Bendita perversión: Damian y su vecinita parte1
En esta ocasion contare como despues de que mi cuñadota Rosario me dejo re caliente, por milagro mi vecinita de 11 años se deja coger y hacer de todo por mi, empezando mis aventuras con una de las putitas mas hermosas y complacientes de mi vida..
Bendito morbo: Damián y su vecinita 1er parte
Mi nombre es Damian, tengo 34 años y dos hijos, y vivo en Buenos aires. Este es un relato de una serie de historias que me pasaron en mi vida sexual, con mis cuñadas, y otros personajes que participaron en satisfacer mis morbos y juegos. Las historais no las voy acontar en un orden determinado, sino que se iran complementando a lo largo del tiempo. Espero que disfruten como yo disfrute mis experiencias.
Este relato es de cuando empecé a tener relaciones con mi vecinita de 11 años. Yo ya venia teniendo relaciones con todas mis cuñadas, especialmente con la pequeña de 14 , que se había convertido en toda una putita adicta a mi pija, y le encantaa que le chupe y le coja el ojete cada vez que podía ( historia que relatare en otro lugar). Esa mañana fui a llevar a mis hijos a casa de mi suegra que iba a cuidarlos mientras yo iba a trabajar. Era un mañana terriblemente calurosa, al entrar mi suegra agarro a la bebe y mi hijo mas grande se sento a ver televisión.
Mi suegra: Che Damian te quedas a comer algo?
Yo: No, me tengo que ir a hacer cosas y me olvide algo en casa así que tengo que volver a pasar por ahí.
Suegra: ¡uh Dami, que lastima, hice unas empanadas riquísimas!!
Yo. No me digas eso…jajaja, que después me como todo y me dan ganas de dormir la siesta.
Suegra: Vos te lo perdes. ROSARIO!!!! LEVANTATE!!! ( le pega un grito )
Yo: Jajajaja. ¿Esta durmiendo todavía?
Suegra: Si se acuesta re tarde. Se queda boludeando con el celular hablando con las amigas-
Si bien era cierto que se quedaba boludenado con las amigas, lo cierto es que anoche la pendeja me hizo una video llamada para que me pajera mirándola, me mostraba la conchita abierta, y me decía que le encanta que se la chupe y se la huella toda…que quería mi lengua en su cola y después mi lechita…la pendeja era una cerdita, le encantaba que le chupe el orto gordo que tiene, y me la garche hasta llenárselo de leche y tomársela. Y anoche me quiso provocar, así que me llamo desnudita. Y supuse que ahora estaba como la deje.
Yo: ¿Voy a despertarla quieres?
Suegra: Dale anda, que a vos por ahí te da bola, antes que la cague a trompadas.
Yo: Jajaj Dale…
Me mandé por el pasillo a la pieza de la pendeja, entre y volví a cerrar la puerta, entraba muy poca luz por la ventana, el olor a que se había pajeado anoche llenaba la habitación, era inconfundible el olor de esa conchita. Dormía con la boca abierta, mi pija recontra dura, metí la mano bajo la sabana y la destape, estaba con el corpiño deportivo y un solcito, empecé a manosearle las tetas y a llamarla despacio, mientras con la pija ya afuera se la pasaba por la cara.
Yo Ro…dale despertate bonita, te tengo un regalito
Ro: ahhh. Déjame dormir…
Entonces abrió los ojos y vio mi pija, y sonrió entre tierna y perversamente.
Ro: Mmmm que ganas que tenia de algo rico…
Yo: Si pendeja…y yo ganas de llenarte de lechita. A ver cómo me oles la pija y te la pasas por la cara…
Rosario empezó a llenarme de saliva la pija, la acariciaba despacio mirándome a los ojos y pasándosela por la cara, acercaba su nariz a mis huevos oliéndolos de forma profunda. Se había vuelto muy puta la nena, veníamos hacía varios meses cogiendo y jugando mucho. Me presentaba a sus amigas para que me las garche, me entregaba el orto con desesperación, se había hecho una gran putita…
Ro: Dami…quiero que me chupes la concha y me hagas acabar con tu lengua….
Yo: Mmmmm pendeja, me encanta lo que pedís, ponete contra la pared de espada y abrite que te chupo todo.
Rosario se levantó y se fue contra la pared sacándose la bombachita y dejándola caer en el piso, sus tetas hermosas se movían de un lado para el otros salidas de su corpiño. Ese culo gordo y carnoso me volvía loco. Para que se dé una idea, Rosario es una pendeja de 14 años gordita, la típica gordita gauchita, con unas piernas fuertes por el deporte, y un culo gigante que le quería hacer desde que era chiquita, encima unas tetas que le crecieron un montón y me encantaba chupar y amasar.
Me apoye contra ella con la pija dura y la bese desde atrás pasándole la lengua por el cuello hasta llegar a su boca. La pendeja me movía el orto y me ronroneaba despacito como buena trola que era.
Ro: mmmm, si mi hermana viera como te calentas y las cosas que me haces….que te abusas de mi pedófilo de mierda…
Yo: bien que te gusta que te viole y me viole a tus amigas….agradece que me llevo bien con tu mama y estoy casado con tu hermana, sino ya te hubiera hecho diez hijos por puta…
Ro: ¿Sí? Me quieres marchar embarazada, si sus un enfermito…
Yo: Si, obvio…
Ro: Dale, antes que mi vieja joda…cómeme la concha…
Metí la nariz en ese orto que olía a hembra, sudadito, se sentía el olor de que había estado pajeandose, la pendeja me dejaba olerle el orto y la concha, sabía que eso me re calentaba. Empecé a frotarle el clítoris y meterle el pulgar en la concha…toda mojada, literalmente le caía liquido por las piernas. Mi lengua y mi nariz se metían en su orto mientras Rosario se movía y se frotaba contra mi cara y mi mano
Ro: ¿MMM si hijo de puta…así, que rico, te gusta mi orto? Se que te morías por olérmelo y meterme la lengua, así que no me bañe, para que sientas como me moje toda anoche
Yo: Pendeja puta, como te me entregas trola…si, me encanta ese olor a hembra que tenes
De repente mi suegra nos grita desde la cocina
Suegra: Rosario déjate de joder pelotuda y levántate. ¡Vengan a comer!!
Yo: Mmmm pendeja te quiero llenar de leche
Rosario: Dale chúpame bien la concha rápido,
Empecé a succionale la concha fuerte y rápido pasándole la lengua. Rosario se mordía la boca para no gemir…por momentos se le escapaba un “ mmm…siii..asi”.. LA velocidad aumentaba, y su lubricación también…de repente se puso toda dura y arao a pared “ ayyyyy….dios que rico”. De su concha empezó a salid mucho juguito el cual saboree todo. Se dio vuelta y me beso, pasándole la lengua y limpiándome la cara y la barba.
Ro: Mmmm, amor que rico que me hacer ahí…tenía unas ganas…
Yo: Haceme acabar a mi pendeja, déjame que te llene el orto de leche, y te vas a almorzar toda en lechadita…
Ro: No amor, mama está llamando. Tenemos que ir. Antes que venga
La pendeja me sonrió con cara de malvada. Sabiendo que me dejaba re caliente, le encanta provocarme para que la viole, pero no podía ese día porque mi suegra estaba muy cerca y con mis hijos. Se cambia rápido frente mío mientras me dice
Ro: Kalu y Mili te extrañan, y dicen que nos juntemos los cuatro, en un par de semanas Kalu se queda sola casi todos los días, quieren que nos garches a las tres..
Yo: Me gusta la idea. DEcile a Mili que me debe sacarme la leche con las tetas…y Kalu quería probar al lluvia dorada….que se prepare para la duchita.
Ro: Creo que yo también voy a probar eso…
Yo: Yo quiero probar la tuya pendeja, asi como me encanto olerte esa concha hoy….parece que anoche te re tocaste.
Ro: Estaba re caliente anoche. Muero porque me garches me hagas trillizos
Yo: Deci que sus muy chiquita y me matan, sino ya estarías preñadita para que te garche y te chupe las tetas de embarazada.
Ro: Si, como le haces a mi hermana no?
Hablaba de su hermana mayor, no mi esposa, que estaba embarazada y como el marido no le daba bola me la garchaba yo, y ella nos descrubrio y se prendio a la fiestita. Y Kalu y Mili son las dos compañeritas de Rosario de la escuela, Kalu es una flaquita tetona, y con un ortazo, carita de putita, una turrita cumbiera re putita, que cuando se entero que me garchaba a rosario le pidió sumarse y entendio enseguida lo que me gustaba, me mando una tanguita con olor a conchita y una cartita para que me la viole, y después de eso me la garche con Rosario varias beses. Mili era una gordita timida, re tetona, que Rosario para divertirse hizo que me chupe la pija, pero no pudo parar mas y me entrega todo. Incluso la hice violar por algunos de sus compañeritos de colegio, ahora es una gordita gauchita. Otro día contare estas aventuras que tenemos con Rosario.
Ese día me termine volviendo a casa re caliente, tenía que buscar unos elementos para trabajar, tratando de ocultar la pija dura, manejando con dificultad para concentrarme de lo caliente que estaba. Cuando llego a casa, por suerte, me entra un mensaje indicando que no tenía trabajo ese día, por lo cual estaba solito y caliente. Pensé en llamar a rosario o a alguna de sus amigas y traérmelas a la casa, pero justo escucho ruidos del patio de la casa de al lado, de la pileta. Me acerco a la ventana a espiar de dónde venían los ruidos y casi me muero, mi vecinita con su mallita enteriza nadando solita en su pileta. Mi vecina se llama Andrea ( Andy), y es una nena de 11 añitos, con un culito divino, y unas tetitas chiquitas y en crecimiento. Colorada con unos ojos verdes hermosos y el pelo ondulado. La mayita le dejaba ver perfectamente ese culito redondo y paradito, además de meterse justo en medio de la conchita, resaltando ese conejito divino. Me senté a mirarla por la ventana a mirarla, y sin importarme nada me bajé los pantalones y el calzoncillo y me empecé a pajear despacio mientras la miraba.
LA pendeja jugaba y se reía en la pileta, su cabello rojizo mojado le llegaba hasta los omoplatos, sus pecas y sus ojitos verdes la hacían ver como una niña inocente, hermosa, comible. Hacía mucho calor, por lo que la pendeja disfrutaba refrescarse, parecía estar sola, porque no se veía alas hermanos ni a los papas. Se tiraba y nadaba dejándome ver esa cola, y yo que estaba re caliente por culpa de rosario me seguí pajeando sin importarme si alguien me veía, hasta que paso lo peor. Ella levanto la cabeza y me vio. Yo me puse pálido, pensé “ acá llama a su mama y se me pudre la vida”, pero no, la pendeja se quedó paralizada mirando, y no a mí, sino a mi pija, entonces me tire el lance y seguí, la pendeja me miraba fijamente con la boca casi abierta, fijamente, yo la mire y le sonreí, y ella me devolvió tímidamente la sonrisa, la salude con mi otra mano, y me devolvió el saludo con la misma timidez.
Seguí paseándome despacio mientras nos mirábamos fijo, estaba re caliente y no me importaba nada. Ella seguía con la boca abierta, tímidamente llevo su mano a su conchita y se la toco por arriba de la malla, se veía que sus tetitas se habían puesto duras. Mi pija estaba durísima, las venas parecían que iban a reventar, sentía la leche en mis huevos por explotar, quería que esa pendeja viera como me saltaba la leche, igual que con Rosario, me importaba un carajo ser un pedófilo, quería abusarme de la pendeja, someterla, hacerla una putita. Moviendo los labios le pregunte si le gustaba, y la pendeja entendió al toque, y asintió con la cabeza, le pregunte si quería tocarla, y volvió a decir que si, incluso moviendo los labios…eso fue mucho para mí, empecé a aumentar el ritmo y sentí como la leche me subía por la pija desde los huevos. Hasta que explote como un animal, me llene de leche la pija las manos, la ropa, los huevos…de mi boca salió un gemido grave, como un bufido…Andy dejo de masajearse la concha y se quedó mirando sorprendida como había llenado de leche mi abdomen, mis pinas, mis manos. Yo la mire fijamente sonriendo, por un momento pensé que iba a salir corriendo, como no corrió supe que era mi oportunidad…y quería más. ¿Recordé que hacia unas semanas su hermano había tirado una pelota a mi terraza, asi que le pregunte desde la ventana “no queres venir a buscar la pelota que tiro tu hermano el otro día? ¿Y de paso te muestro más de cerca? “Ella puso los ojos grandes como un búho, su cara de niña estaba toda colorada. Trago saliva y salió corriendo para adentro de la casa. Pensé que la había asustado y que si le contaba a la madre tendría problemas, me puse mi pantalón otra vez, sin limpiarme, pensando en ir a darme un baño.
De repente suena el portero, lo primero que pensé es que la niña le conto a la madre lo que había visto, asi que con nervios y pensando alguna excusa levante el tubo, pregunte quien era. “ Soy Andrea, la vecina de al lado, vengo a buscar la pelota de mi hermano…..” La voz de la niña parecía a punto de quebrarse por la timidez, como si tuviera mucho miedo…y hacia bien porque iba a hacerle de todo…
Caminé por el pasillo de entrada y abrí la puerta.
– ¿Hola Andy, como estas? ¿Queras la pelota no? Veni pasa- Yo estaba vestido con mi pantalón y la remera manchada con restos de leche. Ella estaba con el pelo mojado y un vestido tipo de playa. Parecía que se había sacado la malla y no tenía nada abajo.
– Hola, bien. Si quería llevarle la pelota a mi hermano asi se pone contento cuando vuelva, y además quería ver…
– ¿Que querías ver bonita?
– Eso que te salió recién- dijo bajando la voz y mirando al piso
– Ahh…esto queres ver? – mostré la mi entre pierna toda húmeda de la acabada
– Eh…sí creo que si…-
– ¿Estas seguras? No quiero que hagas cosas que no queres-
– Sí, estoy segura…-
– ¿Y mama, está en casa? –
– No, ella se fue a casa de un amigo de mi hermano, yo estaba sola, van a volver todos tarde
– Pero está mal que andes en casa de extraños-
– ¿Si lo se…me voy?
– Hagamos una cosa, vos guardas el secreto de lo que viste y de lo que hagamos hoy, y yo no le cuento que venís a casa de extraños- Me sonrió picaronamente
– Si, trato hecho…-
– Bueno pasa, mi casa es la de la escalera al final del pasillo-
Camino por delante mío por el pasillo, nerviosa como temblando. Era hermosa, una colita paradita, que se ve que no seco bien con la toalla porque se marcaba la humedad de la pileta, estaba solo con el vestidito y las ojotas, entro por la puerta de mi casa (el pasillo es la entrada a mi casa y la de mi vecina de abajo, Andrea vive en la casa de al lado). Al pasar la entrada ella me espero paradita e la escalera mientras cerraba la puerta, se me quedo mirando roja como un tomate y toda dura…
– Relájate, vas a conocer cosas muy lindas-
– No debería estar acá-
– Pero ya estas, y vas a probar lo que me generas-
ME acerque y la bese despacio en los labios, ella no se resistió, abrió la boca y se dejó llevar, besaba torpemente, pero ya iba a aprender, empecé a pasarle la lengua por la carita y a acercarla con mi brazo, mis labios le recorrían la piel de la cara dejándola llena de baba, mientras olía su piel, y sentía sus músculos tensos en mis brazos. Si bien estaba nerviosa no ofrecía resistencia, dejando que mi lengua y mi boca la disfrutaran. Su piel estaba cada vez más caliente, y su respiración iba agitándose.
– ¿Nunca nadie te hizo esto no? – ¿Ella negó con la cabeza, sin abrir los ojitos- No? ¿Y como sus tan putitas pendejas? Venir a la casa de un macho? ¿Sabes lo que te va a pasar hoy no? –
– ¿Me va a meter eso? – Dijo con vos temblorosa abriendo los ojos y mirando mi entrepierna que ya estaba re dura
– Obvio, pero mucho más, hoy te voy a hacer una mujercita de verdad, de las que complacen a su macho, y desde hoy te voy a coger cuando pueda…vas a ser mi puta. ¿Está claro? – Le dije levantando la vos y subiendo mi mano por su cola
– Si señor…lo que diga- Su voz era temblorosa pero no parecía dudar de que iba a dejar que pasara lo que iba a pasar. Y yo estaba por encontrarme con una putita innata. Al llegar mi mano a sus glúteos por debajo del vestidito de playa me encontraría una bombachita de nena, pero muy chiquita. El toque y estaba toda mojada, pero ya no era el agua de la pileta.
– ¿Mira que trolita sus, que linda bombachita, me la voy a quedar de recuerdo pendeja, de cómo te voy a violar, vas a hacer muchas chancha ditas hoy, y como buena puta vas a dejarte hacer y me vas a decir a todo que sí, está claro? –
– Si señor-
– Mmmm…que bebe obediente mi amor, ahora mira bien lo que viniste a buscar, arrodíllate-
Saqué mi pija del pantalón, toda oliendo a semen y pegajosa, sus ojos la miraron fijo, “alela pendeja, pásatela por la cara” El agarre del pelo, y empecé a frotársela por la jeta, ensuciándola toda, llenándola de mi olor, la agarre del pelo mientras le pegaba pijazos a esa carita de nena de escuela de monja. Estaba re caliente, con esa pendejita toda entregada, dejándose hacer lo que quería, la veía inspirando el olor, se moría por la pija. De los pelos le hice olerme las pelotas “ sentís putita? Olor a macho, olor que vas a sentir seguido desde ahora” “si señora me gusta” Eso, me termino de encender, le pegue un escupitajo en la cara, “claro que te gusta pendeja puta, la pija es lo tuyo, claramente, ahora ponete en pelotas que te quiero chupar toda”. Ella con cara de sorprendida, toda roja se paró sobre la escalera y me miro, pensé que iba decir que no cuando levanto su vestido y me mostro esas tetitas en crecimiento, nada despreciables, dos limoncitos con un pezón rosadito y plano, luego dejo caer su bombachita al piso. “ponete como perrito en la escalera bebe” y Asi lo hizo, poniendo la colita abierta en pompa, me acerque y abrí los cachetes de esa cola hermosa, y vi asomar esa conchita lampiña aun, abultadita, me chupe los dedos y metí mi índice y mi dedo medio, no fue necesario, estaba re mojadita, se le escapaban los gemidos, evidentemente era una pajerita y merecía que la someta.
– Te gusta no? Te encanta mis dedos ahí-
– Ay…si, se siente muy rico…-
– Mmm, estas re tiernita, te tocas mucho ahí- Mientras me chupaba los dedos y olía a mi nueva hembra
– Sí, todos los días…me encanta, pero no se siente tan bien –
– Y no sabes lo que te espera todavía- Y sin piedad metí mi dedo gordo el en orto rosadito y virgen
– Ayyyyyyyyyy!!! Duele. – Su primer lagrima
– Shhh, no te quejes, ahora sus mi puta entendiste? Y te bancas todo, de acá vas a salir bien violada ahora. ¿Está claro? – Y con mi otra mano le tiré el pelo y le escupí la cara otra vez
– Ayyyy….siiii…siii señor ….- empezó a llorisquear, pero dejo de intentar resistirse. Claramente le gustaba que la viole.
– Ese orto también hay que estrenarlo, no es solo para hacer caquita…y lo tenes tan lindo. Me hice tantas pajas después de verte llegar del colegio mostrándomelo…-
– Ay señor me duele…pero es tuyo…-
– Bien, estas entendiendo-
Me agaché y metí mi nariz en ese culito, olía a nanita limpia, pero subía el olorcito de su conchita toda mojada, y la mezcla era impresionante. Sin piedad abrí bien sus nalgas con mis manos y empecé a chupar sin parar el agujerito, también bajaba a la conchita, penetrando con la lengua, probando esa virginidad que iba a robarme. Ella gemía cada vez más fuerte, se le escapaban grititos, sus caderas empezaron a moverse como locas sobre mi cara, le empecé a chuponear fuerte el clítoris hasta que soltó un grito agudo, sus piernas se pusieron muy tensas y su concha se llenó de jugo. La pendeja había tenido su primer orgasmo, por lo menos en manos de un macho. Estaba toda roja, su respiración entrecortada, mi cara llena de sus juguitos pegajosos, me saboreaba y disfrutaba su olor en mi boca. LA levante en brazos porque estaba a punto de caerse, y la mire toda sudada, su carita toda sucia por cómo se la escupí y le pase la poronga, sus ojos verdes eran hermosos, esa cabellera rojiza alborotada. Me acerque y la bese apasionadamente, como si fuéramos dos enamorados, y luego pasaría que la pendejita se enamoraría de mí, y mucho…para mi seria siempre mi puta, y la iba a usar a mi antojo.
– No te duermas todavía amor, falta lo mejor, ahora vas a dejar de ser virgencita, y vas a s amia…-
– Me va a doler…- sus ojos se llenaron un poco de lágrimas, empezó a entender que no tenía forma de zafar.
– Si bebe, te va a doler al principio, pero después vas a gozar mucho…-
– Tengo miedo…-
– Si, lo sé, pero cuando te acostumbres vas a ser la mujercita más feliz del mundo vas a ver princesita, vas a ser mi mujercita-
La acosté sobre mi cama, y le puse un plástico abajo y una sábana vieja, para no dejar manchas. Le abrí las piernas y volví a chuparle la conchita. Ella volvió a gemir, le gustaba, esta vez estaba más relajada, mi lengua entro profundo y la ayude con mis dedos, se mojó un montón, la conchita virgen se iba preparando, succione el clítoris muy fuerte hasta que volvió a acabar en un grito. “ahora si pendeja, vas a ser mi hembra” Apunte la pija re dura a la entrada de la concha y la mande adentro despacio hasta sentir el tope, si ahí estaba, la virgencita iba a ser mía, la mire sonriendo y le dije que respire hondo, me miro asustada, no le di tiempo a arrepentirse, se la mande adentro sin piedad, su grito fue terrible, pero no me importo, entro casi entera y sentía el calor de esa conchita apretada, también sentía algo de sangrecita escurrirse. Empecé a bombearla, ella me suplicaba que la suelte, pero le dije que ahora era tarde, que la iba a coger hasta que se acostumbre. La escupí otra vez, y le pasé la lengua por la cara, la besaba con mucha lengua y baba, recordándole que esto no era una novela, que acá era una putita y tenía que darme placer. Le dolía, claramente, me apretaba fuerte, le dije que se relajara que en un rato iba a disfrutar más. Bajaba y subía el ritmo, de a poco se fue mojando de nuevo, y sus gemidos de dolor empezaron a convertirse en gemidos de placer.
-te está gustando princesa? ¿Te gusta cómo te meto la pija?
-sí señor, me gusta se siente rico, me arde, pero me da gusto-
– No me digas señor decime Dami, o papa, que m ere calienta-
-Bueno papi-
– asi mi amor, ahora te voy a bañar en lechita-
– ahhh….si si . se siente rico, haceme lo que quieras papa-
– si bebe, todo lo que quiera, ya no tenes vuelta atrás, vas a ser una puta muy chanchita-
La bombeaba cada vez más fuerte cuando vino su segundo orgasmo, reventó en un grito de “ Siiiiii”, y quedo temblando, su boquita tenía un aliento frio, pero sus cachetes estaban que ardían. Estaba casi desmayada, pero seguía gimiendo, acelere más, mientras le chuponeaba la boca y le masajeaba las tetitas, hasta que sentí mi leche a punto de salir, de los pelos la hice arrodillar
– Ay Duele!!!-
– ¡Cállate puta y abrí la boca!!- Obediente abrió la boca con los ojos llorosos.
El primer lechazo fue directo a su lengua, pero el resto le baño su cara, sus mejillas, una entre los ojos, en su pelo. Era una visión hermosa de la pendeja toda guasqueada. Yo aullaba como cerdo con mi orgasmo. Y después le acariciaba la carita con la pija, ella pone los cachetes con gusto.
– ¿Te gusto verdad cerdita? –
– Es muy rico y espeso-
– ¿Te gusta el olor de mi pija?
– Si papi, huele bien…-
– Mmmm, bebe, me dieron ganas de hacer pipí-
– Anda al baño papi- Intento levantarse, y no la deje, de mi pija dura empezó a salir el líquido amarillo con fuerza directo a su cara
– Ay nooo, que asco….nooo- empezó a llorar
– Shhh, dijiste que todo lo que diga, disfruta como te meo y te marco como mi puta- Estaba con el re ganas de hacerlo desde que me lo pidió la amiga de mi cuñada, y ahora nadie mi iba a impedir disfrutarlo con la pendeja
Dejo de llorar, me miro toda meada cuando termine, yo le acariciaba la cara. Me acerque y la bese asi toda sucia como estaba “bebe, sus hermosa te amo, descansa y seguimos jugando en un rato”. Ella me quedo mirando, con un sollozo me abrazo y me dijo que le dolió pero que se sentía muy rico. Yo sorprendido de cómo esta pendeja se dejaba someter le dije que descansara que se venía algo nuevo y más difícil, se recostó sobre las sabanas sucias me miro y se durmió en unos minutos mientras yo la besaba y la acariciaba. Mientras pensaba en cómo le haría la colita a esta pendeja hermosa, suena mi celu, era Rosario.
– ¿Hola Dami, nos escapamos con las chicas del cole, donde estás? –
– En casa, me suspendieron el laburo, si vienen les pago el remis y me ayudan con un asuntito que tengo acá-
– Jajaja, queres que vayamos a hacerte compañía?
– Obvio, mira lo que tengo acá para jugar con ustedes- Saque una foto a Andy toda llena de leche, pis, dormida plácidamente y se la mande
– Sos un cerdo chabón, es una nena, como la vas a dejar asi, jajaja, las chicas lo están viendo y no lo creen-
– Deciles que vengan que van a ver lo bien que la pasamos. Y vos pendeja, bien que te gusta cuando te baño con leche, necesito que vengan porque le voy a hacer el orto-
– Jajaja, bueno, te ayudo es una nena y la vas a lastimar-
– Jajaja, hacete la que te jode que sea una nena, te encanta ofrecerme a tu sobrina con tu hermana mayor para que me chupe la pija, asi que veni y disfruta a esta putita vos también-
– OBVIO, ya vamos- Y me llega una foto de las tres besándose y manoseándose. Unas putas de verdad.
Me di vuelta y empecé a chuparle el orto a Andy, olía riquísimo, ahora sudadito por la garchada que le había pegado. Medio dormida me dijo si se tenía que ir
– ¿No mi amor, recién empieza, ahora vienen unas amiguitas mías a jugar con vos, asi que aprovechemos la tarde, dale amor?
– ¿Quien?
– Ya vas a conocerlas. ¿Te queres quedar?
– Sí, ¿pero me puedo bañar?
– Nooo, ni se te ocurra, a mis amiguitas les va a encantar verte asi….
Así me quede mimándola, esperando a Rosario y sus amigas, Andy iba a pasar de ser una nena virgen a tener la primera orgia de su vida.
Continuara….
QUE DELICIOSO RELATO ME CALENTÓ 🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥
Como aparecen los otros relatos para leerlos
Uff súper caliente este relato. La forma de hablar del tipo lo hace más caliente aún.
Wooooooow no estoy de acuerdo con el maltrato así pero es excitante!