El Incubo del Internado – Sangre Nueva 4

Brat sigue en sus locuras, adentrándose al territorio de las brujas y los secretos del director Jay.
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…

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Que decir, esa noche sería muy intensa, tras ver a mis padres coger, y estar decidido a cogerme a las hermanitas que tengo, si bien que las vi (al menos a Lizy) desnuda con unas formitas que deseaba disfruta, meterle la verga hasta el fondo, cogérmela como si no hubiera mañana, me distraje demasiado, pero volvería al mercado para recoger el talismán, solo que al llegar pude ver como el lugar estaba cerrado, lo cual no me gustó, por desgracia ignoraba los horarios, por ello seguí revisando esperando encontrar algo, todo era bastante siniestros, cruce las partes que conocía, para irme metiendo en pasadizos más feos, una parte que parecía peligrosa, aunque se hallaba sola, era alguna clase de vecindad, ahí encontré unos cuantos locales abiertos, pero estos tenían banderines color negro, lo cual me llamó la atención, y pude ver que había una preciosa rubia, con cuerpo esbelto, quien al verme preguntó si se me ofrecía algo, dejando ver un vestido que se veía como un camisón que fácilmente podría caerse, de hecho notaba que no traía sostén, lo que me incitaba a intentar verle las tetas, casi apostando que tendría unos pezones rosados, o que seguro estaban duritas por el frio, ella se daría cuenta, y cruzaría la pierna, me daba la impresión que no traía ni una tanga, lo cual me inquieto por lo que tomaría ventaja para “regañarme” pero yo mencioné lo ocurrido, a lo que esta se burló un poco, pues debería llegar antes, cuando alguien se asomó, era la misma rubia de cuerpo voluptuoso, quien aparte usaba un atuendo similar, que parecía a punto de reventar, era exquisito,  se me ponía bien dura la verga pensando en que deseaba metersela.

Brandy, no molestes al cliente, ah, pensé que no volverías, pero es como dijo Jay, eres algo “especial”, bien,  déjame lo que traigas, espero que sea cabello – dijo la mujer y le entregué el mechón que lo vio con dudas, mirándome con desconfianza, aunque no podía quitarle los ojos de encima, mas porque la tela parecía a punto de romperse por culpa de los pezones.

Me pude haber confundido con algunos, es que mamá también usa su cepillo con mis hermanas menores y no tenía tiempo que perder, se vería raro de mi parte – le dije para evitar las dudas.

Bien, mientras la mayoría sea de ella no habrá problemas, pero puede que tu papá se ponga incomodo con tus hermanas, ellas lo podrían ver diferente, mejor cuídalas, si son pequeñas no habrá problemas, pero cuando vayan creciendo podrían comenzar a sentirse atraídas por tu viejo, mejor quítale el talismán cuando se hallan arreglado las cosas con tu madre, espéranos, ya casi tenemos todo listo, solo es cuestión de acabar el ritual, es buena hora, realmente – dijo un poco bromista la mujer, y se retiró llevándose a la preciosa rubia, la otra.

Yo me quedé inquieto, esperando ahí, pero no me pude contener, empezaba a ver algunas cosas, papeles con supuestos pergaminos de hechizos, cosas mágicas, talismanes, también piedras con algunos conjuros, algunos para la suerte, otros para la fortuna, algunos para la salud, toda clase de objetos, sin embargo no me pude contener, mi curiosidad era demasiada, así que me fui a asomar dentro para ver que hacían. Había todo un laberinto dentro, era bastante genial, aunque un poco aterrador, pero pude seguir el rastro, aunque no lo parezca soy bueno con las clases militares, me han enseñado muchas cosas importantes, así podría ser indetectable en los baños de las chicas, o podría defenderme de los pobres matones de mi escuela anterior, comparados con los nuevos, son un grupo de putitos, volviendo al tema, el lugar se veía tétrico, como si el lugar estuviera abandonado, fui caminando con cuidado, por eso fácilmente encontré mi cometido, un cuarto donde tenían marcado un circulo en piedra con no se qué tantas cosas, se notaba que era para hacer hechizos, y pensé que le pondrían sangre, de hecho lo hicieron, aunque de un pollo muerto salido de la carnicería cercana, pero eso no sería lo importante.

Dentro las 2 mujeres estaban ahí sobándose los coños de una forma bien sensual, mm, me podía llegar el olor a sexo, también sus tetas estaban al aire, era una visión increíble, estaba con ganas de probarlas, en especial las grandes que se movían de manera hipnotizante, de hecho casi no noto que una tercera casi a mi lado que se estaba corriendo, dejando salir un torrente de sus jugos, pero lo que me sorprendería es que apenas tendría unos 13 años, además estaba casi desnuda, dejándome verle todo, se tocaba con fuerza, trataba de ahogar sus gemidos, aunque se veía tan deliciosa, pues tenía un culo gordo, unas tetas grandes, un coño con apenas unos pelillos, se veía tan rica, como si se ofreciera para que le diera con todo, se me antojaba ir a meterle la verga, pero se suponía que yo estaba fuera, esperando por el conjuro o talismán, ya no sabía, solo quería disfrutar de esa vista, que wow, antes que se diera cuenta estaban escurriendo sus mieles sexuales las otras, como si prepararan todo, en serio que el lugar se llenó de un olor especial, se me paraba la verga bien duro, quería hacer algo como fuera, mientras unas velas se encendían de repente, iluminando todo de color azul.

Entre gemidos se fue llenando el lugar de un aire que me hizo ponerme aun más duro, como fierro, me dolía abajo de tenerla dentro, y lo que estaba grabado en el suelo se fue tornando como que extraño, me daba la impresión de que un humo saliera de esta cosa, aparte que se escuchaban unos susurros, una clase de palabras que me helaron la sangre, no sabía que sucedía, pero me estaba poniendo demasiado caliente, quería sexo, miraba a la chiquilla de 13 con ganas de cogérmela, meterme a romperle el culo, mientras le agarraba todo, y es que tenía un par de tetas muy grandes, casi parecían manzanas, cinturita estrecha, como la que odian muchas gordas que tragan por la frustración y unas nalgas enormes que me daban ganas de usar para masajearme el ganso, su cara estaba normal, pero no me quejaba, estaba ligeramente bonita, seguro que mamaba la verga de maravilla, tenía unos labios carnosos, casi podía soñarla lamiéndome como una golosa, saboreando cada parte de mi carne, pidiéndome mas, dejando que me corriera sobre sus chichis, realmente estaba por delirar con tener sexo con esa chica, igual a como soñaba cogerme con las otras compañeras de escuela que tuve antes, de hecho era difícil de resistir si ella misma estaba desnuda metiéndose los dedos dentro de una manera tan viciosa, estaba perdiéndome en esa visión, casi veía fantasmas de ellas alrededor mío, ofreciéndome sus coños para disfrutar, estaba teniendo un sueño húmedo despierto, aunque eso no era todo.

Una vez que acabaron con eso, empezaron a poner más cosas, en el centro unas flores, también los pelos de mis hermanas, quemaban inciensos o cosas así, olía extraño, las 2 tipas hacían rezos o conjuros, eso no me terminaba de agradar, quemaban cosas en torno a una piedra amarilla, pero no me importaba, quería seguir viendo cosas sensuales, pues parecía que las sombras se movían, viéndose como si estas cogieran en el aire, mientras que la bruja más joven se quedaba en medio desnudita, casi esperando porque una verga la hiciera suya, lo cual pasó de cierta forma, pues entre canticos o que se yo, es que sacaron un pito de mármol y ella se empezó a penetrar a sí misma, siendo como si cogiera con el viento, lo cual me hizo soñar, en serio.

No pude evitarlo, pero antes que me diera cuenta estaba con una alucinación bastante dura, más que mi ganso cuando me saco la leche, imaginando que era yo quien se la clavaba, viendo como me ofrecía los pechos para que se los mamara, mientras se aferraba mi de manera total, como si me marcara igual que una perra, usando sus jugos en vez de orina, casi podía oírla gemir al tiempo que iba restregándome sus tetas sobre mí que me hacían calentar más, jugando con su boquita de manera deliciosa, mientras su cuerpo se iba dejándome sentir cada parte de ella, mirándome de una manera que no parecía normal, tan enloquecida en el sexo, que me sentí perdido, estaba loco por cogérmela, deseaba llenarle el coño de mi leche de macho. Por eso tendría que hacer un esfuerzo, me tuve que alejar, para volver de alguna forma a la tienda, y sentarme, pero pude ver en sueños que estaba en la cama, al lado de una niña, una que me recordaba a la que vi, aunque todo estaba tan oscuro, y la estaba penetrando de nuevo, o quizás era al revés, ella me estaba dando sentones con su precioso culo, dándome un gusto inesperado, pues lo admito, soy Casto, y si, así se le dice a la virginidad de los hombres, me molesta que me digan virgen, suena de mujeres porque lo es.

Como fuera el caso estaba gozando de mi primer encuentro, una chica me estaba violando prácticamente, pero no me molestaba, el calor era increíble, su coño me la estaba chupando como si fuera una boquita, mientras su pechos rebotaban en su movimiento de cadera, sin duda era una locura, que me estaba encantando, quería mucho más, seguir sintiendo eso tan fuerte, más en ese instante me beso, y su lengua llegó hasta mi garganta como si fuera un tentáculo, era una locura, pero sentía ese cuerpo tan sexy entre mis dedos, sus tetas restregarse sobre mí, era el mejor momento de mi vida, aunque fuera un sueño, realmente lo estaba viviendo, cogerme a alguien, sintiendo lo mismo que en el sexo, y me preguntaba cómo era posible, miento, estaba gozando la mejor sensación de mi vida, era tan rico ese sueño, me iba a correr hasta que no pudiera mas, estaba cogiéndome a, no sé quien rayos, pero se sentía tan genial, quería mover mis caderas, pero no, ella tomaba el control de todo, dejándome disfrutar de sus jugos sexuales que no dejaban de salir, me empapaba, carajo, creo que se estaba orinando, incluso el lugar se llenó de otro olorcito, aunque seguía sintiendo que era observado por alguien más, y al voltear me pude dar cuenta que varios ojos estaban sobre mí, y lo peor, la chica era algo demoniaco, me dio miedo, en eso estaba cuando pude sentir algo en mis hombros…

Despierta muchacho, estás bien – decía la rubia voluptuosa despertándome.

Me duele la cabeza – dije algo somnoliento, mientras mi cuerpo se calentaba.

No sé qué pasó, la mente se me puso en blanco, pero sentí rico, y creo que por momento fue una alucinación, pero la tipa de enormes tetas comenzó a mamarme la verga, dándome un gusto, seguía la sensación de placer y wow, fue algo exquisito, usaba su lengua con una técnica de lujo, pienso que estaba soñando, aunque recuerdo un poco.

Vamos, rápido, sácale la leche, con eso se calmara – decía la otra rubia de cuerpo mas esbelto, apenas cubierta por un camisón que no ocultaba mucho su cuerpo.

Aunque de momento igual sentí algo de carne en mi boca, pero no estoy seguro, imagino que le chupe la teta a la brujita de 13 años, porque no había de otra, seguía escuchando a la otra rubia decir algo como:

Rápido, sáquenle el diablo al mocoso, rayos, no sé como uno se escapó, seguro que luego se enojan si no se arregla esto, ya nos metimos en problemas muy serios, ha – decía la rubia chichona y la oía a la distancia, antes de hacer algo, y sentí en la boca algo jugoso que me escurría, an, era una locura de las buenas, haciéndome sentir mucho mejor.

Antes que me diera cuenta me terminé corriendo, la tetuda esa era buena mamando, todo parecía un sueño una especie de visión, tenía ese cuerpo desnudo casi entre mis manos, tocándole por unos segundos, logrando asustarla y pude sentir los pechos alejarse de mí, aunque tenía ganas de cogérmela, en serio, su figura era tan sexy, aunque me sentí algo aliviado cuando dejé de tener fiebre, llegando a escuchar: rayos, el chico estaba aquí ¿verdad? no pudo haberse metido, quizás lo hizo y se regreso, como sea, por esto no se nos invita a las aquelarres en el internado, desde ese accidente tampoco hay chicas, deja eso, ahora que hacemos con el chico; poco me importaba eso pude sentir como una mano me estaba masajeando la verga mientras me besaban con pasión, y por inercia toque algo calientito, redondo sobre mis manos, era una sensación indescriptible, casi como si estuviera cogiendo, y pude verla, en medio de todo, la brujita joven estaba sobre mi haciéndome sentir tan bien, se restregaba a mí, me sacaron un poco la ropa para que ella se frotara directamente, era como si estuviéramos cogiendo, solo faltaba que mi verga se la metiera, pero eso no sucedería, aunque el tallar de su sus tetas o el peso de sus nalgas era de lo mejor, logrando que en breve me volviera a correr, dejándome fuera de control por poco tiempo.

Listo, con esto debe estar, un masaje de cuerpo completo para que el putito se calme – o eso crei que decía la guarrilla de 13 años, mientras se paraba.

Despertaría solo unos minutos después, y me explicarían que olí algo con lo que hacían los talismanes que me mareo, o eso se inventaban, no me importó, con astucia les hice prometer que luego me harían favores, cosas pequeñas, al menos eso porque de lo contrario las acusaría de usar cosas peligrosas, traté de sonar lo más normal, como ellas, aunque perdí un poco el control cuando salió Veronica, la joven brujita, que ahora estaba usando unos shorts de mezclilla cacheteros y un top cortito, se veía perfecta para una nueva mamada, incluso se portó linda, coqueta, como si quisiera que la invitara a salir, cosa que no pude evitar, aceptando con gusto. Por suerte la rubia más delgada tenía una motoneta, así que me ayudó a llegar a la última estación del camión, debo admitirlo, apenas estaba vestida, y no pude evitarlo, mi verga se restregaba en su culo que por momentos se veía a mi alcance, pero me detuvo.

Deja eso pequeño pervertido, no soy para ti – dijo Brandy un poco molesta, aunque me daba la impresión que olia a algo demasiado caliente, estaba tieso.

Perdón, pero como quieres que me ponga si parece que solo usas eso, estoy muy caliente y con ganas de ver si traes sostén – la acerté a decir sin poder contenerme.

Nada de eso, podrías intentar lo que quieras, pero que sea con Veronica, esa cría seguro que se deja coger cuando quieras, si es bien caliente, una novata que no le vendría mal coger con alguien, pero no querrá a un putito virgen – me dijo algo odiosa la bruja.

Pues ya veremos, que si busco ser como el director, y que ninguna vieja se me resista – le dije molesto mientras le agarraba las tetas, y las sentí bastante ricas.

Deja eso, que solo el director podría tomarme – me dijo mientras nos deteníamos un poco, pero luego volvió a avanzar y agregó: antes cometí un error, me dejé llevar por las viejas, pensé que podría conseguir algo mejor, pero me equivoqué, ahora quisiera haber seguido en la escuela como la bibliotecaria, así tendría un lugar con Jay, ese hombre es terrible, pero es quien más me ha hecho sentir placer en toda la vida.

Lo sé, le decimos la bestia – le aseguré emocionado.

Ese comentario divirtió a la bruja, pero no me dijo nada más, pues justo llegaba a la estación, ella se despidió diciéndome un par de cosas, parecía desesperada por volver con el jefe Jay, y me estaban dando ganas de verla empalada por este, aunque eso lo pensaría después, y pude regresar al internado, con respecto al talismán, me dijeron que se lo entregarían a la chica, y ella me lo daría cuando saliéramos, pues el conjuro debía fijarse, pero todo salió demasiado bien, aunque no siempre era así, parece que hoy hubo problemas.

Volvería al internado, llegando cerca de media noche, todo había salido demasiado, y como tenia aun dinero, pues me hicieron un descuento, decidí comprarme un burrito en la tienda frente a la escuela, me encanta comer esa cosa, sabe tan rico, y no es por algún gusto gay con las cosas alargadas de carne, pero una vez que acabé, decidí entrar, aunque pude notar como afuera estaba un carro negro, lo cual me hizo pensar en infiltrarme dentro sin que me vieran, sería sencillo, al revisar, el chofer estaba dormido como tumba, así que pude saltarme la barda y ver cómo me metía a los dormitorios, o eso pensaba hacer cuando decidí revisar algo, la dirección, donde para mi fortuna estaba abierta, tuve que fijarme bien, todo estaba oscuro, pero a un costado una luz, eso me emocionaría, seguro estaban haciendo otro ritual, por lo que me fui a acercar para notar algo, un cuarto oculto, el de los rumores, realmente era algo especial, un aula donde había grabados y cosas infernales, el aire se respiraba diferente, pero no era todo, un par de tipos hacían cosas, uno filmaba, pero ¿qué? Tuve que acercarme más para ver mejor, ahí se hallaba una tipa a punto de dar a luz, también una mujer de cuerpo bien sexy cogiendo con el director, en serio que este se la pasaba con puras bellezas, haciendo toda clase de cosas sexys, no sé cuánto tiempo estuvo ahí, pero súbitamente se estaba corriendo llenándole la vulva de leche, logrando que esta se corriera, mientras ella gemía como una zorra, le agarraba las tetas, que eran grandes y muy redondas, el cabello lo tenía largo, negro, su cara no era hermosa como las de otras, pero el resto de su figura era un placer verlo, las tetas como naranjas, su vientre plano, sus piernas de lujo, en serio, que ganas me daba de poder coger con alguien así, mas cuando ella perdida en el deseo paso a sujetarse a su cintura aferrándose a este de tal forma que parecía que se le metía mas profundo, llegando hasta el límite, se le veía tan caliente, en serio, como me daba envidia, mas cuando le metieron algo por el culo a la tipa, pues el director le abrió las nalgas, y en ese momento una chica preciosa, un poco mayor que yo le fue a enterrar algo, haciéndole entrar en un estado de frenesí, volviéndola loca, la tuve que ver cogiendo más duro, el director empezó a aumentar el ritmo, mientras ella gritaba de placer, pero nada de eso salía de los muros, estaba haciendo un escándalo, uno bastante duro, parecía que se intentaba fusionar con su macho, quien hacia lo posible para hacerla estallar de placer, pero lo más rico es que la chica a un lado se veía igual de caliente, comenzando a sobarse la raja de tal forma que se sacaba la miel, sujetándose el resto de su cuerpo como si tratara de mantenerse cuerda, pero eso era difícil, aparte que estaba preciosa, rubia de largo cabello rubio, con un cuerpo esbelto, me recordaba ligeramente a la Brandy, es brujita, y por momentos me pareció que la llamaron Lexi.

Antes que me diera cuenta la muchacha estaba bañando con su corrida aquello que estaba en el suelo parecía una pintura de algo maligno, se empezaba a tocar de manera viciosa, dejando ver su preciosa figura, aunque no fuera tan voluptuosa, aparte usaba unos tacones que le hacían ver tan sensual, en serio me estaba dando una calentura tremenda verla, en especial cuando escuchaba sus gemidos, su cuerpo agitarse por una fuerza sexual que no terminaba de comprender, parecía poseída por un demonio sexual, perdiéndose en alguna clase de delirio, por momentos creí que se elevaría mientras era penetrada para bañar con todo por medio de sus jugos, pero no paso, aunque sí que se corrió de manera abundante, luego se alejaba, mientras que el director en su ritmo sexual empezaba a dejar escurrir sus corridas, no sé como lo hacía, pero estaba teniendo múltiples orgasmos, todos llegaban al vientre de esa tipa, quien igual tenía sus momentos, escurriendo como si estuviera orinándose, trataba de fijar sus coño, para que todo se fuera dentro de ella, era en verdad un placer, ni la mejor porno que hubiera visto se comparaba, y carajo, el director estaba bien dotado, hasta algo se me hacía que estaba mal con él, porque por momentos se me figuraba que tenia verga de caballo, pero con eso basto para que la tipa terminara corriéndose de tal forma que dejó en el suelo algo más aparte de la mezcla de su miel, el semen, también hubo un poco de sangre, luego de ello dejaron que esta callera al suelo inconsciente.

Después de eso se llevaron a la tipa, no me di cuenta, pero estaba el mismo sujeto de antes, quien llegó con ese general días atrás, y le diría algo como: según si esto es cierto, conseguirás una receta para el vigor, con esto el hijo del general dejará de ser un niño débil y enfermizo, espero que funcione, aunque sigue sin haber gente que lo crea, pero hay resultados.

No podía creerlo, el puto gobierno estaba haciendo tratos con la brujería, o algo así entendí, parece ser que el director es el enlace con esto, carajo, no puedo creerlo pero aparte la tipa esa era una convicta, la sacaron arrastrando, creo que mató a sus hijos y esposo, con tijeras le cortó el miembro a todos, estaba loca, por eso la usaron de sacrificio, la dejaron fuera casi como un muñeco de trapo, inconsciente, así no pude evitarlo, estaba bien rica, así que me acerque a sobarle las tetas, eran grandes, mi mano no alcanzaba, luego puse mi verga para empezar a sobarme con ellas, pero esta reaccionó y se trago mi pene, empezando a darme una mamada de campeonato, sintiendo como jugaba con mi ganso de tal forma que sentí un escalofrió, pues su lengua un tanto fría era bastante diestra, me fue a sacar la leche en poco tiempo, tragándose todo, antes de tirarme, tratar de clavársela, apenas sintiendo como mi malograda punta sintió ese coño húmedo que escurría a pesar que se sentía helado, no me gustó nada, aunque sus tetas casi las saboreaba entre mis labios, pero no se levantaría, estaba algo asustado, además que la tipa se volvió loca, así que hice lo mas cuerdo que pude.

Tome un libro y la golpeé en la cara con este dejándola inconsciente, luego salí corriendo como el viento, mientras me acomodaba la verga dentro del pantalón, escapando para ocultarme dentro del dormitorio, donde esperaba que esa loca no me alcanzara, por suerte así fue.

Aunque al llegar a mi habitación, me quedé inquieto, pues algo sucedería ahí, al entrar a mi cama, viendo que Milton estaba roncando (si comparto cuarto con el 4 ojos, y si, usa lentes aunque nunca lo mencioné antes) me fui a acostar, pero curiosamente sentí una mano solo para notar que sobre mi estaba la misma chica de antes, la de mi sueño con las brujas, quien me sonreía de manera tétrica, y como estaba desnuda, ella misma se fue a mi cuerpo, lista para clavar mi verga, que en sus manos se hizo dura en el acto, lo suficiente para entrar sin problemas, dejándome oír un gemido que me erizo el pelo, y comenzó a cabalgarme, haciéndome sentir un calor inesperado, mientras era usado, aunque no me importaba, me dejó agarrarle las tetas, mientras me sonreía de manera tan viciosa, deseosa de sentirme dentro, ah, no supe cómo, pero me perdí en ese momento, cogiendo con lo que sea que fuera, pero estaba tan caliente que no me importaba nada, la cama se agitaba, era el mejor sueño de mi vida, estaba cogiendo con una preciosidad lúgubre o como se diga, era de lo mejor, en especial cuando me acabé corriendo en su interior, y aquel cuerpo me tomaba, diciéndome:

Simul usque an finem…