Jardinero: un espectáculo hermoso
Continuación de Jardinero: un trabajo nuevo y Jardinero: un trabajo soñado.
Parte 1: https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/heterosexual/jardinero-un-trabajo-nuevo/
Parte 2: https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/heterosexual/jardinero-un-trabajo-sonado/
Joaquín (32) es de tez morena. Mide un 1,73, tiene el pelo negro y brazos y piernas gruesas por los diferentes trabajos que ha tenido, los cuales requieren fuerza física. No es gordo ni tampoco flaco, tiene un poco de físico en el pecho y en los abdominales. Sus ojos son marrones claros.
Álvaro (37) por otra parte es alto, 1,89. Es blanco, de pelo negro, flaco. Tiene una barba cortada, no muy extensa. Sus ojos son color verde.
Romi: 9 años era blanca con pelo negro, con un culito un poco redondo.
Anita: la del medio, 6 años y era un poco morena.
Flor: la más pequeña, tenía 3 años y era rubia.
La escena había dejado boquiabierto a Joaquín. Observaba todo desde la puerta que conectaba el cuarto de invitados con el cuarto de Alvaro. Se puso de rodillas oculto detrás de una pequeña cómoda que estaba al costado de la puerta, lo suficiente tapado para que no le vean, teniendo para la accion, pero con la cabeza sobresaliendo por un costado para no perderse nada. En la cama estaba Romi(9) con las piernas encima de los hombros de un hombre que le estaba haciendo un oral en su vagina. Era Álvaro, su padre. Ambos estaban completamente desnudos, pero llevaban puestas unas máscaras: antifases que le cubrían parte de la cara. La razón de esta unica prenda: una cámara que grababa todo lo que ocurría.
Romi lanzaba gemidos mientras su padre cada vez aumentaba la velocidad de su boca y de su lengua. Utilizaba sus dedos para abrir un poco más esas labios vaginales, metiendo más su lengua en ese hoyito. En un momento, Romi puso sus manos sobre la cabeza de su padre, evitando que alejara esa lengua de su vagina. Lo disfrutaba, esa pequeña no queria que pararan. Su padre pasaba de vez en cuando sus manos por todo el cuerpo de su hija, concentrándose en esos pechitos, en esas tetillas rosaditas que parecían ponerse duras. En el suelo de madera podía ver unas manchas. Al parecer de la verga del padre salían pequeñas gotitas, precum seguramente.
Habían pasado aproximadamente unos 10min cuando Romi apretó con sus piernas la cabeza de su padre y largo unos fuertes gemidos. De su vagina salieron unos chorros que fueron a parar en toda la cara y la máscara de su padre. Por un breve momento la nena pudo descansar y tomar un poco de aire, hasta q su padre mientras se pasaba la lengua por sus labios fue directo a la boca de su hija, fundiéndose en un beso, compartiendo fluidos, tanto saliva como los fluidos vaginales de Romi. A la vez, Álvaro comenzó a frotarse con su hija, su verga y la vagina de ella tocándose. Las manos de ambos se pasaban por todo el cuerpo del otro, mientras continuaban con ese beso. Él le estaba comiendo la boca, lamiendo de vez en cuando su cara y su cuello.
Mientras eso pasaba, yo sentía que mí verga iba a estallar, tenía tocarla por miedo a venirme antes de tiempo.
Terminado los besos, Álvaro sonrió y comenzó a hablarle, de manera que se escuchara en la grabación:
A-Que rico amor, pero eso es solo el comienzo. Saquemos el juguetito, es hora de reemplazarlo por un pedazo de carne que te va a gustar más.
R-¿Me va a doler, papi?
A- Puede que un poquito corazón, pero estuvimos preparando ese hoyito por mucho tiempo. Ya debe estar lo suficientemente preparado para lo que sigue. Además nuestros amigos que nos ven ya están esperando que pasemos a esto. No los queremos defraudar, ¿o no?.
R- No. (Dijo esto dudando de tal afirmación).
A- Bien, esa es mí nena.
Lo siguiente que hizo fue ir al borde de la cama, donde levanto a la nena y apunto el culo de Romi a la cámara. De ahí saco un pequeño dildo, que parecía más un plug anal. Después lo volvió a meter y sacar unas cuantas veces más, para asegurar la dilatación de esa pequeña y para preparar a quienes supuso serían los espectadores de dicho video a lo que iba a venir después.
Tras eso, puso la cara de la nena mirando a la cámara, mientras que con el celu, que estaba sobre la cama, comenzó a grabar lo que iba a pasar en ese culo. Se veía que la verga de Alvaro estaba tan babosa por el precum que la apunto directamente al culito de Romi. Abrió con su mano libre ese hoyito y tiró un escupitajo cargado de baba a ese hoyo, para lubricar un poco más. Después de eso, comenzó a apuntalar esa verga en el culito de su hijo, que vista desde donde estaba Joaquín parecía de unos 19cm, un poco más larga que la de él pero más fina.
Los primeros centímetros entraron sin mucha resistencia, al parecer el plug había dilatado lo suficiente. De la boca de Alvaro salía un bufido, de lo hermoso que sentía su pija entrando por esa cavidad. Sin embargo, cuando entro una tercera parte de la verga comenzó a tener unas cuantas dificultades para continuar. Al parecer, por la cara de Alvaro, había llegado a la estrechez de ese agujero. Su cara era una mezcla de excitación, deseo e instinto animal por continuar hasta el final. Miro para el techo un rato, tomo aire con los ojos cerrados y después miro a la nena.
A- Respira corazón. Abrí con tus manitas la colita. Ayuda a tu papi a entrar.
R- ¿Falta mucho papi?
A- Solo un poquito más. (Mintió el desgraciado, sabía que apenas había comenzado pero no quería asustar a la nena)
Romi puso sus manos a los costados de su colita y comenzó a abrirla, esperando cumplir los deseos de su padre. No podía ver bien su carita, pero debía de ser de placer y de miedo a la vez.
Su padre lanzó otro escupitajo, está vez a su verga ensartada en esa colita, y continúo metiendose en ese agujero. Mientras iba entrando, abriendo con su carne ese hoyito estrecho, de la boca de Alvaro salían gemidos que demostraban lo hermoso que estaba sintiendo ese momento. Había entrado ya dos tercios de su verga. Faltaba poco para llegar al final. Lleno de excitación al contemplar su verga en su hija, comenzó a darle unas nalgadas a su hija. Romi lanzó un pequeño aullido, mezcla de susto y excitación.
R-Papi, me está comenzando a doler.
A- Shh. Silencio corazón, falta poco. Morde si querés a Pacho, para que puedas aguantar lo que falta.
R- ¿Pero falta mucho?
A- Solo un poquito más. Morde un ratito a Pacho y no lo sueltes hasta que yo te diga. Cuando esté todo adentro, vas a comenzar a disfrutar, te lo prometo.
R- Ay pero..
A- Sin pucheros. No me hagas enojar. Mete a Pacho en tu boca y no lo sueltes hasta que te diga, ¿está claro? (Puso una voz más firme para esto).
Álvaro le tiró a Pacho (un osito que estaba en la cama) para que Romi se lo pusiera en la boca. Una vez se puso el osito en la boca, volvió a escupir en su pija. Su cara mostraba cierta molestia, la pequeña protesta no le había gustado para nada. Así que, dejo un momento el celular en la cama y sin sacar la verga de ese culito, puso una de sus manos agarrando los brazos de Romi sobre la espalda de esta, mientras que con la otra agarraba la boca de su hija, haciendo que apretara más fuerte el osito que tenía en su boca. Tras ese agarre, dejo caer el resto de esa verga sobre ese culito. Su pequeña hija se movió, tratando de zafarse del fuerte agarre al que estaba sometida, pero la fuerza del hombre era más. Joaquín sentía unos gritos ahogados por el osito en la boca. Eso mojo aún más los pantalones de Joaquín, mientras su verga pedía a gritos salir.
Álvaro soltó un gemido, medio bufido animal, medio grito. Toda la excitación reprimida hasta el momento salió de un sola vez. La estrechez de la cavidad debía estar ahogando su verga, mientras que los movimientos de Romi debían estar metiendo, sin darse cuenta, aún más la verga de su padre en su culo. Además, creía Joaquín, que los gritos ahogados de Romi debían excitar aún más a su padre.
A- ¿Sentís eso putita? Eso es lo que estaban esperando nuestros amigos. Que tu macho te domara como se debe. Así vas a aprender a no protestar. Y eso que solo estamos comenzando.
Tras eso sacó un poco la verga y luego la metió. Ese vaivén comenzó despacio primero, pero después fue aumentando en velocidad y fuerza las embestidas. Al comienzo continúo con sus manos agarrando los brazos y la boca de su hija. Sin embargo, una vez los gritos comenzaron a parar y fueron reemplazados por gemidos (o lo más cercano a ello) decidió soltarla. Las embestidas eran freneticas por momentos, rápidas, haciendo que los huevos de Alvaro chocarán con la vagina de Romi. Se escuchaba un claro plap, plap, plap, con cada embestida. Los bufidos de Alvaro eran sonoros, se notaba que lo estaba disfrutando. En un momento se detuvo para cambiar de posición, poniéndola cara a cara. El desgraciado quería ver el gozo de su hija. Puso las piernas de su hija sobre sus piernas, sentándose él en la cama.
A- Ahora salta y movete sobre mí verga. Quiero tomar un poco de aire.
Álvaro estaba muy sudado. Se notaba su cansancio. Pero en ningún momento su verga dejo de estar erecta. Temia que la chica lo viera, ya que su cara apuntaba para el lado donde Joaquín estaba. Pero Romi comenzó a saltar sobre la verga de su papi con los ojos cerrados, largando gemidos, de vez en cuando miraba al techo. Continúo así un rato, hasta que también se canso. Su padre, ya descansado, decidió levantarla con sus brazos, comenzó a darles unas embestidas fuertisimas… Una, dos, tres, cuatro y termino por acabar. Álvaro lanzó unos fuertes gemidos y bufidos, mientras por un momento sus piernas temblaron. También lanzó unos gemidos Romi, parece que se había venido. Después de eso, Álvaro la tuvo un rato más levantada a Romi, hasta que decidió dejarla en la cama. Al desprenderse de ella, se pudo oír un cloc, similar a un corcho saliendo de una botella. Ya sin su verga, todo el semen, la sangre y la baba que se acumulaba ese culo buscaba salir. Álvaro decidió apuntar ese culo a la cámara y lo abrió, quería que quedará grabado esa escena.
Mientras Álvaro estaba concentrado en eso, Joaquín decidió con mucho cuidado salir de dónde estaba y volver al cuarto de visitas, cerrando con mucho cuidado la puerta. Moverse era muy difícil, su verga estaba a mil, su short no aguantaba, parecía que se iba a romper por la presión de su verga. Necesitaba acabar, necesitaba ir al baño del fondo. Al salir del cuarto del fondo, vio que las niñas Ana (6) y Flor (3) seguían viendo tele en el living, viendo una película, mientras comían los dulces que hace rato le había dado Joaquín a Anita por su gran trabajo. Al llegar al baño, se bajó rápidamente los pantalones, agarro una bombachita pequeña (que debía de ser de Flor) y dando apenas unas jaladas a su verga, que estaba muy dura y sensible por la excitación acumulada, sintió como los chorros de semen acabaron en toda la tela. Fue tan abundante que en poco tiempo la prenda quedó mojada y babosa por su leche. Una vez se hubo calmado, limpio rápidamente el baño, evitando que quedará prueba de lo que había pasado. A la bombachita la puso en una bolsa que tenía y la guardo en la mochila. Terminado todo, se limpio las manos, un poco la cara (ya que estaba sudado) y comprobo la hora. Las 18:13. Ya se había pasado la hora de salida.
Se preparó para irse, iba a dejar el arreglo del problema eléctrico para otro día.
Dirigiéndose para la casa, se encontró a medio camino a Álvaro.
A-Vi que no llegaste a arreglar el problema eléctrico.
J- Tenía más tarea de lo que pensaba en el jardín. Entre un momento a la casa a ver la situación. (Esto último lo dije para ver cómo reaccionaba)
A- Si escuché cuando entraste. ¿Que tal lo que viste? (Tras esto me dio una sonrisa cargada de diversión, rosando la perversión)
Esa respuesta y esa sonrisa me saco de onda por un momento. Definitivamente ambos sabemos de lo que hablamos.
J- Ha sido.. interesante diría yo jaja. (Sonreí de la misma manera, deseoso de ver cómo continuaba esa conversación).
A- Jajaja. Sos cauto, se notó eso cuando te escondiste a espiar desde detrás de la cómoda.
J- Jajaja. Es q nadie se perdería ese espectáculo. Estuvo riquísimo.
A- Que bueno que te haya gustado. Espero que ese espectáculo me haga un descuento a la hora de pagarte.
J- Uno pequeño. Yo diría que probarlo haría un descuento más importante. Jaja. (Si el tipo pensaba que con solo ver me iba a pagar, estaba equivocado).
A- Ja. Bueno. Se puede arreglar. Pero otro día, claro. Y tendríamos que arreglar los términos.
J- Si claro, aunque también me gustaría conocer un poco la historia, si quiere contarme claro.
A- Bien. Otro día también para eso. Esto es lo que te debo. (Procedió a contar frente a mí el dinero que me debía, sin embargo, saco una pequeña cantidad, pago del espectáculo). Espero que esté bien.
J- Está bien. ¿Cuando quiere que venga?.
A- Mañana si podes. Necesito ese problema eléctrico arreglado cuanto antes. Mí padre viene a verme y ver a las niñas.
J- Jajaja. Claro claro, vengo mañana.
Tras eso, nos dimos la mano, ambos nos guiñamos el ojo con una sonrisa y me dispuse a irme.
Tras salir de la casa, la felicidad que sentía era enorme. No solo había disfrutado a Anita, también había podido ver un espectáculo entre Álvaro y Romi de lo más hermoso y excitante. Sentía que el trabajo que había conseguido había sido lo mejor que le había pasado en la vida. Pronto podría disfrutar esos hoyitos por unos míseros pesos.
Sin embargo, había muchas preguntas: ¿Desde cuándo Álvaro lo hacía con su hija?, ¿lo hacía con las otras niñas también?, ¿quienes eran esos «amigos» de los que hablaba?. Y una más se había sumado ahora, ¿el padre de Alvaro también disfrutaba de sus lindas nietas?
Tantas cosas pasaban por su mente. Necesitaba respuestas y mañana las iba a tener.
Continuará
Espero que a todos les haya gustado el relato. Cómo siempre me disculpo cualquier error que pueda haber en la escritura.
Sin dudas una de la mejores historias de por aquí, espero poder ver la siguiente parte, si quieres escríbeme mi Gmail [email protected]
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