EL libro de mí abuelo cuando era joven

Encontré su libro lleno de morbo, tabu y sexo. .
Nunca me imaginé lo que mí  abuelo hacía de joven.

Bien, Vivo en argentina tengo 30 años, en el sur preferentemente, todo comenzó hace un tiempo cuando tenía 16 años fuimos con mí familia ah visitar a mí abuela, mí abuelo había fallecido hace unos meses así que decidimos acompañar, luego de unas charlas por la tarde en familia, mí abuela nos hizo pasar a su habitación y abrió un baúl, con muchas cosas de mí abuelo, recuerdos y demás para rememorar, había un peculiar libro de bolsillo que me llamó la atención por el candado que tenía.

Al rato salieron todos y sin que nadie me viera tome el libro, y me lo lleve a la habitación donde estaba, me resultaba muy curioso, que podría guardar un libro así, que secretos tendría guardados de tantos años, procedo a abrirlo con una navaja, y lo que encuentre me resultó interesante y morboso.

Ahora paso a leer algunas partes del texto escondidos en la parte de atras:

Cap:1, septiembre de 1980.

Hoy cometí algo que solo podía imaginar tocándome la verga, dejaron al cuidado de mí mama a mí primita de 10 años, ella es down, y no sabe nada, es tonta, ya me había pajeado antes enfrente de ella ya que dormíamos en la misma pieza y de vez en cuando le tocaba el culo, la conchita y le metía la verga en la boca, despierta y dormida, así que no me importaba mucho ya que no sabía hablar.

Un día mí mamá salió a comprar al almacen del centro ya que estábamos en el campo, me dijo que iba a tardar un rato, una vez se fue, corrí rápido a la entrada cerré la puerta con llave, y llame a mí primita, le dije que juguemos al dueño y al perrito, así que la lleve a mí pieza, obviamente la desnude, toda y le dije que se acueste como un perrito en la cama que íbamos a jugar, así que aproveche a pajearme mientras la veía como perrita, jugando con los pliegues de la sabana y sacando la lengua, aproveche a acercarle la verga toda dura y empezar a rozarle la entrada de la concha y el ano, me empezó a salir algo transparente pero no era leche, así que lo usé como lubricante y mí saliva para seguir pincelando el culo, mientras hacía mete y saca pero sin meterla se me ocurrió ponerle la verga en la entrada de la conchita que ya se veía bastante grande, así que no dude, me escupí mucho la mano y le puse la saliva en la entrada y le metí la cabeza, no costó nada, no salió sangre, ella solo gemía, pero seguía tonta como siempre porque era enferma, hasta que no aguante mas la presión y lo caliente que estaba adentro que acabe, le acabe toda adentro, así que la di vuelta y le dije que tome la leche de perrita, que le va ah hacer bien, y empezó a lamer.

En ese entonces, mí abuelo tenía unos 18 años, y en esa época había mucha confianza e ignorancia, por lo que leí el era un psicópata, al momento de escribir este relato, hay muchas páginas más, así que espero que sigan este hilo ya que subiré mas, espero les guste.