Fui infiel, lo disfruté pero no quiero repetirlo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Quiero compartir con todos ustedes, mi infidelidad. Nunca hubiera pensado en serle infiel a mi marido, ya que nos llevamos muy bien y la pasamos bien en la cama, pero las tentaciones existen y he aquí el relato.

Bueno, para iniciar les comento que desde infante he sido una mujer muy atractiva, a raíz de eso he posado para revistas de moda en lo que respecta a ropa de temporada, mi ultimo trabajo antes de mi matrimonio fue de modelo. Soy de tez blanca, pelo castaño claro, ojos color miel, 1.70 mt de estatura, piernas largas torneadas, tengo una linda cintura que resalta mis caderas y mi trasero es bastante llamativo. Mi vida sexual ha sido muy activa, como la de toda modelo.

Después de casarme con Ricardo, por situaciones de crisis económica (ya que habia dejado de ser modelo) del hogar, a los 3 años de matrimonio decidí buscar empleo y encontré en una agencia publicitaria. En esa agencia había más hombres que mujeres y no fue raro recibir ofertas de sexo, ya que casi todos se me insinuaban para acostarse conmigo, pero yo me había casado por amor y no era mi intención faltarle a mi marido.

Un compañero de trabajo era Gerson, un lindo trigueño, soltero, de 1.85 metros de estatura, bastante guapo, sin embargo tenía una fama en la agencia de casanova, solo se mantenía viendo a quien llevarse a la cama. A los pocos días de trabajar allí recibí su propuesta de acostarnos, pero lo mandé al demonio, después de eso ya no me hizo ninguna petición, al contrario se volvió uno de mis mejores amigos y compañeros en esa empresa.

Pasaro por lo menos unos cinco meses. Hasta que llegó el día. Ese día, terminamos un contrato bastante agotador que habíamos empezado hace un mes atrás. Recibimos felicitaciones de nuestro jefe y estabamos muy contentos. Para la hora de almuerzo, como yo vivo a unas calles de la empresa y sabiendo que Ricardo mi marido no estaba en casa y que regresaría hasta más tarde, invité a Gerson para celebrar nuestro éxito, a que comieramos en la casa, que tenía alguna comida congelada de otros días, si es que no le importaba eso. El claro que aceptó.

Llegamos a la casa, calentamos la comida y estuvimos charlando, luego como todavía era muy temprano, nos sentamos en la sala y allí habían varios albumes de fotos, asi que él los tomó y empezó a verlos, muchas eran de sesiones de fotos mías en varios looks de ropa, incluidos traje de baños, que fueron los que más le llamaron la atención.

Entre bromas y risas, estuvimos viéndolas juntos, a veces me acercaba tanto a el que su boca me quedó muy cerca un par de veces. No se porque pero estar con un hombre que no fuera mi marido, en un lugar solos, y que ese hombre me haya propuesto coger hace unos meses atrás, era caliente, mi rajita me empezó a picar, como cuando quiero follar con mi marido. Y para ajustes, Gerson me empezó a endulzar el oído diciendome mientras veía las fotos, que realmente era una bella mujer, muy atractiva, con un cuerpo que haría pecar al más santo. Todo eso puso un ambiente cachondo. De repente que Gerson va acercando su boca a la mía, yo cierro los ojos para no ver, sus labios tocan los míos y nos sumergimos en un delicioso beso, mi lengua y su lengua envueltas en una fina caricia ensalivada. Luego sus manos tocaban mis senos sobre mi vestido, él bajó los tirantes y ahora los acariciaba sobre mi sujetador, nuestros labios aún tratando de comernos vivos.

Con mucha práctica, me zafó el sujetador y mis tetas, que de paso son grandes, salieron a la vista, en un segundo su boca me empezó a mamarlas, sus labios y lengua tenían varias mujeres de experiencia, ya que nunca me había excitado tanto de una mamada de tetas, como la que Gerson me dio esa tarde. Mi rajita se llenó de liquidos lubricantes rápidamente como previendo lo que ocurriria. Luego de saciarse de mis tetas, me recostó en el sofá y nuvamente con una tecnica muy depurada, me sacó los panties, me abrió las piernas y me comenzó a comer la rajita, Gerson lamía en todos los puntos que excitan, sobre todo el clitoris, ese hombre me deboró el coño como nunca otro hombre lo había hecho (cuando fui modelo tuve varios compañeros modelos que me mamaron la raja), estuve gimiendo allí con las piernas abiertas, pidiendole a Gerson que no terminara de mamarla, me vine como una vil puta barata, eyaculé tanto que Gerson tenía acabadura en su bigote. Estaba tan excitada por ese hombre que casi le imploré que me la metiera.

El se levantó y se quitó solo los pantalones y calzoncillos, se montó sobre mi y de un solo empujón me metió casi todo su tolete, luego de un segundo bombeo seco me terminó de penetrar hasta el fondo con gruesa verga, y yo gemía pidiendole que me follara duro, lo cual hizo con mucha fuerza, sentía sus cojones topar en la entrada de mi rajita, ese hombre me cogió como los angeles me hizo terminar en minutos de nuevo, me cogió duro por varios minutos mientras yo me quejaba de placer. Luego, me la sacó y me colocó en cuatro patas, y asi en posición perruna me la hundió de nuevo en el coño, me tomaba de la cintura para metermela hasta los ovarios. Me folló con un ritmo increible y salvaje. De nuevo eyaculé y me mojé por enésima vez mi rajita. Luego, Gerson que ya gemía también de placer, me clavó uno de sus dedos en mi agujerito del culo, lo fue metiendo hasta los nudillos, yo aún era virgen de allí, ya que el sexo anal nunca me había atraído.

Pero era tanta la excitación y el ambiente caliente, que sentí delicioso y placentero su dedo metido en mi culito mientras su verga entraba y salía de mi coñito. Después de unos minutos follando, un segundo dedo penetró mi ano, ahora si sentí un poco de dolor, le indique a Gerson que me dolía, pero el hizo caso omiso y siguió metiendo más rápido sus dos dedos en mi culito. Me vine de nuevo emitiendo un gran chillido como de animal en celo.

De pronto, que me saca su duro músculo de mi vagina y se sube al sillón, es decir parado en el, colocó su verga en la entrada de mi culo y de un empellón me penetró y adios a mi virginidad anal. Le dije varias veces que no quería, pero con lujo de fuerza siguió embistiendome el culo, diciendome no se que palabrotas también, luego de pentrarme se quedó bombeandome su verga en mi orificio, del dolor pasé al placer, la sensación era diferente que con la vagina, pero era placentero, nuevamente volví a gemir y le dije que era el primero que me penetraba por allí, Gerson se sintió tan bien por eso, que aceleró sus pistonazos y en breve me inundó los intestinos de esperma caliente. Mientras eyaculaba, Gerson daba unos gemidos que llenaron todo el departamento, gritos de macho satisfecho.

Después de descansar unos minutos, nos compusimos la ropa y regresamos al trabajo, había un silencio por parte mia, ya que no me imaginaba pegarle los cuernos a mi marido y en nuestro propio departamento.

Al día sigiente le dije a Gerson que todo eso había sido un error y que le pedía que se guardara el secreto totalmente. El aceptó, y aunque otros días me propuso otro encuentro, yo no quise y no acepté. A pesar que había quedado satisfecha como nunca ese día. Fue tan rico ese día, que cuando hacía el amor con marido me imaginaba que era Gerson quien me cogía como ese día, eso me excitaba mucho. Nunca le he dado mi culito a mi marido, solo Gerson a penetrado en el. A los tres meses de eso, renuncié de esa agencia, ya que era imposible estar a la par de Gerson y no pedirle que me volviera a hacer suya.

Ahora trabajo en otra cosa en otra empresa. Espero les haya gustado.