DEVELACION DE LA VIDA SECRETA DE MI ESPOSA

Analizando porque pasan cosas como las que les voy a compartir, veo que es el resultado del deterioro que se va dando en los matrimonios por diferentes causas, entre otras por la inseguridad de los miembros de la pareja que conducen a celos infundados y este creo fue mi caso..
Analizando porque pasan cosas como las que les voy a compartir, veo que es el resultado del deterioro que se va dando en los matrimonios por diferentes causas, entre otras por la inseguridad de los miembros de la pareja que conducen a celos infundados y este creo fue mi caso.

Mi pareja constantemente estaba presumiendo de su fidelidad y cuestionado la mía cuando, nunca existieron pruebas que eso fuera verdad.

Cuando inicio nuestro noviazgo, dos años, y después matrimonio veinte años, nos encontramos que mi esposa recién ha cumplido sus cuarenta años y ahora está más atractiva que tiempo atrás.

Quizás la diferencia de edad, que en los primeros años se pasó por alto, cuando trascurre el tiempo, esto tiene su efecto cayéndose en la monotonía y este es el caso de mi matrimonio y son hechos externos que entran a deteriorar la relación, por eso fue necesario asimilar lo que sucedió y sacar provecho.

No fui ajeno a darme cuenta que algo estaba aconteciendo con mi esposa y el esposo de su hermana, un personaje que ya traía deteriorado su matrimonio por estar buscando aventuras.

Un día que pasaba en mi auto camino a mi casa, dio la casualidad que vi entrar a mi esposa a la casa de su hermana y me alerto porque por esos días la hermana había viajado al exterior del país y la pregunta fue…  ¿qué iba a hacer mi esposa en la casa de su hermana si ella no estaba? y en compañía de su cuñado.

Me quede atento y cuando escuche la llegada de mi esposa, sali a su encuentro muy amoroso y ella de seguro sintiendo su cargo de conciencia por lo que acababa de hacer no me rechazo, se quedó inmóvil aceptando las caricias y los besos y quizás con la mente ocupada en lo que había pasado con su cuñado. Dentro de todas las caricias como en otros momentos, motive sus senos, besos en el cuello y cuando ella menos se lo esperaba deslice mi mano por debajo de su falda y fui directo a su concha que encontré inundada no por su lubricación, porque era exagerada, sino por la descarga que su cuñado le había dejado dentro, y en el trayecto que ella caminó de la casa de su hermana a la nuestra tuvo que fluir hacia su panty.

En ese instante ella debió volver a la realidad y comprendió lo que yo estaba descubriendo, la corrida de su cuñado Luis Fernando, y le dije… siempre me celabas y acusabas de falsas aventuras, mientras presumías de tu fidelidad y resulta ahora que es todo lo contrario.

Cuando venía en el auto camino a nuestra casa te vi entrar con tu cuñado a la casa de tu hermana y sé que ella está fuera del país y ahora lo que me muestra tu concha no es lubricación normal sino la descarga que te dejo tu cuñado, pero no te preocupes que no voy a hacer un escándalo.

Ella no musitaba palabra al sentirse descubierta. La llevé a la sala, nos sentamos y debía estar muy apenada, permaneciendo con la cabeza agachada.

Entonces le pregunte porque estaba con su cuñado y ella me dijo… que él desde hacía tiempo venía coqueteándole y cada vez que la ocasión se prestaba le acariciaba su cuerpo, le daba besos en las mejillas, en el cuello y eso la excitaba. Y hoy que se encontraron por casualidad, él la invito a que fueran a su casa y ella le dijo que no estaba su hermana y él le respondió… tranquila que no va a pasar nada, solo compartimos una copa de licor y sigues para tu casa.

Pero tras esa copa de licor, vino una segunda y comenzaron las caricias de él en sus piernas, luego en sus senos y el licor y las caricias la excitaron tanto que acepto a desnudarse e ir a su habitación y allí sucedió, lo que tenía que suceder.

¿Y lo disfrutaste? Le pregunte.

Ella continuó con la cabeza agachada y con un sí, acepto que lo había disfrutado.

Bueno para que quedemos en paz te voy a confesar algo.

¿Qué cosa? Me pregunto.

Le dije… Desde hace tiempo he tenido la fantasía de verte follar con otro hombre, pero como tú siempre has presumido de ser una mujer muy tradicional, no te lo pude decir. Pero ahora que sé que no eres diferente a otras mujeres y que disfrutas el sexo y la aventura, te voy a proponer que invites a tu cuñado, nos tomamos unas copas, yo me hago el borracho, me voy a mi habitación, tú lo convences que estoy profundamente dormido y se van a la habitación de huéspedes y disfrutan desnudos como lo hicieron hoy. Todo con una condición que no le cuentes que yo estoy enterado porque eso le quitara a él la ilusión de creerse conquistador y más bien sentirse utilizado.

Ella acepto, previo a preguntarme si nos íbamos a separar.

Le dije que por ningún motivo la iba a dejar, ahora lo que iba a suceder es que íbamos a disfrutar el sexo al límite, pero eso sería nuestro secreto para que ella conservara su dignidad.

El sábado siguiente, como mi esposa no se decidía a llamar a su cuñado, lo hice yo, con la excusa que como estaba solo compartiera con nosotros unas copas y él de inmediato aceptó.

Le conté a mi esposa y le pedí que para el sábado se vistiera muy sensual, escogiera su falda más corta, medias de liguero, una blusa delgada y debajo sin sujetador aprovechando que ella conserva en su sitio sus senos.  Y ella aceptó, además se maquillo y peino como para ir a una fiesta.

El sábado, cuando llegó su cuñado, dejé que mi esposa lo recibiera y yo escondido estuve atento al saludo de él, quien no se reservó calificativos para alabar lo atractiva que estaba mi esposa, no paraba de repetir halagos diciendo… Nancy estas muy hermosa. Y ella no pudo ocultar la satisfacción que sentía.

Luego él pregunto por mí, y mi esposa le respondió que estaba enviando unos correos y ya salía.

Los correos que estaba enviando en realidad era el traslado de la cámara de vigilancia del hall a la habitación de huéspedes.  Esta cámara la conecto a mi celular en cualquier momento.

Cuando sali, Luis Fernando me agradeció la invitación y enseguida mi esposa trajo algunas botanas, le ofrecí el licor, él acepto tomar tequila, mi esposa vino y yo lo acompañaría a él también con tequila.

Desde el bar podía ver en diagonal a Luis Fernando dirigiendo su mirada al cuerpo de Nancy mi esposa y en especial a sus piernas, porque él le hizo alguna señal y ella separó sus piernas por unos instantes. Luego él con el dedo pulgar en alto la felicito.

Mi esposa se daba estos lujos porque sabía que yo sería su cómplice en lo que  sucediera.

La noche fue avanzando las copas nos fueron desinhibiendo y en algún momento Luis Fernando se atrevió a decirme que me felicitaba por tener una esposa tan bonita que era envidia de muchos hombres, quise hacer otro comentario, pero simplemente dije… Muchas gracias.

Pasada la medianoche comencé a hacerme el borracho y mi esposa me seguía la actitud de estar ebrio, así que no fue muy difícil, decir que me sentía mal y me fui a recostar a la habitación. Luego vino mi esposa para dar credibilidad al asunto y al regresar le dijo a Luis Fernando, el hombre se profundizo y le dio un beso, me conto después mi esposa, esto para darle confianza.

Él dijo… entonces podemos comenzar lo nuestro y comenzó a acariciarle el cuerpo y se trenzaron en un beso largo al final del cual mi esposa lo llevó a la habitación de huéspedes. Entraron y ella cerró la puerta y yo activé la cámara en mi celular y comencé a ver cómo se fueron desnudando dejando la ropa tirada en cualquier parte.

Lo primero que aconteció fue que Nancy se acostó, separo las piernas y le pidió sexo oral y él de inmediato se sumergió en medio de las piernas de ella y tras penetrarla varias veces con su lengua, cuando ella inició sus gemidos, los labios de Luis Fernando se trasladaron al clítoris y pronto ella comenzó a disfrutar un sonoro orgasmo, quedando rendida.

Mientras ella se reponía él no paró de mamar sus tetas y por momentos tomaba su verga y la paseaba a todo lo largo de la concha de mi esposa, para mantener su erección.

Cuando ella se recuperó él le pidió mamara su verga y ella lo hizo con mucha eficiencia.

Luego ella se acostó y en posición de misionero Luis Fernando comenzó a penetrar la concha de Nancy y ver esto en pantalla me excitó terriblemente, creyendo ingenuamente que Luis Fernando era el primer hombre diferente a mí que penetraba el cuerpo de mi esposa.

Así disfrutaron en medio de un beso prologado varios minutos y luego él le pidió cambiar. Ella se subió sobre Luis Fernando y con su mano dirigió la verga de él, penetrándola con mucha facilidad. En esta posición ella llevaba la parte dominante clavando el miembro de él hasta la raíz en su concha. Los dos estaban muy excitados, por momentos paraban y mientras se besaban él se esmeraba en acariciarle las tetas, en especial los pezones.

Como ya había transcurrido un poco menos de una hora, él le pidió a ella que se acomodara en cuatro o de perrito y él desde atrás volvió a penetrarla para luego tomarla de las caderas y comenzar como una ametralladora a fusilar la concha de Nancy, que le decía… eso, eso Luisfer, hasta el fondo, que rico, hum, hum, hum y pronto los dos llegaron al éxtasis, ella con su orgasmo y él se corriéndose dentro de ella. Mientras duro esta faena, el choque de la pelvis de él contra las nalgas de mi esposa, parecía un aplauso interminable.

Al terminar quedaron pegados al menos un par de minutos recuperando la respiración. Al separarse Luis Fernando, Nancy continuó en la posición de perrito y gracias a la posición de la cámara pude ver como comenzó a aflorar la corrida que él le había dejado dentro a mi esposa. Él puso su mano para evitar que el semen cayera sobre la cama y luego lo hizo ella, para dirigirse al baño.

Cuando ella regreso, Luis Fernando le dijo… Y cuando me vas a dejar probar ese culito tan rico.

Ella le respondió… ya te dije que eso debe ser muy doloroso.

Noooo, le respondió Luis Fernando, con buena lubricación ya vas a ver que te va a gustar. Si hubieras aceptado aquella vez en el motel donde podías gemir como quisieras ya estarías habituada y hasta me pedirías que te follara por ahí, ya que cuando te follo de perrito parece que tu culito me llamara diciendo… ven penétrame.

Jajajajajajaja, rio ella, no te hagas ilusiones.

Como estaban tan en confianza y con sus copas encima. Nancy le pregunto… Luisfer con cuantas mujeres has engañado a mi hermana desde que se casaron.

Déjame ver, porque nunca he llevado la cuenta, haber, haber, en los diez años de matrimonio creo que con ocho. ¿Y tú con cuantos hombres has estado?

Ella respondió con mi esposo y contigo.

Jajajajaja, eso sí que no te lo creo, muchos hombres sé que te han deseado y más de uno lo debe haber logrado. ¿Di cuantos? Nadie se va a enterar

¿Seguro guardas el secreto?

Después que me digas lo borrare de mi memoria.

Contigo y mi esposo, cinco.  Y abrió la mano mostrándole los cinco dedos.

Y yo pensé. ¡Oh sorpresa, esto si lo tenía bien calladito!

¿Y algún trio o algo parecido?

No, no de eso si me he cuidado siempre de no dar publicidad y mostrarme muy señora.

Bueno creo que ya es hora de irme, dijo Luis Fernando.

Pero mi esposa le dijo… mejor quédate que esta habitación esta libre. Tomaste licor mejor no conduces tu auto.

Luis Fernando se quedó a dormir esa noche y mi esposa se vino directo a nuestra habitación. Ella entro al baño para borrar los recuerdos que acababa de recibir y a continuación vino a la habitación totalmente desnuda y al acostarse a mi lado me pregunto si esa era mi fantasía y le contesté que había correspondido totalmente a mis expectativas y deslizando su mano busco mi verga y me dijo… ¿hummmm y estas deseoso?

Por supuesto que sí, le respondí.

Y ella enseguida se subió sobre mi dirigiendo mi verga a su concha para comenzar a cabalgarme y en tres minutos yo estaba explotando dentro de ella. Cuando Nancy lo notó, se inclinó, me beso y me dijo que era el único hombre que ella amaba. Yo le correspondí con la misma frase y nos prometimos nunca separarnos.

Al día siguiente yo tenía que ir a una reunión temprano y Luis Fernando se quedó durmiendo, como yo sali a las siete de la mañana y gastaba cuarenta minutos en llegar al lugar de mi reunión, Conecté mi celular a la cámara que había dejado instalada en la habitación de huéspedes y mientras conducía, puse sonido. Y estaba muy tranquilo cuando escuché la voz de mi esposa diciendo… Vamos, vamos, perezoso es hora de ir a trabajar, detuve el auto para mirar la pantalla y lo que veo es a Luis Fernando estaba desnudo igual que mi esposa y ella se acostó y le dijo a Luis Fernando… ¿Entonces un rapidin mañanero?

Y él de inmediato se acomodó en medio de las piernas de Nancy

Entonces al ver esto activé grabación porque debía continuar la marcha y lo que seguí escuchando fue… Vamos Luisfer quiero sentir tu verga muy adentro en esta mañana y él de inmediato dirigió su verga a la concha de mi esposa, la lubrico en sus flujos y luego comenzó un mete y saca acompañado de los gemidos de ella, que al tiempo lo animaba diciendo… Eso, eso, Luisfer, dame más duro, despierta esta concha con tu verga, sigue, sigue, eso, eso, huuuyyyy, esta mañana estoy muy estimulada, un poquito más adentro y disfruto mi orgasmo, y yo me voy a correr dentro de esta rica concha, dijo él.

Con los videos de este par de días he disfrutado viendo a mi esposa follando con otro, que era mi fantasía, además ahora la noto más dispuesta a disfrutar del sexo sin ningún tapujo.