El edificio y la pandemia (Hoy el 6 piso Dto A) -Parte 2-

Intimidades de un edificio en época de pandemia, .
Recién se habían cumplido los primeros tres meses del confinamiento que nos mantenía a todos encerrados y con miedo, se había transformado en un clásico ver los noticieros de la tele para que nos cuenten como avanzaba la pandemia y el daño que estaba causando, vivíamos con temor y angustia, el conteo de los muertos era cada vez mayor y las noticias de una nueva vacuna eran lejanas, los vecinos del edificio siempre atentos y gentiles se transformaron en guardias celosos de las libertades del prójimo, si te cruzabas a comprar cigarrillos te miraban mal, como si fueses a traer la peste al edificio por atreverte a cruzar la calle, a ese grado de locura habíamos llegado.

A Don Jorge, el del 6 A, rápidamente se le acababan los ahorros, en otras épocas este caballero gentil y educado, había sido gerente de ventas en una importante cadena de electrodomésticos, pero una de las tantas crisis económicas de nuestro país lo habían dejado sin empleo fijo, siendo ya un hombre grande de 62 años y viviendo solamente con su esposa, (sus hijos ya casados vivían en forma independiente) no pasaban sobresaltos, el trabajaba con su vehículo, era chófer de la aplicación Ub.. y con lo que ganaba le alcanzaba de muy buena manera, ademas su nuevo trabajo le daba libertades de horarios, y eso era una gran ventaja para alguien que estaba acostumbrado al extenuante horario del comercio, pero los ahorros se esfumaron rápidamente y se vio en la necesidad de salir a la calle a ganarse el sustento para su esposa y para el mismo.

Siendo un trabajador esencial no le costo trabajo conseguir el permiso para poder circular, y de esa manera fue uno de los pocos que salia del edificio, su mujer, la Sra Raquel, una mujer gordita de 59 años, siempre muy coqueta y de la misma manera educada y simpática, le rogaba tener cuidado y lo bañaba literalmente en alcohol al volver a la casa, casi sin cruzarse palabras lo obligaba a desnudarse y lo metía al baño, mientras ella lavaba y desinfectaba toda su ropa.

Raquel se sentía culpable por ser su esposo el único vecino que no cumplía con la orden de permanecer en su domicilio, y por eso algunos vecinos la miraban medio torcido, ella sentía real vergüenza por ello, y de ser una señora muy simpática paso a prácticamente no saludar a nadie, siempre con la mirada clavada en el suelo y ya no hablaba con nadie, por temor de que alguien pudiera reclamarla por el comportamiento de su esposo. Pero por otro lado sentía un gran alivio al quedarse sola, el amor que sintieron de jóvenes el uno por el otro hacia ya mucho tiempo había desaparecido, solo quedaba un sentimiento de amistad o de compañerismo, ademas desde hacia ya mas de tres años que no mantenían relaciones, si bien ella se consideraba una mujer activa, aun sentía deseos sexuales los que aplacaba masturbándose viendo por Internet vídeos y fotos de sexo, también era una actividad que le daba mucho placer el leer relatos eróticos.

En el ultimo año, esa necesidad de masturbarse había crecido, antes se tocaba una vez cada 15 días pero con el correr del tiempo ya lo hacia a diario, sus dedos no alcanzaban para calmar a su caliente concha y los tubos del desodorante eran sus amantes preferidos, y así fue que descubrió el prohibido mundo del chat.

Al principio solo se animaba a introducir algún saludo en las salas generales, no se animaba a responder a los mensajes privados, había elegido como nick el seudónimo «Sra.Raquel» lo creía apropiado y serio, ella era una señora, con el paso de los días su interacción con los chats eran cada vez mas importantes, y pasaba casi todo el día frente a la pantalla de la computadora, de a poco se fue animando y cada día era un poco mas atrevida y osada, no paso mucho tiempo para que solo chatee en forma privada, le encantaba recibir privados de hombres y leer las barbaridades que le decían, sentía gran excitación al saberse deseada y sus pajas se hicieron continuas, incluso llegaba a pajearse dos o tres veces por día, su nuevo nick era «Madura-casada»

Ese martes por la mañana Jorge se fue a trabajar temprano, eran las 7.15 de la mañana, y habiéndose vencido el pago de la luz y las expensas le informo a su esposa que volvería tarde, debía juntar el dinero para hacer frente a sus obligaciones, ella lo despidió con un tibio beso en la mejilla.

Sin perdida de tiempo se fue a su dormitorio y se maquillo de una manera casi grosera, el rojo de sus labios le daban el aspecto de una mujer de la calle, adrede desabrocho un par de botones de su blusa turquesa y se notaba el canalillo de sus generosos senos, quería darle a su amigo una buena impresión, deseaba despertar en el la pasión que ni ella ni su esposo sentían, hoy charlaría con «Lobo-solitario», hacia ya casi una semana que charlaban y ella le había prometido que hoy se conocerían a través de la web-cam, se sentó frente a su PC e ingreso en su sala de chat preferida, el ingresaría a las 11.30 aun faltaba mucho, así que decidió ver porno, le gustaba ver filmaciones de sexo interracial o de maduras con jóvenes, el tiempo paso con gran velocidad, cuando miro el reloj este marcaba las 11.52, con urgencia ingreso nuevamente al chat y busco a su amigo, lo encontró, eso le provoco un gran alivio.

Luego de los saludos de rigor, el hombre le envió una solicitud de cam, ella con las manos húmedas de sudor, acepto, y en su pantalla apareció la imagen de un hombre joven y si bien no era apuesto a ella se le antojo hermoso, tenia su camisa desabrochada y ella veía con gran nitidez el velludo tórax del macho, no pudo evitar sonrojarse por sus pensamientos y mucho menos cuando el joven comenzó a decirle lo hermosa que era y lo sensual que se veía, casi como si fuera un robot respondía a todo lo que el muchacho le preguntaba, y así fue como le contó que vivía sola con su marido, que con el no tenían relaciones, y que ella estaba casi todo el día sola por el trabajo de su esposo, o sea, le contó en diez minutos todo el resumen de su vida, y el hombre supo inmediatamente que había conseguido una nueva victima, no le costo mucho trabajo convencerla para que le de su numero de celular, y de esa manera el atrevido caballero la llamo.

Sentia mariposas en la panza, la voz de el era varonil y grave, le susurraba en el oído los piropos que hacia muchos años no escuchaba, era el caballero perfecto, gentil, amoroso, educado, varonil, y hasta un poco pícaro, la excitaba oírlo, y sin dudarlo acepto cuando el le propuso hacer una vídeo-llamada, se acomodo el cabello y son una amplia sonrisa lo atendió, el hombre noto que la mujer estaba caliente, y no iba a desaprovechar la oportunidad, ya sin disimulo comenzó a alabar su figura, haciendo hincapié en sus pechos, y le decía que la deseaba, eso la humedecía y sus pezones rosados se erguían buscando una boca para amamantar, que si fuera suya la amaría con pasión y la volvería loca con su verga dura, le prometía sexo animal y amor sin fronteras, ella casi sin darse cuenta se vio con los senos desnudos ante la cámara ofreciendoselos a su macho, estiraba sus pezones y estos ya duros le daban un placer inmenso, mientras veía una verga negra y dura en su pantalla que la hacia delirar de pasión, se imaginaba chupando esa verga, la imaginaba dentro de su vagina moviéndose en forma vigorosa, casi podía sentir como su ano se estiraba para dejarlo entrar en ese lugar prohibido para su esposo, pero a el se lo entregaría, lo dejaría desvirgarla por el culo, era de un tamaño normal 15 cm pero a ella le parecía el falo mas glorioso del mundo entero, el pidió verle su concha y ella desesperada abrió sus piernas para el, corrió su bombacha y le enseño la humedad y los pelos de su raja, ella pidió verle los testículos, y el agarrándoselos se los ofreció como si fuese un delicioso manjar, ver esos testículos peludos y del mismo color negro que la verga la enloquecieron y solo bastaron unas pocas caricias de sus dedos sobre su inflamada concha para lograr uno de los orgasmos mas hermosos y poderosos de su vida, mientras veía como la leche salia disparada de aquella gloriosa verga, logro llegar al mismo tiempo que su macho al orgasmo mas pecaminoso y delicioso de su vida.

Ella sentía en su pecho el amor que nuevamente la llamaba, solo sentía un pequeño remordimiento por su esposo, pero era tanta la pasión que habían encendido en su corazón que nada le importo el serle infiel, estaba enamorada, amaba a su macho, amaba a «Lobo-solitario» y se entregaría toda a el, a su nuevo amor.

Todo estaba arreglado, el miércoles a las 11.30 el la visitaría, a esa hora el portero descansaba y nadie lo vería subir, ella para evitar que los vecinos escuchen dejaría la puerta entre abierta y el debía bajar en el 5 piso, para no hacer ruido en su piso el 6to, subiría un piso por las escaleras y sin prender las luces del pasillo ingresaría directamente a su casa, ella nerviosa lo esperaría, el sabia que era casada y no deseaba atraer problemas.

Había trabajado muchas horas el martes y hoy tenia decidido descansar, no tenia muchas ganas de salir a trabajar, ayer había sido un buen día y con lo justo había conseguido el dinero para la luz y las expensas, su esposa lo increpo por eso, le recalco que tenían la heladera vacía, y necesitaba dinero para las compras, se resigno y luego de tomar un pequeño desayuno salio a trabajar.

Ella se baño y se vistió con sus mejores ropas, había decidido ponerse una falda que le marcaba bien su abultado trasero, a el le gustaban las mujeres culonas como ella, también dejo que se noten sus pechos, no se puso corpiño y los primeros botones de la blusa no los abrocharía, de esa manera el podría verle sus gordos senos que tanto le habían gustado, y claramente notaria el tamaño de sus erguidos pezones, había decidido jugar fuerte y seducirlo, durante la noche anterior tuvo que levantarse de madrugada a masturbarse, era tanta su calentura que se había metido un pepino en la concha imaginando el pene de su amante en ella, tan grande era su fiebre que logro introducir el vegetal hasta el tope, y solo así logro calmar su afiebrada vagina en un orgasmo que la encontró apoyada en la mesa de la cocina con las piernas abiertas y llenas de humedad. Volvió a su cuarto, miro como Jorge dormía y no sintió pena ni remordimiento por el.

A las 11.30 hs. en punto una fuerte mano enfundada en un blanco guante hizo sonar el portero eléctrico del 6 A, su corazón desbordaba de pasión, y al levantar el tubo escucho la contraseña «LOBO» esa era la señal que ella esperaba, y sin dudarlo presiono el botón que abría la puerta a su amante, el ya estaba aquí, solo faltaban segundos para poder besarle y abrazarlo, le daría todo su amor y el sentirá lo mismo que ella, estaba nerviosa pero feliz, sintió claramente cuando el ascensor se detuvo en el 5 piso, abrió su puerta y la dejo entornada, llena de nervios espero el ingreso de su amante, solo unos segundos después la puerta se abrió y ella no logro entender lo que estaba sucediendo.

Tres hombres encapuchados ingresaron en su casa, con gran agilidad el primero de ellos se abalanzo sobre ella y la domino de inmediato tapándole la boca para evitar sus gritos de terror y tirándola al piso y con una gran habilidad la maniato de pies y manos, ella no lograba reaccionar, es como si la vida de repente se hubiese transformado en una película donde ella era la protagonista, pero nada de lo que sucedía era real, solo era un film de terror, sin embargo todo era real, tarde se dio cuenta de su imprudencia y que la habían embaucado como a una idiota.

Entre dos la llevaron a su dormitorio, la levantaron en vilo y  la cargaron, en el camino uno de ellos le manoseo la cola con desparpajo, la dejaron atada de pies y manos sobre la cama, vio claramente como revolvían toda la casa en busca de joyas o dinero, no era posible que una persona que viviera en el barrio La Montela no tuviese valores en su casa, solo pudieron encontrar el dinero de la luz y las expensas, pero ellos venían por mas, no iban a conformarse con esas migajas, el mas grandote era un hombre de color al que llamaban Nassir, era la voz cantante y los otros lo obedecían sin chistar, se le aproximo y la interrogo con crueldad.

-Donde esta el dinero gorda puta?….dímelo ya si no quieres que te mate en este instante..

Desesperada, con temor y llena de angustia ella solo podía negar con la cabeza, realmente no había mas dinero en la casa, el negro totalmente enajenado miro a su colega con odio, era la tercera vez que el idiota fallaba, volvió a ella y le puso su cuchillo en la garganta, lentamente le bajo la mordaza y le advirtió que si gritaba la mataría como a un cerdo, ella solo podía gimotear de miedo y angustia, jamas gritaría, no tenia tanto valor para hacerlo.

Nassir sabia que la mujer no mentía, el que había fallado nuevamente era Lobo, su socio, el debía encargarse de ubicar a las victimas y sacarles toda la información posible, del resto se encargarían el y Tobias.

Ya no había nada para hacer en aquella casa, lo mejor seria huir de allí, y buscar una nueva victima, pero esta vez le aclararía al idiota de Lobo que debía ser algo seguro, no estaba dispuesto a volver a prisión por un mal dato, eran una banda de ladrones profesionales y estos eran errores de principiantes, no volvería a suceder.

Cuando iba a ordenar la retirada vio como los ojos de su amigo y compinche Tobias estaban perdidos en las tetas de la mujer, el lo conocía muy bien, Tobias era un soldado de fierro tan fuerte como leal, y de la misma manera era un sádico-degenerado, y ahora en su mirada notaba que nada podía hacer para evitar que viole a la mujer, esos ojos de deseo enfermizo ya los conocía, y solo matándolo podría evitar lo que vendría, el no mataría a su amigo por esa infiel mujer, lo miro y con la cabeza le dio el visto bueno para que haga su voluntad con ella, el sádico sonrió con malicia y con lentitud comenzó a desnudarse, Raquel vio con horror como el hombre se desnudaba frente a ella, y cuando intento gritar pidiendo ayuda sintió nuevamente el filo de una navaja en su cuello.

-Quieta putita, vos no querías pija?,…..bueno ahora te vamos a dar mucha pija jajajajja

Era la vos del tercero, el que nunca había hablado, era la voz de Lobo, su amor. Lloro, suplico, les prometió imposibles, nada los conformaba, estaba echada su suerte, se la iban a coger.

Tobias la giro con violencia y quedo frente suyo la terrible verga del animal, eran una verga de mas de 20 cm dura y emanaba de ella un olor nauseabundo de orines y mugre, le ordeno abrir la boca y chuparle la pija, ella miraba fijamente la potente poronga y resignada obedeció, sintió nauseas al principio pero en pocos segundos ya no sentía el olor asqueroso del macho, sin notarlo se vio chupándole la verga con fuerzas, cabeceaba y buscaba sentir en el fondo de su garganta la verga.

Que le estaba pasando? estaba loca? no podía ser verdad, pero lo era…estaba disfrutando la verga de Tobias en la boca, era una pija gorda y venosa, estaba dura, muy dura y suave, el con su mano agarraba su nuca y la empujaba, la obligaba a comer verga, ella estaba muy mojada, se sintió puta y eso la excito, y mucho mas placer sintió cuando Lobo comenzó a acariciarle el agujero del ano, le había levantado la pollera y vio su desnudez, no llevaba bragas, abrió el culo de la mujer con sus manos, su ano marrón y apretado fue un imán para sus dedos primero y luego para su lengua después, le estaba chupando el culo con deleite cuando ella pidió que la desaten, prometió no portarse mal y hacerles caso en todo.

Tobias se acostó boca arriba quedando su palo enhiesto y lubricado apuntando al techo, Raquel sin pensarlo dio un ágil salto y lo monto, necesitaba sentir ese palo dentro suyo, era una pija real, hacia mucho que ella no tenia el placer de sentir una verga dentro suyo, esa era tal vez la verga mas grande que había visto en su vida, su concha estaba lista, ya estaba mojada y lubricada con su calentura, le latían sus labios vaginales y sus ovarios le dolían, solo se escucho el gemido de la mujer al sentarse sobre la potente verga y sentir como el gordo palo se incrustaba en ella, sintió como cada centímetro de verga la abría buscando el final de su vagina, estaba llena, fue un gemido placentero y largo, su placer basto para lubricar la entrada del pene en ella, Lobo seguía chupándole el culo, ese hijo de puta sabia como mover la lengua, se lo escupía y se lamia su escupitajo, nunca nadie había eso echo en su cuerpo, ya un dedo invadía su recto, luego fueron dos, se ubico detrás y apunto su negro pene al ano virgen de la mujer, sin piedad y de una fuerte estocada le rompió el culo, ella arqueo su espalda, abrió fuerte su boca buscando aire para sus pulmones y se dejo hacer, tenia un macho hermoso en la vagina y al traidor en el culo, ambos le daban un placer inimaginable, jamas en su vida siquiera imagino poder gozar de esa manera, las vergas de los machos se movían a un ritmo lento y acompasado, uno entraba cuando el otro salia, y así volvía a repetirse una y otra vez.

-Que gusto me están dando hijos de putas, los amo, por favor nunca dejen de cogerme, los amo, cojanme con fuerza, si, así, si aghhhhh…..dale hijo de puta empuja, empuja fuerte, rompeme bien el culo,….que ricooooo,,,,,aghhhhh

Su primer orgasmo fue cuando sintió el potente olor de la pija de Tobias, fue un orgasmo pequeño, ella misma intento negarlo, no podía creer que estaba disfrutando su violación, ella era una señora como iba a tener un orgasmo por una maloliente verga?,  no quería creerlo, mas ya luego perdió el control de sus actos y tuvo cuatro o cinco orgasmos seguidos, uno cuando monto la verga y la sintió en su vagina, otro en el preciso instante cuando le rompieron el culo, ese fue el mejor, sentir como se desgarraba su ano al mismo tiempo que su vagina era estirada por la poronga de Tobias, ese orgasmo la llevo al cielo, tenia los ojos cerrados, necesitaba sentir a pleno ese placer, hermoso que le están regalando sus hombres cuando sintió como la cabeza de una pija intentaba introducirse en su boca, Nassir con un falo terriblemente negro y sucio la obligaba a chuparle la pija, el olor a sexo era asfixiante, ella lavo con su boca la mugre de la pija del tercer asaltante, su concha estaba tan abierta por la excitación que casi no podía sentir la terrible verga que la violaba, su culo gozaba con el ir y venir de Lobo que le revolvía las tripas con su cipote, ni en sus mas afiebradas pajas imagino tener tres vergas para ella y todas juntas, podía morir luego, pero esto valía la pena, ya no le importaba nada, solo quería sentir como sus machos la usaban, y si ellos lo deseaban se transformaría en su puta, gemía como una zorra, pedía por favor que se la cojan con mas fuerza, rogaba que no le saquen de sus agujeros las duras vergas, les pedía por favor que se muevan y se la cojan, y así llegaron casi todos juntos al final de la orgía, el primero en acabar fue Lobo que con tres potentes chorros de semen le lleno el culo, el segundo fue Nassir, que tomándola de la nuca le introdujo el pene hasta la garganta y allí le deposito su carga de espermatozoides obligandola a tragarse su corrida, y por ultimo mientras le chupaba las tetas y lograba hacerlas sangrar Tobias le inundo la vagina de semen tibio, ella al sentir la leche de los machos entro en una vorágine de placer y locura, se desvaneció, era mucho el placer, mas de lo que ella pudiese soportar, se despertó cuando nuevamente la usaron para vaciarse en ella, había perdido el sentido del tiempo, ya no sabia que hora era, sus machos eran insaciables y varias veces cada uno la usaron para vaciar sus testículos, su culo al menos fue cogido en cinco oportunidades por diferentes machos, ellos se turnaban para usarla, cada uno de ellos probo su vagina su boca y su ano, al menos una vez, Tobias le rompió el culo tres veces, la ultima vez fue tanto el placer que sintió que volvió a desmayarse, despertó al sentir el cálido chorro de orina que caía en su cuerpo, los tres machos parados a su alrededor la estaban meando, potentes chorros amarillos y de un olor asqueroso caían en su cuerpo mancillado, la obligaron a abrir la boca y mearon dentro de ella, la obligaron a tragar, ella mientras bebía la orina tuvo su ultimo orgasmo, estaban marcando su territorio como si fuesen perros o tal vez LOBOS.

Cuando Jorge llego eran las 21.45 hs. cuando abrió la puerta del ascensor vio la puerta de su casa entornada, estaba abierta, llamo a su mujer y nadie le contesto, vio con susto como su casa estaba toda patas para arriba, se dio cuenta de inmediato que los habían robado, su corazón casi se detuvo cuando pensó en su mujer, corrió al su dormitorio y un olor nauseabundo lo recibió, su mujer desnuda estaba tirada en la cama, estaba casi inconsciente, prendió las luces y vio como de su ano y de su vagina chorreaban restos de un liquido espeso y blanco, sus pezones sangraban al igual que su dilatado ano, en su cara tenia también restos de semen, noto que aun el semen estaba tibio, corrió levanto el teléfono y llamo a la policía.

Raquel debió permanecer internada por dos días por los abusos a los que fue sometida, ella nunca le dijo a su enfermera que sentía un gran placer cuando le aplicaba la pomada cicatrizante en el interior de su recto.

Habían pasado ya dos semanas del robo, la policía nunca pudo dar con los delincuentes, habían acordado que en un descuido ingresaron al edificio y al azar entraron a un departamento, por desgracia le había tocado a ellos, su esposa testifico que al sentir ruidos en el pasillo creyó que era su esposo y abrió la puerta a los delincuentes que se quedaron todo el día abusando de su honor.

Los vecinos de nuestro edificio somos muy unidos, entre todos hicimos una vaquita y pagamos las expensas y la luz de los vecinos del 6 A.-