Gracias a mi padrastro
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me llamo Caren, pero me dicen Mimosa, ya que soy muy mimosa, en la actualidad tengo 28 años, soy casada, y espero un hijo.
Siempre fui muy pequeña, mido ahora 1,50 y peso 48 kilos, y cuando tenía 13 años, que fue el inicio de mi vida sexual de la mano de mi padrastro, medía 1,20 y pesaba solo 35 kilos.
De toda la vida fui pequeña.
Cuando mi madre se divorció de mi padre, estábamos en Venezuela, yo tendría unos 9 años, mi madre conoció por internet a un señor argentino que vive en España, estuvieron un tiempo hablando hasta que decidieron vivir juntos, y que tanto mi madre como yo, viajemos, mi padre firmó el permiso de viaje y fuimos, llegamos y el cambio de vida fue total.
Eduardo, que así se llama mi padrastro me crió como una hija, nuestra relación es maravillosa, aún ahora que siendo casada, me hago un lugar para estar con él.
Pasaban los años, ya estudiaba, mi madre y Eduardo se llevan muy bien, cuando cumplí los 13, mi abuelo materno se enfermo y mamá tuvo que viajar a Venezuela para cuidarlo, ya que no se sabía en que podía terminar su enfermedad, y yo me quede con mi padrastro.
Hubo un cambio en él, le gustaba mucho jugar de mano conmigo, me daba nalgadas, no fuertes, era mas bien como que me tocaba la cola, siempre quería que estuviera de faldas, sus nalgadas no eran sobre la falda, sino que metía su mano debajo y ya me apretaba mis nalgas, yo lo tomaba todo como un juego, al principio eso me molestaba, pero después fue como parte de un juego que hacíamos, una tarde estábamos viendo tele y me empezó a hacer cosquillas y yo me retorcía de la risa, con la escusa que me hacía cosquillas sus manos me apretaban mis pequeñas tetas que recién me estaban saliendo, yo me quise levantar para que no me haga mas cosquillas, pero Eduardo me abrazó e hizo que me siente en su falda, yo le pedía que deje de hacerme cosquillas entre hipos, me reía, levantaba mis piernas, las abría intentando soltarme de sus brazos, mi falda estaba mas arriba de mi calzón, y siento como haciéndome cosquillas, me aprieta la cuca, yo sentí como una descarga eléctrica, Eduardo ya no me hacía cosquillas en el cuero, solo pasaba su mano por mi cuca, haciendo que sienta algo extraño, me gustaba mucho lo que sentía con su mano acariciando mi cuca, "te gusta?", me dice pasando su lengua por mi oreja, haciendo que me estremezca, metiendo sus dedos por el elástico de la pierna de mi calzón y acariciando los labios de mi cuca, "si", le dije, sin cerrar mis piernas y sin decir nada de como me acariciaba tan íntimamente, "me dejas que te quite el calzón", me dijo, y seguía con su lengua lamiendo mi oreja y sus dedos acariciando mi cuca, que notaba que estaba mojada, "si", recuerdo que solo le pude decir eso, me sentía tan extraña, que casi no podía hablar, solo gemía, levanto mi cola de su falda y noto como me iba quitando esa prenda, hasta que llega a mis tobillos, me baja de su falda, recostándome en el sillón, levantando mis piernas y me quita los zapatos y el calzón, empezando a lamer mis pies y seguía con su caricia en mi cuca, yo estaba con los ojos cerrados, temblaba, no sabía porque, pero no podía dejar de temblar y gemir, siento como me besaba y pasaba su lengua por mis piernas, lo sentía como bajaba, sin dejar de besar y lamer mis piernas y su mano no dejaba de acariciar mi cuca, me abre bien las piernas y grité cuando siento su lengua lamer mi cuca, como la abría y lamia la parte de adentro, yo estaba como dormida, no era capas de hacer otra cosa que gemir y gemir mientras mi padrastro me mamaba la cuca, me hace dar la vuelta, quedé con la cola para arriba, siento como me besaba las nalgas, me las apretaba, como jugaba con ellas, hasta que las abre y lo que sentí cuando su lengua me empezó a lamer el ano fue tremendo, madre mía, que delicia sentir su lengua lamer y punzar para entrar con su lengua, sentía como mamaba fuerte mi ano, como abría mis nalgas lo mas que podía y sentía la punta de su lengua intentar entrar, yo solo gemía y movía mi cabeza.
"Mimosa, me dejas que te desnude?", me dijo, bajando mi falda, sin esperar a que le diga nada, yo estaba tan extraña, que me deje desnudar por completo sin decirle nada, Eduardo me levanta en sus brazos y me lleva a su habitación, besando y mamando mis pequeñas tetas, me siguió besando, y me volvió a mamar la cuca, yo pensaba que me orinaba, sentía cosas en el estomago, mi padrastro se quitó sus pantalones, dejando que le vea su verga, era la primera que veía en mi vida, se acomoda entre mis piernas y empieza a pasar su verga contra mi cuca, para arriba y para abajo, yo no sabía que iba a hacer, solo estábamos disfrutando, ya que se notaba que le gustaba pasar su verga por mi cuca y a mi que la pase, me hace dar la vuelta, quedando con mi cola para arriba, yo estaba como en un sueño, siento como pasa su lengua de nuevo por mi ano, como pasaba su verga, como apoyaba la punta de su verga en mi ano, y hacía fuerza, como volvía a lamer mi ano, y volvía a apoyar su verga y hacer fuerza de nuevo, hasta que di un pequeño grito de dolor, al sentir como su verga había entrado un poquito en mi cola, así estuvo, no se cuanto tiempo lamiendo y apoyando su verga en mi ano, haciendo que entre cada vez mas, no me dolía, estaba como sedada, sentía su verga dentro de mi cola, como hacía fuerza y sentía como entraba, como se abría mi ano, mi padrastro, bajo su cabeza y me empezó a lamer mi oreja haciendo que gima fuerte y volvió a hacer fuerza y siento como su verga seguía abriendo mi cola, "te gusta Caren?", me dijo, sin dejar de lamer mi oreja y seguía metiendo su verga despacio muy despacio dentro de mi cola, "si, me gusta, pero que me haces?", le dije toda inocente, "te estoy rompiendo la colita", recuerdo que me dijo, y volvió a meter mas adentro su verga, y así entre lamidas en mi oreja, haciendo que gima y mucha paciencia, me metió toda su verga en la cola, quedándose quieto, sentía su verga dentro de mi cola, no puedo decir que me haya dolido, sentía una incomodidad, pero me gustaba.
Siento como Eduardo empieza a mover su cuerpo despacio, sentía su verga moverse dentro mio, como se movía en círculos, para los costados, "es para agrandar mas tu ano", me dijo, ya moviendo su verga en círculos y haciendo que salga, y la volvía a meter, me trataba con tanta delicadeza que solo gemía de placer, ese placer nuevo, desconocido para mi, los movimientos ya se hacían mas rectos, mas fuertes, sentía como la sacaba casi toda y se dejaba caer sobre mi, haciendo que vuelva a entrar, yo estaba relajada, sentía como su verga entraba y salía de mi cola, me gustaba, sentía como me latía la cuca.
Me saca toda su verga y me hace poner boca arriba, sentía mi ano latir, era como si me punzara, mi padrastro me levanta las piernas y con su mano, dirige su verga de nuevo a mi ano, y siento como la vuelve a meter, siempre despacio, en ningún momento me hizo doler, siento como levanta mis piernas y su verga estaba de nuevo toda dentro de mi cola, me empieza a lamer los dedos de los pies y su mano a acariciar mi cuca mientras su verga entraba y salía de mi cola, sentía mi ano abierto, sentía que entraba y salía sin dolor ninguno, yo con mis pies en su boca y su mano acariciando mi cuca, sentía como que quería gritar, era tal la sensación de placer y bienestar que sentía, era pura felicidad, sentía como mariposas en mi estomago a medida que la verga de mi padrastro no dejaba de entrar y salir de mi cola, "te gusta Caren, mimosita mía", me decía metiendo su verga bien adentro de mi cola y la movía sin sacar, yo no podía hablar, solo gemía y balbuceaba cosas sin saber que era, disfrutaba esa verga entrando y saliendo, abriendo mi ano, su boca comiendo mis pies, hasta que no pude mas y grite y empecé a sentir la sensación de que me orinaba, que algo explotaba en mi cuca, solo gemía moviendo mi cabeza de un lado a otro, siento como mi padrastro saco su verga de mi cola, y la empezó a acariciar fuerte, subía y bajaba la piel de su verga, hasta que gimiendo muy fuerte, veo que sale un líquido blanco, espeso, a chorros, que me llegaban a la cara, a mis senos, pasaba su verga, aún saliendo ese liquido por mi cuca, dejaba caer ahí los que después me dijo que era leche, en mi barriga, haciendo que mientras a él, le terminaba de salir su leche, que yo con mis manos, me embadurne por toda mi cara, mis pequeños senos, y él embadurnaba de leche mi cuca y mi ano, con sus dedos.
"Te gustó, mimosita mía", me dijo, mordiendo los dedos de mis pies y metiendo un dedo en mi ano, que por lo abierto que estaría casi ni sentí cuando lo metía.
Si que me gustó, me encantó lo que mi padrastro me hizo, como me inicio en el sexo, como ahora de grande, casada, siempre busco un tiempo para que meta su verga en mi cola y me chupe los pies, haciendo que disfrute como solo él me sabe hacer disfrutar
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