Inocentes 16

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi nombre es Gonzalo y este es mi primer relato, ya era hora de que aporte algo a la comunidad. Actualmente tengo 24 años, mido 1.80 cm, morocho y a pesar de no tener un escultural cuerpo, tengo un pene de 17 cm del que no me puedo quejar.

Por alla en el año 2007 cuando terminaba la secundaria una amiga de la escuela me presento a su hermana quién se convertiría en mi novia. Su nombre es Carolina y a pesar de que en ese entonces tenía 16 años, debo admitir que era muy linda: Piel morena clara, grandes ojos color café , su pelo con flequillo recto que estaba de moda, estatura 1.65 cm aprox. y a pesar de que sus senos y nalgas no eran llamativos, era dueña de unos labios gruesos que provocaban el deseo de muchos.
En poco tiempo nos pusimos de novios, era el primero en su vida y pretendía ser su primer hombre, pero tenía un inconveniente: Su timidez e inocencia me impedían que logre acariciar su cuerpo cuando la besaba e incluso he pasado varias noches en su casa intentando lograrlo. Pero era cuestión de tiempo que cediera y luego de un par de meses ella era la que no quería detenerne mis caricias. Fue entonces cuando decidí que era tiempo de avanzar un poco más.

Una noche logre convencer a su padre que la dejara quedarse a dormir en mi casa y lo último que ibamos a hacer era dormir. Fu a buscarla a su casa en auto, Caro vestía una musculosa larga tipo vestido rayado coral y una calza negra, verla así me excitaba. Cenamos en mi casa con mis padres, charlamos un poco y al cabo de unas pocas horas nos fuimos a mi habitación, era un poco más de media noche. Estabamos acostados en la cama viendo la tele, intercambiando pocos besos y alguna que otra caricia, yo esperaba ansiosamente que mis padres se fueran a dormir para comenzar nuestra noche de pasión. Luego de que escuche la puerta de la habitación de mis padres cerrarse, me levante, apague la luz, puse música para distraernos y le pedí que se sentara en mi cama.

Ella lo hizo, me acerqué y comenzé a besarla lentamente mientras acariciaba su espalda. Carolina conocía mis intenciones y respondió mi beso, notaba como mis caricias iban aumentado de a poco su deseo, mis labios bajaron a su cuello al mismo tiempo que nos acostabamos y aprovechando la posición en que estabamos se veía obligada a abrir sus piernas para no estar incomoda, aprovechando esto, mis manos recorrieron sus piernas que gracias a su calza, podía excitarla aún mas, con un poco de dificultad Caro me quitó la remera y yo ni lerdo ni perezoso le quite su musculosa pudiendo sentir su piel que tanto deseaba, era suave y podía recorrela sin dificultad alguna, los besos comenzaban a expresar pasión, me abrazaba con mas fuerza impidiendome que me detenga. Decidí que era hora de sentir lo que mas quería y lentamente subía mi mano derecha hacia su vagina, sentía que estaba mojada y mientras mas la acariciaba, Caro mas se excitaba, me jalaba del pelo, tcaba mi espalda, mi trasero y su mano buscaba dentro de mi pantalón mi pene, pero no se animaba a tocarlo. Fue entonces cuando decidí ponerme de pie, prendí un velador, Caro miraba sin sospechar que iba a hacer, entonces le dije:
-Voy a mostrarte algo, no te asustes, sé que es el primero que ves. Abri mi cierre, bajé mi pantalón hasta mis rodillas y quedé con el boxer, la tenía muy dura.

-Dame tus manos. Ella pensativa y con algo de miedo me las dió, sus manos temblaban, las apoye sobre mi cadera y de a poco las acerque a mi pene que latía con ansias de sentirla. Coloque una mano sobre mi pene, Caro quiso sacarla pero no se lo permití, mi mano guiaba la suya a lo largo de mi pene, su rostro se mostraba sorprendido y notaba un poco de timidez en él. Guíe su otra mano hacia mis huevos, esta vez no inteno quitarla. Luego de 5 minutos acariciandomela, tome ambas manos y las puse sobre el borde superir de mi boxer, Caro entendió lo que debía hacer y lentamente lo bajo, miraba asustada pero con ansias de conocer uno. Mi pene al fin se liberó, su rostro notaba sorpresa, no me sacaba la vista de lo que acababa de ver, Caro no se movió, no sabía qué hacer y nuevamente tome sus manos y las dirigí a mi pene.
-Es muy grande, casi cabe en dos manos.

-Viste? A los hombres nos encanta que nos tomen el pene. Subi y baja tu mano a lo largo.
-Además esta húmedo. Eso es semen?
-No, es líquido preseminal. Vos también estas húmeda ahi abajo
Se sonrojó cuando le dije eso, mientras seguía pajenadome con algo de torpeza, desprendí su corpiño rojo y pude ver sus senos con forma de copa, sus pezones estaban duros y un poco morados.
-Te animas a darle un besito?
-Me da verguenza, no se si hacerlo
-Solo un besito, aca en la puntita. Hacelo por tu novio si?
-Bueno.

Comenzo con un besito, le segui insistiendo por más, no podía dejar pasar la oportunidad de sentir sus carnosos labio y su lengua.
-Abri la boca y chupala.
-No! Me da cosa
-Amor no te va a pasar nada malo, además, las parejas hacen estas cosas, es normal. Imaginate que es chupa chups.
Acento con la cabeza, cerró sus ojos, abrió un poco su boca pero no cabía, entonces la abrió lo más que pudo. Solo entró la cabeza pero basto para que yo gimiera, la sacó un poco, pero esta vez trato de metersela hasta donde ella aguantaba.
-Muy bien hermosa, abri los ojos no seas miedosa, tenes que metertela toda. Le dije esto aprovechandome de su inexperiencia, a pesar de sus esfuerzos, solo llegaba hasta la mitad.
-Mirame mientras me la chupas.

Lo hacia torpemente, le enseñe como subir y bajar su mano mientras seguía con mi pene en su boca, esa escena era muy excitante, sus grandes ojos y su mirada inocente no dejaban de verme. Me laceraba el miembro cada vez que se movia. No aguanté más y la tome con fuerza de su cabeza para que aumentara el ritmo. Se la metía hasta que hacía arcadas, incluso así no entraba toda, sentía que iba a explotar.

-Metetela toda, dale si yo sé que podes. Ella muy sumisa acentaba con su cabeza, comenzaban a caerle lagrimas de los ojos, se la metía hasta donde me permitía su garganta, la dejaba un rato así hasta que hacía señas de que se ahogaba y se la sacaba. Verla de esa forma me descontrolaba más, no me importaba nada.
-Seguí así, yo sé que te gusta chuparla y mira todo lo que tiene que entrar todavía. Hasta el fondo va a entrar.

Me miro asustada cuando dije eso, estaba por acabar y asi fue, con brutalidad tome su cabeza y hice que se metiera el resto de mi miembro. 5, 6, 7 chorros de semen, no los quería tragar.
-Tragate la lechita, dale que sino te ahogo con mi pija. Obligada lo hizo, luego saco sus labios chupando todo sin dejar escapar nada.
-Abri la boca y mostrame que no quedó nada. Asi lo hizo, saco su lengua y efectivamente se tragó todo.
Decidí que después de excelente mamada que recibí, debía correspondele con algo….

Disculpen que lo alargue tanto, pero no quería dejar ningún detalle afuera. Subiré la segunda parte en unos días, comentes si les gusto! Asi me ayudan a corregir algunos detalles para el próximo.
Hasta luego!