Al fin llegaste mi amor

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Karla_patito.
Al fin llegaste amor mío, volviste a mis brazos deseoso de placer y amor. Placer extremo al que te tengo acostumbrado y amor el cual te transmito cada vez que me miras a los ojos. Llegaste y me besaste dulcemente, un beso tierno y largo tenías ganas de ello y yo que me muero por explorar cada centímetro de tu cuerpo.

No hacen falta las palabras, ambos sabemos cuánto nos deseamos, me miras con la invitación a hacer de tu cuerpo lo que se me antoje y yo acepto esa invitación. Te desvisto poco a poco con calma aunque mi cuerpo está ardiendo, beso tu torso desnudo, mmm como me encanta el olor de tu piel, su textura, su color, dejó caer tu pantalón y noto tu erección más potente que otras veces.

Te siento en el borde de la cama y te haga uno señal para que te quedes quieto para que todo me lo dejes a mí, hoy quiero ser yo quien te lleve al cielo. Tantas veces me has llevado tu que hoy deseo corresponder a todo ese placer que me has brindado durante todo este tiempo que llevamos juntos.

Comienzo a desnudarme lentamente, primero me quito la pequeña blusa de tirantes que llevo puesta y después me quito más lentamente aún mi sostén. No traigo panties porque yo sabría que vendrías corriendo a mi traigo una falda escocesa, la que tanto te enloquece, obviamente medias altas con liguero y zapatillas altas, te tumbo sobre la cama para terminar de zafarte el pantalón y tu trusa que estaban enrollados en tus tobillos. Te quito los zapatos y los calcetines para empezar a besar tus piernas, paso mi lengua suavemente por entre tus muslos, tú te arqueas y tu erección es más visible ahora.

Te subes perfectamente a la cama y te relajas, no sabes lo que haré, solo sabes que te haré temblar de placer como siempre lo he hecho, te abandonas y quedas a mi merced, quiero recorrer cada parte de ti no quiero dejar parte alguna de tu cuerpo sin ser besada, chupada o lamida por mí.

Me subo en ti y mi vagina ya inundada la apoyo en tu vientre, mis piernas envueltas en mis medias atrapan las tuyas y me las tocas, te beso primero los ojos, suspiras y me voy a tus oídos, los beso, los succiono y bajo lentamente por tu cuello, te beso los hombros, te subo los brazos y recorro con mi lengua tus bíceps, te arqueas nuevamente, paso a tus tetillas y las chupo, voy de una a otra hasta que tu cuerpo se eriza, voy bajando lentamente hago círculos con mi lengua sobre tu abdomen y meto mi lengua en tu ombligo, bajo un poco más y tu pene reacciona quiere ser chupado por mi pero aún no es tiempo.

Bajo hasta tus muslos y los recorro con mi lengua, paso por detrás de tus rodillas, llego hasta tus pies, ahora te retuerces de placer y estas a punto de estallar, vuelvo a subir, mi lengua recorre cada centímetro de tus piernas, me acerco poco a poco a tu sexo, te flexiono las rodillas y empiezo a lamer tu ano, oigo tus gemidos ahora más y más intensos, recorro ese pequeño orificio con mi lengua y tú sigues abandonado al placer.

Por fin me apodero de tu miembro empiezo a succionarlo como si se me fuera la vida en ello, subo y bajo con mi boca y a la vez te masturbo con mi mano, te masajeó tus testículos, siento como crece aún mas tu excitación, me concentro en la cabecita mientras mi mano sube y baja sobre tu erección, estás a mil, y yo muero de ganas por ser penetrada, por cabalgarte y llenarme de ti.

Tomó un condón del cajón y te lo pongo. Me vuelvo a subir sobre tu vientre y te doy un beso apasionado, tu tiras de mis caderas pues no aguantas más, me clavo tu miembro de una sola estocada, y empieza el vaivén, la danza del amor que tantas veces hemos creado juntos.

Mi vagina se amolda perfectamente a tu miembro, lo aprisiona con delicadeza y fuerza a la vez, nos miramos a los ojos y nos decimos con ellos que nos amamos, seguimos danzando, me masajeas mis senos, sabes que me encantan tus manos en ellos pero también sabes que me vuelvo loca cuando me los chupas. Entre gemidos me dices cuanto me amas y lo bien que te hago sentir, me dices cuanto te gusta hacerme el amor y me pides que no pare de moverme.

Suspiro pues el placer que obtengo contigo es maravilloso te incorporas para chuparme los senos, me estas volviendo loca de amor, lo haces tan exquisito que no puedo más, tanto tiempo sin ti y ahora estoy gozándote y mi cuerpo lo manifiesta. Siento venir mi orgasmo mi cuerpo se tensa y tu chupas con más fuerza, y empiezan las contracciones en mi vagina, tú me has vuelto multiorgásmica , sientes como te aprieto y jadeas, mi cuerpo tiembla, me estoy viniendo riquísimo es tan placentero mi orgasmo que me dejo caer sobre tu torso, me aferro a ti y tu beso con pasión.

Ya recuperada continuo cabalgándote, en eso me tomas de las caderas y giramos sobre la cama, ahora tu estas encima mío, comienzas el mete y saca y yo paso mis dedos por tu espalda y cruzo mis piernas sobre tus nalgas para aprisionarte un poco más y para que sientas la caricia de mis medias que tanto te excita, te siento tan mío y yo soy tan tuya que quisiera que este instante nunca terminara.

Tus suspiros son más fuertes ahora señal inequívoca de tu inminente venida, me muevo al compás de tu cuerpo, yo también lo siento venir, empezamos a jadear más agitadamente hasta que terminamos esta danza de la mejor manera, en un orgasmo mutuo, suspiramos, gritamos, gemimos, jadeamos, nos volvemos locos, te dejas caer sobre mi y el sudor que de nuestros cuerpos emana inunda la habitación del aroma del amor, amor que acabamos de hacer, amor que destila por cada uno de nuestros poros.

Así permanecemos unos instantes y después te dejas caer a un lado mío, hemos hecho el amor de una manera extraordinaria, que lo mejor será descansar, nos dormimos perfectamente acoplados, abrazados como siempre, finalmente tenemos toda la noche por delante.

Despierto y no estás a mi lado, me levanto y te busco en la ducha y no estás, regreso a la habitación y no veo tu ropa, miro el calendario y es 5 de abril. AUN NO HAS LLEGADO, todo fue un sueño, un sueño maravilloso pero con un despertar fatal, regresa pronto amor mío que todo mi ser muere por estar contigo.

Si supieras cuanto te extraño, ya estarías aquí conmigo…