la camarera
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi familia y yo habíamos quedado con mis familiares de Moratalla para comer, cuando llegamos decidimos irnos a comer fuera, en un restaurante que ellos conocían y la comida era fantástica, cuando llegamos empezamos a pedir unos cuantos aperitivos, yo cuando vi a la camarera me di cuenta que era una compañera de clase que hace ya un montón de tiempo que ya no veía, se había dejado las clases porque había empezado a trabajar aquí. Esa chica es morena, de piel oscura y es guapísima con un cuerpo perfecto, cuando me vio me reconoció al instante, pero como tenia trabajo que hacer solo me saludo y luego continuo trabajando, después terminar de comer mis tíos y mis padres se pusieron a hablar de cómo les va el año, yo mientras tanto me levante para poder buscar a la camarera y poder hablar con ella, por suerte era su orario de descanso y estaba fuera tomando el aire.
Cuando me acerque a ella empezamos a hablar sobre los que ella estaba haciendo, mientras me respondía no pude para de fijarme en que no apartaba la mirada de mi y de cómo se mordía el labio, al cabo de un rato me dirigió a un almacén que es donde el restaurante guardaba la comida y sin previo aviso me empezó a besar, yo no puse resistencia porque para ser sincero me gustaba la sensación de sus labios tocando los míos, cuando ya se puso a poner caliente y no tardo mucho me quito la camiseta y me empezó a besar el pecho, en ese momento entre yo a acción y le quite su camiseta para dejar al descubierto su sujetador que ella se quito y yo me puse a chupar sus perfectos pechos y ella solo podía gemir de placer y llevar la cabeza hacia atrás, mientras intentaba desabrochar me el cinturón y quitarme los pantalones y los calzoncillos.
Cuando lo consiguió se arrodillo y mi polla después de chapármela un poco con la lengua se la metió en la boca, yo no podía aguantar el placer de su legua rozándome la polla una y otra vez, luego la levante y le baje los pantalones y las bragar para dejar al descubierto su coño negro, depilado y mojado, acerque su lengua y empecé a lamerle el coño como a nadie antes se lo había hecho, mientras tanto ella se retorcía de placer y solo me pedía una y otra vez que no parara, que se iba a correr, cuando me le deje el coño bien mojado empecé a penetrarla, ella no podía para de gemir y de decirme que se la metiera hasta el fondo. Mientras que le penetraba sus caderas hacían un movimiento que a mi me volvía loco y entonces fue cunando me pidió que se los metiera por el culo, yo lo intente, pero el agujero era muy pequeño y mi polla no entraba, en esos momentos sentí que me iba a correr, la levante y le puse la cara delante mi polla, cuando empecé a rociarla con mi semen ella abrió la boca y yo le metí la polla para que se tragara mi semen, al final, cuando termine de llenar su boca con el semen ella se lo trago, se empezó a vestir y me dijo al oído con una voz muy caliente que esta experiencia quería volver a repetirla, después de decirme eso abrió la puerta y se fue.
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