La casa de mis tías parte 1
Como es vivir en la casa de campo junto a mis tias y lo morboso que es vivir con ellas.
Desde hace tiempo vivo con mis tias en una casa de campo que le perteneció a mis abuelos por muchos años, mi abuelo junto con mi abuela tenían una casa de campo bastante alejada donde había un gran campo y tenían una granja de gallinas y algunos animales, en esa casa vivieron mi madre y mis tías, actualmente mi madre y yo vivimos ahí con mis tias, empezó cuando mi madre se entero que mi abuelo había fallecido a lo que mis tías la llamaron para reunirse y yo pues nunca lo había conocido ni recuerdo haberlo hecho pues era bastante pequeño, pero tras esto mi madre decidió mudarse con sus hermanas a la casa de su niñez ahora que era propiedad de ellas, ya mi abuela había fallecido antes de que yo naciera.
Desde que nací vivía con mi madre en un departamento junto a una amiga de ella, a si que nos pasamos a vivir en la casa de campo, segun mi madre era una casa bastante alejada antes pero ya con el tiempo se establecieron algunas casa vecinas en la carretera pero aun con eso la casa tenia un gran campo y habian pocas casas vecinas. El dia que nos mudamos conoci a mis tias. La mayor de ellas era Kiara, luego le seguia Melissa, Tiana, luego seguía mi madre y la ultima era mi tia Damaris.
quienes eran bastantes cariñosas conmigo, pase casi toda mi niñez en esta casa, me acostumbre a recorrer los campos y alimentar a las gallinas, había más animales antes segun decian mis tias pero con la muerte de mi abuela dejaron de trabajar en la granja pero aun tenian un corral de gallinas, no tenia amigos entre las casas vecinas pero si en el colegio que quedaba bastante lejos y tenia que levantarme muy temprano para tomar el bus, vivia feliz y tranquilo, mis tias eran muy agradables y me acostumbre a recibir bastante atencion por parte de ellas, al crecer me decian lo mucho que me parecia a mi abuelo, les preguntaba mucho como era él, y mis tias hablan muchas cosas buenas, de que era guapo atento, cariño, divertido y muchas otras cosas, le tenian bastante cariño, a ellas le dolio mucho que mi abuelo se habia ido pues antes ellas eran bastante unidas a él pero al crecer cada una fue a hacer su vida distinta y con el tiempo se iban distanciando, mi tia Kiara se habia mudado cuando estaba en la universidad, mi tia Melissa se fue a vivir con su novio de aquel entonces y se paso a vivir a una amiga, mi tia Tatiana se habia mudado con su novio un tiempo y al terminar regreso luego del fallecimiento de mi abuela, mi tia Damaris fue la unica que se quedo todo el tiempo y mi madre se había ido a vivir con su amiga hasta que quedo embarazada.
Iba creciendo y al llegar a mi adolescencia comencé a tener un gusto por las revistas porno, comencé a ser bastante hormonal llegando a comprar películas y revistas de adultos con mis amigos del colegio, me masturbaba mucho cuando llegaba a la casa en la tarde y veia porno a escondidas y hasta lo descargaba en la computadora. En la casa tenia mucha confianza con mis tías hasta llegue a sentirme atraído por ellas, ya que en ocasiones ellas iban con ropa bastante reveladora cuando era verano, andaban con bividi y shorts o aveces en calzones, eso me calentó mucho y me encerraba a mi cuarto a masturbarme pensando en ellas, al inicio era algo que me daba verguenza pero mientras mas frecuentaba mas comence a fantasear con ellas, llegue a tenerles morbo cuando yo tenía 14 años, cada que las veia con ropa ligera se me ponia dura y lo ocultaba, seguia manteniendo mi interaccion normal con ellas, con mi tia Melissa tenia mucha confianza ella era bastante coqueta y le gustaba darme piropos diciendome guapo o papasito, al igual con mi tia Damaris que le gustaba abrazarme o me decia bebe hermoso, cuando tenia contacto con ellas evitaba que notaran mi ereccion, ya en ese entonces empezamos nuestros viajes a la playa en ese verano luego de tiempo, a mi me gustaba ir a la playa pero ahora me era muy dificil ir viendo a mis tias en bikini pues tenian buena figura y me calentaba mucho verlas en bikini, pero la que mas me fijaba era de la tia Tatiana quien tenia un bikini bastante revelador, parecia que tenia una tanga y tenia una tetas tan ricas que senti que rebotaban, yo me quedaba casi todo el rato en el mar para que no vean mi ereccion, no me preocupo que el agua estuviera helada, aproveche para que se me bajara la calentura mientras veia como los demas veian a mis tias pero mas a Tatiana quien le gustaba correr en la orilla junto a mi madre y Damaris quien tenia tambien un rico bikini, para sentir menos tension me quite el short y los calzoncillos dentro del agua, claro estaba alejado del resto de gente donde no habian muchas olas, no fue hasta que mi tia Kiara se iba acercando, yo rapido me puse mi short y todo para que no note que estaba desnudo. Ella se lanzo sobre mi para que la cargue de espaldas en el mar, me gusto sentir sus tetas y muslos que se sostenían en mi y nadamos ya con el resto, era pesada al estar en el agua era más ligera, el día siguió normal ya me bajó la calentura pero mi tía Melissa tambien se lanzo en mi esta vez para que la cargue entre mis brazos, ya la tenía dura pero la seguí cargando pues me gustaba sentirla más aun sus muslos, me atreví un poco a besarle su hombro, ella se reía.
Luego de ese verano comencé a tenerle mas morbo a mis tias todo a escondidas de mi madre, me gustaba masturbarme viendo porno pero me excitaba imaginarme estar con ellas, yo sabía que ellas eran bastante coquetas y que les gustan salir con otras personas, entre ellas me decían chismes de la otra y sus novios diciendo que tal tia le gustaba estar con varios hombres o que ella le gustaba provocar a otros y esas otras cosas que se decían para fastidiar. Para centrar mejor estas anécdotas yo tenía 15 años, mi tia Kiara tenia 40 años, mi tía Tatiana 39, Mi tía Melissa 36, mi madre 35 y mi tía Damaris 33.
Era alguien bastante rebelde, llegaba a pelearme con mi madre por llegar tarde a casa, me gustaba salir mas con mis amigos del colegio, iba a salir a los Mall, a jugar baloncesto o ir al parque con mi clase y llegaba en la noche, en la casa estaban mis tias y conversaba con ellas, pero mas paraba con mi tía Melissa y Damaris siendo quienes mas fantaseaba, ellas se recostaban en el sofa y hablamos, viendo tele, de reojo las veía como se recostaban como si estarian modelando para mi, me cubria como siempre, las veia y ellas hablaban de forma sensual o asi lo sentia en mi mente, con el paso de los días empecé a venir mas temprano tambien pues me cansaba de pelearme siempre con mi madre, con mis tias siempre tenia confianza y les contaba mi dia a dia y ellas me contaban su día, a veces me gustaba verlas por la ventana mientras cuelgan el tendero cuando traen shorts y me masturbo viéndolas desde mi cuarto.
Un dia normal mientras estaba en casa, me encontré un calzón tirado afuera de la puerta del cuarto de mis tías, a lo que intrigado tome el calzón y con mucho morbo la empecé a oler mientras me masturbaba con mi pantalón puesto, no sabia de quien tia podria ser pero luego de un rato deje el calzón y lo tire al cuarto para evitar que alguien me descubra, el dia siguio normal y en la noche me masturbe para acabar la calentura que fue encontrar ese calzon. Los días transcurrieron, y de pronto volví a encontrarme otro calzon afuera de la puerta a lo que esta vez volví a hacer lo mismo con la diferencia de que ahora me lleve el calzon a mi cuarto para masturbarme, fue rico oler este calzon sucio, lo empecé a lamer e imaginarme como seria oler la vagina de mis tias, al terminar regrese el calzon en su lugar, luego de ese dia volvi a revisar si encontraba algún calzon tirado, siendo muy pocas veces a lo que me tentaba la idea de sacarlo yo mismo del cuarto y eso hice empecé a oler un calzón que estaba tirado en el cuarto mientras me masturbaba con mi pantalón puesto, estaba excitado hasta que me interrumpio mi tia Melissa quien me encontro en esta posicion, yo alterado solo tire el calzon tratando de disimular, mi tia me vio medio riendo regañandome de que hacia con ese calzon, yo trataba de evadir la conversación agregando que lo habia encontrado afuera de la puerta y que ya ocurre varias veces, ella me dijo que no deberia estar haciendo eso, pues que pasaria si al final sea de mi madre, yo me quede con la duda luego de que dijiera eso, pero al final me dijo que me perdona esta vez medio riendo y que espera que no este robando ningun calzon de sus hermanas o de ella, luego algo coqueta me empezo a bromear diciendo lo travieso que era y que ya no era un niño, tambien de que entiende de que ahora las veo como mujeres muy bellez, a lo que luego entramos en confianza y seguimos con lo nuestro, la verdad me senti aliviado y trate de evitar hacer eso de nuevo.
Pasaron unas semanas, estaba ya cerca de mis exámenes finales del año a lo que en poco tiempo llegaría el verano, yo estaba ansioso pues volveran los dias de playa, hasta que volví a encontrar otro calzon en el pasillo afuera del cuarto, yo ya estaba caliente y me queria desahogar así que tome el calzon y lo escondí en mi cuarto para más tarde, esa noche me masturbe rico oliendo ese calzon, lo lamia mientras imaginaba que era la vagina de una de mis tías, luego lo escondí entre mis cosas y me quede dormido. Pasaron los dias y habia olvidado por completo que tenia el calzon guardado hasta que una tarde que estaba viendo tele con mis tías tranquilo mi tia Kiara nos preguntó si habíamos visto su calzon tirado que le falta uno, a lo que quede paralizado al recordar que tenía guardado el calzon y que era específicamente de mi tia Kiara, mire de reojo a mi tía Melissa y vi que ella me puso una mirada de que me descubrió, yo finjo que no sabía nada, luego de cenar fui directo a buscar el calzon en mi cuarto y lo tire al cuarto de ellas donde espere que mi tia Kiara lo encuentre. Esa noche regrese a recostarme en mi cama viendo tele pero de pronto entra mi tia Melissa a venir a interrogarme, yo estaba entre nervioso y avergonzado pero me tranquilice al ver que no vino a regañarme, mi tia se sento en mi cama y me dijo que sabia que yo habia tomado los calzones de mi tia Kiara y me recordo que dije que no lo volveria a hacer, me disculpe y le dije que no me resisti pues vivir con ellas me hacian pensar muchas cosas, mi tia se mostro bastante comprensiva y dijo que entiende que a esa edad puede sentir ese tipo de deseos y que tambien paso por eso a su edad, y que a veces el sexo es una forma de liberar tension de tanto estres pues ella tenia experiencia confesando que era alguien bastante traviesa a mi edad, luego me pregunto de forma coqueta que si yo tenia novia, le respondi que no, luego me pregunto que si estaba viendo a alguna chica en el colegio, le comente algunos ligues y amigas que tenia en el colegio pero jamás llego a nada. Mi tia Melissa y yo hablamos ya en confianza donde hablamos de cosas mas personales, ella me dijo una anecdota divertida de cuando mi abuelo la descubrio desnuda junto a su novio en su cuarto y este hecho al sujeto de su casa estando aun desnudo, algo que me hizo reir, luego ya en mas confianza le confese que comence a tenerles morbo desde que tenia 14 y me calentaba mucho cunado ibamos en la playa, mi tia de forma cariñosa diciendome pobrecito por lo que tuve que pasar y que debio ser incomodo diciendome que no deberia darme verguenza de sentir eso que es normal pero tambien que deberia dejar de robarle prendas a ellas y que hay que respetar sus cosas privadas, esta vez fui mas conciente agregando que le gusta que alguien la ve de forma atractiva y se alegra que sea yo, pero de pronto me pregunto de que pensaria de ella si fuera de mi edad, le respondi que nada cambiaria, ella me dio un abrazo algo que me calento, algun dia llegara tu dia en la que experimentes el sexo, me dijo ella mientras me abrazaba. Con la conversación que tuvimos sabía que ella ya tenía experiencia a mi edad y que era bastante traviesa, a lo que algo intrigado le pregunte quien fue su primera vez, ella hizo un siseo diciendo – shhhhh aun no te lo puedo decir, pues era una niña bastante mala bb. Al final me dio un beso en la mejilla y salió del cuarto, yo estaba algo caliente, mi verga estaba dura y quería masturbarme esta vez pensando en mi tía Melissa y en Kiara a quien le había olido sus calzones.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!