follando a la orilla del rio

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me llamo Melissa, tengo 23 años, no muy alta, cuerpo atlético, cabello largo y negro, piel india, ojos marrones y grandes, labios pequeños y hermosos…
mi esposo se llama Carlos tiene 26 años, piel morena, cuerpo perfecto, cabello y ojos negros, todo lo que siempre quise…

el relato que les cuento paso apenas una semana, resulta que mi esposo y yo tenemos 3 años de relación, nos amamos pero debido a digamos la juventud discutimos mucho, en esos días habíamos tenido problemas y yo decidí irme de la casa, el me buscaba y me llamaba pero yo no quería regresar hasta que ese fin de semana me convenció de salir con el supuestamente a hablar de la relación…

antes de continuar disculpen algunas palabras que quizás no entiendan pues soy dominicana y se dice que tenemos nuestro propio idioma…
continuando con mi relato, cuando salimos en una moto que tiene mi esposo,me llevo a un lugar apartado cerca de un rio donde casi ninguna persona va, ademas ya eran eso de las 6 o 7 de la tarde, el cielo estaba bien nublado y una brisa fría como de lluvia se acercaba a nosotros…

paro la moto a la orilla del rio y empezó a pedir que regresara con el, a lo que yo me negaba, pero mientras hablaba y me miraba a los ojos sus manos ya estaban entre mís muslos, sentía una corriente por todo mi cuerpo, estábamos sentados en la hierba, me halo hacia su cuerpo y yo me deje llevar, me beso y jugueteo con su lengua dentro de mi boca, seguido me empezó a sobar el toto (vagina) a lo que saco mis senos y empezó a mamarlos con unas ganas que nunca antes le había visto, se paro del piso y bajo el pantalón, y sus bóxers se levantaban de tan parado que tenia el guevo (pene,polla,etc) y saco su rico guevo de mas o menos 16cm moreno y con una cabezota roja y brillante, la cual ya tenia una gotita de baba saliendole, me tomo por la cabeza y me dijo "mámamelo" yo no opuse resistencia y me meti ese rico guevo en la boca

me lo empujaba casi hasta la garganta, tanto que me daban náuseas por instantes pero seguí comiéndome mi guevo k ya estaba mojadito y suavecito, el me dice que me detenga, me levanta del piso y me baja los pantalones y mis hermoso hilo dental blanco y me dice k suba un pie en una parte de la moto y deje el otro en el piso mientras abro las piernas lo mas que pueda, pensé que me lo hiva a meter, pero no, se bajo detrás de mi y empezó a mamarme el toto y el culo, mi toto que ya estaba mojadito de solo saber que tenia ese guevo tan rico en la boca, me pasaba esa lengua por el ollito de mi culo y hasta el ollito de mi vagina, estaba bien babosa ya y el noto mis ganas y se detuvo luego de unos minutos y se paro, ubico su guevo en mi vagina y de un solo empujón me lo metió completito de espaldas, grite fuerte de lo rico que se sentía, grite de placer, pero a ninguno los importaba pues ya era casi de noche y estábamos a las orillas de un rio que seguro no había nadie, y yo empece a pedirle…

-si papi, asi papi, metemelo enterito, agarrame por pelo y halame fuerte, agarrame por la cintura y dame duro
rompeme ese toto papi, has lo que quieras con ese toto que es tuyo
meteme mi guevo enterito, sacame esa leche…

el tuvo que detenerse unos segundos porque estaba casi viniendose y me pidió que cambiaramos de posición..
me subió en la moto (que esta bien estacionada) y me recosto a lo largo encima de ella y el se coloco en la parte de atrás me halo hacia el, me levanto un pie hacia su hombro mientras con el otro le rodee la cintura, entonces volvió a metermelo y que sensación mas deliciosa, en vez de meterlo derecho hacia un movimiento de abajo para arriba y haciendo mas precion cuando hiva subiendo, su guevo me entraba completito y yo gritaba del placer, el me decía…

-dime perra volverás a dejarme? Esto es para que no te vuelvas a ir, ves lo que te pasa por dejarme, ahora te romperé ese lindo toto que tienes perra, maldita perra te vas a venir? Me vas a dar lo que es mío, dame mi leche perra

A lo que siento unas gotas de agua caerme en la cara y era la lluvia, empezo a caernos encima mientas singabamos, era tan rico sentir ese guevo calientito completo dentro de mi y a la vez ese torrente de agua fria sobre mi cuerpo, no nos importo la lluvia ni los gritos de placer fuerte, no nos importo nada…
yo le respondia
-no papi, jamas me vuelvo a ir, no te dejare otra vez, es que ese guevo me gusta demasiado, hay papi dame duro, rompeme el toto, meteme ese guevo enterito, hay papi me vengo, me vengo papi, tomala toda ahiiiiiiiiiiiiii ahhhhhhhhhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiii papi tomala malditoooooo
y el me grita
-damela perra y toma la mía, te voy a llenar el toto de leche maldita perra, toma tu leche perra, ahiiiiiiiiiiiii Melissa te amo, toma tu leche mami, toma ahhhhhhhhhhh

Y nos vinimos juntos, sentí toda su leche calientita dentro de mi, mientras yo me venía tambien, y se contraian los músculos de mi vagina mientras sentía los espasmos de su guevo adentro de mi, ummmmmmmm delicioso

me dio un largo y rico beso en la boca, luego saco su rico guevo de mi toto, bajo su boca hasta alla y paso su lengua por mi clítoris y mi ollo, luego subió y me puso su guevo en la boca y me dijo "ahora limpialo con tu boca como yo te limpie tu toto" y asi lo hice, le pase la lengua por todo el guevo…

luego me ayudo a levantarme de la moto, me dio otro rico beso en la boca y me dijo "ves porque te amo y no puedo dejarte ir?", nos pusimos los pantalones y regresamos mojandonos…
esa noche regrese con mi esposo a casa y si me sigue singando asi, no creo que vuelva a irme…