El velador de la escuela – Parte I

Año 1989 y el inicio de una gran aventura sexual.
Que tal queridos lectores, hoy les traigo una nueva saga que espero sea de su agrado.

Hola a todos me llamo Severiano, pero todos me conocen como Don Seve y tengo 49 años, hoy quiero contarles mi magnifica vida rodeado de pequeñas hermosuras además de que puedo presumir que me he cogido a más de 900 niñas, si como lo leen y para que se den una idea de cómo fue eso les puedo decir que en mis más de 30 años de ser velador me cogía a unas 30 niñas al año y sin más preámbulo vamos a los detalles.

Cuando tenía 16 años había dejado la escuela para ayudar a mi padre en la sastrería que el manejaba, éramos 5 en la familia mi padre, mi madre, dos hermanas y su servidor, hace no mucho tiempo cuando iba en primaria mi madre enfermó y murió a causa de neumonía, mis hermanas se casaron con tipos mucho mayores que ellas y se fueron para los Estados Unidos donde siguen viviendo y mi padre falleció en un accidente mientras regresaba de entregar unas camisas (fue atropellado por un conductor ebrio que no respetó la luz roja) por lo que intenté sacar adelante la sastrería pero no prosperó debido a que ya no era lo mismo sin mi padre que era el que sabía hacer negocios con sus clientes además de que abrieron más sastrerías que me fueron robando clientes y esa situación siguió hasta que un amigo de mi padre quien era un maestro de escuela primaria (y además nos encargó su traje de bodas entre muchos otros pedidos también hace buen tiempo) me preguntó si no deseaba ser el velador de la escuela donde él trabajaba, oferta que acepté puesto que no sabía hacer otra cosa.

Llegué temprano el día que me presenté para aceptar la oferta de trabajo que me habían propuesto, estaba bien aseado y arreglado, el mismo amigo de mi padre me recibió y me presentó con el director que era un señor ya mayor, afable y bonachón con casi 60 años y próximo a jubilarse, la escuela aunque ya tenía más de 50 años de existencia fue renovada por completo porque era de reciente construcción y estaba compuesto de un edificio de tres pisos que tenía forma de cuadrado (visto desde arriba) y detrás había otros tres edificios paralelos conectados entre sí, después de la plática me contrató para ser el nuevo velador de la escuela y me llevó a donde se convertiría en mi nuevo hogar, un espacio acondicionado como departamento lejos de las aulas de los alumnos y donde tenía todo lo que necesitaba, es decir una cama, cocina, baño con ducha, armario, etc., mi labor era exclusivamente vigilar la escuela por las noches y patrullaba desde las 10:00PM hasta la hora de entrada que eran las 7:00AM y después de eso me dedicaba a dormir y despertaba como a las 3:00PM esa era mi rutina de trabajo, ahora si pasemos a la mejor parte.

Tenía poco tiempo de haber ingresado a trabajar como velador de la escuela primaria y en uno de esos días acababa de terminar mi redada de vigilancia y ya era la hora de abrir la escuela por lo que fui a abrir la puerta de entrada para que los niños entraran a sus clases rutinarias y yo por mi parte me retire a dormir y era tal mi cansancio que no me di cuenta que una niña como de 7 años me fue siguiendo sin que me diera cuenta y justo cuando entré a mi departamento la niña fugazmente se escabulló y por eso no me percaté de su presencia hasta que cerré la puerta y la vi.

– ¿Qué haces aquí pequeña? – le pregunté

-vaya, tienes un cuarto muy grande-

-vas a llegar tarde a tu clase niña- le dije en tono severo, pero sin regañarla.

-ah, está bien mi maestra no va a venir porque se enfermó-

-te refieres a la maestra Carmelita, ahora recuerdo que los maestros hablaron de eso la semana pasada-

-por eso quería venir aquí, quiero jugar contigo-

-lo siento pequeña no puedo jugar contigo ya es hora de que me duerma-

– ¿duerme usted a esta hora? – me preguntó sorprendida la niña.

-sí, eso es porque vigilo la escuela toda la noche y por eso es que duermo cuando estas en clase-

-ah no se preocupe puedo chupársela mientras duerme-

Ese comentario me puso en shock, solo había tenido un pequeño romance con una pequeña prima que se mudó y no la he vuelto a ver pero esta niña se notaba que era muy picara y traviesa, yo no había experimentado el placer del sexo opuesto pero como estaba muy cansado deje que la niña hiciera lo suyo y yo caía rendido de cansancio, me acosté en la cama y ella se subió encima y saco de mi pantalón mi pene que estaba algo flácido y ella rápidamente se lo llevó a su boca y era muy habilidosa con su lengua pues me fue haciendo una felación de lo más rico que he sentido.

Era tal mi cansancio que me quede dormido, así que no recuerdo lo que paso después solo sé que cuando desperté ella ya estaba totalmente desnuda y solo tenía puestos sus calcetines blancos de la escuela que le llegaban a medio tobillo, la vi en todo su esplendor, esa piel canela tostada, cabello largo suelto y con un flequillo, ojos sepias y mirada seductora, era como un ángel caído del cielo.

-no te pregunté tu nombre ¿Cómo te llamas? –

-me llamo Cinthya-

– ¿cuántos años tienes, pequeña? –

-tengo 7-

-Y dime, ¿has jugado con alguien más a parte de mí? –

-sí, juego con mis tíos y sus amigos de ellos-

Esa respuesta me dejo helado, ya me imaginaba a esa traviesa jugando con las vergas de sus tíos y aquellos tipos con los que tenía sexo, contemplando con más detalle su cuerpo vi que sus pezones estaban muy marcados por tanta chupada que le dieron esos hombres, sus labios vaginales ocultaban esa cueva misteriosa que ya había sido perforada en incontables ocasiones y esa carita de lujuria oculta por una sonrisa encantadora e inocente le daban el toque perfecto a ese cuerpo de 1.27 metros que tenía a mi disposición.

Cinthya siguió chupando mi verga y quien sabe cuánto tiempo más estuve dormido ya que esa niña mamaba sin cesar, hasta que después de varias expulsiones de semen que tragaba a placer como una becerrita me halagó.

-ah, me gusta tu cosota es mejor que la de mi tío y sus amigos-

-cómo te encanta mi pene ¿verdad? –

-si deme más y lléname con tu leche-

Al cabo de unos minutos más de intensa mamada de campeonato que me estaba dando esa chiquilla la cargue y la puse para ver con más detenimiento su vagina, era difícil de creer que esa vagina de 7 años ya había perdido su inocente virginidad pues se veía casi intacta, le metí un dedo para ver qué pasaría y entró muy fácilmente, así que le metí otro dedo y me dijo que le metiera otro más, de hecho mis dedos eran algo delgados ya que el trabajo de sastrería no es algo que ponga tus dedos muy anchos, le entraron 4 de los 5 dedos de mi mano derecha y comencé a moverlos de adentro hacia afuera y Cinthya gemía cada vez más fuerte.

-Ah… si… me gusta sigue… no pares…

-y tu sigue chupando mi pene, es todo tuyo princesa-

Cinthya continuó chupando si cesar al mismo tiempo que gemía y yo jugaba con esa partecita que quien sabe desde cuando fue profanada, los dos estábamos masturbándonos mutuamente hasta que ella soltó sus jugos que escurrieron de mi mano bajando como agua de rio.

-eso se sintió tan bien- dijo Cinthya con algo de respiración pues acababa de tener un orgasmo.

-Quiero meter mi pene dentro de tu vagina- la lujuria se apoderó de mi por lo que le pedí que me dejara meterla

-Adelante señor- la niña dio su consentimiento.

-Llámame Seve desde ahora-

-Si, Seve-

Cinthya se acomodó boca arriba y abrió sus piernas para que mi amiguito pudiera entrar, me asombré al ver que le entró casi toda mi verga, digo la mía es normal no es nada del otro mundo cuando se ponía erecta en ese entonces media como 18 o 19 centímetros hoy en día mide como 22 o 23 cm, una vez que le metí mi verga la cual nunca antes se había puesto tan gruesa quizá por la excitación del momento comencé a cogérmela y me movía cada vez más bruscamente, mis bolas chocaban contra la pelvis de la niña y era increíble que una niña tan pequeña como lo era Cinthya ya haya sido penetrada desde hace tiempo y que ahora la tenga conmigo era el sueño de cualquier hombre hecho realidad.

-Sr Seve siga, me gusta mucho como me mete su cosota-

-No se llama cosota, se llama verga-

-sí, Seve-

La seguía cogiendo salvajemente por casi 15 minutos seguidos hasta que mi pene disparó una enorme cantidad de semen que se le escurría de la vagina de la niña y como aún mi pene estaba dentro de ella vi que mi verga estaba siendo cubierta de leche como si fuera un helado derritiéndose bajo la luz del sol, Cinthya se levantó y su rajita salió mostrándome cuanta cantidad de líquido blanco había dentro de ella, y después de comprobar que le había soltado mi leche en su vagina ella misma se puso en cuatro patas y sin decirme una palabra me señalo la entrada de su ano con su mano izquierda, dándome a entender que quería que le diera por su otro agujero.

Le metí mi verga en su hoyo anal y vaya sorpresa también se estira muy bien y mi pene le entro completo, y nuevamente empezó a mover de adelante hacia atrás y la niña gemía del placer que estaba sintiendo.

-ah… sabía que usted era como mi tío y sus amigos, le encanta jugar con las nenitas a ser amantes-

-Wow, Cinthya tu tío te entrenó para ser toda una putita-

Le seguí dando cada vez más duro, el sonido del mete y saca y los gemidos de la niña me dieron a entender que lo disfrutaba y que le siguiera dando y dando verga, y después de unos minutos más mi verga nuevamente sacó otro tanto semen que llenaron las entrañas de la pequeña y al salir mi pene no tenía restos fecales, pero ambos ya estábamos cansados así que decidimos descansar un poco y me quedé dormido por un rato y creo que ella también puesto que no la escuche hacer ruido alguno.

En cuanto terminamos de descansar por la exhaustiva ronda de sexo nos arreglamos y le ayudé a salir de mi departamento sin que nadie la viera, afortunadamente nadie nos descubrió ya que los alumnos habían salido hace no mucho y ella salió como si nada hubiera pasado, pero por supuesto íbamos a tener muchas más sesiones de sexo.

Como tenía mucha curiosidad por saber cómo fue iniciada decidí preguntarle al respecto y me dijo que su tío jugaba con ella a los juegos de castigo, se iba desnudando conforme perdía y terminaron teniendo sexo, y además me dijo que tiene amigas en su grupo y en toda la escuela quienes ya tenían experiencia y otras que querían tener su primera vez (es notorio que las niñas se compartan sus secretos y gracias a ella podría tener todo un harem para mí y así ya no me sentiría solo) por lo que habíamos acordado que ella llevaría a sus amigas en cuanto se presentara la oportunidad, aunque eso me preocupaba pues acababa de obtener el trabajo y si el director o algún docente o alumno me descubriera seria despedido y terminaría en prisión, pero gracias a Dios eso nunca pasó.

La semana transcurrió sin novedades y no volví a ver a esa preciosura de niña llamada Cinthya sino hasta el sábado debido a que salí a comprar los víveres que me hacían falta y en la tienda me encontré a esa niña que iba acompañada de una prima casi de la misma edad que ella, traía puesta una falda azul oscuro por encima de la rodilla que hacían lucir unas magníficas piernas que me volvían loco, una camisa azul claro de manga corta, zapatos de charol y calcetas cortas, contemplaba con la mirada esa hermosura de niña que acompañaba a Cinthya hasta que ella me trajo a la realidad.

-Hola Seve, que sorpresa verlo por aquí-

-Prima ¿Quién es esta persona? – preguntó la otra niña puesto que aún no me conocía.

-él es Severiano, pero le digo Seve, es el vigilante de la escuela del que te hable-

-disculpa nena ¿cómo te llamas? –

-me llamo Marisol, gusto en conocerlo señor-

-por favor no me llames señor aun soy muy joven.

Nuestra conversación se interrumpió debido a que las mamas de ambas niñas terminaron de pagar sus compras y regresaron a sus casas y yo también regresé para hacer los quehaceres y el domingo hice mi redada como siempre, pero a partir de ese momento decidí que si quería disfrutar de esa niña tenía que modificar mis horarios de vigilancia, pero sin descuidar mi trabajo por lo que hice varios ajustes a mi horario de trabajo y cuando por fin tuve mi nuevo horario decidí ponerlo en marcha.

Al día siguiente había cambiado mi rutina de trabajo ya que solo me dedicaba a vigilar unas cuantas horas en lugar de toda la noche lo que me ahorraría horas de sueño y aunque suele haber actos de vandalismo por los alrededores y robos por la noche la escuela nunca sufrió un solo reporte de robo debido a que siempre cierro muy bien todos los accesos y no importa cuánto intenten los ladrones nunca podrán ingresar a cometer fechorías, volviendo a la historia era la hora de entrada y los niños y niñas suelen jugar antes de que suene la campana de inicio de clases y en cuanto iniciaron las clases yo ya estaba en mi departamento con Cinthya pero desafortunadamente las niñas que me prometió que iban a venir ese día no vinieron porque la maestra Carmelita aún estaba convaleciendo por la operación que tuvo hace poco y no había docente que la cubriera de manera interina y por esa razón nadie de la clase pudo venir a excepción de Cinthya.

En fin, dejando de lado esa situación regresemos a donde nos quedamos, Cinthya y yo ya estábamos desnudos y disfrutando de un rico 69, ella como ya tiene experiencia mamando vergas no le costó nada hacer que le diera su premio de un rico postre de semen, y ella por su parte me recompenso con los juegos de su éxtasis.

-Wow, Seve su semen es rico y caliente-

-si mi reina tú también eres deliciosa-

Me senté en una silla con la polla apuntando alto y Cinthya se sentó sobre mis piernas y mi verga entro fácilmente y con mis brazos la sujete para que empezáramos a coger como buenos amantes, mi pene entraba y salía con total soltura mientras los dos nos dábamos un beso francés de película, la verdad siento que ella nació para ser putita pues sabe cómo darle placer a cualquier macho solitario como yo, nuevamente mi polla le entraba y salía mientras ella se movía de arriba hacia abajo al mismo tiempo que su lengua jugaba con la mía, ya no me importaba nada más y decidí que quería jugar con Cinthya todo el tiempo que fuese posible.

-Ah siento que ya no puedo más- grito de placer la pequeña

-Adelante reinita hazlo-

Cinthya desbordo todo un rio de sus jugos que bajaron por mi pene, luego por la silla hasta finalmente caer al suelo y por supuesto le di su merecida recompensa; una dotación de mi deliciosa y caliente leche que degusto la muy putita, al cabo de un rato sonó la campana de fin de las clases y los alumnos debían regresar a sus casas pero como nadie sabía que la niña estaba conmigo pensé que era muy peligroso que la vean salir del área que estaba prohibida para los alumnos, así que decidí mostrarle la entrada que solo yo utilizo y que nos sería de gran ayuda de ahora en adelante. Si bien la primera vez que entro Cinthya salió por donde entró debido a que corrimos con suerte ya que las señoras del aseo no habían venido, pero en esta ocasión su presencia podría delatarla y por esa razón decidimos hacer uso de la entrada secreta.

Muchos de ustedes se preguntaran cual es esa entrada secreta, pues les explicare, aunque la escuela se construyó en una zona algo apartada del centro de la ciudad ya que en ese entonces era solo un pueblito y con el paso de los años la zona se urbanizó y se instalaron muchas viviendas, edificios departamentales y comercios, pero por suerte la escuela colinda con una calle poco transitada que en realidad era una privada es decir una calle sin salida a otro lugar además de que tiene una puerta secreta que conecta con mi dormitorio y la utilizo para entrar y salir cuando salgo a comprar sin que nadie lo note, dicha puerta secreta consiste en una puerta tipo panel que simulaba ser ventana corrediza y estaba oculta entre densos árboles y arbustos y hay un pequeño espacio donde un niño puede entrar sin ser visto, además de que tenía una reja protectora que solo se abre por dentro (y la cual tuve que echarle truco para abrirlo por fuera cuando salía a comprar), eso me ayudaría muchísimo en todas las ocasiones que tuve sexo con todas las niñas de las que les hablaré.

Nos dirigimos a un rincón de mi departamento y detrás de un mueble con ruedas se hallaba una puerta que solo se abre y se cierra por dentro (y la cual tuve que arreglar para abrirla por fuera además de la reja protectora, más que nada por seguridad), luego había unas escaleras que daban a otra puerta y de ahí a la puerta secreta que da con el jardín de arbustos y el árbol que bloquea la vista y a su vez colinda con la calle, primero salí yo para asegurarme de que nadie nos viera, pasaron unos segundos y una vez que confirmé que no había nadie Cinthya salió, pero antes me dio un beso y me dijo al oído:

-Seve, me la pasé genial contigo, le prometo que la próxima vez vendrán mis amigas, ya les dije y me dijeron que si vendrán-

– ¿en serio tienes muchas amigas que hacen lo mismo que nosotros? –

-claro que sí, ellas y yo jugamos con sus tíos que son amigos de mis tíos-

-si Cinthya, pero mejor entren por la puerta secreta, se ocultan detrás de los arbustos y les abro la puerta para que entren sin que las vean-

-sí, les voy a decir que vengan y jugaremos mucho-

Así fue el comienzo de esta aventura en el jardín prohibido del Edén.

Nota del autor: esta nueva saga será la más larga que haya publicado, estoy finalizando las otras sagas y muy pronto las subiré conforme vaya terminando, dejen sus comentarios, no puedo proporcionar datos de contacto pero si les interesa comunicarse conmigo solo avisen.