El esclavo
Cuando me mudé con mi mejor amigo no imaginé que esto pasaría con su hija .
Me llamo Kevin, tengo 30 años, mido 1.78 y peso 60 kilos, soy delgado y moreno, no soy musculoso pero trato de mantenerme en forma, actualmente me mudé de ciudad a Monterrey por cuestiones de trabajo, yo soy ingeniero en sistemas y trabajo en una maquiladora, pero me mandaron a la sede para organizar sus sistemas y actualizar todo, desgraciadamente no tengo donde vivir así que la primer semana me quedé en un hotel, hasta que un buen amigo me llamo, me invitó a quedar en su casa, a Rodrigo lo conozco desde niño, crecimos en el barrio juntos y aunque es 4 años mayor que yo siempre nos llevamos muy bien, el estaba casado y tenía una hija, a su novia la embarazó cuando aún estaba en la prepa así que fue papá joven, Daniela su esposa tiene 32, es una mujer muy guapa pero no tiene nada especial, pero su hija es una muñequita, se llama Jazmín y tiene 16 años y no la veo hace casi 8 años, cuando la conocí era hermosa, cabello totalmente chino, piel blanca, ojos marrones y delgada, imaginaba que no había cambiado mucho en este tiempo.
Al llegar a la casa de Rodrigo me saludo con mucho gusto, su esposa me invitó a pasar
Rodrigo: mi hermano, como estás, que tal el trabajo
Kevin: Ya ves, me mandaron de la empresa a poner orden pero nunca se preocuparon por darme donde quedarme, mucha gracias, y Jazmín?
Rodrigo: no debe de tardar en llegar de la escuela
En eso iba entrando la niña, no tan niña ya, Jazmin había crecido mucho, media 1.68, era alta para una niña de 16 años, hacia atletismo así que su cuerpo era simplemente perfecto, su cabello seguía muy chino, lo llevaba largo hasta la espalda y se veía como cabello de muñeca, su cara seguía siendo muy dulce, una boquita pequeña pero labios gruesos y rojos, ojos marrón pero muy finos, una nariz respingadita, piel tan blanca como siempre, sin una sola imperfección, sus pechos eran grandes, fácilmente mis manos los abarcaban con cierta dificultad, cintura de abeja y caderas amplias, un culito bien firme por el atletismo, piernas firmes y marcadas pero sin verse masculinas, llevaba una blusa de cuello alto, una falda a las rodilla y tenis, se veía hermosa, cuando se presentó se escuchaba tímida, como si no acostumbrara a tratar con hombres, me enamoré en cuanto la conocí pero de forma platónica, yo era un adulto y ella una niña, no quería acabar en prisión y acabar con una gran amistad por una calentura.
Ese día convivimos los 4 juntos, Jazmín apenas me dirigía la palabra, se vino la noche y decidí salir un rato a conocer la ciudad, Rodrigo decidió quedarse porque se sentía mal, salí en mi coche y estuve paseando y conociendo un rato, volví a la casa a eso de la 1 am, Rodrigo me había dado una copia de la llave, yo dormiría en el cuarto de visitas en el piso de abajo, las recámaras estaban arriba así que no molestaría a nadie.
Al entrar escuché ruido en la sala, era Jazmín quien veía la tele en volumen muy bajo, veía un Dorama, una de esas series coreanas que son populares entre las adolescentes, me pareció algo tierno, más por como iba vestida, llevaba una pijama de pantalón largo de color naranja, una blusa de tirantes rosa con Bob esponja en ella, pantuflas de oso y su cabello suelto y alborotado, se veía que no traía sujetador pues su pechos se veían bien a través de su pequeña blusa.
Kevin: hola Jazmin, pensé que estarías dormida
Jazmín: no podía dormir, así que baje a ver la tele, no le molesta señor Kevin?
Kevin: no claro que no, yo iré a dormir, no te desveles y dime solo Kevin, tu papá y yo somos casi hermanos.
Me fui a mi cuarto y me quite la ropa, quedé en puro bóxer y me acosté, no pasaron ni 10 minutos, aún no me dormía cuando escuché que tocaron la puerta, era Jazmín
Jazmín: hola señor Kevin, ya se durmió?
Kevin: no querida, aquí sigo, y enserio no me digas señor
Ella se acercó a mi y se sentó a mi lado, yo estaba poniéndome nervioso de tener a una adolescente en mi cuarto
Jazmín: es que, quería pregúntale algo
Kevin: que quieras pregúntame querida?
Jazmín dudo un momento y después soltó la bomba
Jazmín: quería saber cómo es el pene de un hombre, casi todas mis amigas tienen novio y ya lo han visto, yo no tengo porque mi papá no me deja pero cuando supe que vendría quise aprovechar y ver cómo es el pene de un hombre
Yo me puse pálido al escuchar esa petición, no podía creer que una niña tan dulce con carita de muñeca pudiera tener interés en esas cosas
Kevin: mmm Jazmín, entiendes lo que estás pidiendo? Soy un adulto y soy amigo de tu papá
Jazmín: por eso, porque se que usted no se aprovechará de mi, entonces puedo verlo?
Me la pensé un momento y decidí cumplir su deseo no son antes pedirle que no le dijera nada a su papá.
Me destape y ella vio que solo tenía mi bóxer pero la situación era tan morbosa que ya tenía una erección, mi verga parada media 18 cm, entonces me baje el bóxer y quedé completamente desnudo frente a ella, ella no dejaba de mirarlo y puedo jurar que la vi relamerse los labios
Jazmín: woow Kevin, si que estás bien dotado, oye y me dejarías tocarla?
Yo no sabía hasta donde quiera llegar pero me dejaría llevar, la dejé que lo tocará, empezó a masajearlo torpemente, casi sentía como jalaba la piel de mi miembro con brusquedad, tomé su pequeña mano y le enseñe como hacerlo, entones sin decir nada se lo metió en la boca, no pensé que una nena así supiera lo que era una mamada pero en su boca podía sentir su lengua, sus dientes, como rozaban con la cabeza de mi verga, estaba al borde del éxtasis al sentir su boquita virgen, tome sus cabellos rizados y la ayude a meter y sacar mi verga de su boca, sentí que daba arcadas, supongo que al ser virgen jamás había tenido una verga (mucho menos una de 18 cm) en su boca, cuando sentí que iba a terminar la hice que parara, no quería acabar en su boca y que se enojara conmigo.
Kevin: ahh querida espera, es que sino voy a soltar mi leche en tu boquita
Jazmín: mmm mejor suéltala en mi conchita no? Te gustaría hacerme el amor? Es que me siento rara y como que caliente y no quiero que nos quedemos así nada más
Con sus palabras mi verga empezó a palpitar, la empecé a besar en los labios, apretaba sus pechos, efectivamente, mis manos no los abarcaban, le quite la blusa y empecé a lamer su pezones, estaba bien parados y eran rosados, se veían hermoso con sus pechos blancos, ella daba pequeños gemidos, tratando de no hacer ruido, baje besando su estómago, su abdomen, su cadera, su piel era lo más suave que había besado jamás, entonces empecé a bajar su pantalón, llevaba unas bragas rositas con dibujos, fue lo más tierno que jamás vi, era raro para una muchachita de 16 pero quién era yo para juzgar, empecé a comerle la conchita, la cual por cierto estaba perfectamente depilada, sin un solo bellito que desentonar con la perfección de su vagina, metía mi lengua y pude sentir como se empezó a mojar, me puse sobre ella y apunte mi verga a su conchita, entonces la mire
Kevin: mi amor, estás segura de que quieres perder tu virginidad conmigo?
Jazmín: SII porfavor, es que me gustas mucho la verdad, desde que te conocí siempre pensé que eras muy guapo
Entonces acaricie su conchita con mi verga y empecé a meterla lentamente, ella empezó a quejarse de dolor, apretaba mis brazos y clavo sus uñas en ellos, en cuanto entró toda me quedé ahí un minuto, me pareció raro no sentir su himen romperse, de seguro se masturba y lo rompió ella misma, pero no iba a admitirlo jamás, sus papas eran muy conservadores y religiosos, empecé a meter y sacar lentamente, ella cerró con fuerzas sus ojos, pero se veía que le gustaba, estuvimos casi una hora así, en la misma posición, no quise arruinar su primera ves con posiciones sexuales muy atrevidas, entonces sentí como mi leche estaba por salir
Kevin: mi amor, me voy a venir, lo quieres adentro?
Jazmín: ahhh ahhh siii por favor, quiero sentirlo adentro no te preocupes, hoy no soy fértil!
Le di más fuerte y entonces sentí mi leche llevar su útero! Fue increíble la sensación, me gustaría probar más posiciones con ella pero ya habría más tiempo después, al acabar ella jadeaba cansada, me besó con dulzura en los labios
Jazmín: gracias por esto, te amo
Kevin: yo también te amo pequeña y no le digas a tu papá por favor
Jazmín: no te preocupes, de mi nunca lo sabrá
Se vistió y salió del cuarto, yo dormí desnudo esa noche.
Cuando amaneció me vestí y me fui a trabajar, el día transcurrió con normalidad, acomode las computadoras de la empresa y el sistema, entonces me llegó un mensaje, era de Jazmín:
“Hola Kevin, crees que podrías pasar por mi a la casa de una amiga?”
Decidí ir por ella, cuando la recogí iba vestida diferente al día anterior, ahora llevaba una minifalda de mezclilla y una blusa tipo top, no entendí lo que pasaba, subió al carro y me dijo
Jazmín: Kevin crees que podrás comprarme una blusa hermosa que vi en el centro comercial? No es tan cara, solo cuesta 499 pesos
Me reí con cierto nerviosismo, pensando que ella bromeaba
Kevin: Cariño, está muy cara, pero luego te compro otra cosa va
Jazmín: mmm creo que no entendiste, me vas a comprar la blusa ahorita o sino le muestro esto a mi papá
Me mostró un vídeo de su celular, no se cómo había grabado la noche anterior cuando me la cogí, me quedé pálido y siento que mi corazón se detuvo un momento
Kevin: ammm Jazmín, que es eso? Porque grabaste eso?
Jazmín: antes que llegara deje mi teléfono en tu cuarto con detector de movimiento, cuando entramos pies grabó como me “desvirgaste”, así que si no quieres que se lo muestre a mi papi vas a hacer todo lo que yo te ordene, básicamente a partir de hoy eres mi esclavo, y si tratas de decirle algo antes tu, imagina a quien me creerá más, a su hija adolescente menor de edad, bien portada o a su amigo al que no ve hace años?
Entendí mi situación, la niña no era una muñeca, era una pequeña perra manipuladora, lo planeo todo, entonces no se desvirgo sola sino que de seguro ya ha cogido antes y solo me uso. No tuve más remedio que acceder a ser su esclavo
La lleve al centro comercial y compro su dichosa blusa, me pidió mi opinión y me hizo acercarme a los vestidores, entonces me jalo dentro del vestidor, estaba solo en ropa interior pero ya no era la linda ropa de antes, está ves llevaba lencería sexy, una tanga roja de encaje con moños y un bra con transparencia que dejaba ver perfectamente sus pezones paraditos
Jazmín: te dije que harías lo que te ordenará, y ahora te ordeno cogerme bien rico papi!
Estaba algo molesto pero supongo que también sacaría algo de provecho de mi situación, me quite la ropa y vi que su tanga tenía abertura En medio para que fuera más fácil de cogermela, entonces vi a un lado su mochila de la escuela, ahí se veía que llevaba su otra ropa, bragas normales, de color blanco y un brasier que cubría perfecto sus pechos, la muy perrita usaba ropa sexy afuera de la casa y antes de llegar se cambiaba, seguro que esconde su otra ropa en su cuarto o algún lado para que sus padres no la vean.
Nos empezamos a besar, ella bajo y me empezó a dar una mamada aún mejor que antes, era obvio que tenía muchísima experiencia, entonces con su mano empezó a apretar mis testículos, era doloroso pero ella me dijo
Jazmín: cállate esclavo, imagina si haces ruido y alguien nos ve, mínimo te vas a prisión por violar a una niña de 16 años
Era odiosa, manipuladora pero tenía suerte de darme la mejor mamada de mi vida, entones se paró y se puso de espaldas
Jazmín: quiero que me cojas por el culo y no hagas ruido esclavo
Acomode mi verga en su culito, abrí sus hermosas nalgas e hice a un lado el pequeño cordón que hacía de hilo de la tanga, entonces se la metí por el culo
Jazmín: ahhh que rica verga tienes esclavo, me voy a divertir mucho contigo ahhh siiii dame duro papi!
Kevin: ahhh si que rico putita, no imaginé que fueras tan puta
Entonces saco mi verga de su culo y de nuevo apretó mis testículos
Jazmín: aquí quienes la puta eres tú, eres mi puta y me vas a complacer en todo lo que te ordené y por amarme así se te acabó la diversión
Se vistió con su otra ropa, era un vestido de girasoles, huaraches y una diadema amarilla y salió del vestidor me dejo con la verga parada y a media cogida, me dolían los testículos, me vestí y con cuidado salí sin que nadie me viera, la busque y la vi ya en mi carro, había guardado su maleta en mi carro
Jazmín: ahora tú vas a cuidar mis cosas cuando estemos en casa, se me agotan los escondites para que mi mamá no me diga nada, llévame a casa y si papi pregunta algo diré que amablemente me compraste una blusa que me gustó.
Y así fue como empecé a vivir con mi mejor amigo y me volví en el esclavo de su hija, pero pronto se presentaría la oportunidad para darle la vuelta a esto.
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