La camarera
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por hplapatogoma.
Os voy a contar una historia que me paso hace muy poco tiempo, yo soy un joven de una ciudad española llamada Barcelona y en verano voy todos los años al pueblo de mis padre que es Calatayud. Alli tengo muchos amigos y amigas con los cuales disfruto de los veranos y otras vacaciones como en semana santa.
Yo tengo 21 años, y soy un chico del monton como muchos otros, no destaco en grandes cosas por las que las chicas se enamoren de mi pero tampoco tengo cualidades que una chica no se fijaria en mi. Las chicas algo mayores me prestan algo mas de atencion que las chicas jovenes ya que mi padre es uno de los ricos del pueblo y esto las encanta porque piensan en si podran cazarme para vivir de las cosas de mi padre.
Esta historia que os voy a contar me paso una semana santa en el pueblo de mis padres. Era el jueves santo, los amigos quedamos a comer para celebrar el cumpleaños de uno de los amigos.
En el restaurante donde comimos habia una camarera de 17 años, era muy morbosa, morena, tenia unas tetitas no grandes pero lo justo para poderlas coger con la mano, mas adelante averigüe que tenia los pezones grandes como una antigua moneda de quinientas pesetas, un culo respingan y tenia un pircing en la ceja izquierda.
Estuvimos comiendo y ella no se dejo ver en toda la comida hasta que llego la hora de los chupitos de hierbas que entonces nos trajo la botella y al dejar la botella deslizo su mano sobre mi espalda preguntandome donde me habia metido tanto tiempo sin hacerla una visita, a mi me sorprendieron estas palabras pero mis amigos la vacilaron como a casi todas las personas ya que se habian emborrachado con el vino de la comida.
Se termino la comida y nos fuimos todos a seguir bebiendo cubatas toda la tarde.
Al llegar la noche iban casi todos como trapos yo no estaba muy borracho porque me ausente un rato del alcohol a no poder beber tanto alcohol.
Decidimos no irnos a casa a cambiarnos y salimos con la misma ropa con la que estuvimos comiendo. Esa noche vi a un monton de chicas del pueblo con las que hacia mucho tiempo que no veia y hable con ellas, estuve muy ocupado pero al entrar la camarera que se llamaba Marisa mi mirada la siguio desde la puerta del bar hasta donde se encontraban sus queridas amigas.
Marisa no me miro mientras estaba con sus amigas, yo la miraba de vez en cuando a ver si veia cualquier gesto suyo que me reclamara pero pasaba mas de mi persona, casi como si ni me conociera. La vi que se iba hacia el baño segun arranco en direccion al baño una amiga suya la cogio del brazo para darla un objeto no pude fijarme bien en que era, me disculpe ante la persona con la que yo hablaba y me fui hacia el baño para intentar encontrarme con Marisa y asi poder hablar con ella.
Al llegar al baño nos topamos de frente, y al saludarla ella paso de mi como sino me conociera, la chica me tenia un poco confuso pero su suprema atencion y su pasar de mi me estaban volviendo loco y encima haciendo que me fijara en ella mas de lo normal.
Paso la noche y no pude de dejar de mirarla en cada bar que la veia, cada vez que la miraba deseaba cogerla de los brazos desnudarla brutalmente y follarmela en medio del bar pero solo era un pensamiento, queria oirla gritar de placer cuando mi polla se introdujera en su coñito pero pasaba de mi persona. Paso toda la noche y no me hizo caso asi que cuando ya no podia mas me fui a mi casa andando y cuando llegaba vi que paso un coche que me pito.
El coche era un opel Astra negro y el conductor era un gilipollas farlopero que nunca he tragado ni tragare, pero en el asiento del copiloto iba Marisa, atras no supe si iba nadie porque los cristales estaban tintados. No entendia porque me habian pitado pero me daba igual.
Al llegar a mi casa me fui directamente al baño y me quite las zapatillas, el pantalon y el calzoncillo mi polla estaba dura, bastante y yo muy excitado de pensar en Marisa, cerre los ojos y me puse tranquilamente a menear mi polla pensando en como follabamos los dos, Marsia(al verla en ese coche, ella habia pasado a ser una puta barata)y yo.
A la noche siguiente pasaron unos dias y no la vi, me fui olvidando de ella pero el miercoles santo tocaba salir de fiesta.
Esa noche nos fuimos todos los amigos a casa de un amigo, y llegamos tarde a los bares ya habia salido todo el mundo y habian llegado la gente de los botellones. Asi que al entrar al bar estaba hasta arriba pero como de costumbre nos hicimos notar de que habiamos entrada montando un poco de jaleo. Todo el mundo nos miraba pero yo solo me di cuenta que Marisa me miraba a mi y nuestras miradas se cruzaron, yo no me di cuenta que al mismo tiempo que me miraba a mi podia mirar a cualquier de mis amigos pero a mi solo em aprecia que ella me miraba a mi.
Paso el tiempo, la noche habia avanzado y era tarde asi que decidi pedir un vaso de tuvo lleno de licor de hierbas, levante el vaso y me lo bebi de un trago ya que en toda la noche habia bebido nada mas que cervezas. Busque a Marisa y me fui hacia ella para hablar de lo que pasaba con ella pero al acercarme se abalanzo a darle un abrazo al gilipollas del farlopero, asi que pase de ella y me puse a hablar con Leticia una amiga suya. Leticia estaba muy mal, llevaba un pedal de la leche y era amargate hablar con ella, estaba mal y la hacia falta dormir. Asi que me dirigi hacia Marisa y Laura que estaban a mi lado.
Mario(yo):chicas deberiais llevaros a vuestra amiga Leticia a la cama que esta bastante borracha y no debe seguir bebiendo.
Marisa: Metete donde te llamen Mario si ella quiere irse que se vaya solita, a ver si el chico de la ciudad va a venirnos a decir que debemos hacer con nuestras amigas.
Laura: Marisa, cortate un poco que Mario tiene razon y Leticia esta peor que de costumbre, por el idiota de Adolfo.
Marisa: joder que gente, lo que la hace falta es beberse todo y meterse todo lo que pille
Mario: os encargais no chicas.
Marisa: Si pero ayudame tu Mario a llevarla a casa que te piilla de paso y Laura tiene trabajo con su novio, que hace mucho que no le ve y tienen que recuperarse en el asiento trasero del coche.
Laura: perra, que os den por culo mal pensados y no te rias carbon.
Asi que salimos los tres del bar, Marisa agarrando de la mano a Leticia y yo agarrandola del brazo. Bajamos calle abajo, mientras la preguntaba a Marisa con quien iba ayer y cosas como si tenia novio…(lo tipico)
Leticia estaba mareada y no se sentia bien asi que hicimos un stop en un banco en medio de la calle.
Mario: chicas en vez de llevar a Leticia a su casa porque no nos lo montamos los tres juntos.
Leticia: lo que tu quieras guapo.(se acerca hacia mi, mientras Marisa la tira del brazo hacia ella)
Marisa: Eso es lo que tu quieres pero no lo tendras guapo, no te sera tan sencillo. Leticia solo se besa conmigo.
Marisa: Leticia dame un pico.
Veo como se dan un pico.
Mario: jajaja
Mario: pero no valeis con lengua.
Marisa: Leticia dame un muerdo.
Las veo como abren sus bocas y sus labios se juntan.
Mario: ya pero y las lenguas que no las he visto juntarse, solo os habeis juntado vuestras bocas.
Marisa: que te estas excitando y quieres aqui que nos lo montemos gratis para ti, pero te vas a quedar con las ganas niño.
Mario: si me excita para que negarlo, pero realmente no valeis para darosle con lengua.
Marisa saca su lengua se acerca a la boca de Leticia que por esos momentos parecia una muñeca hinchable dedicada al capricho de Marisa y mete toda la lengua en su boca logro ver como Leticia saca tambien su lengua se juntaron y no pude ver mas porque sus bocas se juntaron en un breve beso. Marisa decidio terminar con el juego y terminamos por llevar a Leticia a su casa. La subimos y la metimos en la cama con la ropa interior puesta(yo queria quitarsela pero Marisa no me dejo). Nos fuimos al salon que estaba lleno de botellas vacias ya que habian estado ellas bebiendo y cenando antes de salir pero quedaban algunos culitos de las botellas.
Marisa: ¿quieres una copa?
Mario: si te tomas tu una conmigo, me la pones de lo que tu bebas.
Marisa: no temes que te emborrache
Mario: quien lo deberia temer eres tu Marisa
Marisa: ¿yo? ¿Porque voy a temer que una persona como tu me emborrache?
Mario: por si me aprovecho de una chica tan guapa como tu o de cualquier locura de un chico(me corta Marisa)
Marisa: cualquier locura de un chico excitado como tu, que te crees que no me he dado que el juego de los besitos te ha excitado, y ver en ropa interior a Leticia tambien.
Mario: si todo eso me ha excitado pero lo que realmente me vuelve loco eres tu, me tienes desde que te conozco loco y cuando te volvi a ver que nos trajiste los chupitos no he sido capaz de sacarte de mi cabeza, todos los dias pienso en ti.
Marisa: pues si eso es verdad no te habras pajeado pensado en mi niño.
Mario: no
Marisa: no una vez no muchas, no seas cortado reconocelo, que no pasa nada por ello.
Mario: si unas pocas veces, todas las que me he masturbado
Marisa: jajaja como os gusta a los chicos
Mario: y las chicas no os gusta
Marisa: a mi no me gusta masturbarme porque para eso estais los chicos.
Nos miramos los dos y nuestras bocas se acercaron, las lenguas se enrollaron entre si.
Marisa fue cayendose en el sofa hasta tumbarse y yo estaba arriba, la acariciaba la cara baje el mano hasta llegar a sus senos pero ella me la quito, me molesto porque queria correr pero no me iba a dejar, seguiamos besando y al rato volvi a intentar bajar mi mano a sus tetas y no tuve ningun obstaculo esta vez. La tocaba sus tetas por encima de la ropa, notaba sus pezones un poco duros.
Mi mano izquierda apretaba el seno derecho de ella mientras mi mano se deslizaba hasta el primer boton de su pantalon, lo desabroche levante la mano y la subi por debajo de su camiseta hasta tocar el borde del sujetador, luego la deslice de nuevo hasta su pantalon y volvi a desabrochar los dos siguientes botones. Deje de desabrochar cuando note que la mano de Marisa me tocaba el paquete por encima y mi polla estaba por ese momento muy dura, me dolia de lo apretada que la tenia dentro del pantalon.
Marisa: que abultado esta esto jajaja.
Mario: esta que pronto va a reventar
Marisa: habra que hacer algo.
Marisa intenta desabrocharme un boton pero al costarla cojo y me quito el pantalon casi sin desabrochar ningun boton tirando de el. Me acaricia la polla por encima del calzoncillo, me relajo y me empieza a mordisquear el cuello, me baja un poco el calzoncillo y agarra mi polla. Que gusto sentir su mano sobre mi paquete, empieza a masturbarme pero me hace daño, se nota que lo ha hecho mas veces pero no lo controla porque me hace daño cada vez que baja para abajo pero ese pequeño dolor no me importa porque el gusto es mucho mayor, no me quejo y continuo hasta que veo que me voy a correr y se lo susurro al oido que me voy a ir.
Ella me mira a los ojos y me sonrie con una sonrisa picara, luego baja la cabeza y mira a mi pene mientras acelera el ritmo hasta que me corro de gusto salen unos chorros, la mancho la camiseta, la mano y hasta la alfombra de la corrida tan intensa que tengo.
Marisa: joder que corrida tan grande, un de dos te excito un monton o llevas años sin masturbarte porque has manchado todo y me has llenado de semen.
La cojo la camiseta por abajo y tiro de la camiseta para arriba con la intencion de quitarsela, se la quito y a continuacion la quito el pantalon.
Me pongo a jugar con el pelo de su pubis y mis dedos, ella sabe que va a pasar pero mi tranquilidad la esta matando, hasta que de su boca sale unas palabras “que coño haces, carbon” mi mano se desliza entre la mata de pelos y se va introduccion en el monte de Venus, hasta encontrar el agujero, pera mi sorpresa estaba muy humeda, bastante y mi dedo se cuela hasta el fondo de lo lubricado que esta todo. Me parece que uno es poco y introduzco dos para hacerla un dedo, acelero el ritmo, mas y mas y mas, noto como suspira profundamente Marisa, me excita y continuo masturbandola mientras mi boca se va hasta sus senos y muerdo el seno izquierdo por encima del sujetador con la boca la bajo un poco el sujetador lo justo para verla su hermoso pezon. La chupo todo el pezon y lo alterno con algunos mordiscos.
Marisa suspira hasta que logro que se corra, me besa en la boca y me lleva hacia una habitacion de la casa de Leticia, nos tumbamos en la cama y seguimos jugando con nuestros cuerpos.
Autor: hplapatogoma
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