Ana María, mi loca vida sexual

Tengo la necesidad de escribir mis vivencias sexuales, me ha pasado de todo y creo que es una forma de desahogar o tal vez sentirme liberada de todo lo que ha pasado por mi vida..

Ana María

CAP. 1

Me presento a todos los lectores de SST, tengo más de 15 años leyendo relatos eróticos, bueno se van a preguntar pues cuantos años tengo. Actualmente tengo 27 años. Vivo en unión libre con mi pareja desde hace 4 años y tenemos 2 hermosos hijos, el mayor tiene 5 y la menor apenas 8 meses para el día que empiezo a escribir estos relatos, si estos porque no se todavía cuántos serán ya que son muchas cosas que he vivido relacionadas con el sexo, desde juegos inocentes con mis amigos y vecinos, mi inicio sexual con mi consentimiento aunque no sabía mucho que era lo que hacía si me dejo muy marcada esa parte de mi mente que relaciona todo lo que es el amor y los sentimientos con el sexo, tanto como para bien como para algunos males siempre el sexo dominó mi existencia, he llegado a pensar que soy ninfómana pero afortunadamente con ayuda de terapia por otros asuntos de mi vida he podido tener ese apoyo emocional que dentro de sus consejos me decía que escribiera todo lo que pudiera recapacitar y que lo guardara bien o los destruyera. Por esas terapias que tomé desde los 14 años tuve la costumbre de escribir largo y tendido, no soy escritora obviamente por escribir mis recuerdos, así como tampoco soy psicóloga solo por haber terminado en varias ocasiones desnuda y con mi psicoterapeuta enredado entre mis piernas sobre el diván de consulta.

Como adivinaran me llamo Ana María, o Ani como casi todo el mundo me llama. No voy a decir exactamente de donde soy, simplemente de algún lugar de la costa de México,  igual y alguien después podrá relacionar pero no lo diré por una parte porque ya soy una señora respetable con dos hijos y por otra parte mi familia o muchos de mi familia podrán leer esto, no solamente soy medio golfa por mí, también mi familia es muy dada a explorar lo más que se pueda del sexo, por eso sé que incluso mis abuelos han tenido aventuras, les encanta la pornografía e incluso la literatura erótica.

Como primer capítulo voy a platicarles como es mi familia, sus costumbres, también un poco de la mojigatería que es la que predomina y como fue mi primera experiencia sexual con un primo. No me espanto absolutamente de nada.

Para empezar mi familia es bastante joven, mi abuela a sus 59 años ya es bisabuela de mis dos hijos, ella fue madre antes de los 20 si no me equivoco a los 16 tuvo primero a mi mama y dos años después a mi tía, mi abuelo ya era un señor casado de respetable 31 años, si bien no es parte tan importante de esta historia si puedo decir que parte de su temperamento lo tenemos sus hijas y enteste caso yo su nieta.

Hay más familia en la historia, los hermanos de mi abuela, sus hijos primos de mi madre y mis primos. Antes de seguir con la parte que habla de mi primo y de mí, platicaré como es que mi madre quedo embarazada de mi a sus 14 años, obviamente esto nadie de mi familia me lo platicó ya que fue todo un escándalo. Mi nana la cual me conoce a mí, a mi madre y a mi tía y a mi abuela ha trabajado casi desde niña con la familia por lo cual además de hacerla una confidente de todas y cada una de nosotras también se encarga de aclararnos cualquier duda por muy vergonzosa que esta pueda llegar a ser.

Para la época de mi abuela y para la provincia pues no era tan extraño que una chica de la clase media fuera madre joven, si bien no era lo recomendado si fue el caso mi abuela a quien prácticamente sus padres obligaron a casarse en cuanto supieron que ella estaba embarazada, claro mi abuelo tenía dos esposas, dos familias y no sé cuántos hijos regados por ciudades y rancherías, lo único que me conto mi nana es que los padres de mi abuela ocultaron el embarazo de la niña por lo que mi madre nació en un lugar diferente, para el resto de la familia y las amistades ella se casó y se fue a vivir a otro país donde nació mi madre y mi tía y posterior regreso con un nombre, una familia y un marido ausente por viajar constantemente a atender múltiples negocios en distintas partes del mundo.

Claro que toda esta historia fue solamente para evitar que hablaran de que la señorita se encapricho con un joven socio de su padre y hasta que no termino en una cama con él y pudo calmar sus calenturas a los 15 años terminando bien panzona fue que pudo redirigir su vida mediante la constante oración y visitas diarias a la iglesia y bueno como parte del regalito nació dos años después la hermana de mi madre. Mi abuelo no solamente es amable y muy respetado hoy en día, también es un caballero religioso que si bien vive separado de mi abuela ellos siguen aun casados, aunque el viejo viva con una chiquilla que conoció hace algunos años en uno de los burdeles, así como lo leen. El licenciado Tovar (no diré el verdadero nombre) desde siempre fue aficionado a las casas de citas, a los burdeles y a levantar cuanta mujer joven que se dedique a vender su cuerpo y que mi abuelito no quiera llevarse a disfrutar por un par de horas. ¿Como fue que supe eso?, bueno dentro de mis vivencias que yo creo que podría escribir una enciclopedia con todo lo que ha pasado por mi vida y más entre mis piernas.   No es algo de lo que me sienta orgullosa pero tampoco me siento ofendida por decirlo, si, así como ahora soy ama de casa, a mis 13 años ya andaba cobrando favorcitos sexuales y a los 15 en la prostitución callejera, también en burdeles y casad de citas, a los 16 aunque no lo crean ya que en México no se puede tener documentación falsa también trabaje en un par de lugares conocidos como tables. Precisamente en uno de esos burdeles fue que mi abuelo se enteró en lo que su nieta andaba, por ser ya algo conocedora del ambiente también supe que hace diez años aproximadamente saco de esa vida a una chica que se llama Alondra. Alondra si bien no era de mis mejores amigas me conocía bien, quien diría que una prosti de 14 años se convertiría en mi abuelastra cuando yo estaba apenas cumpliendo la mayoría de edad.  Si lo se así es de bizarra mi familia, incesto, prostitución, violaciones y promiscuidad, por supuesto que acompañado de muchos rezos y como no podía faltar en ninguna respetable familia provinciana, mochos e hipócritas a mas no poder, jejeje tal vez por eso es que hay muchos rumores que mi tía y su hija mayor son hermanas ya que el padre Jorge la acostumbro a pasar tardes enteras en la sacristía, en lo que mi abuela se arrepentía de sus horribles pecados con hombres casados y con sacerdotes santos que no tuvieron reparo en derramar sus bendiciones en el cuerpecito de mi tía antes de que esta tuviese siquiera vello púbico y tetas.

En fin, hay de todo en mi familia, por eso es por lo que era importante presentarlos un poco para que no me juzguen si en ocasiones incluso me burlo de la forma de ser de mi familia, no son malos, pero si muy de aparentar algo que no es.

Comenzando con el relato me describiré físicamente, soy bastante alta, siempre lo fui desde niña, un poco llenita por no decir que pasada de peso por que me encanta comer, aun así siempre he tenido un cuerpo llamativo, nalgas bastante grandes, mis senos se comenzaron a formar aproximadamente a los 8 años pero por el exceso de grasita en mi cuerpo, soy de piel blanca aunque un poco bronceada por el sol y el calor que hace aquí, pero en las partes donde no me da el sol si soy muy blanca, mi pancita jamás ha desaparecido del todo menos ahora después de dos embarazos que son los que he llevado a término, tuve anteriormente 3 embarazos pero ninguno llevado a término, el primero a los 12 años otro a los 14 y uno a los 17, ya iré contando cada uno de estos pero por los prejuicios de mi familia los dos primeros aun cuando yo si quería tener a mis hijos no me lo permitieron por lo que fui obligada a perderlos apenas se enteraron de ellos. Bueno actualmente mis pechos con la maternidad han aumentado a una copa D lo cual es bastante y del agrado de quienes me ven ya que aun cuando soy gorda no dejo de llamar la atención, creo que mi mejor época fue entre los 19 y los 22 años que me embarace de mi hijo el mayor. En fin, no sé qué más pueden saber de mí, actualmente tiño mi pelo de color rubio, pero soy de cabello castaño y como me dice alguna vez mi marido, soy una rubia rusa porque tengo el cabello rubio pero el oso negro jejeje, por esa razón es que rara vez dejo crecer mi vello púbico.

Después de esta presentación comenzare este primer relato vayamos al grano, como fue que perdí completamente mi inocencia a manos de mi primo, no voy a decir que Joaquín mi primo fue mi primer hombre ya que él no me quito ninguna virginidad, por más que lo hubiese querido a los 8 años de edad jamás hubiera podido soportar su enorme verga por alguno de mis agujeritos, lo cuales jamás habían sido perforados, sin embargo puedo decir que mi primo me volvió primero curiosa y después caliente insaciable, aunque el me cuenta que fui su experiencia más joven tampoco fui la primera para el a sus 18 años ya había incluso tenido experiencias con prostitutas, amigas de la escuela, novias e incluso me entere que también tuvo sus historias con la hermana de mi mama antes de casarse y con nuestra tía, prima de ellas con la cual incluso fuimos compañeras de gremio cuando ella se fue a otras ciudades para ejercer de forma libre el oficio más antiguo, eso lo contare en otros relatos.

Durante el verano la casa de mi abuela era un ir y venir de gente, los hermanos de mi abuela iban de visita aprovechando la cercanía con el mar, llegaba familia, se iba otra familia, mis primos para ver a otros primos tomaban como punto de reunión la casa de mi abuela, para ese entonces mi mama había conocido a otro novio, si así es, yo no conocí a mi papa si no hasta los 14 años, por lo que mi mama desde que recuerdo tenía novios diferentes, unos jóvenes como ella que para esa época tendría 22 años, salía con amigos, con vecinos, incluso en temporadas llegamos a irnos a vivir al lado de hombres que la disfrutaban un tiempo y después no soportaban su forma de ser tan inmadura, llegando incluso a tener discusiones con mis abuelos y nos íbamos a casa de un amigo suyo, se llama Javier el cual tranquilamente llegaba a los 50 años y no hacia más que consentirnos y en cuanto llegábamos a casa me metían a un cuarto de juegos y en dos minutos ya tenía a mi madre desnuda con las piernas abiertas y gimiendo de felicidad, yo tendría unos 5 años para ese entonces si bien sabía que eso no se tenía que decir, no dejaba de llamarme la atención el gusto de mi madre por ese pedazo de carne que recibía por todos su orificios, incluso alguna vez que ellos estaban en lo suyo Javier al ver que yo estaba ahí tomaba su cosota y me la mostraba con una sonrisa, posiblemente si no hubiera sido por las peleas de ellos yo hubiese terminado partida a la mitad por Javier. Bueno ya me desvié del tema principal, mi primo Joaquín ese verano paso más tiempo en casa de mi abuela, los primos más grandes regresaban a sus casas y el seguía todos los días en casa de mi abuela, para mí era divertido porque teníamos una pequeña alberca en el jardín en donde pasaba gran parte del día y la tarde durante las vacaciones, mi mama con su trabajo, mi abuela también trabajaba en casa, tenía su agencia inmobiliaria a un lado de la casa por lo que prácticamente yo estaba sola con mi nana y mi primo todo el día, mi nana además ayudaba en la casa y siempre al pendiente de toda la familia por lo que Joaquín en un principio se tumbaba a escuchar música y a leer en lo que yo jugaba en la alberca, en una ocasión lo invite a nadar y al poco tiempo estábamos los dos jugando a lanzarnos agua y a luchar dentro de la alberca, mi primo a sus 18 años ya media casi 1.90 m. bastante alto y muy buen cuerpo, un rostro interesante más bien de niño estudioso y no de galán pero poco a poco supo ganarme y empezar a rosarse con mi cuerpo, a los 8 años bastante llenita de mi barriga, mis piernas gorditas y  mis pechos más bien de grasa hicieron que el buscara más el contacto conmigo que yo con él. Pasaron un par de días y de repente caigo en cuenta que mis dos bañadores estaban húmedos en el baño, mi nana me dijo que los lavaría pero que olían a humedad así que había de dejarlos remojar más tiempo,  mi primo ya estaba afuera por lo que simplemente salí al jardín con mi piyama y me la quite enfrente de el quedándome solo en calzón, uno que por el tamaño de mis formas, me quedaba a la mitad de mis nalgas, Joaquín no sabía como disimular su asombro,  si bien me había toqueteado a su gusto los últimos días no había tenido la oportunidad de ver directamente mi cuerpo casi desnudo, ese día estuvo prácticamente todo el día pegado a mí, claro cuando no hubiese alguien cerca, cuando alguien se acercaba el disimuladamente parecía estar en otra cosa, pero casi todo el día pude sentir su erección en mis nalgas, en mi vagina, en mi ombligo cuando me cargaba y al final a media tarde cuando mi nana se retiró a su casa después de comer le pidió a mi primo ya no meternos en la alberca porque no había nadie ya que habían salido, que nos dejaba de cenar y que por favor cuidara que me durmiera temprano porque mi abuela, su esposo y mi mama llegarían pasadas de las 11.

Le dije que nuevamente fuéramos a nadas, yo tenía una bata de baño puesta y mi calzón todo mojado entonces mi primo también casi corriendo fue a la alberca junto conmigo, me dijo que le rozaba mucho y que se quitaría todo, yo de forma divertida vi su cosa a medio parar, me reí y le dije que yo también, los dos quedamos desnudos y con la casa sola, jugamos unos momentos pero después de eso el me pego a su cuerpo desde atrás donde apoyo completamente su pene en mis nalgas, a los dos nos gustó esa sensación y dejamos de jugar únicamente para sentirnos el uno al otro. No se cuánto tiempo paso, tal vez unos 20 minutos y el directamente ya acariciaba mi cuerpo, amasaba mis pequeñas tetas y mi barriga, yo sentía su pene mojar la raya de mi trasero y como se frotaba cada vez más rápido, me dijo que sería mejor entrar a bañarnos porque ya se había aburrido de nadar, me dijo si le gustaría bañarme con él en la tina del baño de la abuela, y nos fuimos así desnudos al baño, mientras llenábamos la bañera con agua caliente el me tomo de la cintura y comenzó a besarme de una forma muy tierna, el sentado y yo abrazada a el sintiendo su calor, en un momento mientras separábamos nuestras bocas el me dijo:

J: Te amo Ana, quiero ser tu novio.

A: Pero somos primos.

J: No nos casaremos, solo quiero ser tu novio, además tu eres muy pequeña para casarnos.

A: Bueno, pero no vayas a decirle a nadie, me moriría de pena.

J: Lo prometo.

Nuevamente seguimos el besuqueo, el me abrazaba y mordía cariñosamente mi cuello y mis oídos, a mí me daba mucha risa, mientras sentía su pene frotarse con la parte baja de mi barriga un líquido caliente me mojo de pronto. Pensé que era su pipi, pero cuando la toque vi que era más como la clara de un huevo, le pregunte que por que me había echado pipi en mi estómago, él me dijo que eso no era pipí, que era leche con bebes, yo no tenía idea de lo que me decía, pero no me dio asco ni nada solo lo deje seguirme tocando.

J: ¿Quieres sentir algo muy rico amor?

A: Si, ¿qué?

J: Acuéstate sobre la toalla, abre las piernas.

Obedecí y él fue de inmediato a pasar su lengua por toda mi vulva, lamia mis ingles, mi clítoris, la entrada de mi vagina, mi ano, todo lo hacía muy lentamente, aspiraba el olor de mi vagina y de mi culo mientras que veía como nuevamente se acariciaba su verga y esta se volvía a poner dura, yo no soporte más y tuve mi primer orgasmo, unos chorritos salieron de mi por lo que trate de alejarlo.

A: Joaquín, ¡no!, ¡me está ganando!

A: ¡No, me meo toda!

J: Si mi vida, quiero tu chis, meate toda. Te amo.

J: ¡Meate en mi amor!

Nuevamente tuve un orgasmo que casi me saca lágrimas de los ojos, quedé rendida con las piernas abiertas sobre la toalla mientras mi primo nuevamente eyaculaba sobre mi cuerpo, desde mi ombligo hasta mis pezones, un poco de su leche cayo en mi cuello pero no me importaba nada.

Me cargo y me metió a la tina donde nos seguimos besando y acariciando, pero ya sin la misma intensidad que hacía unos minutos.

A: ¿Que me paso?

J: Hicimos el amor, tuviste un orgasmo mi nena.

A: Sentí que se me salía todo de mi cola.

J: Así es primita, espero te haya gustado como a mí.

A: ¿Sentiste también como yo?

J: Bueno las niñas y los hombres tenemos cuerpos diferentes, pero si debe de ser parecido.

A: ¿Primito, porque te salió la leche con bebes?

J: Cuando dos adultos hacen el amor pueden tener un bebe, tu todavía no puedes además de que si te meto tilín podría lastimarte, esos bebes se echan adentro de la panza de la mujer para embarazarla.

A: ¿Me puedes embarazar?

J: No prima, eres muy peque, además de que no podríamos casarnos, nuestra familia no iba a aceptarlo y podría lastimarte, cuando seas más grande tal vez, pero ahorita tienes 8 años y yo 10 más, soy muy joven para tener un bebe.

A: Bueno cuando este más grande me podrás embarazar muchas veces.

J: Ya lo veremos primita.

Ese verano fue de muchos descubrimientos, sin embargo el gran amor de Joaquín que no permitió jamás que su pene entrara más que en mi boca, no se cómo algunos relatos hablan de niñas pequeñas y que reciben un pene adulto, debe de ser algo horrible sentir un dolor ahí cuando no estas preparada y más siendo una niña, mi primo jamás me penetro más que cuando ya estaba desarrollada y tenía como 16 años, eso lo contare en otro relato, nuestro noviazgo duro aproximadamente un mes, cuando nos quedábamos solos no podíamos evitar la sensación de desesperación por sentirnos desnudos, mis pequeñas tetas crecieron de tantas veces que las chupo y las mamo durante ese mes, sentí sus eyaculaciones en mi boca, en mis senitos, en mi ombligo, jeje, esto era algo que le gustaba más a el que a mí, también frotaba su chorizote entre mis nalgas y le gustaba eyacular pegadito a mi vagina o a mi ano, varias veces me quede con mis partecitas pegajosas de las venidas de Joaquín, también no se cuántas veces me tomaba a los bebes, pensando como broma que me pudiera embarazar si me comía su corrida.

Una mañana mi abuela le dijo a Joaquín que por favor se fuera a su casa, que después hablarían, yo estaba desayunando y no supe que decir, mi abuela me soltó a quema ropa:

Ab: ¿Anita, te ha hecho algo Joaquín en estos días cuando están solos?

A: No abue para nada lo quiero mucho.

Ab: No me mientas, el no puede hacerte nada, quiero saber si te amenazo o dijo que te haría algo.

A: No abuelita, es el mejor primo que tengo.

Ab: Me parece raro que pase tanto tiempo contigo, debería salir con muchachos de su edad con novias.

A: Abue, él es único que juega conmigo, además es un poco ñoño, le da pena hablar con mujeres.

Ab: Aún así, quiero que me digas si algún día trata de tocarte o de besarte, él ya es un hombre y tu una niña.

No se habló más del asunto, mi abuela interrogo también a mi primo, pero por supuesto lo negó todo, mi madre y mi abuela se enfrascaron en una pequeña discusión que me tendría que revisar un médico, pero mi madre no lo permitió, si bien ella era muy joven también sabía que yo no sería tan feliz si hubiese sido violada o abusada por algún hombre.

Joaquín se limitaba a saludarme con un frio beso en el cachete cuando estaba la familia y a mirarme disimuladamente cuando nos juntábamos, nunca mas volvimos a estar solos.

Continuara…