era toda una mujer
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Yo, como ya he comentado, tenia que frecuentar la zona por motivos de trabajo y no de placer, aunque tambien algo hubo, y no es que pretenda desvelar que el vestir de paisano, por esta zona de la ciudad, no me diferenciaba mucho de llebar uniforme ante mucha gente de dudosa reputacion que era capaz de reconocer nuestra identidad nada mas vernos.
Yo era nuevo en mi trabajo en esta ciudad, aunque no tanto en el cuerpo. Quizas mi mirada aun un poco ingenua y mi presencia, me considero algo atractivo, atrajeron a esta señora que, segun me confeso, estaba a punto de entrar en los cincuenta, yo tenia por aquel entonces 27.
Cada vez que visitiba su local, su saludo cortes y amable se mezclaba con una mirada picara y descarada hacia mi y mi cuerpo. Pronto llego la confianza entre ambos, y es que el roce hace el cariño. Tras varias semanas entablamos amistad, incluso para comentar algunos temas personales. Era evidente que yo le gustaba, yo en principio no me habia planteado nada con aquella mujer, habia conocido a una chica de 19 años con un cuerpo exquisito y que era una autencia fiera en la cama. Pero como dice el refran: tanto va el cantaro a la fuente que al final termina comprandose un bono para el metro.
Descripcion: Ella tenia 49 años, a punto de cumplir los 50, de estatura media-baja. De constitucion ancha pero no era gordita, como luego pude comprobar. Pecho exuberante, caderas anchas, piernas marcadas, con unos gemelos que con los zapatos de tacon parecian de gimnasio, pelo negro, ojos marron oscuro y piel morena. No era una belleza pero tenia una forma de mirar picara que gustaba mucho. Era viuda y con un hijo algo menor que yo, este, a punto de casarse.
Como comentaba anteriormente, tanta confianza y tanta muestra de deseo por parte de ella, termino despertanto mas que mi curiosidad, se me desperto el deseo, y aunque tenia mis dudas termine por plantearme seriamente probar ese cuerpo maduro de curvas exuberantes, nunca habia tenido sexo con una mujer madura y realmente no sabia como podia resultar de gratificante.
Tras una visita de rutina a su local, me invito a pasar por tarde sobre las siete, hora de salida de su turno de trabajo. Yo acepte, y confirmamos el encuentro.
Llegue a las 18:50 h, bien vestido y perfumado, lo que le agrado enormemente. Ella estaba todavia tras la barra del bar, me sirvio una cerveza bien fria y puso otra para ella. Has venido, me comento, y yo le respondi: pues mas bien si. Nos reimos juntos, luego le comente: sabes que eres bonita, y ademas estas muy buena, tu forma de mirarme y tus insinuaciones me ponen muy a tono.
Ella volvio a reirse y me comento: ya lo se, no soy una niña ingenua, eso el lo que he pretendido siempre contigo, me gustas mucho. Me dijo que dejaba el trabajo, el ambiente de la zona la tenia hata y queria mudarse de ciudad, le quedaban dos semanas de trabajo. Me dejo un poco desmotivado, pero luego todo cambio porque, ella me cogio de la mano, su compañera de trabajo ya estaba en la barra y se dispidio de ella muy rapidamente, y me llebo directamente, por la puerta interior, a la zona de habitaciones de las chicas de alterne. Quieres? me pregunto, yo asenti.
Entramos en la habitacion, con cama de matrimonio, se abrazo a mi cuerpo diciendome: yo no soy una chica de alterne, tu me gustas mucho y yo soy viudad, no voy con cualquiera, asi que de sexo ando un poco escasa. Empezamos a acariciarnos y a besarnos en la boca, la tenia rica y me encantaba jugar con su lengua, nada que envidiar a una jovencita. Nos fuimos quitando la ropa el uno al otro, cuando me quede desnudo ya estaba en ereccion, ella se separo un poco de mi para disfrutar de la imagen de mi cuerpo desnudo, lo cual me puso mas caliente todavia, la atraje hacia mi y termine de quitarle el sujetador, dejando a la vista dos enormes pechos, sorprendentemente duros, cononados por dos grandes pezones, no me lo podia creer. Luego le baje la bragita, dejando al descubierto una gran mata de pelo negro y una culo grande y ancho, esto todavia me puso mas caliente.
Nos tiramos directamente sobre la cama morreandonos y sobandonos, luego ella me cogio por la polla, me hizo ponerme sobre ella, a la altura de su cara y comenzo a comerme la polla como si estuviera a punto de llegar el fin del mundo y fuera la ultima polla que iba a saborear. Nunca me la habian chupado con tanto deseo, fue increible. Me hizo tumbarme boca arriba y siguio degustando mi duro rab, luego se subio encima de mi, coloco mi polla en la entrada de su coño y termino de sentarse, mi rabo entro directamente hasta el fondo de su coño y ella solto un gemido de placer. Me estuvo follando durante un rato, en el cual pude adivinarle varios orgasmos. Ella se erigio como la directora de la pelicula, haciendome cambiar de una postura a otra, las queria probar todas. Finalmente quiso recibir mi leche en su boca, pero yo habia quedado prendado de su ancho culo maduro y pretendi otra cosa antes.
Le propuse encularla, ella estaba reticente, pero termino accediendo. Se puso una toalla para cubrir su cuerpo y saliendo de la habitacio pidio a una chica de alterne que le dejara lubricante. Volvio con el y yo me dedique primero a manosear aquellas grandes nalgas y luego a lubricarle el ojete del culo.
Coloque mi polla en la entrada y empuje despacito y suavemente hasta que me capullo desaparecio tragado por aquel gran culo. Segui empujando y se la meti hasta el fondo. Ella no se quejaba, al contrario, parecia disfrutar del momento. La estuve follando por el culo durante un gran rato, hasta que senti que llegaba el momento de descargar mi leche dentro de su culazo. Ella lo presintio y me dijo, sacame la polla del culo, tu leche la quiero saborear yo en mi boca. Accdi a su deseo, la saque, muy a pesar mio, me quite el condon y seguidamente, ella ya estaba de rodillas delante de mi, me la menee un poco y se la meti en la boca en el momento que un chorro de semen salia inyectado a presion, tubo que llegarle hasta la garganta. Recibio la descarga completa en su boca sin desperdiciar ni una gota y luego me hizo estar atento para que pudiese observar como se tragaba hasta la ultima gota de mi descarga.
Fue fantastico, estubimos liados durante los dias que permanacio trabajando el aquel bar. Luego se marcho para no volver, pero me dejo un grato recuerdo y lo mas importante: desperto en mi un interes por las mujeres maduras que no habia sentido antes y que desde entonces no he perdido, disfrutando de encuentros sexuales con mujeres entradas en años, que si no poseian un cuerpo 10, si eran una grandes y morbosas amantes.
Esta historia, es un relato, pero tambien es una experiencia que sucedio realmente, quien no se la crea, pero para el. Yo la vivi y que me quinten lo bailao.
Hasta la proxima.
Autor: Anonimo
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!