Armando y Jois, pareja swinger: El gangbang de Jois (Parte 3)

Parte final de la orgía en dond emi novia está con 10 machos. .
Jois: 21 años

Armando:21 años

Juan: 60 años; Pedro: 46 años; Fernando: 39 años; Miguel: 37 años; Sebastian: 35 años; Luis: 28 años; Saúl: 27 años; Alberto: 24 años; Aldo: 25 años; Juan Jr: 20 años.

Continuaron todos follandola durante toda la noche, ya todos habían pasado su miembro viril por la boca y la vagina de mi novia, hasta que se a dejaron muy irritada y roja, por lo que todos se pusieron de pie y se masturbaban frente a Jois y expulsaran su leche en su cara.

Uno de los primeros fue el hijo de Juan, mientras que Sebastián, Luis y Saúl desfilaron casi al mismo tiempo y se corrieron en su cara y boca de mi chica. Jois tragaba algunos chorros y otros los dejaba en su cara porpósito, se snetía bien guarra y pedía más, pidiendo que apunten bien y no desperdicien nada, sin duda estaba deseosa de mucho semen.

Los demás ese siguieron corriendo hasta que solo quedaban Pedro y Juan , los dos mayores que seguian aguantando. Perdo levanta a Jois y la empinó. «Voy a comerte el culito perra», le dijo a mi novia mientras la ponía a cuatro pata recostada sobre la cama, se agachó a su culo y se pajeaba.

Además, Juan se subió a la cama y agarro la cara de Jois de la frente mientras se pajaeaba y ambos se miraban, Juan no pudo evitar decir: «Pequeña perra… ¿eres una perra?», a lo que Jois obediente respondió: «La más perra».

Juan terminó vaciandose en su cara y, acto seguido, besó a Jois con todos los fluidos de él en la boca de ella. Mientras tanto, Pedro se venía en las nalgas tras un largo y prolongado beso negro.

Todos descansaban mientras se aseaban, con las vergas pegajosas y humedas. Jois estaba bañada en semen, y tuvo que darse un baño para poder estar guapa de nuevo. La velada continuo con un descanso y con quienes ya estaban de nuevo listo para una segunda pasada.

Jois terminó dormida y cansada, oliendo a sexo y semen brotando de su vagina, todos los muchachos se vaciaron en ella por lo menos dos veces, Juan y Pedro llegaron a venirse cuatro veces por todo el cuerpo de ella, quien realmente terminó agotada y cansada.

Poco a poco fueron todos yendo al baño a limpiarse y a secarse, para luego irse agradeciendome de haberlos dejado hacer con mi chica lo que querían.

A la mañana siguiente Jois se despertó e hicimo el amor de manera más romántica, tranquila, me confesó que se sentía en un sueño, tenía todo lo que quería, ser una perra de noche y amada en el día, y esto tenía para continuar por más tiempo.