir la segunda parte de tu orden Amo, cuando salga de trabajar,comere fuera de casa y luego me ire a tomar cafe a una cafeteria alejada de mi zona habitual. alli intentare cumplir tu orden.

como te anuncie ayer, sali d emi trabajo a las tres de la tarde y me dirigi hacia la Plaza de Colon andando, hacia una tarde casi de primavera y mi objetivo era serenarme, tranquilizarme, calcular mi determinacion a cumplir la segunda parte de la actividad que me habias programado y por otra parte, planificar como hacerlo.

Entre en un restaurante cercano a la Plaza de Colon y pedi mesa. Mientras tomaba una ensalada y un pescado a la plancha estuve pensando mucho, recordaba como habia sido nuestro inicio, como me habia provocado sentimientos enfrentados tu forma casi brutal de dirigirte ami, sin apenas ninguna consideracion y como a pesar de ello, o quizas por ello, me habia sentido irremediablemente atraida por tu forma de tratarme. de esta manera, cada vez que me dedicas una poesia o algun gesto de ternura cobran para mi un valor indescriptible.

Despues, estuve recordando las cafeterias de la zona; en principio habia decidido alejarme del area dercana a mi trabajo pero mas tarde pense que a la hora que pensaba cumplir tu orden no esperaba encontrarme a nadie conocido; eludiria los lugares a loos que suleo ir a desayunar con compañeros y teniendo e cuenta que habia decidio hacer una exhibicion "light", esperaba no ponerme en apuros.

Eran las cuatrro y media cuando pedi la cuenta y pase al lavabo. Una vez dentro, repire profundamente y me despoje del tanga. me habia puesto medias de presion para evitar tener que quitarme los pantys. Despues desabroche mi camisa, la colgue del pomo de la puerta y me libere del sujetador. Una vez vestida, me mire en el espejo para comprobar que todo estaba controlado.

Al salir del lavabo y cruzar el restaurante hasta mi mesa volvi a sentir esa sensacion intensa de saberme desnuda.

Sali en direccion a Alonso Martinez y me dirigi a una cafeteria que esta en la misma Glorieta. en principio pense en coger mesa, pero luego pense que para mi objetivo seria mejor quedarme n la barra, en una de esas banquetas altas.

NO puedfo continuar ahora, me han interrumpido, seguire mas tarde.

Sali en direccion a Alonso Martinez y me dirigi a una cafeteria que esta en la misma Glorieta. en principio pense en coger mesa, pero luego decidi que para mi objetivo seria mejor quedarme en la barra, en una de esas banquetas altas.

La barra forma un angulo de 90º y ahi me sente, frente a las mesas, era el lugar adecuado para que, sin tener que volverme abiertamente pudiera ser vista.

pero pronto me di cuenta de que la ropa que llevaba no me ayudaba a mi proposito, la falda es demasiado larga y no podia exhibirme sin dejar claras mis intenciones. pague el cafe´, sali a la calle y para abreviar tome un taxi hasta mi casa, alli me desnude y elegi una falda por medio muslo que sin ser exagerada me facilitaria mi objetivo. Probe a sentarme en el borde de la cama, frente al espejo y comprobe los movimientos que debia hacer para que me mostrase sin levantar sospechas. Elegi una camisa rosa de escote en pico y, cuando iba a salir, saque del bolso mi tanga y mi sujetador y los deje en el cesto de la ropa. Sabia que si no llevaba "proteccion" te sentirias mucho mas orgulloso… y yo me sentiria mas excitada.

De nuevo tome un taxi y ahi mismo pude comprobar que la eleccion de falda habia sido acertada. Los ojos del taxista, trefeljados en el retrovisor, danzaban del control del trafico a mis muslos una y otra vez. ¿Por que no iba a ser el el numero uno de los siete? abri el bloso, tome la PDA y fingi trabajar con ella mientras dejaba que mis piernas cruzadas dejaran mis muslos bien a la vista.

Decidi ue debia dar el paso poco antes de que llegara a mi destino, para evitar que tuviera tiempo a reaccionar; le habia dirigido a la Plaza de España y cuando estabamos cerca, descruce lentamente mis piernas y me gire hacia mi izquierda. Sus ojos siguieron el movimiento de mi cuerpo y por su expresion supe que habian llegado al destino que yo queria. estaba parapetada tras mis gafas de sol pero eso no me facilitaba del todo mirarle directamente, no queria ser descubierta y por eso mi movimiento fue cualquier cosa menos algo similar a la mitica escane de Sharon Stone.

Mi falda habia quedado por encima del tercio superior de mis muslos y deliberadamente retarde el actod e cerrar la PDA y devolverla a mi bolso antes de colocarme la falda correctamente.

Llegamos a mi destino, pague y crei adivinar un tono diferente en sus gestos y su voz, pero no di ocasion a nada mas.

Me sentia excitada cuando entre en el Vips de la plaza de los Cubos. A estas horas apenas habia gente en las mesas, la hora de los almuerzos habia pasado y aun faltaba una hora para que comenzara el tumulto de las meriendas. Elegi, en contra d ela voluntad del camarero, un emplazamiento en una zona vacia y espere.

Autor: Anonimo