Dulce vita 3

Asi continúa la historia del dia de hoy.
– asi me gusta… Que rico… Awwww… Siiii

En el sofa de la sala de estar, una nenita a su panochita lengua le dan, rosada y devorada, un orgasmo pronto tendrá, a sus 5 años una verga probó y a sus 7 años adicta salió.

Desnuda y abierta nadie sabrá, que en esa casa, una nenita verga probará.

Un hombre calvo saliva a su panochita dejo, y lubricada su gorda verga, con su mano izquierda sobo.

– que rico, que rico…  – ella sonrie por lss cosquillas que siente, con sus piernitas abiertas, aprieta su opresor y caliente queda, cuando el hombre sus senitos pellizco.

El sube y besa su barriga, y sube hasta probar sus areolitas, las jala y muerde y marcas deja, gime y deja rosadita las tetitas., un beso en los labios y lengua abre su boquita y de su boca sale.

– Dame vergita.

El hombre sorprendido, se pone de pie y observa su dulce bebé, se quita su pantalón y de pronto un vergon salió, sus bolas peludas y enormes, la niña observo y mas excitada quedó.

De rodillas se coloco y en su boca sus bolas metió, succiono y succiono y el hombre gimió, y la niña un pelito de su boca saco.

Ella sonrie y se mete su biberon, succiona y succiona, pero el hombre la apartó.

Desesperado a la niña agarro, y sobre el sofa su pene le metío, al príncipio le dolio y casi lloró, aun virgen a ningun hombre conoció.

– ahahahahahh me duele… Suavecito… Ahhh ahhh ahhhh Suavecito.

El hombre se movio y solo la punta entró, y luego de un empujón su virgo rompió, ella se safo y sangre salió, y asustada lo miró.

– No te preocupes hermosa, ya eres mi señora.

Y asi se la metió y un poquito entró, suave, adelante y atrás, suave y poquito rudo hasta que ella solita abrió y a su macho recibió.

Gemis y Gemia, hasta que luego mas pedía, de un pronto a otro, un demonio la poseyó,  ella exigía mas duro por favor.

El hombre entendió y sobre el la monto, sus brazos la atrajeron, y verga el le dio, en el espejo podía ver, como sus bolas rebotaban una y otra vez, arriba y abajo, abajo y arriba, la niña saltaba poseída.

– siii siii siiii siiii siiii siiii – decía la pequeña.

– oh ooooh ooooh – el hombre sus ojos blancos ponia.

– que ricooooo ricooooo ricooooo…. Ahhhh ahhhhh awwwwwww la siento en mi pancita.

El la abrazo y besos le dio, que dichoso el lechero que a su segunda niña ya se comió.

Mientras sus padres trabajaban, su niña en su panochita una verga guardaba, quien iba a pensar que a esa edad una fiera en la cama, era convertida ya.

Un calor sintió y su niña se separó, lo miro y triste lo observo.

– me orine – dijo con tristeza y se tapó su dulce almeha.

El hombre la miró y en su cara su panochita su Lengua pasó y orina trago.

No te preocupes le dijo después, disfrutastes como se debe ser, pero falta que mi semilla, te la deje calientita.

El hombre la cargo y a la cama de sus padres ella lo dirigió y sobre esa cama, sin piedad verga le dio.

Ella muchos gritos dio, mas de placer no de dolor.

Y el como loco, casi roja se la dejo, metida tras metida, pronto se vendría y el misionero, loca la ponía.

– eres… Una…. Ahhhhh… Ahhhh…. Putita…. Ahhhhh ahhhhh

– No pares por favor…. Noooooo

Pero entre mas trato, ese guante vaginal su verga apretó y zas un torrente de leche, en su vagina dejo.

Le lechero respiro y la niña sonrío, y su vagina mucha lechita expulsó.

Su rostro sonrojado, mostraba su batallón, abiertita le costaba cerrar el hueco que el hombre le dejó.

Lo que no sospecho es que su papito, todo lo presenció, y una mancha de semen en la pared dejó,  enfermo se reportó y a su casa llegó, y presenció como a su niña un lechero lechita le guardo, calceta, vestido y calzoncito de ella observo en el pasillo, boxer, pantalón y camisa de hombre grande no le pertenecia, y muchos gemidos escucho un cuando se acercó su tesoro feliz encontró.

En vez de enojo una calentura le agarro, y asi su verga saco, esa misma a su nena pronto daría lo mejor.

*  nada es real, ojala manuela, pueda ser la lechera.