La bendi de Papá 2da parte
Sophia está más grande. Y aprende a guardar secretos de amor con su papa. .
Sophia está más grande. Y aprende a guardar secretos de amor con su papa.
A los dos años y medio de Sophia, yo había sido trasladado a los servicios de inteligencia, y ascendido a funciones que me permitiera vivir mas tiempo en casa, aunque me obligaban a estar a disposición de mis superiores por varias semanas en ocasiones. ASi fue como había estado dos semanas ausente y casi sin poder hablar con Mariana y con mi beba. Cuando yo no estaba presente Sophia se ponía particularmente triste, y muchas veces tenía conductas de berrinches, o que hacían enojar a Mariana.
En ese tiempo estaba dejando los pañales, solo los usaba de noche, y de día andaba prácticamente sin problemas. Pero esa tarde no fue así, llegue medio de sorpresa después de tantos días de estar fuera de casa, y al entrar escuche los gritos de Mariana.
-PEndeja de mierda, otra vez te measte toda!!!te voy a moler a palos pendeja conchuda!!- los gritos venían de la cocina, el llanto de Sophia era terrible, claramente la había golpeado
-perdón mamá, fue sin querer, estaba jugando
– siempre estás en otra pendeja. Te voy a tener que poner pañales de nuevo, un corcho en la concha te voy a poner!!
– ¡No mama!! no me hagas nada- “ paff” se escuchó el nalgueo a Sophia y mas llanto
– Que mierda pasa Mariana, que gritas asi?- Sophia tenía los pantalones mojados bajos, y la cola colorada- vos le estabas pegando?
– ahh mira ahi volvio papa, por fin, a ver si te haces cargo de tu princesa, te vas a la mierda
– que decis, pelotuda. Si no laburo no comes. no tenes para todo lo que te gusta, todavía estás estudiando, y yo mantengo todo. si queres que contratemos a alguien para que la cuide lo hago, pero no le pegues más.
– ¡Mira como se meo, tres veces se meo hoy!!
– Debe ser porque la tratas como el orto. Veni Sophie, veni con papito- Me agache le subi su bombachita y su pantalón, el olor a pipi ya me activo. La abrace fuerte- te extrañe princesa, papi te va a cambiar- Mire a Mariana, después vos y yo vamos a hablar…mejor ni te acerques, porque se te pudre
– Callate tarado, que vas a hacer, pegarme!!- Dijo a los gritos mientras me alejaba con Sophia en brazos
Sophia sollozaba en mis brazos abrazándome fuerte. Su pelo ahora estaba largo, era negro, brillante, sus ojos grises estaban colorados de tanto llorar, su pielcita morena, sus rasgos sensuales estaban paspados por las lagrimas.
-Ya esta princesita…papi te extraño, no llores, yo ahora te cambio, y además te doy una sorpresa que te traje
– PApi…me duele, perdon…no me di cuenta…soy una cochina…- dijo llorando, mientras entrábamos al baño.
– Sos la cochina más bonita del mundo princesa, amo a mi cochinita- dije mientras la dejaba en el piso y le daba besitos en sus lágrimas…- estabas nerviosa por algo?
– es que mamá me grita mucho y me hace sentir miedo, después me dice que soy una sucia- ella temblaba, me daba mucha pena. Le sonríe y le dice
– Mmmm y por ahi deberia revisar si sos una sucia no?
-Papitooooo no soy sucia … .- Mi princesa había aprendido a hablar muy rápido, era una nena muy inteligente, pero su relación con Mariana era una cagada.
– mmm puedo revisar?
– chii pero no toy suciaaaa
– Bueno reinita, no te enojes…dejame revisar tu sapito pero no le decis a nadie dale?- la senté y muy despacio baje su pantaloncito, dejando esa bombachita húmeda llena de corazones lilas, el olorcito empezó a activar mis alarmas. Si bien la tocaba, o la olía estando dormida, y muchas veces la ensuciaba con semen, tenerla despierta frente mío con su vagina estaba llevándome a otro paso más en mis pecados. Quite despacio la bombachita, que estaba pegada a la piel, en el proceso acaricie despacio ese culito, ella solo se dejaba hacer algo nerviosa.
-Si papi… dale… – dijo con un poco de vergüenza…yo olí un poco sin tocar esa vaginita peladita, gordita, con labios gruesos, tan bonita y tan pura. El olorcito que llegaba era fascinante, a pipi de nena, a culito un poco sucio. PEro me fascinaba
– mmm estás un poquito sucia amor, pero no pasa nada, fue un accidente, y papi te va a ayudar a cambiarte.
-Pero papi… no estás enojado? perdón, si huelo cochino…
– Eyyy , tranquila princesita, papito te ama, y ama todo de vos, y si oles un poco cochino o tuviste un accidente no me enoja. Papi está acá para ayudarte. Además…te cuento un secreto…? – De repente abrí una puerta que podría haber sido un desastre, pero su inocencia y su confianza en mí fueron suficientes para que su reacción fuera la mejor que podía ser.
– Que secreto papi, siii decime papito- Dijo emocionada
-shhh, que sino escucha la bruja de mama, y deja de ser secreto….
– Perdon … .me decis? – fue muy graciosa su expresión tapándose la boca y mirándome fijo pidiendo que le diga ese secreto.
– Bueno, te lo digo, pero me prometes que nunca a nadie se lo decís, ni a la abuela, ni a las primas, ni a algún amiguito, menos a mamá, y a nadie… es solo un secreto entre papá y su princesita.
-que siii papi, se lo que es un secreto, ya soy una nena grande….
– si veo que estas grande, te está creciendo el culito….jiji- dije chistosamente
– Papa!!!!! dale decime…
-Bueno, te digo, a papito….- hice una pausa, y sus ojos se abrieron mirándome fijo- le encanta el olorcito que cochino de este sapito…. pero shhh no le digas a nadie- le hice unas cosquillitas en su pancita, a lo cual se retorció riendo
– jajajaja, para , papi cochinoooo, paraaaaaaa- se reía ….
– papi, es re cochino, así que guarda el secreto dale? shhhhh
– Bueno PApi… prometo guardo el secreto….
-Ahi vengo, voy a buscar ropita para cambiarte.- Salí a su habitación y busqué una mudita de ropa- le busqué una calcita muy apretadita, que me gustaba como marcaba su culito y una bombachita de Peppa pig.
Al entrar al baño vi por el espejo que se pasaba su manito por la vagina, y luego se olía, me quede viendo desde atrás de la puerta para que no note mi presencia. Era tan pequeña, pero ya exploraba ese hermoso cuerpito, pasaba sus deditos pequeños por su sapito, y luego los olia, también probo hacerlo en su culito. No parecía darle asco, todo lo contrario, se tocaba y olía con mucho goce. En un momento pasó el dedo por su vagina, y para mi sorpresa lo chupo, luego se lo quedo mirando, y volvió a hacerlo. No podía creerlo. Esa vision, de tan pequeño angel, de ojos grises, pelo negro, piel morena, estaba probando ese manjar tan sabroso, que habia yo probado cuando era apenas una bebita, o cuando dormia. DEcidi convertir esa situación fortuita en una oportunidad, asi que abri la puerta y la mire mientras se llevaba sus dedos a la boca.
-Qué estabas haciendo señorita?- dije cruzando la puerta, ella enseguida puso sus manitos en la espalda, tratando de ocultar su travesura- estabas metiendo tus dedos en tu sapito?- Miro al piso con seriedad, como si tratara de ocultarme lo obvio
-no papi, yo no…- intentaba hacerse la distraída con tanta ternura….- solo que me picaba el sapito papii
– mmm y vos cuando te rascas el sapito después te chupas los dedos – finji mirarla seriamente…- Su cara intentando pensar qué excusa poner la hacía mas hermosa. – me parece que le estas mintiendo a papito…
– no papi yo…yo no…no te enojes!!!- empezó a pucherear de una forma tan tierna- es que dijiste que te gustaba y quise….buuuu-
– ey ey…tranquila amor….shhh no llores papi no se enojo, está bien que lo hagas-
– pero…pero no soy cochina? – miro extrañada limpiándose las lagrimas
– ya te dije que a mi me gusta tu olor..y tu sabor debe ser muy rico … .- ya conocía su sabor, la había probado dormida muchas veces.- no me voy a enojar con vos…ahora papi va a guardar ese secreto …te parece?
– siii.. papi…secreto- dijo asintiendo con la cabeza graciosamente- porque mami me va a re cagar a palos si me ve…- dijo sabiamente.
– entonces papi guarda el secreto, y vos haces esas cosas solo cuando estas con papi, no cuando esté mami…porque me parece que te gusto y lo vas a seguir haciendo verdad?
– si papi … .- miro colorada para otro lado- me gusto mi sapito…
– bueno , entonces con el sapito solo jugas cuando estas con papa en casa, y mama no esta … .trato hecho?
-chi papito …prometo… –
– esa es mi princesita, muy inteligente…- le di un besito pico en los labios- te puedo preguntar algo hermosa?
-si pa –
– es rico ? que gustito tenia tu sapito?- se puso más colorada, a estas alturas sus cachetes estaban calientes
-si… es rico…me gusto mucho….-
– bueno, que lindo que puedas probar algo tan rico…como me gustaria a mi poder probar algo rico asi…- dije haciendome el tonto.
– papi si vos queres yo te puedo dar de probar!!!- dijo emocionada
– ¿De verdad amor? le dejarías probar a papi?-
– Si papa, si vos sos re bueno conmigo, yo te dejoooo- Me mataba su ternura
– pero mira que tiene que ser recontra secreto, nadie se puede enterar si papi prueba, porque puede enojarse la policía- Cuando nombre la policía miro muy asustada.
– policia porque papi, si haces nada malo- otra vez volvió a pucherear
– Porque la gente va a pensar que te quiero lastimar, asi que tendria que ser muy secreto-
– prometo que nunca le voy a decir nuestros secretos a nadie papi, lo prometo-
– Eso mi pequeña, sos tan inteligente, papá y vos van a tener secretos solo nuestros, te amo mucho- le di otro pico. A pesar de su corta edad era tan lúcida e inteligente que no dejaba de sorprenderme. – bueno ahora a cambiarnos, dale…
– pero papito, no me dijiste que querías probar mi sapito? – insistió…y ahí vi que logré mi propósito.
-¿me dejarias ahora? de verdad? –
– Si pa, probaa dale- dijo pasándole el dedo por su tajito y llevándolo a mi boca. Yo abrí la boca y chupe sus deditos con lentitud, ya tenían ese olorcito delicioso, además su sabor único, que tenía un toque especial porque ahora estaba despierta, y esa complicidad hacía que fuera mucho más excitante. un momento especial de amor entre padre e hija. Se me quedo viendo esperando mi reacción
-mmm que rico saborcito…el sabor secreto de mi bebe…- dije mientras le pasaba la lengua despacito por sus deditos.
– Si papito? ¿Te gusta?
– Es muy rico, y tenía que ser rico viniendo de una nena tan hermosa como vos Sophi- Ella respondió con un gesto de alegría frente a mis halagos. Se veía muy hermosa, abierta de piernas, solo con su remerita, entregada a los mimos y secretos conmigo.- Te puedo pedir algo ..pero tiene que ser super…super secreto
– que es papi??!! yo prometo que guardó el secreto!!- dijo entusiasmada de poder seguir compartiendo cosas conmigo.
– Bueno, te cuento….papi tiene ganas de probarte pero con la boca en tu sapito…me dejas?- me miro algo extrañada
– Pero papi ahi hago pipi, esta re cochino!!! no te va a gustar- su inocencia y las enseñanzas estúpidas de la madre le hacían responder eso, pero mejor así podía sostener el secreto tan prohibido entre los dos, como un pacto especial.
– Amor, ese es parte del secreto, papi es muy cochino y le gusta mucho tu olorcito y tu saborcito, y quiere compartir eso entre solo los dos, es un secreto de amor entre papá y Sophia- le hable tiernamente mirándola a sus ojitos verdes, mientras acariciaba su hermoso rostro. Su mirada que contrastaba con esa piel morena y ese pelo negro oscuro hacia su mirada mas tierna y exitante.
-ok papi, yo prometo no decir nada…y si a vos te gusta te dejo que me des besitos ahí…- dijo finalmente pero con voz cautelosa.
– Gracias amor … .puedo hacerlo ahora?
– Si podemos, pero esta mamá…y si viene? y ve nuestro secreto? – Yo sabía que Mariana estaba encerrada en la cocina enojada, y no iba a venir. No dejaba de sorprenderme como mi hija era tan viva, tan atenta a esos detalles. Estaba criando un pequeño monstruo, un pequeño y sexy monstruo.
– Mami está viendo algo en la tele, y además está enojada con papi así que la bruja no nos va a molestar, igual…- me di vuelta y puse la traba del baño luego abrí la ducha. – así no va a poder entrar ni molestarnos…shhh secreto entre vos y yo- Le guiñe el ojo. Ella me sonrió confiada y ansiosa. Así que empecé a darle besos despacio en sus muslos, mi nariz ya detectaba el aroma de su conchita pequeña. Así sentadita en la tapa del inodoro ansiosa recibiendo besitos, podía sentir sus piernitas ponerse algo rígidas, pero no buscaba correrse.
– siento como cosquillitas papi….-
– y no te gustan amor? ¿Quieres que pare?
-Nono papito..seguí me gustan las cosquillitas, son raras pero lindas..
-los besitos de papi te van a dar unas cosquillitas muy ricas, se llaman cosquillitas de amor, sabes? vas a dejar que papi te de cosquillitas de amor?
– cosquillitas de amor? de amor de papito? – me miró entre sorprendida y emocionada
– de todo el amor que papito tiene para vos…pero es secreto, acordate …- dije mientras le seguía dando besos despacio y me acercaba, mi nariz rozó su hermosa vulvita.
-mmmm siiii papito ….va a ser secreto las cosquillitas de amor…mm- gimió sutilmente la pequeña Sophi. Di mas besos subiendo hasta su pequeña vagina, donde pase despacito mi lengua por la hermosa hendidura, mientras con mi nariz aspiraba ese olorcito de mi princesita
-mmm papii, siento las cosquillitas de amor…papiii – dijo cerrando los ojitos, y lanzando un gemidito.
– Te gusta…mmmmshhh, dejas que papi te haga mas cosquillitas- empecé a acariciar por dentro con mi lengua mientras mis manos empezaron a subir por su culito
-mmmmhhhh papitoooo papiiiii cosquillitas- suspiraba y gemía, su pechito mostraba signos de agitación frente a mis caricias.
– mmmm hijita que rico tu juguito de amor, yo te hago estas cosquillitas de amor y vos me das ese juguito tan rico….- dije mientras estimulaba su uretra y su pequeño puntito de placer, oliendo y saboreando la mezcla entre sus jugos y mi saliva.
– ahhh pa…juguito de ammmoorrrr aghhhhhh- trataba de entender esta sensación nueva, que experimentaba totalmente conciente. Empecé a succionar despacio y a saborear su pequeña hendidura peladita, ella empezó a retorcerse pero no buscando alejarse, sino tratando de procesar todas las sensaciones que le generaba mi contacto. – Papa…..son cosquillitas muy fuertes paaaaaa- sus dedos tocaban mi cabeza pero inconscientemente tratando de atraerme mas, buscando mas esa sensacion. PAra mi era magnifico poder probarla asi, despierta, consciente, llevando al máximo su intensidad, pudiendo disfrutar de este nuevo secreto que compartimos. La poca culpa que había sentido estos años por tocarla dormida, por ensuciarla, se estaba esfumando, pero no podía dejar de hacerlo, era puro amor que estaba pudiendo darle.
PArecía una muñequita de trapo, levante sus piernitas y la abrí toda con facilidad, chupando su ano y su vagina. Por momento me detenía a oler esos aromas tan sensuales y deliciosos de mi pequeña, que a tan corta edad estaba dejando parte de su inocencia. So carita toda colorada y caliente, y sus jadeos de placer me incitaban a seguir, ya no podia hablar solo tenia su boquita abierta mostrando agitación, los labios secos, fueron por lo menos 10 minutos de intenso placer, no podía dejar de chuparle la concha, ni siquiera podía pensar que mi esposa estaba en algún lugar de la casa, solo podía disfrutar de ese sabor tan dulce, ese olor tan rico e infantil, tan diferente al de una concha adulta. Ese liquido que me pegotea mi cara. Bajaba mi lengua y la hundía en su anito, ella ahí usaba sus piernitas como para traerme, claramente la estimulación en el culito era algo que le gustaba, ya desde bebe, yo solo imaginaba el dia que hiciera mío el culito de mi pequeña hembrita. cuando lengueteaba su ano, mi nariz se mete directo en su concha recibiendo un baño de aromas directo a mi cerebro. Era increíble, ella toda mojada, recibiendo amor de papito.
-Ahhh papito ahhh siento algo muy fuerte,….ahhh- estaba por acabar, mi hija iba a tener un orgasmo, un orgasmo siendo tan chiquita,y con su papito.
– Si hijita debate llevar, disfrutalo, vas a sentir muy rico, vas a ver … .- Ataque su clítoris otra vez, con mucha intensidad, ese diminuto botón no podía dar tanto placer a un ser humano.
– Papito me voy a hacer pis de nuevo, porfa ahhhh-
– Hace hija, papito va a guardar el secreto, a papi le podes hacer pis no pasa nada- Envesti con más fuerza, alternando entre estimular su clitoris y succionar su agujerito. El ritmo de mi boca empezó a ser frenético .
– PAPIIIIIII AHHHHHHHHH AHHHHHH- empezó a temblar y ponerse dura, parecía una convulsión, tal vez lo era, pero de placer. Su orgasmo parecia muy intenso…..y paso lo que tenia que pasar, se hizo pipi en mi boca, la cual saboree, tome toda, lejos de darme asco, disfrute cada gota de ese jugo amarillo, mezclado con sus flujos… – ahh paiii, eso fue muy lindo…. ahhhh…
-Te gusto princesita? te hice sentir bien?
– Si papito, pero te hice pipi, no te enojes,… perdon no pude controlarme…como cuando me toco mi sapito- ahi entendi como es que se había hecho pis encima. La nenita se estaba estimulando.
– No te preocupes amor, yo estoy feliz, para papi es como si me dieras amor…. podes hacerlo cuando quieras, siempre que mami no nos vea…es nuestro secreto especial – le dije dandole unos últimos besitos…
– oh pa … .si amor especial- repare que llevábamos mucho en el baño, pero estaba muy duro, muy excitado. Necesitaba descargar…. Así que la levanté y paradita frente al espejo me puse tras de ella sentado ahora yo en un banquito que usábamos para que ella pueda lavarse las manos ..
– ahora papito te va a poner una cremita de amor para que no se te ponga rojo el sapito por haberte hecho pipí… dale? Pero no tenes que mirar… y acordate … es todo secreto .
– si papi? Lo que vos digas… prometo que es todo secreto…. – estaba re entregadita…. Saque mi pija sin que la viera y empecé a pasarla por su culito, ponsandolo con mi precum … .- papito qué es eso… que tenes ahí?
– es la pomadita especial hija…Pero todavía no mires…- ella asintió con la cabeza y nos mirábamos por el espejo… le empecé a dar besitos en el cuello, ella solo se dejaba y movía su colita, como disfrutando el contacto de mi pene en sus glúteos…- que linda sos hija ..que nena tan buena… papi va a darte está pomadita por lo contento que se pone por tener secretos con vos….
– si papi… se siente raro…Pero me gusta cuando me limpias vos…. ¿Me vas a limpiar así desde ahora?
– si amor!!! Pero acordate…es secreto…mamá no puede saber nada…
– Sisi … .ahh – me mire al espejo y el morbo fue al límite… ella roja de excitación siendo manoseada y apollada por mi, que me estaba masturbando frenéticamente en su culo. Quería ensuciar su colita… amaba mancharla con semen, marcarla. Ella tallaba mi pija con su cola con los ojitos cerrados o cada tanto mirando mi cara de pedófilo pajero….
– ahhh hija…. Acá va tu pomadita!!! Siii toda para vos!!! – bese sus labios disparando chorros y chorros en su colita, que fui embadurnando con mi pija, dejándolo como una pomada blanca pegajosa.- ahhh siii toda la pomadita de amor de papi….
– papitooo siii. La siento en toda la cola… es un montón
– es porque papi tenía mucha pomada de amor y como te portaste tan bien… te la regale…
– si papi!??? Y puedo pedirte más!!!- me dijo mirándome desde el espejo.
– si hija…incluso podés comerla un día que estemos solos, Pero ahora a terminar de cambiarte…y te vas a jugar a tu cuarto…
– si papi dale…puedo ver tele?
– si amor!! Obvio..
Ayude a que se termine de vestir, dejando su culito embarrado y su conchita oliendo a flujos. Le di otro piquito. Y le recordé que era un secreto entre nosotros
-papi, dormis conmigo está noche?
-si amor… dale. Y si queres hago unos sanguchitos y llevo una coca, y vemos una peli de princesas juntos dale?
-siiii vamos a comer en la cama y ver pelis!!!- se fue contenta a su habitación.
Yo me dirigí a la cocina, como supuse Mariana seguía ahí, estaba boludeando con el celular, con los ojos llorosos. Levanto la vista mirándome con rabia.
– Y ya limpiaste a tu princesita? total la pelotuda que lava la ropa y la fuma todo el dia soy yo…-
– no te preocupes, plata no me falta, y voy a contratar una niñera para los horarios donde no va a la guardería. asi podes estudiar, y podes dedicarte a hacer tu vida, que es lo que queres
– OBvio, si no me das bola, y es todo para ella y como ella quiere.
– Tiene 3 años, vos tenes 30…te portas como una pendeja caprichosa, pero es la ultima vez que la tratas asi…la proxima la vas a pasar mal- Se levantó enojada y camino hacia mi a los gritos, empujándome contra la pared.
-Dale que vas a hacer, amenazarme? pelotudo!!! quien te crees, crees que te tengo miedo?- Solo sé que mi reacción primera fue pegarle un cachetazo que cayó contra la mesa de la cocina. – Hijo de puta que te pasa!!! te voy a cagar denunciando
– Esto vas a denunciar, a ver si alguien te da pelota, estupida…mira tan enojada y con ese orto y esas tetas. Que no te doy bola? hace rato que no me atendes, seguro que te estas garchando algun medico o enfermero en el laburo, trola.- Le levanté el vestido y le arranque la tanga con furia- Hoy tenes que ir a trabajar a la noche no? vas a ir bien llena de leche, pelotuda.
– No, soltame hijo de puta, que haces, no quiero!!! Soltame!!!
– Acá lo que vos quieras me chupa tres huevos, vas a aprender a respetar, despues si queres ir a revolear el orto en el trabajo no me importa, pero cuando quiera que me mimes la poronga, mejor que calladita me lo hagas- Se la clave en la concha, y empecé a bombearla contra la mesa, ella lloraba y gemía, me estaba re excitado, y darle leche a Sophia no me había alcanzado.
– Para por favor…asi no…por favor…buuu- lloraba desconsolada mientras me la garchaba y le lamía la cara, las lagrimas. Yo estaba re excitado por tenerla así, clavandola mientras estaba vulnerable, marcándole la cancha
– Vas a pensarlo bien la próxima vez que quieras tocarle un pelo a Sophia, está claro?
-sisis pero para, por favor…-
-Mmm, como extraño estas tetazas, ahora te voy a sacar la pija, y te vas a arrodillar, y me vas pajear con las tetas…entendiste?
-No, ni en pedo soltame!!!!- Le di otro roscaso
– entendiste, o queres que te meta un palo en el orto?
– Nonono para…bueno dale- SAque mi pija y agarrada del pelo la arrodille frente mío mientras me sentaba. –
– Escupite las tetas y pajeame dale- Sacó sus dos enormes tetas por debajo de la remera, estaba sin corpiño, y puso la pija en el medio mientras seguía llorando. mi cara tenia olor a conchita y meo de Sophia, no se si se dio cuenta, o se hizo la boluda, pero no dijo nada cuando lami su cara mientras apretaba mi pija con sus tetazas.- mmm asi vez, no es tan difícil que sirvas para algo, y atiendas a tu macho
-sos una mierda…ahh- lloraba
– mmm asi nena…asi ….- le marcaba el ritmo con el cual apretarme la chota- siempre fuiste una negrita puta, una turra que le gustaba la pija, ahora te haces la dificil.- Entonces la vi, tras el marco de la entrada de la cocina, viendo el espectáculo, Sophia. Lejos de estar asustada miraba lo que hacía su mamá, escuchaba lo que yo le decía, probablemente vio los golpes que le di. Me sonrió cuando le hice que hiciera silencio con el dedo en los labios. La situación me exito tanto que empece a acabar a chorros- mmmm toma puta, toma sentí mi leche, la leche de tu macho, aprovecha porque seguro hay más de una hembra que la merece mas que vos ahhh toma- le bañe la cara y las tetas. todo esto frente a la mirada de Sophia, la cual Mariana no alcanzo a ver.
– Quedaron claro los tantos pendejas? no vuelve a pasar.
– Si…está claro…por favor déjame sola…me tengo que ir a la facu y al laburo despues- dijo mirando al piso, tapándose las tetas todas chorreadas.
– Que bueno que haya quedado claro, nos vemos mañana. Y te aviso quien va a ser la niñera.- Cuando volví a levantar la cabeza, Sophia ya no estaba. Así que fui a preparar las cosas para la noche de películas y secretos entre padre e hija.
Continuará.
Espero que les guste esta nueva serie, hace un tiempo que quería empezar otra historia perversa, en particular esta va a ser una seria mas lineal y con un final. Como siempre si quieren intercambiar experiencias, contarme que les pareció el relato. O si quieren pensar alguna historia en conjunto, escribanme por telegram a @inviernopor
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