LA COSTURERA SEDUCTORA I

Joven costurera estaba con mucho hambre de mujer y llego un dia una buena comida…….
Mi nombre es Alicia, aprendi a manejar la máquina de coser muy bien porque veía a mi madre trabajar mucho en ella, y como a mí me gustaba dibujar, pasaba muchas horas haciendo moldes de vestidos, pantalones y, todo aquello que mi fantasía de niña, de joven me podía imaginar, tengo 26 años, nunca he ido a la universidad y me dedique hacer realidad esos moldes y junto con mi madre hacíamos obras de costura a la comunidad donde vivíamos. Cerca de casa hay muchos centros de trabajo colectivos, hay una aduana donde trabajan muchos caballeros, fábricas de tejidos y allí trabajan muchas chicas, también artesanos porque la población sino trabajan en las fábricas están en el campo; ellos son nuestros clientes. A pesar que mis padres son conservadores, a escondidas veo alguna revista de adultos que se olvidan los clientes y yo me las guardo. Mi padre es muy celoso y el está trabajando en una de la fabricas como técnico, es un hombre muy rudo y serio, mama lo quiere mucho, ella es muy feliz con el sobre todo por las noches.

Los trabajos cuando son pesados los hacemos junto con mama, y si no cada una hace lo suyo. Un día se apareció uno de los trabajadores del puerto, muy tosco el, manos grandes y ásperas preguntando si se le podía hacer un pantalón.  Yo: Si señor, es para usted o para un pariente suyo?  Pedro: Es para mí. Pero le informo que es muy difícil confeccionarme ropa.  Yo: No se preocupe procuraremos hacerlo a su gusto y medida… Pedro: Hasta ahora nadie ha podido hacerme unos buenos pantalones.  Yo: Venga vamos a tomarle las medidas.  Se acercó y mama iba a tomar los datos que yo iba a medir.  Paso a paso tomaba con mucho cuidado cada una de las dimensiones, y él era muy fuerte. Yo: En que trabaja señor?  Pedro: En el almacén del puerto, allí somos 12 más el jefe y el secretario 14.  Yo: También carga muchos bultos y pesado, Pedro: Si y también manejamos los coches de carga. Me llamaba mucho la atención este señor, su fortaleza y la dureza de sus músculos, eso hacia vibrar mi cuerpo, un da me había pasado algo así con nadie.  Cuando llegue a la parte de sus piernas, me estremecí, pude notar que tenía una verga muy robusta y gruesa; mi cuerpo se asustó y no sabía cómo reaccionar, sentía mi sangre subir de calor ante tamaña pieza sexual, mis manos no me obedecían y querían apretar tamaño paquete, me costó mucho controlarme, ya para eso sentía mi chucha húmeda y muy caliente. .  Yo: Prefiere sueltos o al cuerpo su pantalón señor.  Pedro: Suelto por favor, pero no mucho.  Yo: está bien.  Cuando llegue a la entrepierna, yo temblaba, ya que pude sentir lo caliente del cuerpo de Pedro; el me miraba avergonzado y, yo más…pero esa situación me excitaba mucho ya querría desvestirme y darle mi conchita a tan fuerte cuerpo. Mi conchita que nunca había probado verga tan enorme y gruesa como la de ahora…  Yo: Listo señor, dentro de tres días venga para hacerle la prueba y toma las medidas finales. Pedro: Mire son dos pantalones para trabajo y si salen bien le mando más de salida.  Yo: Esta bien.

Esa noche ya en mi soledad  en mi cuarto, toda desnuda y con la mano apretaba mi chuchita y me ponía a imaginar de qué tamaño seria su sexo, si por encima de su ropa lo sentí inmenso, grueso, apetecible y calcule que sería como 20 cm.  En estado de reposo, y cuando se animara de qué tamaño seria Oh dios mío esa verga me rompería toda mi conchita. Cuando concilie el sueño, me vi desnuda con ese trabajador tosco rudo, que me apretaba a su cuerpo, que hacia vibrar mi sangre y movía los sentimientos más obscenos, porque en el sueño me la, metía por mis dos huecos, sintiendo más gusto por delante y mucho dolor placer por atrás…oh que rico. Y sus manos ásperas pasaban por todo mi cuerpo, mies seños se ponían duro y mis pezones se paraban esperando ser mamados; mis nalgas nos escapaban de esa inspección manual del trabajador, cuando de pronto en el sueño siento que me abre las pierna si coloca su vergota en la entrada de mi chuchita, y OH   yo misma empujo mi pelvis a la suya para que se meta toda y con mi manos ajusto su cintura para que se ajuste más… que rico es sentir esa cosota dentro…toda … Y siento que me mojo… entonces me despierto asustada y veo que en verdad me moje en el sueño… ese señor me había cambiado mi equilibrio y despertó eso que estaba dormido….. Me bañe para calmar mis efluvios vaginales.

Pasaron los tres días y ya tenía el pantalón listo para la prueba del trabajador, yo estaba impaciente, no sabía a qué hora llegaría, porque ese día mama y papa se fueron a saludar a sus parientes a un pueblo cercano y no llegarían hasta el día siguiente, es decir estaría solita, soñé que haría muchas cosas con Pedro, sentiría ese olor a trabajador y sus manos por toda la fineza de mi piel y mi conchucha se mojaba sola para facilitar su ingreso masculino; Cuando de pronto tocan la puerta y era él  Yo: Hola buenos días pase.  Pedro: Buenos días, estará listo mi paquete.  Yo: Si, tenga pruébese allí detrás del separador.  Se fue allí y yo me puse en un la quería verlo todo, mi mano estaba en mi chucha, apretándola duro; para ver por el espejo, que parece él no se había dado cuento que había. No se me escapaba ningún detalle y de pronto si, se la vi, no usaba ropa interior y su verga salió de su prisión, era INMENSA, me puse muy caliente, tenía ganas de probarla con mis bocas era gruesa y cabezona, estaba temblando era la primera vez que veía una verga en mi casa de esa manera y era arrechante..  Yo: usted me avisa.  Pedro: Ya puedo salir para ver con usted.  Yo: Si.  Cuando salió, note que su verga no se notaba y eso le gusto al señor.  Yo: Le quedo bien?  Pedro: Si me queda muy bien y la voy a recomendar.   Le hice una factura indicándole cuanto iba a ser el costo del trabajo, cosa que no le pareció mal, se la entregué en un sobre.  Yo: viene mañana a recoger el pantalón listo con los cambios que me ha dicho ahora.   Pedro: Mañana también le traigo tela para mis pantalones de trabajos.  Volvió a meterse atrás del ambientador y pude volver a mirar esa vergota que la quería para mí. Cuando salió me dijo que hacía mucho calor y que si podía invitarme un refresco, yo le acepte. Salió a comprar los refrescos y lo bebimos conversando cosas sin importancia, pero notaba que se quedaba mirando mis piernas robustas y fuertes, blancas. Yo sentí que mi sexo se abría ante cada mirada de el en esa zona, no le decía nada porque yo quería me mirase. Mis pechos estaban duros ante esa excitación.

Cuando terminamos los refrescos Pedro: todavía siento calor usted no?  Yo: Si, también siento mucho calor.  Seguía mirando su vergota y, parce que él lo noto.  Pedro: puedo tomar una ducha en su baño? Yo: Claro, le voy alcanzar un toallon para que se seque.   Pedro: Gracias es usted muy amable. Se metió en la ducha, y me pido la toalla, extendí mis brazos con la prenda, y de reojo pude ver la fortaleza de su cuerpo y la dimensión de su verga parada.  Ohhh que rica me dije.  Pedro: usted no se baña?  Yo: Cuando usted se marche.  Pedro: Venga báñese conmigo otra vez, no hay nadie que lo impida, cierra la puerta y venga. No lo dude ya quería una metida y así lo hice, cerré la puerta de la calle, temblando me metí al cuarto de baño y… Pedro: Que hermosa es usted Alicia.    Yo: Usted es muy fuerte    Empezó a tocarme con sus manos ásperas mis nalgas y yo me deshacía, mi conchita se humedeció toda, me levanto en peso y fuimos a mi cama, me beso con sus labios grueso y duros mi concha… Umm que rica concha tienes, esta mojadita…    Baje mis manos instintivamente hasta su verga, la tome, era muy dura y venosa, sentía que me iba a raspar cuando me la meta, pero eso me gustaba.    Pedro: Chúpala…   Yo: es muy grande para mi boca…  Pedro: Chúpala, vas a ver que no y así fue no sé de donde salió tanta plasticidad que abrí la boca y entro su cabezota….esta rica me decía, caliente y dura, En la saco de mi boca y me puso echada mirando el techo abrí mis piernas, se puso a mar mis pechos y sus dedos expurgaban mis vellos y la chucha estaba lista para el ataque de su verga…estaba bien húmeda.    Sentí que coloco su cabezota en la puerta de la chucha y como en mi sueño empujé hacia arriba para tenerla toda para mi…   Ay que rica la tienes, métela más Pedro…  Pedro: Ya la tienes toda dentro de ti y está muy caliente y jugosa que se resbalo solita…  Yo: Yo: estoy plena y llena de esa vergota pero quiero más…dame más….El empezó con sus movimientos de meter toda lo más profundo posible, y si me raspaba la chucha cada vez que entraba un poco más, y al salir sentí que debía ajustarla para que no se vaya toda, sus huevos duros y grandes chocaban en mi pelvis…que paradisiaco era todo eso, sabia cachar y eso me llenaba mucho.

No se cuánto tiempo me cacho, porque me desmaye ante tanto placer, cuando desperté estaba sola Pedro se había ido porque tenía que trabajar de noche, estaba toda llena de leche… fui al baño y note que no tenia sangre, Esa noche dormí placenteramente, por fin había tenido una verga inmensa dentro de mi.  Al día siguiente al medio día llego Pedro, Pedro: Hola Alicia, ayer fue un día muy feliz para mí, nunca nadie había aguantado mi sexo completo.  Yo: Que bueno, yo también lo gocé mucho.  Pedro: Mira aquí tienes la tela para otros dos pantalones de trabajo más, lo haces a la misma medida. Y aquí el pago de tus servicios.  Yo le entregué su pantalón terminado y se fue.  Pedro: Gracias Alicia, te voy a recomendar en la empresa para los trabajos de overoles de todos.  Cuando se fue abrí el sobre, allí estaba la boleta que le hice pero había más, otro sobre con cinco veces más de lo acordado por la confección de los pantalones, entendí que era por el polvazo que le di…