Después de 3 meses de separada 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando termine de masturbarme frente a la mirada de mi joven amante, me acurruque contra él, "te gustó Jorge?", le dije, besando sus labios, "es que estoy flipando señora, nunca me imagine poder hacer esto con usted", me dijo, pasado sus manos por mis tetas, "pero ya va siendo hora que te marches, los chicos pueden venir en cualquier momento", le dije, pensando que no sabía que hora era, y mis hijos podían llegar, y como explicarles que estaba con su amigo. Jorge se vistió, mientras yo seguía desnuda, lo acompañe hasta la puerta y se marchó y yo me fui a dormir, tranquila, satisfecha. El domingo paso como siempre, con los chicos en casa, escuchando música, Jorge me miraba pero no me decía nada, todo normal. En la semana yo seguí con mis cosas, el estudio, mi trabajo, pero no dejaba de pensar en Jorge, quería volver a estar en la cama con él, debía buscar otra oportunidad. Mis hijos seguían también con sus cosas, se iban temprano a clases y no volvían hasta las cuatro de la tarde, así que me fije que materias tenía mañana, y ya las tenía aprobadas, así que agarre mi móvil y llamo a Jorge, "hola cariño, estas ocupado?, quieres venir mañana a casa en vez de ir al instituto?", le dije, "claro, cuando mis hijos se hayan ido, no te gustaría volver a cogerme?, si, entonces te espero desnudita?, un beso, hasta mañana", le dije, ya quedando que vendría al día siguiente.

Esa noche me duche, me depile bien la cuca, me pinte bien bonitas las uñas de mis manos y de mis pies, quería estar radiante para mi joven amante. A la mañana mis hijos se levantan, les doy desayuno, y se van, yo de inmediato me quieté la pijama, quedando completamente desnuda, esperando a mi amante, me puse perfume entre mis tetas, estaba nerviosa, no lo voy a negar, hasta que como a la media hora, suena el telefonillo, que de inmediato atiendo y era Jorge, le abrí y lo espere detrás de la puerta para darle la sorpresa, cuando veo por la mirilla que esta llegando, abro y me quedo escondida detrás de la puerta y la cara que puso cuando me vio desnuda, fue un poema. A mi siempre me gusto estar así con todos los hombres que estuve, desnuda, para que me manoseen a su gusto, que me den fuertes nalgadas, sentirme deseada por ellos, sentir sus manos por todo mi cuerpo, que me la metan en cualquier lugar de la casa, eso me vuelve loca. Jorge me quedó mirando sin decir nada, yo agarré sus manos y las lleve a mis tetas, "así, apriétalas así que me encanta, te gusta como te estoy esperando?", le dije, besando sus labios y acariciando su verga por sobre el pantalón, que ya se estaba poniendo dura.

Jorge me estrujaba las tetas, no hay cosa que me caliente mas es que me aprieten fuerte mis tetas y mis pezones, yo estaba desabrochando su pantalón para sacar su verga, todavía estábamos parados contra la puerta de entrada, sentía como mi cuca se mojaba mas y mas, "ven cariño", le dije, agarrando su verga con mi mano, y nos fuimos al sillón del salón, Jorge se quitaba la ropa mientras yo no dejaba de besar sus labios y acariciar su verga, lo senté y me puse de rodillas entre sus piernas, metiendo su verga en mi boca, mamando con deleite, lamiendo todo su tronco, sus huevos, mojando bien con mi saliva toda su verga, me pongo en pie, le doy la espalda y abriendo mis nalgas me fui sentando, haciendo que hermosa verga se vaya metiendo en mi culo, hasta quedar sentada sobre él y su verga toda metida en mi culo, que lo movía para los costados, "deja que yo haga las cosas, tú solo juega con mis tetas", le dije, moviendo mi culo en círculos con toda su hermosa verga dentro, gimiendo a medida que ese chico me estrujaba las tetas y me cogía por el culo, me levante y volví a arrodillarme entre sus piernas y se la seguí mamando, me volví a poner en pie y con mi mano la puse en la entrada de mi cuca, volviendo a sentarme sobre él y su verga se perdió toda dentro de mi cuca mojada, "que rico que me coges papasote, ahora vamos a la cama así me sigues dando verga", le decía, tirando mi cara para atrás buscando su boca, sin dejar de mover mis caderas con toda esa hermosa verga dentro, "como me gusta que me cojas", le decía, sin dejar de mover mis caderas, disfrutando como sentía su verga moverse dentro de mi cuca. Me pongo en pie y le digo de irnos a la cama, donde me puse en cuatro patas, con mi culo bien levantado y me escuche a mi misma, una voz ronca por lo caliente que estaba, pidiéndole que me de fuertes nalgadas, a lo que él empezó a darme fuerte con la palma de sus manos, haciendo que sienta como me dolían las nalgas, como me quemaban, "que ricas nalgadas, sigue azotando mi culo, dame mas fuerte, soy una mujer muy mala y merezco que me azotes", le decía, sintiendo como me daba mas fuerte los golpes en las nalgas, sentía como mi culo me quemaba, me caían lagrimas, pero también me calentaba mas y mas, "mete toda tu verga en mi cuca, cógeme fuerte", le pedí yo, desesperada, notando como Jorge ubicaba su verga contra mi cuca y de una sola vez la hizo que entre hasta que sus huevos chocaron contra mis nalgas, gritando de placer

Mis tetas se movían para adelante y para atrás, a medida que Jorge me cogía, "papasote, fuerte por el culo ahora", le dije, agachando un poco mas mi cuerpo y abriendo mis nalgas, Jorge sacó su verga de mi cuca y como pudo la metió toda, fuerte, de una sola vez, haciendo que muerda las sábanas para no gritar de placer al sentir como me había entrado esa delicia de verga en mi culo, "haaaaaaaa, que rico, dame verga fuerte por el culo, dame fuerte papasote", le pedía yo, mordiendo las sábanas y abriendo mis nalgas, sintiendo como esa hermosa verga entraba y salía de mi ojete, como me estaba cogiendo fuerte, como me estaba reventando el ano, como a mi me gusta. Yo siempre que estuve con los hombres con los que me acosté, siempre me gustó que me cogieran bien duro y con Jorge no iba a ser la excepción, me encanta sentir como entra y sale la verga del lugar por donde me estén cogiendo en ese momento, tanto sea la cuca como el culo, sentirla fuerte, sentir como se desespera el macho de turno en cogerme y cogerme, y así estaba Jorge, cogiendo mi culo con todas sus fuerzas, mis nalgas hacían un fuerte ruido al chocar contra su cuerpo y con las metidas y sacadas que hacía, no dejaba de tirarme pedos, "mete la verga una vez en la cuca fuerte, la sacas y la metes en el culo fuerte, así una metida fuerte en cada agujero, pero fuerte, no te preocupen en hacerme daño, me gusta", le dije, disfrutando como loca, me había corrido dos veces ya mientras mi joven y aguantador amante me seguía cogiendo, noto como me saca la verga del culo y la mete fuerte en mi cuca, haciendo que gima de placer y ahora la saca de la cuca y la mete fuerte, de una en mi culo, así una y otra vez, por la cuca, por el culo, yo gozaba como una loca, me encanta que me cojan así, "cariño, déjame acomodar mejor", le dije, dejando que Jorge pare un poco, así también se reponía y duraba mas. Yo metí su verga en mi boca y se la mame un poco, hasta que me pongo boca arriba, levantando mis piernas, abriéndolas, dejando que me vea bien la cuca, el ano, lo abierto que ha de estar, "sigue metiendo tu verga como lo estabas haciendo antes", le dije, esperándolo con mis piernas abiertas y levantadas para que me siga cogiendo, se sube sobre mi, y vuelve a meter su verga con todas sus fuerzas en mi cuca, la saca, la mete fuerte en mi culo, yo gemía, gritaba de placer al sentirme así cogida, fuerte, sentir esa verga entrar fuerte en mi cuca, en mi ojete,sentir a cada embestida en mi culo, como me salen los pedos

Jorge jadeaba, gemía, me tenía agarrada de mis tobillos y su verga no dejaba de entrar y salir de mis agujeros con fuerza, como le había pedido que me coja, como le había pedido que me haga disfrutar, "que rico me estas cogiendo papasote, sigue así dándome verga", le pedía yo, disfrutando de esa hermosa y joven verga que me estaba cogiendo, "señora, no doy mas, me voy a correr", me dijo Jorge, con su cara empapada de sudor, "si papasote, si, lléname la cuca de leche, papasote, lléname la cuca", le dije, dejando que meta su verga lo mas adentro de mi cuca que pudo, y yo lo envolví con mis piernas sin dejar de mover mis caderas, gimiendo,pidiendo su leche, hasta que siento como se empieza a escurrir dentro de mi cuca, sentía su leche caliente llenar mi cuca, como a medida que metía y sacaba su verga, la leche se me desbordaba, mojando mi ojete, haciendo mancha en la cama, pero Jorge seguía y seguía dejando su leche en mi cuca, mojando mi culo, haciendo que la mancha de leche fuera mas grande y yo disfrutando de esa hermosa cogida que me dio. Jorge cayo al costado mío, respirando con mucha fuerza, agotado, "que rica cogida me diste papasote", le dije, besando sus labios y agachando mi cuerpo para limpiar su verga con mi boca, que estaba llena de leche, sus huevos, su bello púbico, mi cuca escurría leche de tan llena que estaba.

"Que rico me cogiste papasote, te gusta cogerme?", le decía mientras besaba sus labios, "me deja flipando señora, que bien que folla", me dijo, acariciando mis tetas, "sabes que puedes cogerme siempre que quieras, mientras no se enteren mis hijos, claro", le dije, pasando una de mis piernas por sobre las suyas. "ha que chica haz cogido, alguna del grupo?", le dije, hablando y pasando mi mano por su pecho, noté que a Jorge le había incomodado esa pregunta, "que ocurre Jorge que no me respondes?", le dije, subiendo encima de él y pasando mis tetas por su cara, "es que señora", me estaba diciendo "hay, basta de señora, ya me haz cogido por todos lados, me puedes tutear cuando estemos en la cama, y ahora cuéntame a quien te haz cogido", le decía, mimosa y pasando mis tetas por su boca, "a Karen", me dijo, dando vuelta la cara, y Karen es mi hija, o sea que se cogió a la madre y a la hija, "tú haz desvirgado a mi hija?", le dije, quedando sobre él y mirando su cara, "no Mercedes, tu hija ya estaba desvirgada", me dijo, "ni fui el segundo que se la folló, hasta el culo lo tenía roto", me dijo, como sacándose un peso de encima.

Mi Karen, mi hija, la que parece que nunca rompió un plato en su vida, y cuando sale, sale a coger, como su madre cuando era de su edad, me baje de encima de Jorge, me quedé pensando en lo que me había dicho, yo juraría que mi hija era virgen, no solo ya la habían cogido algunos chicos, que hasta el culo le habían roto, y no tuvo la confianza de decirle a su madre de eso. La verdad, me sentí tan mal, que termine pidiéndole a Jorge que se fuera, no por el echo que Jorge nos haya cogido a las dos en distintas etapas, me sentí mal por la forma de haberme enterado de las cosas.