El Médico y las Niñas Cap. VIII.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sexigaleno.
Después de la noche de aprendizaje de Karlita, y la rutina diaria, que se vive con ambas chiquillas, y la manera de cómo entre ellas se protegen, se cuidan hasta el más mínimo detalle; así como las constantes llegadas de Luisita y normita, se van creando lazos muy fuertes entre ellas, ya que de vez en cuando departen la noche entre tres o hasta cuatro juntas, haciendo lo propio de esa edad, y obviamente la confianza entre ellas es total, al grado de platicar cositas muy picantes de su edad en amenas charlas así:

K.- bueno y ustedes ¿ya tienen sus novios en la colonia?, ya que en la escuela, parecen caballos, nada más se la pasan corre y corre, a la hora del recreo,

N.- yo tuve uno, allá en Honduras, de mi edad, terminamos porque se fue para el norte, con sus tíos, a trabajar allá, y ya no lo volví a ver,

L.- pues yo no he tenido, pero fíjate que mi primo me anda echando los perros, tiene 15, pero me da cosa, ya que es muy tentón, le gusta andarme agarrando la cola y mis tetitas,

S.- no pues yo nada, mi papi dice que espere a crecer más, ya que estoy muy chica, y por eso no tengo,

K.- a, que tu papi, siempre cuidándote, ¡yo sí tengo uno!, nada más, que es grande de edad, ¿nada más que no les voy a decir quién es, ya que es un secreto?,

N, L y S.- anda no sea mula Karla, dinos quien es, nosotras no decimos nada, sí cuéntanos, como te ves con ese novio, ya que siempre estás aquí o en la escuela y siempre andamos juntas, y no lo hemos visto, ¡cuenta!,

K.- nooo, chiquitas esto es algo muy privado, si sabe mi daddy me corre de su casa, mejor me lo guardo, para otra plática, ya que me pongo como nerviosa cuando me acuerdo de él, y mejor ustedes platíquenme sus aventurillas, sip,

N.- bueno, como quieras, yo ya dije de mi exnovio de Honduras, a veces nos íbamos de pinta allá, y nos metíamos a unas cuevas, desde la mañana, hasta que era la hora de regresar a nuestras casas, y pues a solas y en lo oscuro, nos pegábamos unos besotes grandes y a veces me metía mano en mi cuca, ¿ustedes creen?,

L.- ay, pues yo no he tenido novio, hasta hoy, pero mi primo el que me anda echando los perros, una ocasión me estaba ayudando a hacer mi tarea y en esas, nos besamos en la boca un buen rato, y me tiró a la cama y se me subió encima y me talló su aparato en mi bollito un rato y de ahí se paró y se fue al baño,

S.- uff, no friegues luisa ¿y que no le dijiste nada a tu mamá?, ¿yo no he tenido novio, pero, estoy por tener uno, ya que me quiere mucho, bueno eso siento, y quiero que me enseñe a besar, y ha ¿. . . .?, bueno no digo,

K.- ¿a, que Sandra?, platica bien, yo no te he visto nada, ya ves que vivimos y andamos juntas, ¿de qué hablas?, ten cuidado ya ves que tu papi, te quiere mucho y ya ves que te cuida demasiado, como a mí,

N.- eso es cierto Sandra, ya viste, con lo de las pelis, que se enojó mucho y te las decomisó,

L.- oigan a ustedes ya les salieron pelitos en el bollo, yo ya tengo unos cuantos y el frente está lleno de una alfombrita suave de pequeñitos vellos, ¿ustedes no?

S.- yo no tengo, no me ha salido nada, estoy lisita de mi conchita, ¿tú ya tienes Karla?, no te he visto,

K.- no, todavía no, yo creo que en poco tiempo me van a nacer, ya que dicen que a los 12 salen y que da comezón, ¿es cierto luisa?,

L.- no, no se siente nada, sólo que se pone como de un color más oscuro el frente y te va tapando la raya nada más,

N.- pues a mí me están saliendo como mi cabello, rizados, pero pequeñitos, parece mi cabeza están ensortijados y brillosos, pero muy chiquitos,

K.- uy se te han de ver muy coquetos esos vellitos de tu bollo, porque no, nos los enseñas, total estamos puras viejas aquí,

S,. sí, norma, bájate los calzones y deja verte, como son, nadie lo va a saber, ¡estamos entre amigas!,

L.- ándale antes de que suba el papá de estas, ¡bájate los chones, anda!,

N.- bueno, pero tú también nos enseñas tu pelillos que dices que tienes, eh,

S y K.- pues ya estamos, ¡enseña!, ¿Qué bien se te ven eso rizos en tu panochita?, a ver deja tocarlos, ¡oye que suaves se sienten y como se te enroscan?, están muy bonitos,

L.- ay, pues los míos son igual de suaves pero no son chinos, ¡miren!, como me están naciendo en el frente, parece una alfombrita, ¿ya vieron?,

S.- que bien se ven, bueno ya tendré los míos pronto, ya leí, en un libro del consultorio, que ya me falta poco, para que me comiencen a nacer,

K.- pero tú norma, ya me imagino, que los vas a tener muy esponjados, por cómo te están creciendo, vas a tener que recortarlos como las mujeres de las revistas de hombres de esas, del conejito, ji ji ji,

S.- y tú también luisa, se ve que vas a ser muy peluda, y también te tendrás que pasarle el rastrillo, a la conchita, sino se te van a salir por los lados del calzón,

En eso llega el médico a la planta alta, las saluda y a comer todas con él, la misma rutina de siempre, descansa un rato y entra Karlita a su habitación y le dice en un tono molesto, ¿en la noche, quiero hablar contigo papi?, nada más que se duerma Sandra, ¡vengo para haca!, sí mi amor, pasa algo, te noto molesta, bueno en la noche platicamos, ok, déjame descansar unos minutos,
Ya una vez pasada la tarde y haber cerrado la consulta, se dispone el médico a descansar y aparecen las tiernas Sandrita y Karlita, pidiendo permiso para ir a cenar a casa de Luisita, ya que su mamá las había invitado a cenar antojitos en su casa, y que no tardarían, ya que querían ver una peli, que les había prestado Normita, y pues se fueron a departir a esa casa, mientras el médico se hizo un café y veía la tv, en eso entra Karlita de vuelta a casa, y le dice ¿no tengo hambre, por eso me regresé, en una hora voy por Sandra, bueno y de quieres hablar amor, ¡ven siéntate conmigo!, ah, pero de pie ¿me puedes explicar que pasa entre Sandra y tú?, ya que dice de un novio que tiene, que le va a enseñar muchas cosas y pues me molestó eso, haber dice el médico, vamos por partes, no te entiendo,

M.- que dices tú, ¡que dice Sandra, de que un novio le va a enseñar!, ¿qué?,

K.- si, a besar a no sé qué otras cosas, pero yo no la he visto con nadie y me imagino que debes de ser tú, ese novio, ¿no?,

M.- haber, amor porque dices eso, tu eres una niña aún, acaso ya te sientes mujer, ¿cómo para reclamar derechos entre nosotros dos?,

K.- pues no, pero me da coraje, ¡porqué yo te quiero mucho!, y me siento insegura de perderte, hay algo aquí, que me duele, al oírla decir eso, y me imagino que eres tú con ella en la cama, haciéndole cosas como a mí, ¡enseñándola!,

M.- ¡No seas celosa Karlita!, ya te he dicho que tú eres como mi esposa chiquita, ya ves que compartimos, más cosas muy seguido, y Sandra ya casi la tengo en el abandono, ya que nos hemos entendido mucho en todos los aspectos, como si fuéramos una pareja de la misma edad, ¿o no lo sientes así?,

K.- sí, pero da coraje, a veces siento enojo hacia ella, pero si dices, que tú y ella nada, me quedo tranquila, ¿podemos hoy estar solitos, sí?,

M.- bueno, ya sabes lo que tienes que hacer, hay te espero, mientras vete por Sandra, no se dejen solas, y deja de andar de celosa, “mi pequeña nalgoncita”, ¡te amo!,

K.- sip, yo también y mucho, mucho, al rato regresamos papi, besos,

Una vez que la súper-niña salió, sus pensamientos se centraron en esa corta conversación y se hizo múltiples preguntas así mismo, acerca de la reacción de Karlita, ya que la notó, más que enojada ¡celosa!, sintió a una mujer y no a una niña, ¿por qué sentirá celos mi nalgona?, ha de ser, cómo la trato, creo que yo también a veces me pongo celoso, de que, se pone alguna ropa, que a mí no me gusta que use, en la calle, pero en fin voy a bañarme, para estar bien y quitarme el estrés del día.

Sentado esperándolas, como si fuera el padre biológico de ellas, hacen su arribo esas muñecas de carne, y Sandrita le ofrece unos antojitos que le mandó Luisita y su mamá, y pues se pone a cenar algunos de ellos, mientras las nenas viendo una película en la recamara, en eso, pasó a despedirse y se fue a acostar, ya estaba esperando que Karlita llegara, quería que esa muñeca, le quitara el estrés de la semana, ya que andaba con cierto grado de ansiedad, por estar con ella, hasta que pasadas dos horas llega la súper-muñequita, y,

K.- ¡hasta que por fin cayó la Sandra!, ya la deje bien dormida y tapada, ya ves que hace frío y la deje abrazando uno de sus osos,

M.- que bien, ¿ya apagaste la luz de la sala?, y el gas lo cerraste, sí es así, vente tengo frío y necesito tus bracitos,

K.- sí, espera voy a quitarme mi pantalón, espera,

M.- oye amor, ya no quiero esas escenitas de celos, eh, y menos de Sandra, ustedes son como hermanas aquí, y no deben de pensar y discutir por simples pensamientos absurdos, ¡acuéstate a mi lado, vente!,

K.- sip, papi, pero no me dejes de querer, eso sólo te pido, parándole ese apetitoso par de glúteos de niña-mujer, para acomodarse, en el paquete de él,

M.- uy Karlita, estás algo nerviosita, ¿verdad?, ya te acomodaste a modo de que sienta tu carnita rica,

K.- pues sip, desde el miércoles quiero algo, pero no se podía, ya ves que Sandra está a todo, pero ya estoy aquí en tus brazos, ¿me haces o te hago?,

M.- pues, ¡no sería mala idea que tú lo hicieras!, a ver sí puedes, ahora tú me enseñas, ok,
K.- bueno, ¡pero me diriges eh!, como le hago, ¿quieres que me monte encima de ti?, ok, espera me voy a quitar mi bóxer, ¡ya, acomódame!, ah, lo tienes bien gordo ahorita, ¡deja acomodármelo!, ay, ay, despacito, despacito, ayy, ayy, uff, no me va a entrar así, espera,

M.- sí entra amor, sólo ten calma, es despacio y tienes que lubricar tu twinki, sino te duele al entrar, mira quieres le ponemos un poco de gel o te esperas a que se lubrique sola, ¿dime?,

K.- ay, ayy, bueno ponle un poco de eso a tu coso, haber dame yo me pongo en mi twinki un poquito, ahh, esta calientito uyy se resbala mi dedito adentro, ahh, ya acomódame otra vez,

M.- ya está amor, comienza a comerme despacito, eso, así, despacito, eso, eso, ahh, que bien, así, así, ya quédate quieta, ahh, ahh, no te muevas, voy yo a meter otro poco, tu quédate quieta yo te voy bajando,, ahh, ahhhh, que rico, que rico, estas bien calientita del twinki, ya entro más, espera ¿te duele, te arde, que sientes?,

K.- ahh, ahhh, ayy, me partes mi twinki, me lo partes así, ayyy, ayyy, siento que tocas adentro algo y me lastimaaaa, ayyyyyyyyyy, yaa, noo lo metasss massssssssss, ayyyyyy,

M.- bueno, hasta ahí nada más, muévete despacio, la cola hacia atrás y regresas, lo que puedas si te cansas y te duele, paras, ok, ¡dale amor!,

K.- siiii, siiii, ahhh, ahhhhh ayyyyy, que bien sientooo, ayyyy, ayyyyyyyyy, ahhhhhhhhh, espera ya me cansé un poco, ahhh, ahhhhhh, ayyyy, ayyy,

M.- descansa, pero no te salgas, quédate mi pene dentro, eso así quieta yo te detengo de tus nalguitas,

K.- ahhhh, ayy, me gusta, me gusta esas cosquis, ahhh, ahhhh, ya, sientes, me muevo ya sola, sientess, papiiiiii, no me lastimessss, papiii, ayyyy, ayyyy, saca tus manos de abajo, quiero comerte másss, otro poquitoooo, ayyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyyyyyyyy, ya, yaa, yaaa, entroooo, ya entrooo, ayyy, ayyyy, me gustaaa, me gustaaa, ahhhhhhhhhhh,

M.- ahhh, ahhhh, síiiii, Karla, sigueee, sigueee, ya te entro todoooo, mamitaaaa, ahhhhh, ahhhh, mmmmm, no te forcesssss, despacioooo, deespaciooo, asíiiiiiii, asíiiii, ahhhhhhhh,

K. ayyyyy, ayyyyy, esperaaaa, espera, ya me hiceee, esperaaa, ahhhhh, ahhhh, ahhh, ahh, ya, yaa, ayy, ayyy, mi twinki, en eso metió su manita a donde descansaba su puente vaginal encima de la de la pelvis de él, y grande fue su sorpresa al sentir que no había espacio para sus dedos entre los dos y dijo sorprendida, ¡¡¡me lo comí todo, papiii!!!, me lo comí,

M.- sí mi amor todo entro, ahhh, pero yo no he terminado, descansa un poco hay sentada, como estás y te vuelves a mover, espérate unos momentos que te pasé esa sensación de cosquilleo,

K. ahh, sii, uff, papi, ¿me quieres mucho, verdad?, no me dejes papi, ya me acostumbré a ti,

M.- ya sabes que te amo Karla, sólo tenemos que ser cuidadosos, con esto y eso es todo, ¿ya sientes que ya te pasó esas cosquillitas raras?,

K.- ya, ¿quieres que me vuelva a mover, o me montas tú?,

M.- mejor sigue tú, pero ahora en lugar de hacer tu cola hacia atrás y para adelante, ¡quiero que rotes tus caderitas, de tu cintura para abajo, sin que saques lo que tienes dentro, te muevo un poco para que veas y luego ya lo haces sola, como si bailaras algo sensual, ok,

K.- sí papi, enséñame, ¡ya estoy lista!,

M.- ahora, eso es, eso, suave, así, así, suave, ¡arrima tus piernas más adelante!, eso así, asiiii, que sientes amor, que sientes, eso es, asiiii, asiiiiiiiiii, que rápida eres con esos movimientos me vas a sacar todoooooooo, ahhhh, ahhhhhhh, ahhhhhhhhh, sigueeeeeeee, no te detengasssssss, eso bailaaa, la caderaaaaaa, asiiii,

K.- ayyyy, ayyyyyyyyyy, ahhhhhhhhhhh, me hagoooo, otra vezzz, me hagoooooo, yaaaaaaaaaa, yaaaaaaaaaa, ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyyyy, ahhhhh, ahhhhhhhh, ahhhhhhhhhh, ayyy, ahhh, ya, yaaa,

M.- ¡te volviste a hacer mi amor, acabaste otra vez!, y a mí me exprimiste todo, ¿lo sentiste también, que entraban mis chisquetes dentro de ti?, ¡acabamos juntos, amor!, ya descansa, bájate de mí, para limpiarte el “twinki tragón” , uy que mojadita quedaste, ¿te gustó?,
K.- siii, me gustó, me lo haces muy suave, ¡me haces orinar mucho papi?, y me siento bien, ni me duele, me lo haces con mucho cuidado, y eso que lo tienes bien gruesote, mira ni te lo abarco con los deditos de la mano con “el gordo y el índice”, lo tienes súper-gordo, papi,

M.- ya mi amor, no me lo chulees, que me la voy a creer y luego, ni quien quiera comérmelo, ja ja ja,

K.- ¿y quién quieres que se lo coma?, ¡sino yo!, es mío, mío, nada más, o se lo quieres meter a otra, nooo,

M.- como crees, si ya has aprendido mucho en estos dos meses, ya sabes cómo se hace, sin que te lastime yo, ni que tú te lastimes, esto es con calma, ya vez, entro bien en ti, y ni sientes, aunque estas estrechita, pero con calma, cómo te digo, te entra bien, ¿te gustó?,

K.- sí, papi, me lo haces muy suave, luego me pongo a pensar ¿cómo es ´posible que tu coso, que es como de 5” de grueso entre en mi twinki que apenas normalmente le entra mi dedito chiquito de 1 “, uff, ¿te digo algo pa?,

M.- sí mi amor dime, ¿te sientes mal, sientes algo, que te pasa?, dime mi súper-niña,

K.- bueno, pero no te vayas a enojar eh, es que te he comparado con mi padrastro, y él tiene su coso más chico que tú y más angosto, y tú lo tienes gruesote y más grande, hasta pensé la primera vez, que me ibas a romper más, pero no, me lo haces muy bonito, hasta hay veces que al recordar lo que me has enseñado, se me moja mi bóxer, de esa babita que te tomas de mi twinki,

M.- aja, que bien, pero te voy a decir algo, eso que me estás diciendo, ¡ya deberías borrártelo de tu cabecita!, no tiene caso, que recuerdes esas cosas feas que te hacía ese animal, vive el presente a mi lado, ya veremos después, que pasa, mientras haz de cuenta que no te pasó nada con ese hombre, y que fue un sueño, que ya se está esfumando, ok,

K.- si papi, ya me borraré eso que me pasó, ¿ha pero hay otra cosa que hice?, ¿quieres que te cuente?,

M.- sí dime que pasa, ¿Qué hiciste pequeña?, no me digas que otro pene entró en “mi twinki”,

K.- no, como crees, es algo muy loco, escucha, una noche hace dos semanas, entre en la madrugada a tu cuarto, ya que fui a hacer pipí, y estabas bien dormido y, ya ves que duermes encuerado, y vine a querer taparte y tenías tu coso bien parado y te lo toque, cómo me enseñaste y te lo chupé y te vaciaste en mi boca y tu como sin nada, ni cuenta te diste, te limpié, te tapé y me fui a dormir con el sabor de tu esperma en mi boquita, ¡también a ti te saben bien!, son como saladitos, ¿espero no te enojes papi?,

M.- y porque no me lo habias dicho, eh, pillina, eres un amor, vente vamos a dormir, ya sabes temprano a asearte esa twinki, antes que nada, no quiero olorcillos raros en ti,

Que trama tan exquisita sin forzar a nadie, las cosas se dan sin pedir, que para mi criterio, así debe de ser, éste capítulo VIII, es morbo-erótico, me llena de una gran emoción escribirlo, para los asiduos lectores y mi selecta comunidad, el próximo episodio, por fin es desvirgada Sandrita la princesita del médico, por él mismo y Normita la Hondureñita, siente la llegada de su primer período menstrual y es atendida, por el médico y se suceden otras situaciones, con Luisita, ya que de una caída que tuvo, se fractura una pierna y es atendida en el modesto consultorio y es hospitalizada dos semanas, mientras pasan también situaciones muy morbosas y exquisitas a la vez, con un saludo nos despedimos de este capítulo mi amigo y colega de profesión el Dr. Mangual y un servidor y relatador de ustedes SEXIGALENO.