APP XXX 18
pese a la perdida, Cas sigue adelante, aunque una nueva intriga cargada de erotismo se aproxima….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…
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Cas no podía creerlo, pero perdió un trió de chicas encantadoras, que exudaba sexualidad, a esas 3 las quería coger desde el comienzo, no estaba contento, ¿Cómo había sucedido? Sin embargo al preguntar por ellas al gremio de perros, estos no respondían nada, de hecho el mismo Corvin se mostraba muy molesto, no obstante, nadie le daba respuesta de aquello, lo cual era indignante, se sentía burlado, como si le subestimaran, aunque ese era el mínimo de sus problemas, pues debía hacer arreglos, se cambio a la universidad de sistemas informáticos local, la cual sería cara, pero su madrastra estaba contenta con darle eso, quería tenerlo cerca, no solo para pasar deliciosas noches de sexo, disfrutando de sus cuerpos, sino porque necesitaba que este le ayudara con todos sus negocios, pues ella no podría trabajar por maternidad, debido a su edad, su embarazo tenía sus riesgos, pero ella estaba contenta, la gente le veía como si fuera la buena en alguna clase de historia dramática, sin imaginar que durante unos días ella solo vestía un poco de lencería para que su hijastro le diera tan duro como pudiera, en el coño o el culo, disfrutaba mucho de recibir las atenciones carnales de su actual macho, quien le trataba de una manera tan apasionada, compartiendo la cama, aunque eso sería solo por un tiempo, pues cuando su vientre se viera demasiado hinchado, eso lo dejarían de hacer, pero seguramente a la fecha, la mujer gozaría viendo a su hija tomar su lugar. Cogiendo entregada a la pasión, recibiendo buena verga dentro de su coño caliente, usando apenas unas medias que resaltarían las piernas, unos tacones, si la muy guarra estaría encantada de ser la mujer de su hermanastro, aunque eso sería más adelante, pues de momento debían seguir con los juegos, y Janet era la novia oficial, por lo que ella podría gozar de tener al joven en su cama, disfrutando del mejor sexo, al menos de momento.
Cas vería que todo estaba bien, su madrastra era su primera amante, de hecho esperaba un hijo suyo, lo cual le tenía algo nervioso, jamás esperó eso, aunque se manejarían como si fuera en realidad su hermano, Juliana y Janet de alguna manera se hacían cercanas, de hecho se dio cuenta que por los trabajos de sugestión, crearían una especie de triangulo amoroso, compartiendo la cama, era una locura, pero no le importaba, al menos en eso estaba de suerte, por su parte las gemelas fueron oficialmente adoptadas, así que se quedarían en casa, acudiendo a la misma escuela que Noemi, quien se sentía contenta de tenerlas cerca, su mente era un caos por las drogas, le hicieron daño, pero ellas lo sabían calmar con sus juegos especiales, haciéndose muy cercanas, quizás demasiado, además ya no necesitaba llamarle, pero ahora sus noches calientes las pasaba con ambas, haciendo tríos lésbicos incestuosos, que seguramente serian de lo más candentes, si muchas veces despertaban temprano para bañarse antes de ir a la escuela, y le preocupaba un poco a Cas, sino fuera porque su madre le decía:
Descuida hijo, solo la están preparando para cuando la hagas tuya, esa niña esta loquita por ti, no tiene ojos para nadie más – eso le daba a entender que todas ahí estaban en una especie de complicidad sexual, para gozarlo como si fuera una especie de semental.
Por su parte su padre quedó destrozado, la venganza de Constance fue implacable, decían que sufrió un golpe muy fuerte durante el asalto, provocando un derrame cerebral, que le dejó en estado vegetativo, pero que lo cuidarían hasta el resto de sus días, era mentira, el suero intravenoso que recibiría, era una droga que atrofiaba los nervios, quedaría paralizado para siempre, y lo peor sería que lo convertirían en testigo mudo de todas las cosas que harían, de hecho el viejo infeliz miraba como su hijo cogía con su esposa todas las noches, llenándole la vulva de leche, escuchado también los planes, donde sería un espectador, pero jamás parte de nada, atado a una silla, sin poder responder, necesitando pañales o que alguien hiciera las cosas por él, pues era como un cadáver en vida, realmente Constance fue despiadada con este, e igual sus socios, acabaron mal, siendo convertidos en criminales, parte de una conspiración, que acabarían en prisión, y todos los bienes pasaron a nombre de la familia, lo cual aumentada los recursos de Cas. Cuando este llegó a su nueva escuela, casi se volvió una celebridad a la que todos buscaban, en especial las chicas, muchas trepadoras sociales, quienes querían algo de suerte, pero con unas pocas palabras las mandaba a volar.
Los siento, pero tengo novia, Janet, te suena su nombre es una nueva modelo, salimos desde hace meses y estamos muy enamorados – con eso no solo se deshacía de las lagartonas, atraía a sus compañeros quienes querían saber más de la sexy muchacha, quien aparte, aparecía en veces para estar con su novio, logrando ser la envidia.
Además se le veía a Cas algo inquieto, no dejaba de pensar en el gremio de perros, como es que parecía haberle traicionado, quería saber, ¿Qué paso con las 3 chicas? Pero sólo le hablaban de la purga, por lo cual se volvía una molestia muy grande, sin embargo, ese era el menor de sus problemas, pues tocaría algo un tanto problemático. En uno de esos días sucedería que le dirían los maestros que habría un curso especial para informática en una ciudad cercana, como varios de los estudiantes eran parte de grandes familias, moverse no resultaba un gran problema, por lo cual, esperando mejorar su valor curricular, Cas aceptó a irse por unos días, pues debido al problema no estaba disfrutando tanto del sexo, podía coger cuanto quisiera con quien tuviera oportunidad, por lo general era Janet, su preciosa novia, quien le cumplía todos sus fetiches, pero en veces hacia cosas con July, ni que decir de las gemelas, quienes se entregaban como pocas, haciendo tríos donde se perdía entre unas y otras, gozando de sus cuerpos en desarrollo, y de cierta forma con Noemi pasaba lo mismo, empezando sus primeros encuentros sensuales, aunque la principal era Contance. Cada uno de sus cuerpos deliciosos eran disfrutados por el joven, quien gozaba de las atenciones de cada una de ellas, encajándole la verga tanto como podía, sintiendo la calidez de esas formas seductoras, que llamaban la atención de todos al caminar, desatando la lujuria de manera mórbida, entre las sabanas o cualquier cuarto que pudieran, pues incluso se bañaban juntos, o llegaba a ver todo lo que quisiera de cada una de ellas, disfrutando de una escena de sexo sin barreras, más que las que cada uno de ellos quisiera.
Cas se hallaba en esos pensamientos mientras se movilizaba, a veces perdiéndose en memorias sexuales que lo dejaban ansioso, pensando en que sería lo siguiente en probar, aunque en serio quería disfrutar de aquel trió que conoció de manos de Tea, quien era invitada, de hecho quedaría como su sexy secretaria, mientras que aun se decidía el futuro de las otras 3 niñas, pero iban a pertenecerle, aunque la principal sería la mayor, cogiéndola hasta que la preñara, todo era algo caótico, por eso decidió irse un poco, las cosas eran un desastre en su cabeza. Se fue en una avioneta, esperando que no le hicieran alguna mala jugada, aunque no iría solo, en esta ocasión le tocaba ser acompañado por un colega, un pervertido que quería trabajar haciendo juegos para adultos, pero le faltaban los contactos para llamar la atención, o al menos eso entendía, porque se le veía bastante inquieto, tratando de mantener la calma cuando finalmente dijo:
Oye podemos hablar un poco, aunque primero, gracias por echarme la mano, me salvaste de un cobro considerable – decía Max, su nuevo compañero de la carrera de sistemas informáticos.
No hay problema, la verdad me gusta tu trabajo, aunque los maestros lo vean mal – señaló un poco aburrido Cas mirando a su amigo.
Excelente, que bueno que dices eso de mi trabajo, porque me interesa que me ayudes – dijo finalmente el chico sacando una computadora portátil.
No quieres que aporte dinero a esto o si – diría algo inquieto el niño rico.
No, quiero que le eches un vistazo, estoy haciendo una novela visual, pero tengo mis dudas, luego lo subiré a la nube, lo ofreceré en línea, espero dentro de poco sacar dinero, pero tengo mis dudas, quisiera que vieras para hacer mejoras – aseguró un poco inquieto Max mientras le dejaba jugar con su equipo.
No sería algo tan complicado, entraría a ver y notaria una presentación muy normal, la trama era sencilla, un padrastro enamorado de su hijastra, dejados solos en casa para que pudieran hacer varias travesura, era una premisa sencilla, pero bastante excitante, pues el hombre tenía un diseño burdo, demasiado musculoso, la chica preciosa, muy bien diseñada, una rubiecita tetona que llamaba la atención por el cuidado, y se notaba una serie de escenas demasiado excitantes, que se podían repetir debido al sistema: descuidos en el baño, la chica orinando o cambiándose de ropa, una especial donde se estaba masturbando, era un deleite visual.
Todo comenzaba a mejorar cuando sacaban una serie de escenas de fanservice especiales, donde se podían ver en diferentes posturas a la chica, exhibiéndose, como si quisiera que le rompieran el coño con una fuerza salvaje, agachada para recoger algo, dejando ver su tanga, sentada con las piernas abiertas debido a una caída, bañándose con apenas un poco de espuma en su cuerpo, o en la cama apenas con un calzón, la trama seguía liberando algunos eventos, en los que se hacían cosas más intimas, desde ir a la playa, donde se vería con un bikini, o ir a entrenar, donde podría verse a la hija moviéndose de manera excitante pues al correr su culo sobresaldría, pero también sus tetas se agitarían de manera sabrosa, pero el juego no estaba terminado, apenas tendría una escena de sexo, donde ella misma se ofrece a su papá, después de una secuencia algo aburrida, de hecho se notaban algunas fallas, pero al final esta terminaba en el cuarto del hombre, haciendo una secuencia muy sexy donde solo vestía una especie de lencería, moviéndose de manera excitante para entrar en un besuqueo, donde seguiría una serie de caricias, y la verga del padrastro entraría por su cuevita súbitamente, haciéndola gemir como una perra en celo, siendo ella quien cabalgaría al hombre para ser empalada en un evento bastante excitante, aunque se sentía algo molesto, pues le tomaría mucho esfuerzo y era repetitivo llegar a ese punto.
Entonces qué dices ¿Qué te parece el juego? Cualquier sugerencia es bien recibida – le dijo Max.
Mm, mira, la historia es muy lineal, es bastante repetitivo, no es muy creativo, pero te diré algo, para variar te daré 2 sugerencias, primero que le des variedad como que elijan si es padre o hermano, con la chica, también podrías divertirte con un cambio de aspectos, que se diseñe a la chica, bueno eso se me ocurre – decía un poco inquieto Cas.
Mm, sabía que debía preguntarte a ti, algo me decía que eras el adecuado – dijo Max ansioso.
Mm, no entiendo porque lo dices eso – cuestionó un poco el joven mientras veía que iban a aterrizar de una vez.
Tendrían que aguantar un poco, y se iban a despedir, aunque por la curiosidad Cas le dejaría seguirle, subiéndose a un taxi especial, para comer en un elegante restaurante a un lado del hotel donde se quedaría, siendo uno de 3 estrellas, lo cual asombraría a Max, quien miraba aquello como si fuera un mundo de diferencias, donde los tratarían como clientes importantes, una vez ahí continuarían con la charla.
Mira, tengo 2 razones para haberme acercado a ti, no tanto eso de que fueras parte de la elite, digo, eres el hijo de un empresario importante, tienes tanto dinero como quisieras, aparte de una novia preciosa, pero algo en tu mirada se ve diferente – decía un poco inquieto Max
No sé a qué te refieres – respondió algo desmotivado mientras llamaba a una mesera.
A su lado llegaría una sexy morena con cuerpo voluptuoso, con una camisa que parecía a punto de romperse por el tamaño de sus pechos, tenía el pelo rizado, una falda corta que apenas contenía un par de nalgas grandes carnosas, que seguramente se sentirían de maravilla, al menos cuando la estuviera penetrando, o eso pensó un poco el chico mientras la veía caminar para atenderlos. Pedirían 2 menús a la carta, mientras la mujer tomaba nota mental, pues se le había olvidado la pluma, o eso pensó cuando se vio que se le cayó cerca de la mesa, dándose la vuelta para tomarla, dejando ver sus carnes suaves, apenas cubiertas, lista para darle directamente en el culo, que por segundos creyeron que estaba rogando por sexo duro, aunque no se quedaría, se marcharía para atenderle, aunque llamaba demasiado la atención de todos los presentes.
Por segundos pensé que le darían una nalgada o al menos le agarrarías por detrás – dijo Max un poco ansioso, mirando a la mujer desde la distancia.
Ganas no me faltan, pero que quieres que te diga, soy figura pública no puedo hacer eso – le recordaba Cas un poco inquieto.
Aparte que estas bien acompañado, digo, tu novia salió en unas sesiones de fotos de ropa de marca, se ve preciosa, todo le queda bien, dime, ya te la has llevado a la cama – preguntaba un poco ansioso Max.
Que quieres que te diga, claro que lo he hecho, sería un idiota si no – aseguró el joven un poco inquieto, mirando a su compañero.
Jajajajaja, por eso te pregunté, porque ya tienes experiencia, no eres casto como muchos, y casi podría apostar que eres de esos que hacen cosas coquetas, no solo te quedas con lo básico, sino que intentas cosas nuevas – casi se burlaba Max mirando a su colega.
Bueno, eso tiene algo de verdad, puesto que me la he pasado con una preciosa novia, le he comprado toda clase de prendas para que se vea linda, antes de mudarme, vivimos juntos – aseguró Cas un poco confiado.
Jajajaja, ya sabía yo, dime que has usado esposas, o trajes de Maid, quizás de colegiala, lencería rica, porque con eso yo soñaría con hacerle a tu novia, en serio que esta deliciosa, como pocas mujeres, como me dan ganas de cogerla a la fuerza, mm – decía un poco mañosos Max.
Oye, que hablas de mi chica, así que respeto, no te hagas ideas raras, que le tengo mucho cariño, es con quien estuve en las malas – sentenció molesto Cas.
Oh, perdón, no era mi intención, pero se me fue la mano, me disculpo, pero en verdad tendrás que aguantar, muchos chicos se la van a jalar viendo a tu novia, querrán hacerle cosas, es lo normal, pero tu descuida, que solo soy un hablador, no me tomes tan en serio, eso si te agradezco, es que quería hablar con alguien que supiera de cosas de sexo, porque, bueno, yo no tengo nada de experiencia, no soy popular, apenas el nerd del salón – decía un poco humillado Max.
En eso no podía negarlo, max debía tener al menos 1,8m de altura pero a duras penas alcanzaría los 75 kilos, se veía flaco, estirado, con cabello castaño desalineado, seguramente podría ser presa de abusos, aunque demostrada un talento pervertido, lo que le daba ideas a Cas para hacer más cosas, no sabía si sería buena idea, pero la idea de introducirlo al mundo del gremio le iba gustando, pues tendrían un técnico que pudiera hacer nuevas producciones, videojuegos eróticos que valieran la pena, o eso pensaba. Pero no se quedarían mucho a hablar, luego de comer y charlar, se moverían cada uno a su lado, por suerte para Max, el tenía un tío trabajando en ese lugar, así que podría quedarse con él, mientras que Cas se dormiría en el hotel y en la mañana siguiente irían al curso, donde todo sería como lo esperaban, aunque cabe decir que al menos le tomaría 3 horas ser presa de algunos acosos, pues unas chicas, no tardarían en reconocerlo para buscarlo, quedando de ofrecida, para pasar una noche deliciosa, detalle que no funcionaria.
Era evidente para el joven, esas tipas solo querían conseguirse un “novio” rico, uno para poder quedar con lujos y privilegios, no estaban por otro motivo, lo cual le enojó bastante, pues deseaba algo un poco mas intimo, aparte no necesitaba de esas atenciones, puesto que su madre Constance, le mandaba material especial durante su ausencia. Apenas al tercer día de llegar, recibiría una llamaba muy caliente de su madrastra, en serio le gustaba esa candente mujer, que usaba ligeros camisones de seda fina, que apenas cubrían sus preciosas formas, tetas grandes carnosas, o una vulva jugosa, la cual ahora cargaba a su hijo, lo que le daba una sensación de inquietud, pues ya todos sabían de su embarazo, y la felicitaban, mientras que a él lo dejaban como representante de muchos negocios.
(La narración sigue por diálogos “C” para Cas y Co para Constance)
Co: hijo, como estas, solo han sido unos días pero te extraño, dime ¿Qué paso?
C: todo bien, las cosas van como se esperaba, pero tengo ganas de dormir a tu lado Constance, deseo chupar tus tetas, les tengo unas ganas deliciosas.
Co: mm, no digas esas cosas o me pondré caliente, en serio tengo ganas de irte a buscar, estaré premiada, pero aun me arde el interior.
C: lo sé, pero debemos mantener las apariencias, madre e hijo afuera, y en la cama somos de todo, si mi verga quiere entrar de nuevo en ti.
Co: mm, en serio, me dices esas cosas y me dan ganas de sobarme, estoy bien caliente en la cama, mis dedos no son suficientes, apenas lo disfruto porque el viejo me ve así, jajajaja, ahora debe desearme, pero ya no me tendrá.
C: de lo que se pierde, porque tu coño esta delicioso, y siempre jugoso, me dan ganas de regresar.
Co: quédate allá, luego te desquitas, acá tengo a tus mujeres, y seguro que va a gustar, son adictas a ti, déjame te muestro.
Muy para la sorpresa de Cas, su madrastra le mandaría un video donde podría ver como ambas estaban haciendo cosas eróticas en su cama, sobando sus coños uno contra otro, totalmente desnudas, Janet y Julianna, entregadas en un encuentro lésbico bastante intenso, con sus vulvas depiladas, mientras sus tetas se veían de manera espectacular, moviéndose de una mera casi hipnótica, pues la fricción que estaban dando, en sus conchas, a su vez estremecía todos sus sentidos, causando una oleada de calor tan potente que no podría contenerse ninguna, aunque todo estaría en una imagen Gif que calentaba perfectamente.
C: mm, luego tengo que sacar a las 2 a pasear, quizás estar de travieso y hacer una cita doble, jeje.
Co: eso será después, estoy organizando un viaje familiar, para que puedas disfrutar de eso sin problemas, se me antoja verte coger con ambas, es que ya se me empieza a hacer grande el vientre, mm, me diste tan rico.
C: y te seguiré dando con todo, nomas que regrese, aunque será peligroso con el bebe ¿cierto?
Co: descuida, podre satisfacerme hasta que nazca viéndote coger con Julianna y Janet, esas 2 cada vez son más unidas, lo que pasara con los chocolates esos arregló muchos de mis planes, mm, pero vas a tener que cuidar a mi niña, entendido.
C: claro, siempre y cuando Janet comparta la cama, sabes que no la voy a abandonar, le tengo unas ganas bien duras de cogérmela.
Co: no hay problema, aparte, las gemelas te tienen una sorpresita, jejejeje.
En ese momento le mandaría un pequeño video, apenas sería de unos segundos, pero le causaría un morbo increíble, se pondría tieso en un solo instante, dándole ganas de irse a cogérsela de inmediato a las “3”, puesto que era las hermanitas, disfrutando de un momento intimo, se estaban bañando, usando el jabón como intermediario para darse placer entre ellas, se hallaban muy juguetonas, tocándose entre sí, haciendo una serie de toques bastante coquetos, cosquillitas que iban desde sus tetillas hasta su vulvita, besitos cariñosos, suaves caricias, despertando un morbo indescifrable que se perdía en los gestos de la más pequeña quien sonaba como gatita en celo, era una locura, sentía su verga bien dura, que diría:
Con ganas de romperle el coñito – dijo un poco ansioso Cas.
Tranquilo hijo, será tuya, pero tienes que esperar, es muy chiquita todavía, pero ya la gozaras – aseguró la mujer mientras miraba a su hijo bastante ansioso de sentir aquellas formas.
Luego de eso le pasaría una foto más donde vería como ellas jugaban bien calientes en la camita, pasando un rato entre besos caricias, usando una cremita especial para pasarlo mejor, disfrutando de un jueguito especial que aseguraba el despertar del deseo, era tan caliente, que no podía dejar de verla, estaba pensando en cuantas travesuras haría con ella, quizás no podría esperar hasta los 12 años para poder gozar de la pequeña Noemi, aunque ese era el plan, pero al menos al volver le haría muchas cosas a las gemelas, que las encontraba totalmente irresistibles, cogerlas con el uniforme de la escuela se volvía su fetiche con ambas.
Co: después de esto, quería avisarte hijo, tu entrada al club será para finales del año, todos están contentos con tu entrada, te lo aseguró, así que prepárate, quizás deberías hacer más.
C: en serio, pensé que tardaría por todas las cosas que pasaron, ¿Qué sucedió? Mamacita.
Co: jejejeje, pícaro, en serio que sabes cómo tenerme contenta, pero bueno, las chicas que trajiste, han estado trabajando muy bien, Tea, en tu ausencia me hace los mandados, y muchos quieren romperle el coño, por cierto la Tifanny y Katy, esas pérfidas están en un centro de películas, es algo extremo, pero no se puede hacer mucho, son demasiado vulgares, no tienen clase, putas baratas, mientras que Luisa y Julia, mm, serán servidumbre especial, podrían terminar en el gremio como perritas especiales, ya las solicite, y por cierto Anne, es una joyita, es bastante buena actuando, así que se unirá al elenco infantil con las gemelas, aparte que siendo tan blanquita, uff, ganará millones, su defecto ahora será su fortaleza, aunque puede que las 3 terminen en otras casas, nada es seguro, pero esto te ayudará para hacerte de renombre, cuando seas miembro, muchos te reconocerán con antelación.
Habiendo dicho eso Cas se despediría, eran buenas noticias, apenas pudo divertirse en esos días, todo había sido bastante duro, tantas cosas que hacer, y seguía molesto por no disfrutar de esas 3 lindas niñas: Dayna, Luna y Mar; eso le tenía frustrado, si no pudo disfrutar tanto de algunas fiestas como la del Halloween, en que vio a la pequeña Noemi y las gemelas de brujitas, todas a juego, se veían preciosas, pero su mal humor amargó un poco su momento, apenas se las pudo coger a las mayores con sus vestidos puestos, y a su hermanita le daría un beso mas de enamorado que de hermano, si poco a poco todo cambiaba, se iban acercando, ella era más coqueta, un poco posesiva con él, celosa con Janet, aunque entendía que la necesitaban, porque de otra manera no podrían estar juntos, solo que ella deseaba poder coger con él, como ella lo hacía, si muchas veces los encontró haciendo cosas en la cama, gozando de esos pechos enormes, o con una buena verga encajada hasta escurrir.
Con ese pequeño aviso podría mantenerse más tranquilo, y volver a sus labores, aunque no estaba contento ahí, no dejaban de verlo varias golfas, que sabía perfectamente lo que buscaban, hacerle alguna clase de juego para quedar con él, aunque este no les daba entrada, y por suerte su cuartada era excelente, como para que nadie le dijera algo, pues muchos le dirían a esas tipas: cómo se va a rebajar contigo, estas buena, si, pero ese esta con la Janet, una belleza que todos le queremos dar bien duro, cuando se va a ir contigo, la única a la par es la Julianna que es su hermana, ja; y a todo eso Cas solo tenía que agregar un detalle para que muchos le felicitaran, de hecho ayudaba a la imagen de ella como modelo, diciendo que fue la incondicional cuando le iba mal, logrando que muchos la vieran con mejor gesto, pues una chica así les parecía demasiado valiosa, incluso algunos compañeros le verían con un poco de rencor por tenerla, cosa que no le importaba demasiado, a fin de cuentas ellos no disfrutarían de esa belleza como él.
Sin embargo pasarían 2 cosas más, durante su salida habría de convivir igual en el restaurante, donde vería a la preciosa chica morena, su nombre era Sugar, o al menos eso le decía, quizás fuera alguna moda de los padres o un coqueteo de ella, al final poco le importaba, pues era una delicia, quería invitarla a pasar la noche, pero no se le daba la oportunidad, aparte que parecía notar que tenía un novio celoso, o lo que fuera, lo cual causaría una ligera frustración, sin embargo no era todo, después de ello sucedería algo más. El sábado darían una pequeña fiesta por el fin del curso, aunque eso sería solo un decir, puesto que harían una convivencia con buffet, todo era parte de una escuela de renombre, así podrían pasarlo bien los alumnos, pues con solo esos días se habían formado algunos grupos, los chicos que eran trabajadores, otros con los que eran líderes de empresas y las tipas que estaban tratando de quedar con alguno de los segundos.
Cas no se juntó con ninguno, por suerte Max se le quedaba cerca, así que podría pasar el rato con cierta seguridad, evitando a las golfas que solo buscaban como conseguir a un bobo con quien pasar el rato, evitar a los cretinos creídos, o eso se vería, pero no tardó en notar algo interesante, pues entre las meseras estaba Sugar, quien lucía unos pantalones de vestir que no ocultaban sus preciosas formas, era una locura que le encantaba, aunque igual su camisa apenas mantenía sus tetas dentro, de hecho varios jóvenes le estaban mirando con ganas de meterle la verga entre las masas de carne sabrosa. Por ello no lo pensó mucho antes de saludarla, viendo con gusto que como siempre se movía con una sensualidad que le resultaba irresistible, en cada movimiento se dejaba ver un encanto que le hacía desear tomarla, aparte cabe decir, aunque era poco tiempo de conocerla tendría cierta confianza, y eso le serviría a ambos, pues parecía alejar a otras chicas, o al menos eso creería, pues a mitad de la fiesta se sentiría muy mal, un tanto mareado, como si le hubieran metido algo en su bebida, lo cual le dejó inquieto, pensando en escapar, y por suerte Sugar sería la elegida para llevarle a su cuarto de hotel, teniendo que marcharse rápido.
Era un asco, se sentía como un tonto, y a pesar de todo haría un mensaje, diciéndole a SecretGun, que algo le pasó, le metieron alguna porquería en la bebida, para que revisara, había olvidado por esa noche que los estaban merodeando, si en el cumpleaños de su hermanita le regalaron esos chocolates contaminados, fue demasiado torpe, así que trataba de resguardarse, aunque algo le pasaba, la verga se le estaba parando, en especial al sentir como tenía cerca los pechos de Sugar, quien le diría algo como: tranquilo nene, ahorita vamos a casa para que descanses; y escuchaba como el taxista le decía cosas, no recordaría mucho, sin embargo se sentía nervioso, pero con gusto llegarían a su habitación, después de entrar al lobby, y recoger la llave, por desgracia por la hora apenas podría ver que sucedía, muchos de los trabajadores ya se habían retirado, por lo cual la preciosa morena entraría hasta su cuarto, un penthouse elegante, que le permitiría sentirse soñada, si le dijo:
Mira no es lo que acostumbro, pero si me dejas pasar la noche, bueno, podríamos divertirnos mucho juntos ¿Qué dices? – una propuesta indecorosa de parte de Sugar mientras miraba el cuarto con una clase de gusto vicioso en su mirada.
No sería nada del otro mundo, antes que se diera cuenta, ya estaba sobre la seductora morena, entregada en una faena sexual, ella se dejaría arrancar la ropa, dejando ver ese enorme par de tetas, que se veían tan suaves, dejando libre un aroma tan seductor que le despertaba un morbo increíble, le hacía desear romperle el coño con la fuerza de su verga, que se iba armando de una rigidez como la del hierro, aunque antes de eso se besarían apasionadamente.
Mm, esto querías verdad, señor cliente, hacerme su puta de una noche – decía la joven mientras se dejaba besuquear, haciendo un suspiro al sentir como le lamia el cuello.
Es que estas bien rica, ni quien te pase por alto, pareces de chocolate delicioso, en serio – decía Cas sin dejar de sobar ese cuerpo mientras le sacaba la ropa con desespero sexual.
Estaban en un juego de pasión reconociendo sus formas, notando con gusto la joven, que la figura de su pareja no era tan delgada como pensó, sino que su cuerpo era más torneado de lo esperado, músculos bien definidos, aunque no estaba robusto, sino que resultaba ser atlético, lo cual despertaba una sensación de ardor sexual que aumentaba mucho del morbo de la muchacha, quien se iba sintiendo más interesada. Se entregaban a la lujuria en movimientos lentos, dejando al suelo la ropa, camisa y pantalones, el conjunto de lencería no era a juego, no estaba buscando acción, pero después de ver aquello, quería sentirse como una reina, y pasar la noche con Cas era su oportunidad, además que le permitió alejarse de idiotas que la estuvieron manoseando, prefería darle oportunidad a este, que al menos era coqueto, y ahora lo estaba gozando.
Mm, señor cliente, pensé que sería solo un putito de muchos, caliente por el cuerpazo que tengo, pero sabe lo que hace, mm, me gusta cómo me toma, mm – confesaba Sugar entre las caricias que iba desde sus nalgas a la espalda, sintiendo como le chupaba los pechos.
Y apenas comiendo dulzura, mm – le decía con cierta pasión que iba acentuando con sus manos
Él le prestaba toda la atención, iba gozando por amasar ese culo con un gusto bastante grande, que apenas veía por culpa de las tetas, que eran la gloria, sacando la tanga, que una vez fuera dejaría que el lugar se llenara se su aroma embriagante, muy fuerte y sensual, lo cual le invitaría a dejarle metérsela, un pequeño gusto que apenas podría tolerar, pues de una sola embestida se la dejaría ir hasta el fondo, logrando que ella gimiera de forma deliciosa, pues aparte se mordió el labio de manera juguetona, antes de empezar el vaivén del amor que sería el inicio para esa faena sexual. Sugar se entregaría de manera perfecta, abriendo sus piernas de manera gloriosa mientras sentía como se la iban metiendo, sacándosela de una vez, aunque antes volvería a golpear su interior causándole un gusto total, esto en un juego que despertaba la pasión, una locura de pasión sin frenos, mientras esos pechos se iban moviendo de manera seductora, como invitando a lamerlos de manera voraz otra vez.
Ah, eres una locura mujer, si quieres algo más que solo servir platos búscame, quizás podrías se modelo o actriz, no sé, con ese cuerpo de infarto nadie se resistiría a ti, ahora que te pruebo quiero dejarte marcada para que me desees – decía entre embestidas, en que el coño de la mujer le recibiría como si fuera un gusto único.
Mm, que rico señor cliente, mm – apenas acertaba a decir la muchacha mientras era penetrada.
Luego de ello, seguirían en su faena, moviéndose hasta llegar a un orgasmo, pero no contento, cuando ella quisiera marcharse, o algo parecido, Cas la tomaría por la cintura, jalándola para acostarla sobre el sintiendo ese par de nalgas deliciosas, que no le detendrían de intentar algo, abrirlas para dejar meter su verga, empezando a bombearle de manera anal, sacándole un suspiro mientras la sujetaba por las redondas tetas. Continuarían cogiendo a pesar de la droga, de hecho parecía que esta afecto los sentidos del joven que no era del todo consciente, pero no dejaba de sentir ese voluptuoso cuerpo que le fueron encantando, la figura de aquella hembra le despertaba una sensación indescriptible, tan ardiente que su verga se mantenía dura, aunque se corriera, no dejaba de mantenerse dura, entrando y saliendo de aquella gruta de placer en un frenesí sexual, que iba dándole una sensación de locura carnal, una fiebre de pasión que o dejaba de impulsarlo a entrar y salir de aquel cuerpo tan seductor, hasta que se corriera dentro del culo de aquella hembra que desfallecía en un orgasmo múltiple.
Perdería la cuenta de las veces que se correrían dentro de ella, pues incluso después de llenarle el culo de semen, no se detendría, agarrándola para llenarle la boca de su leche, el cual recibiría con un gusto tan delicioso, quería sentir esa carne tan seductora, desde su lengua hasta sus tetas, verla moverse coqueta era un placer, así que se dejaría llevar, hasta que acabó inconsciente, abrazado a esa seductora mujer, o eso creyó…
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