Buscaba perder mi virginidad a los 15 y recibí más que eso ese mismo día.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sexhoy18.
Hola a todos!.
Mi nombre es Natalia y voy a contarles lo que me sucedió hace dos años por haberme escapado de mi casa un fin de semana para encontrarme con un ligue de internet.
Con quien deseaba perder mi virginidad.
Recién había cumplido los quince cuando empezó mi curiosidad por todo lo referente al sexo.
Cursaba tercero de secundaria en un colegio de monjas a media hora de mi casa.
A la salida del colegio pasaba las tardes con mi prima Dany que era mi compañera de salón para hacer tareas.
Al terminar mi iba a mi casa no más de las 5 pm, que era el horario de permiso de mi mamá.
En esas horas en casa de Dany nos la pasábamos en internet.
Siempre metidas en el Facebook haciendo nuevos amigos.
Unos más guapos que otros.
Constantemente recibía invitaciones de amistad de chavos muy guapos a los que por supuesto aceptaba y de inmediato me empezaban a contactar para seguir una amistad.
Algunos de ellos poco a poco iban subiendo de tono sus pláticas.
Me pedían que les mostrara mis bubis pequeñas, que les mandará besos y otros hasta me pedían foto de mi vagina.
A Dany y a mi eso nos divertía mucho y ademas de eso conseguíamos verlos desnudos, ya que nos enviaban fotos de sus penes en erección.
Así que esas tardes en casa de mi prima eran las más divertidas.
Y de esa forma es como empecé a conocer este mundo de sexo y así empezar a conocer el cuerpo desnudo de los chicos.
Uno de esos chicos que en su foto de perfil era tremendamente guapo.
Se llaman Adrián de 21 años.
Me encantaba su cuerpo, su pecho marcado, su abdomen, su pene erecto se veía rico.
Y yo que era virgen ansiaba que él fuera el primero.
Él me lo había propuesto y yo le dije que si de inmediato.
El problema sería como vernos, ya que él vivía en otra cd a 3 horas de la mía.
Pero gracias a que por esas fechas se presentaría un grupo famoso en su cd.
, me invitó a ir a su casa y me pagaría el viaje.
La cosa sería como escaparme de mi casa.
De inmediato me puse de acuerdo con Dany.
Acordamos inventar un paseo del colegio el sábado del concierto.
Para yo viajar allá.
El vienes anterior le diría a mi mamá que me iría a casa de Dany para irnos juntas.
Y le diré que el domingo me regresaría en la tarde luego de hacer la tarea.
Y como mi tía trababa hasta las 10 pm en palacio de hierro pues tendría tiempo para llegar a mi cada sin despertar sospecha.
Todo lo planeado se cumplió tal cual.
Adrián compró mi boleto y me dijo que le recogiera una hora antes de la salida.
Ese mismo viernes a las 5 de la tarde mi prima Dany me acompaño a la central de autobuses.
Me dio un beso de buena suerte y me subí al autobús con mi maleta con ropa sexy y muerta de emoción y nervios.
Había acordado con Adrián que él me esperaría llegando a su cd para irnos a su casa.
Sus papás no estarían y tendríamos todo en fin de semana para nosotros.
El viaje de 3 horas me pareció eterno.
Iba en camino a perder mi virginidad, me temblaban los pies, mi vagina se mojaba cada es que imaginaba ver desnudo ante mi a Adrián.
Me desesperaba el tiempo que tardaba en llegar.
Esas tres horas fueron eternas hasta que al fin estaba bajando de camión y ahí estaba Adrián.
Se veía más guapo en persona pero me había mentido en algo.
No tenía 21 años.
Era mayor.
Tenía 35.
Se veía muy bien pero me dio miedo que fuera más mayor de lo que había dicho.
Me abrazó tomando mi maletita y me dijo a la vez -Si, soy mayor, pero no temas mi reyna, todo estará bien, sólo dime si aceptas continuar o ahora mismo podemos comprar tu boleto de regreso sin problema.
Sus palabras me dieron confianza.
Y acepté irme con él.
Nos fuimos en su coche directamente a su casa.
En en camino me iba acariciando la cara y las piernas y no paraba de decirme que era realmente hermosa.
A mi me parecía perfectamente guapo, su voz era muy varonil, estaba vestido con ropa muy cara, olía muy rico y su barba le venía muy bien.
Estaba emocionada y nerviosa a la vez por lo que iba a pasar en unos momentos.
En el camino había demasiado tráfico.
Dijo que tomaría un atajo, así que se dirigió por calles más solas y alejadas de la cd.
En el recorrido sus caricias en mis piernas iban siendo más intensas.
Empezaba a acariciar mi vagina por debajo de mi falda sin perder de vista el camino y sin dejar de conducir, me hacia temblar, sentía delicioso, sus dedos hicieron a un lado mi calzón y empezaron a entrar en mi hoyito y jugar con mi clítoris haciéndome gemir de placer.
Me incliné hacia atrás y serré los ojos para abandonarme a sus caricias.
De pronto me dice -Quieres conocer mi pene mi reyna.
Le conteste que si con la voz entrecortada por lo excitada y por la emoción.
Si dejar de conducir desabrochó su cinturón y bajó con trabajo su pantalón y sus bóxers hasta los tobillos liberando su enorme pene grueso completamente erecto.
Mis ojos no podían creer eso tan hermoso.
Se veía mil veces mejor en vivo que por foto.
Era enorme, gordo, con venas saltadas y Moreno.
Me pidió que la acariciara, cosa que hice sin pensarlo.
Él puso su mano sobre la mía y empezó a subir y bajar mostrándome como hacerlo, cosa que aprendí de inmediato.
Me pidió que le diera un beso en la punta de esa hermosa herramienta.
Me lo pensé un poco y finalmente lo hice.
Mi instinto me llevó a abrir la boca después de darle un par de besos.
Me metí un poco en la boca, sólo la cabeza y se la empecé a mamar.
Él dio un gran gemido mientras decía – Wooow mi reyna, que rico, sigue así aaaah aaaaah si no dejes de hacer eso aaaaah.
Su sabor era delicioso.
Poco a poco me fui metiendo más a la boca hasta que pude mamar gran parte de su gran pene.
No sabía que un pene pidiera saber tan rico, no sabía como es que supe hacer sexo oral pero lo estaba haciendo como experta y disfrutando al máximo, eso me tenía súper excitada.
Su huevos eran enormes, los lamia para descansar mi boca en momentos y regresaba a mamar ese falo caliente y duro.
Mamarlo era lo más delicioso que pudiera imaginar.
Pero de pronto me pidió que parara por que lo iba hacer venir y él quería venirse dentro de mi.
Estacionó en coche frente a un parque muy sólo lleno de árboles, no había luces ni casas por ahí.
Solo autos estacionados.
Se bajó sin acomodarse el pantalón, sólo lo subió a sus piernas para poder caminar.
Se pasó a mi puerta, la abrió, tomó mi cara y la acercó de nuevo a su pene para volver a mamarselo.
Mientras con una de sus manos empezaba a meter un dedo otra vez en mi vagina virgen volviéndome loca de placer.
Se quitó la camisa, su pene se veía cada vez más grande y grueso, me cansaba en tenerlo en mi boca pero no quería dejar de mamarlo.
Pero él quería pasar a lo que seguía.
Me hizo girar para que mis pies quedarán colgados hacia afuera, me pidió que me recargara hacia atrás, mi espalda descasaba en mi mochila que acomodó él mismo para que no me lastimara la palanca de velocidades.
Se inclinó entre mis piernas y me quitó mi calzón, lo llevó a su nariz y lo olió mientras decía -Mmmmm que delicia mi vida, que rica estas.
Lo aventó al asiento de atrás y de inmediato metió su cara entre mis piernas y con su boca abarcaba toda mi vagina empezando a succionar y a lamer de una forma deliciosa y experta.
wooooooooow aaaaaaaah era delicioso, no sabía que exista un placer tan maravilloso, me lamia y succionaba mi clítoris de una manera muy a hábil, sus barba crecida raspaba entre mis piernas haciéndome cosquillas mientras su lengua no dejaba de lamer.
Con sus manos acariciaba mis pechos y los apretaba como desesperado mientras su cara seguía entre mis piernas llevándome al primer orgasmo.
Aaaaaaaaaah mi cuerpo temblaba sin control, todo esos era nuevo para mi.
Él no paraba de succionar mientras mis jugos iban a parar directo a su boca.
Temblaba sin control, él me pedía más de mi miel, lamía y succionaba todo lo que de mi salía, sus manos no dejaban de apretar mis bubis y masajearlas de una manera deliciosa.
Poco a poco me iba recuperando del primer orgasmo y ya me venía otro igual aaaaaaaaaagh aaaaaaaah siiiiiii wooooooow este era más intenso que me dejaba sin fuerzas y me hacia temblar como loca.
Él aprovechado ese momento se puso de pie y puso su grueso pene en la entrada de mi conchita y empezó a empujarlo con decisión mientras me decía -Aguanta mi reyna, te dolerá al principio pero luego te encantará.
Yo sólo quería que siguiera y le decía; -Hazlo!, metemela por favor!.
La quiero sentir ya!! La quiero adentro!.
De pronto sentí algo duro y caliente forzando mi entrada, estaba tan lubricada que de inmediato entró la punta causándome un rico espasmo con un poco de dolor mientras él gemía como celebrando el momento.
-Que rica estas bebé aaaaaaaaah te la voy a meter toda, por favor aguanta, pasará rápido el dolor.
Diciendo esto fue empujando lentamente dentro de mi vagina, invadiendo mi interior, sentía claramente el paso de su grueso pene rasgando y estrenando mi cabidad, lo sentía más duro y caliente que una piedra, me dolía, me ardía, se lo decía pero me tranquilizaba asegurando que pasaría rápido el dolor, de pronto ya no pudo meter mas, algo dentro mío se lo impidió, me dolía, quería que lo sacara, se lo rogaba, pero él me pidió aguantar un poco más.
Lo sentía duro y enorme dentro de mi causándome dolor y ardor, quería que lo sacara.
Él respiraba muy agitado y sudaba a chorros sobre mi.
Así sin moverse por un instante empezó a lamer mis bubis para tranquilizarme, me volvía loca de nuevo con su boca, me distrajo, cedí mi cuerpo mientras lamía mis pezones y los mamaba como bebé sediento, con una mano masajeaba una bubi mientras con su boca me mamaba la otra, era un verdadero hombre experto.
Y de pronto y sin aviso empujó todo su pelvis hacia mi metiendo todo su pene en mi interior haciéndome gritar de dolor -aaaaaaaay aaaaaaaaay sácala!!! Sácala por favor le pedía llorando.
Él se quedó tranquilo y buscó mi boca con la suya para hacerme callar con un apasionado beso y meterme su lengua hasta la garganta.
Su pene latía duro en mi interior, no se movía pero no se salía tampoco.
El dolor no bajaba, pero él empezó a sacarlo meterlo lentamente, me dolía, me ardía horrible, sentía que me partiría en dos, lloraba y le pedía que lo sacara, pero él estaba como en otro mundo, había empezado a agarrar ritmo saliendo y entrando en mi vagina, empecé a sentir rico poco a poco y quizá yo aflojé mi cuerpo, por que empezó a moverse de afuera hacia dentro con más velocidad.
Me sujetó de mis piernas subiendo las a sus hombros y sin sacar en su totalidad su grueso miembro empezó a cogerme con más y más velocidad, dudaba sobra mi, gemía, gozaba, gritaba, me decía que era lo más rico que había tenido en su vida, me penetraba con demasiada fuerza y velocidad.
Pero en momentos paraba de pronto y lo hacia lento, yo empujaba mi cadera hacia arriba para recibirlo todo dentro de mi, con mis manos me tocaba yo misma mis bubis, mis pezones más duros que nuca, era el placer más grande que jamás hubiera imaginado, mientras él volvía a penetrarme con más y más velocidad haciendo que nuestros cuerpos causarán un hermoso ruido en ese lugar solitario.
No podía más de placer, gemía, gritaba, le pedía que me lo diera más y más fuerte, le rogaba que me diera más fuerte, le decía su lo amaba, lo mordía en su hombros, me tenía como loca rogándole más y más placer.
me venía otro orgasmo, aaaaaaaaaaaaaaaaaaaah empecé a temblar, lo abracé con mis piernas y le regalé mi tercer orgasmo, este era más grande y abundante que los dos anteriores.
Al sentirlo él me jaló más hacia él y me empezó a dar con todas sus fuerzas y con toda la velocidad qe pudo.
Gemía yo y gemía él, yo le rogaba parara, que me lo diera todo, me empezaba a convulsionar por el gran orgasmo, él me la metía con toda la velocidad que podía, gritaba y me decía que estaba deliciosa, que apretaba muy rico.
Dio un gran grito que ahogó entre mis bubis y empezó a eyacular dentro de mi.
-aaaaaaaaah siiiiiiiii aaaaaaaaaah aaaaaaaah descargaba su leche caliente y espesa en mi interior, la sentía claramente, su cara agitada y sudada entre mis bubis me volvía loca mientras su pene seguía dentro de mi, lo empujaba hasta el fondo dejando hasta la última semilla de ese hermoso falo en mi interior.
-Aaaaaaaaaaa!.
Después su último gemido, se recostó sobre mi hasta que su miembro perdió su erección y se salió sólo de mi vagina dejando salir unas gotas de su semen combinadas con sangre de mi himen.
Respirábamos cada vez más relajados cuando de pronto escuchamos una voz de hombre que decía -SALGAN DEL COCHE Y PONGAN SUS MANOS EN ALTO, ESTÁN DETENIDOS POR FALTAS A LA MORAL EN VÍA PÚBLICA.
Era un policía.
Nunca nos dimos cuanta cuando se acercó.
Quizá circuló sin luces para sorprendernos y se aventó todo en show para luego aprendemos.
Adrián rápidamente se subió los pantalones asustado, yo me acomodé mi falda que la tenía levantada en mi estómago.
Nos pusimos de pie recargados en el coche muertos de miedo.
-Ah es menor de edad verdad señorita? Esto le va a salir muy caro joven, dijo el policía con voz amenazante y autoritaria.
-Que es de usted señor?, su sobrina?, su hijastra? su vecina?, su amiga?.
Adrián estaba aterrado, sólo dijo nervioso que me acababa de conocer y que se le había hecho fácil.
-Traigo 3500 pesos poli, por favor acéptelos y déjenos ir, por favor!!.
Adrián suplicaba casi llorando.
Él policía mi miró de arriba a abajo, se le llenaron los ojos de lujuria y preguntó -¿en verdad no es nada de ti? Para regresarla a su casa? Adrián le contestó que no, que yo era de otra cuidad.
El policía dijo tajantemente -MIRE JOVEN VAMOS A HACER ESTO; USTED ME DA ESOS 3500, YO LO DEJO IR, PERO ME LLEVO A SU AMIGA PARA REGRESARLA A SU CASA.
Y NO SE APURE, SUS PADRES NO SABRÁN LO QUE ESTABA HACIENDO
Yo veía a Adrián y le suplicaba que no lo hiciera, que me matarían en mi casa.
Él sacando el dinero de su cartera y entregándosela al policía me dijo que todo iba a estar bien, que si no lo hacía por lo menos a él le tocarían 20 años de cárcel.
Así que llorando acepté y lo vi alejarse mientras yo me subía a la patrulla esposada con las manos hacia atrás.
Iba llorando, el policía hablaba por su radio en claves, no entendía nada.
Me hizo un par de preguntas y de donde venía.
Luego de saber de donde era empezó a manejar por una carretera oscura mientras yo seguía aterrada por lo que me esperaba en la casa.
No llevaba ni 15 min en carretera cuando el policía me pregunta mi edad.
Le dije que tenía 15 años.
Voltea a veme y me dice que soy muy bonita y joven.
Que cuando me vio cogiendo con ese cabron pensaba que tendría más de 20.
Sus palabras me parecieron fuertes, pero no le decía nada, sólo me daba vergüenza verlo a la cara.
Seguía viendo hacia el lado de mi ventanilla.
Volvió a romper el silencio diciendo -Te veías muy linda ahí acostada en su coche con las piernas abiertas recibiendo su verga mi niña! Volteo mi cara para verlo y en ese momento me acaricia mi pierna diciendo ; -Tus papas no se gana a enterar de eso mi niña, no les diré lo que hiciste, sólo tendrás que dejarme hacer lo mismo que te hizo ese cabron.
Mi corazón empezó a temblar de nuevo, no sabía que contestar.
Sólo me le quedaba viendo mientras él seguía acariciando mis piernas y poco a poco subía su mano entre ellas por debajo de mi falda.
Cabe mencionar que no llevaba calzones, se habían quedado en el coche de Adrián juntó con mi mochila.
En cuanto el policía tocó mi vagina y aún que piensen que estaba loca, sentí muy rico, él sintió que estaba muy mojada y que incluso tenía semen de Adrián, pero no le importó.
Sólo dijo; -Wow mi niña, este cabron te dejó bien abierta y mojada, así ayudará a que entre la mía.
Sus palabras me pusieron a mil mientras sus dedos entraban y salían de mi vagina causándome tanto placer que le dije que haría lo que él quisiera.
Se salió de la carretera y entró a una camino de terraceria.
Yo ya empezaba a verlo de otra manera, era alto, de aproximadamente 40 años, robusto, blanco, pelo café y muy peinadito, no traía gorra de policía, su pecho era ancho como de gimnasio, sus piernas se apreciaba gruesas, iba afeitado, con labios gruesos, ojos cafe y muy bonitos.
Su voz varonil y tranquilizadora.
Cuando encontró el lugar preciso se bajó de la patrulla, se acercó a mi puerta, me abrió para que me bajara, abrió la puerta de atrás y me pidió que me sentara.
En cuanto me senté dejando mis pies hacia afuera pude ver su bulto erecto bajo sus pantalones mientras se quitaba la pistola, el chaleco y la camisa quedando sólo en pantalón y playera.
Era muy alto y corpulento, me sentía una niña pequeña ahí expuesta ante tal macho preparado a hacerme suya.
Cuando empezó a soltar su cinturón mi corazón saltó de emoción, se pene se marcaba demasiado, lo tenía completamente erecto, se lo empecé a acariciar así sobre el pantalón antes de que se desabrochara la ropa y la bajara.
En cuanto bajó su pantalón su gran pene saltó hacia mi cara como un resorte, no lo podía creer, era enorme y gordo.
Era mucho más grande que el de Adrián.
Sus huevos eran unas enormes bolas peludas listas para se lamidas, cosa que hice de inmediato haciéndolo gemir.
Se los lamí como desesperada, le olían y le sabían delicioso, sabían a macho, a hombre, a gloria.
Era el hombre perfecto para vivir y coger a diario.
Con las dos manos lo masturbaba y le empecé a mamar ese delicioso palo de carne.
Él me sujetó la cabeza para llevar su ritmo mientras su verga entraba y salía de mi boca.
Estuve mamando su pene por varios minutos hasta que él ya no podía más.
Me la sacó de la boca y me empezó a meter dos dedos en mi ya dilatada vagina.
Yo ya lo quería dentro de mi.
Él no emitía palabras, sólo respiraba fuerte y gemía.
Cuando sus dos dedos entraban a tope en mi a gran velocidad mi orgasmo empezó a fluir de manera deliciosa, me eché para atrás con las piernas abiertas para disfrutar al máximo y regalarle mi orgasmo, sus dedos de pronto salieron de mi, sus manos levantaron mis piernas hacia sus hombros, y su gran verga ya estaba forzando la entrada de mi vagina para entrar.
Cosa que hizo de inmediato haciéndome gritar como loca de dolor y placer a la vez.
Era demasiado gruesa, la sentí claramente romper algo dentro, la metió de golpe y hasta el fondo, todo su peso estaba sobre mi sin forma de escape.
Gimió como toro mientras mi cuerpecito estaba entre él y el asiento sin poder moverme.
Lo único que hice fue abrazarlo con mis pies y mis manos se colgaron de su cuello.
Él entendió que estaba lista y empezó a sacarla lentamente para volver a meterla hasta el fondo causando mis gemidos y gritos uno tras otro.
Como todo un experto me empezó a coger y tomarme como si fuera una muñeca de trapo, me cogía con velocidad, me mamaba mis bubis, me giró dándole la espalda y me cogió de a perrito, me daba con fuerza toda su verga mientras yo gritaba y pedía mas.
Me empezó a dar nalgadas mientras su gran verga seguía entrando y saliendo.
Yo mantenía los ojos cerrados, no imaginaba que existiera tal placer.
Quería que no acabara nunca, pero de pronto él empezó a gemir y gritar mientras su pene entraba y salía más rápido dentro de mi.
Se empezó a convulsionar expulsando su semen dentro de mi mientras gritaba de placer y me jalaba más hacia él, la posición de perrito me ayudaba a llevar completamente el ritmo.
Sentía claramente su leche caliente entrar en mis entrañas, su gruesa verga palpitaba dentro mío haciéndome gozar, sus manos jalándome hacia el me dejaba sin control, él me hizo como quiso, yo era una muñeca a su merced.
Una vez que se vacío dentro de mi, sacó su aún erecto falo, me pidió que se lo mamara.
Cosa we hice sin problema.
Saboree su esperma, el de Adrián y mis jugos.
Se la deje cada vez más limpia mientras poco a poco iba perdiendo la erección.
Me dio una playera para que me limpiara.
Se puso el uniforme de nuevo.
Nos sentamos al frente de nuevo y me llevó hasta la central de autobuses.
Me dio dinero para el boleto.
Me pidió mis datos del face para estar en contacto.
Me dio el nombre de una pastilla para que me la tomara al día siguiente para evitar embarazo y se despidió dejándome en la puerta de la central.
Obviamente me contactó por face.
Llevamos relación carnal desde entonces.
Viaja para acá dos veces por mes.
Me sigue cogiendo como un rey.
Lo amo.
Él sigue casado pero eso no me importa, nunca dejaré ese hermoso pene que me da cada vez que nos vemos.
Seguramente él leerá este relato por que es lector de esta página.
Está dedicado a ti.
A ti que me hiciste amar la verga.
Y que me has hecho adicta al semen de macho.
El día que se acabe esto seguramente empezare a buscar machos a diario hasta encontrar uno como tu.
De Adrián ya no supe nada.
Pero aún que me hubiera contactado no habría hecho nada con él.
Estaba y estoy muy bien atendida por mi policía maduron.
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