Dulce Inocencia VIII: Clase de Natación
Nuevo relato de esta antología y volvimos con los trajes de baño..
Primero que nada agradezco enormemente el apoyo del anterior relato, para mí sus comentarios valen mucho sean positivos o negativos, gracias al buen recibimiento del relato anterior “Vengan a mi casa” habrá 2 capítulos más en un futuro cercano igual con el relato “Traje de baño poco apropiado” así como muchas otras ideas de ustedes que eventualmente se convertirán en nuevos relatos. Por último es casi seguro que el próximo relato sea “Cazando una rajita” dado que es de los más pedidos, aun así no se olviden de votar y dejar sus opiniones, ahora sin más disfruten el siguiente relato.
- Enséñame tu pene papi
- Cazando una rajita
- Terapia de Hermanos
Comienza un nuevo día y una nueva clase, como es de costumbre todas mis estudiantes vienen por mí, todas quieren nadar con su profe, a menudo aprovecho para dedear y manosear esas pequeñas e inocentes rajas de 6 años o esas preciosas barriguitas sobresalientes. Mi nombre es Roberto, soy maestro tutor y de natación de una pequeña escuela primaria, dado que en este pueblo la mayoría son mujeres no es de extrañar que tendría ventaja en este ámbito, me mantengo en forma y cuido mi físico pues esas zorritas no se van a enamorar solas, a decir verdad entré a esta escuela solo para cogerme a esas inocentes y dulces putitas vírgenes en sus trajes de baño azules, pero terminé enamorándome de una de ellas.
Mi noviecita Heidi llegó corriendo, vistiendo una toalla mientras empujaba a las demás niñas solo para darme un abrazo, esa pequeña nena bronceadita con ojos avellana hermosos, algunas pequitas y un cabello corto castaño adornado con un pequeño broche de gato, ella gritaba
-¡Dejen en paz a mi novio!
Las demás niñas le gritaban y una de ellas le quitó su toalla revelando su secreto, un diminuto traje de baño estilo tirantes que dejaba ver sus pezones, su diminuto clítoris y sus respingadas nalguitas y barriguita. Sus amigas de inmediato comenzaron a burlarse, pero yo alcé la voz
-¡Bueno ya cálmense, será mejor que sigamos con la clase, Heidi tú te quedas después de clase, tenemos que mejorar tus movimientos!
Mientras Heidi sostenía su pequeña tabla para nadar, yo aprovechaba para agarrar y disfrutar esa deliciosa barriguita y esas hermosas piernas, cuando nos adentramos en lo más profundo de la piscina, no hacia más que masajearle su clítoris y pellizcar sus pequeños pezones. Mi pequeña hembra se comenzaba a excitar pues soltaba pequeños gemidos y tenia toda su carita roja, pero tenía que asegurarme que nadie nos interrumpiera.
-Paciencia hermosa, todavía tienes que reponer tus clases
Luego de que todas las niñas se fueran comenzamos a nadar desnudos mientras nos dábamos un largo beso de lengua, me encanta lamer esa pequeña lengüita de primaria. Mientras le pellizcaba sus nalguitas a mi Heidi, ella frotaba lentamente su pequeña rajita sobre mi perna, saqué a Heidi y la coloqué en el borde de la alberca, tenia esa linda vista, su delicioso anito y su húmeda rajita acompañada con sus respingonas nalguitas solo para mí, de inmediato comencé a devorar ese pequeño manjar prohibido, su vagina tenia un sabor dulce y salado y una textura muy suave, Heidi babeaba en el suelo mojada mientras yo apretaba esas nalguitas y metía mi lengua hasta lo más profundo de su ano hasta que su vaginita empezó a chorrear, rápidamente nos metimos a los vestidores para continuar con nuestra clase.
-Me alegra ver que hayas usado tu regalo Heidi
-Lo uso porque se que te gusta profe, (decía con una respiración cortada y agitada)
La puse de frente y comencé a lamer su hermosa barriguita y su ombliguito, estaba a punto de explotar y que mejor lugar para hacerlo que el útero de una estudiante de 6 años, comencé a meter mi verga hasta el fondo de su rajita mientras le pellizcaba sus pequeños y excitados pezones.
-Heidi recuerda que aún es una clase, si te corres primero voy a tener que castigarte
-¿Pero y si aguanto Profe?
-Te voy a dar una sorpresa mi amor
Comencé a embestir el coño de Heidi soportando no correrme, parecía imposible, pues sus pequeños gemidos junto a lo apretado de su rajita hacia que mi pene rogara por terminar en ese pequeño y apretado útero, pero recordé la clave para mi victoria, solo bastaba con un beso de lengua mientras estiraba uno de sus pezones y masajeaba su ano, apunto de correrme Heidi soltó un fuerte chillido y se corrió mientras que empezaba a orinarse por lo que tuve que llevarla a las duchas mientras tenía mi verga insertada por completo en su vagina, con el agua fría sobre nosotros, Heidi liberó toda su carga de orina mientras yo bombeaba todo mi esperma en esa apretada raja como si quisiera preñarla.
Saque mi verga de su vagina y lo metí a su boca para que lo lamiera, pone cara de inocente pero es una traga leche profesional, en cuestión de segundos lo dejó bien limpiecito.
-Muy bien Heidi es hora de tu castigo
Heidi luchaba por recuperar la compostura pues estaba agotada, la recosté en mis piernas y comencé a soltarle unas fuertes nalgadas, ella solo gemía mientras intentaba morder sus labios, al final su castigo terminó excitándola más. Luego de dejarle sus nalguitas rojitas Heidi quería continuar
-Profe mi culito todavía no ha recibido tu lechita
Bastaron unos minutos de morder y degustar los inexistentes senos de mi Heidi para que mi verga se endureciera y pudiera penetrar ese delicioso y apretado culito de 6 años como es debido, coloqué a Heidi en cuatro y ahí en el piso de la regadera mientras la coladera se llevaba los restos de nuestras corridas, el culito de Heidi empezó a ser destrozado por mi verga, no paraba de embestir con fuerza mi palo contra esas nalguitas, con una mano las pellizcaba con fuerza y con la otra agarraba la boquita de Heidi mientras ella gemía.
-Te amo Heidi, (gritaba mientras me movía)
Pero su respuesta me conmovió
-Yo también te amo Roberto y haría lo que fuera por ti, (lo dijo mientras me volteaba a ver con una carita sonriente llena de alegría.
De inmediato la cargué y nos pegamos a la pared, su respuesta me conmovió y comencé a besarla mientras me movía cada vez más rápido y profundo así estuvimos hasta que estaba por terminar, pero Heidi me dijo:
-¡Profe córrase en mi puchita, quiero quedar preñada!!!
Esas palabras, nunca le había explicado nada sobre el embarazo, pero el morbo de embarazar a mi linda noviecita a tan tierna edad me motivo a sacar rápidamente mi rabo y metérselo en esa bonita vagina enrojecida, sin poder hacer más exploté por segunda vez en su útero llenándolo por completo. Los dos quedamos agotados, Heidi encima de mí, Heidi solo me preguntó:
-¿Cree que termine preñada?
Solo bese su frente y nos quedamos dormidos empapados y desnudos
Luego de despertar y secarnos le pregunté a Heidi
-Oye mi amor y ¿cómo sabes como se hacen los bebes?
Leí en los libros que si el hombre pone su semen en la puchita de una mujer pueden hacer un bebe, Profe ¿Cree que pueda quedar embarazada?
Agarré su cabeza y sus manitas y viéndola a los ojos le contesté:
-Todavía estás muy joven mi amor, aunque no me gustaría nada más que verte preñada y dándole leche a nuestro bebe creo que tendremos que esperar un poco más
Heidi hizo una cara de puchero, pero le contesté
-Creo que por ahora solo disfrutaré a mi linda noviecita justo como ahora
Saqué un regalo de mi mochila y se lo di a Heidi, cuando lo abrió sus ojitos se iluminaron, era un anillo rosa, el cual inmediatamente colocó en su dedito
-Ahora somos esposos Profe jiji
-Así es mi amor y ahora voy a besar a la novia
Comencé a besar su cachete mientras le hacía cosquillas y ella solo reía
Esa noche en verdad había pensado en que seria ver a mi Heidi preñada a esa edad y entonces recordé que un amigo me habló de un lugar en otra ciudad supuestamente secreto, algo como una guardería donde venden una galleta que hace que las nenas jóvenes sean preñadas, tal vez vaya ahí en algún momento si el deseo de ser padre sigue creciendo.
Al día siguiente en clase, Heidi estaba dormida en clase por el agotamiento en la “clase” de ayer, una de las niñas la acusó y la desperté susurrándole al oído “Despierta princesa” mientras le daba un beso puro en el cachete, todas las niñas quedaron boquiabiertas y comenzaron a pedir uno también, pero mi hermosa Heidi solo despertó con una sonrisa en su rostro.
Este relato es enteramente ficticio y dichos comportamientos no deben ser replicados nuestro único fin es entretener.
Como pequeño aviso extra se vienen varios relatos una vez terminada esta antología, algunos muy esperados y otros creados gracias a las sugerencias de varios de ustedes en los comentarios, si quieren dar ideas o sugerencias para un próximo no duden en dejarlas en los comentarios, espérenlos pronto.
- La Guardería III
- Un mundo feliz
- Granja lechera
- Traje de baño poco apropiado II
- Traje de baño poco apropiado III
- Traje de baño poco apropiado IV
- Vengan a mi casa II
- Vengan a mi casa III
- Inocencia Perdida I: Pagando viejas deudas
- Inocencia Perdida II: Una perrita enjaulada
Voy a empezar a hacer este tipo de relatos más «suaves» por así decirlo más seguido, por favor no se olviden de votar y comentar, sus opiniones valen mucho para mi.
Excelente relato, me encanto, tiene de todo, mas como esto!!! Saludos
Este estuvo bien pero sí lo noté más suave en comparación al anterior. Y a qué te refieres en ese comentario con volverlos más <> ?
Si el siguiente será «Cazando una rajita», entonces que el siguiente sea «Enséñame tu pene papi».
Me gusta que por ayuda de la comunidad tengas secuelas de otros relatos anteriores debido a su éxito y otros nuevos por ayuda de la misma comunidad. Los espero con ansias y no sé por cuál podría empezar si salieran todos a la vez.
a lo que me refiero es que empezaré a hacer relatos más románticos o suaves como este, pero aún así seguirán los relatos con brutalidad, violaciones y todo eso, solo para tener más variedad.
La comunidad vale mucho para mi y todo esto es posible gracias a ustedes.
Prepárate porque al terminar esta antología van a llover todos los trabajos pendientes.
Fue increíble, que la historia ocurriera en el mismo universo que la guardería abre un mundo de posibilidades, ¿Se convertirá en asociado? ¿Habrá embarazo? Que ansias por leer los siguientes relatos. Soy su fan.
Este fue el relato más hermoso, tiene el balance perfecto entre el morbo y un romance puro y casto, me encantó muchísimo.
Como sugerencia, he pensado en que cosas podrías hacer en el taller de Santa Claus, ya sabes Santa haciéndolo con sus pequeñas niñas duendes… Sé que harías un gran trabajo
Hola Dartrix me alegra mucho que te haya gustado, en un principio no tenía pensado juntar este relato con la Guardería fue una idea que surgió y como tu dices abre muchas posibilidades, obviamente la historia de estos dos amantes continuara con un bebe en camino, pero eso es trabajo para otro capítulo de la Guardería.
por ultimo me encantó la idea del taller de Santa, quiero empezar a escribirla aunque no se si sea mejor publicarla hasta diciembre, lo dejaré a votación.
He de admitir que soy de relatos muy fuertes ajajaja, aún así apoyare todos los relatos tu ingenio junto con el hecho de que hagas caso a tus seguidores me gusta. voto por cazando una rajita y espero con ansias inocencia perdida y granja lechera.
Muchas gracias por el apoyo, te prometo que en el siguiente vuelven las brutalidades