Armando y Jois, pareja swinger: Llegamos al Gloryhole, la fantasía más perversa de mi chica (Parte 1)
Después de un tiempo cogiendo, a Jois se le ocurre la idea más perveersa.
Jois: 22 años
Armando:23 años
Después de más de dos años de estar en el ambiente y de haber Jois llegado a tener casi 20 amantes en todo este tiempo, empezamos a un poco tener algo de monotmnía y empezar a buscar cosas más fuertes en cuanto al sexo, así que le propuse algo que sería el detonante de una nueva faceta en Jois.
Había leído en un foro del tema que habían los famosos Gloryhole en nuestra ciudad, estas cabinas con agujeros donde cualquiera pondría su pene a merced de lo9 que pudiera hacer la mujer en cuestión. Le comente esta situación a Jois quien primero río y luego mostró cierta curiosidad e interés por hacer esta práctica.
Vimos algunos videos donde ve+iamos que las chica iban y esperaban lo que podían salir, entró en nosotros muchas dudas así que seguimos haciendo las averiguaciones, me contacté con una pagina y el chico nos explicó toda la dinámica de manera resumida y muy práctica.
«Mira hermano, acá yo trabajo con 15 a 20 chicos que se van rotando, ellos se hacen exámenes y pruebas cada cierto tiempo, pero también está al gusto de ustedes o de ellos colocarse condones a la hora del sexo oral, si hay peneteración si es obligatorio ese uso, ustedes como pareja pagan un precio simbólico y tú puedes estar todo el tiempo ahí cuidando a tu chica (…)».
Consulté con algunos amigos y la verdad nos pareció muy confiable tanto a mí como a Jois, así que decidimos arriesganros e ir a este lugar.
Llegamos, una calurosa noche de vernao, donde Jois fue con un short rosado y un polo, ella estaba en una etapa en la que prefería ir cómoda a sus encuentros, ya que al final iba a terminar desnuda, jaja.
Entramos al lugar, era un sitio diferente para las parejas y chicas, los chicos solos llegaban por otro lado, el morbo era pues no saber quién estaba del otro lado.
Fue en eso que nos asginaron un cuarto, nos encerramos ahí, era amplio, las reglas eran que los chicos del otro lado tendrían que poner su dedo por el agujero y ella tocarlo para saber que había alguien ahí, posterioromente de la felación y es que había química, se podía invitar solo de a uno adentro del cuarto.
Empezamos a escuchar música afuera y más voces de hombres que iban recorriendo los cuartos, Jois estaba cómoda y se sacó las zapatillas y y se hizo una cola en el cabello.
Empezaron a tocar uestra puertas y Jois estaba nerviosa pero decidida, había tomado un poco de energizante con alcohol para darse valor. De pronto, una mano entró por el agujero queriendo tocar a mi chica, ella soltó una risa y se dejó manosear, era una mano fuerte, se notaba de un tipo joven, tras ello, y lamer sus dedos, el hombre sacó su verga y la puso en el agujero, era una prominente, venosa y curva, a Jois le encantó y dispuso a mamarla, fueron largos minutos de una intensa mamada hasta que el chico tocó y gritó: «me voy a venir».
En ese momento, Jois aprisionó sus labiós contra la cabeza del pene de este desconocido, mientras que él vaceaba sus huevos en la boca de mi chica, la vi tragar como dos veces y luego abrir la boca para ver como había quedado depositado el semen en toda su boca, mi chica tragó y sonrió. «Que dulce woao, que rica», mientras de afuera se escuchó un: «Gracias preciosa»…
Ella se había tragado el semen de alguien sin verle la cara, lo cual la puso muy morbosa y empezó a desnudarse por completo, en eso se escuchó la voz de otro hombre tocando la puerta, Jois sacó su pequeña y femenina mano por el agujero y y fue tomada por una mano más morena, casi negra, la verdad ella nunca había estado con alguien tan oscuro como ese hombre, yo miraba todo con mucho morbo y aún sin tocarme, pero muy excitado de toda la situación.
El hombre preguntó: «Woow niña, dejame tocar esas tetitas» , Jois sin decir nada acercó su pecho y él empezó a manosearle las medianas tetas, «ufff, naturales así me gustan eh…»
Luego sacó su mano y en lo que iba sacando su polla iba advirtiendo: «Espero que puedas con una como la mía». Y sacó una verga que si habíamos creído que la anterior era grande, pues esta era demasiado grande. Una polla negra, curva, venoza, y que se veía incluso aún no erecta, por lo que Jois nerviosa empezó a tratr de meter en su boca y llenar de sus babas para poder ir estimulando aquel pedazo de carne negra que se iba endureciendo de a pocos, con el calor de su aliento y sus labios alrrededor de ella.
Jois chupaba y chupaba y despues de un rato ya andaba enamorada de esa verga. El hombre del otro lado solo jadeaba y gemía, en un momento sacó su verga para poder meter por el agujero sus dos huevos negros, mi chica solo atinó a lamer el par de testículos del desconocidos de la manera más morbosa y sucia posible.
El hombre tenía unos huevos muy hinchados, por lo que parecía llevar una buena carga, lo mejor iba a venir después, ya que sacó sus huevos y metió su verga ya con un condón puesto, por lo que Jois sabía que debía poner su dulce vagina a disposición, ella dudó un pcoo al verme, pero yo no pude negarme a ver a k novia empalada por semejante trozo de carne, la animé a ponerse de pie y colocar esa verga en la entrada de su rajita para empezar a ser pentrada, el hombre gozaba de estar follandola vaginalmente y durante un largo, Jois solo gemía y jadeaba mientras se agarrabas una de sus tetas.
El morbo en aquel momento era increíble y la noche recién arrancaba, vendrían más machos dispuestos a hacer de todo con mi chica…
CONTINUARÁ…
Ya quisiera ir ahí