La esposa de mi primo

Aprovechandome de la esposa de mi primo mientras está borracha.
Hola, mi nombre es Alex, al igual que muchos en esta página me he decidido a contar mis experiencias sexuales que van desde el vouyerismo hasta relaciones con familiares.

Al ser hijo único y de padres ausentes por cuestiones de trabajo desde pequeño tuve esa libertad de experimentar y descubrir lo que me exitaba aún cuando en mis primeros años no contaba con la tecnología que hoy se tiene.

Creo pertinente presentarme, al menos en este primer relato, como ya lo dije mi nombre es Alex, me considero bisexual, actualmente tengo 31 años, mido 1.70 y soy de piel clara.

Soy de México, vivo al norte del país, normalmente por las fechas de diciembre hay fiestas por el año nuevo, y en esta familia se acostumbra celebrarlo reuniéndose con los abuelos y siendo mi familia la única que vive en el mismo lugar es habitual que los familiares de queden en nuestra casa, algo que siempre me ha molestado ya que soy yo quien siempre debe ceder su cuarto y termina durmiendo en la sala.

Está situación me molestó por mucho tiempo hasta que empecé a ver las ventajas que esto conlleva. Esto sucedió cuando yo tenía 15 años uno de mis primos, mayor que yo, llegó a la casa con su esposa, era la primara vez que la veía, se habían casado apenas un mes atrás. Ella se llama Martha, debo admitir que era muy linda, pero sin duda lo que más atraía de ella era su cuerpo, el cual lucía con leguins ajustados y pronunciados escotes que no dejaban nada a la imaginación, todo un sueño para un chico de 15 años. Cómo de costumbre me tocó darles mi habitación y yo aprovechaba para entrar con la excusa de haber olvidado algo, en varias ocasiones la pude espiar mientras se cambiaba de ropa e incluso entrando a la ducha pero ella nunca me dió pie a algo más. Una de estas noches la familia se reunió en el patio para tomar y bailar cosa que a mí me desagrado pues creo que no podría dormir, para las 2am la música seguía y yo tenía que ir al baño, al llegar ví que la luz estaba encendida, creí que la habían olvidado así que solo entre y me sorprendí al ver a Martha en la taza del baño, mi primera impresión fue disculparme y salir pero me di cuenta que estaba dormida, sin duda había tomado demasiado, trate de despertarla pero no reaccionó si que molesto me dirigí al patio a decirle a mi primo que fuera por ella y la llevara a su habitación pero a medio camino me llegó una idea, podría sacar provecho de esta situación. Me asome al patio y ví que todos seguían en la fiesta, nadie se preguntaba por la esposa de mi primo, solo les importaba tomar.

Esto me dió confianza en poder aprovechar la situación y volví al baño con una notable erección en mi pijama. Entre al baño y nuevamente trate de despertarla incluso moviendo sus brazos pero no reaccionó, cerré un poco la puerta y apague la luz, pensé que si despertaba no sabría que era yo y podría salir rápidamente. Al estar en la taza del baño tus leguins y tanga estaban abajo en sus tobillos, así que fue fácil meter mi mano en su entrepierna y comenzar a acariciar su vagina completamente depilada, era un sueño echo realidad, aunque olía un poco a orina no me importo, seguí acariciándola y con la poca luz que entraba de la ventana me aseguraba de que siguiera dormida, mi exitacion aumentaba así que me baje un poco la pijama y mi boxer dejando fuera mi verga que estaba increíblemente dura por el momento que estaba viviendo, una mezcla de adrenalina y exitacion. Comencé a masturbarme mientras introducía lentamente uno de mis dedos en su vagina, mi única experiencia eran un par de videos que un amigo guardaba en su computadora, los cuales veíamos una y otra vez, pero ahora era real, el olor, el calor, la sensación de su piel eran algo increíble para mí. Me arriesgue un poco más y comencé a meter dos dedos a medida que sentía como su vagina se mojaba más y más y mi verga se deslizaba sin problemas en mi mano con ayuda del precum hasta sentir que me correría pronto asi que me detuve, me quedé un momento de pie admirando a Martha mientras mi verga palpitaba y llevaba la mano con la que la masturbe a mi cara, el olor era embriagante y quería seguir hasta el final.

Salí al pasillo a asegurarme de que la fiesta seguía y podría continuar, cuando los escuché riendo y cantando volví a entrar al baño con cuidado abrí los botones de su blusa y la baje hasta sus codos sin quitársela, me quite la pijama y el boxer para tener más libertad de movimientos y me puse frente a ella para rozar mi verga en tus tetas sintiendo el encaje de su brasier, lo examine un momento y para mi fortuna el broche estaba al frente así que rápidamente lo abrí dejando al descubierto ese hermoso par de pechos comencé a acariciarlos siempre expectante de su cara para asegurarme de que no despertara y sin dudarlo me arrodille para besarlos y pasar mi lengua por sus pezones, me sentía en el cielo y mi verga estaba dura como roca goteando precum, ya no aguantaba así que pensé en masturbarme frente a ella y correrme en sus pechos, me puse de pie y mientras me la jalaba mi exitacion me hizo tomar su mano y ponerla al rededor de mi verga para simular que ella me lo estaba haciendo y casi me da un infarto al sentir su mano apretarme y moverse por si misma, pensé que se había despertado, que todo este tiempo fingió estar dormida, pasaron mil cosas por mi cabeza en solo un segundo pero su voz me trajo de nuevo a la tierra al escuchar tu voz entrecortada decir el nombre de mi primo, se estaba despertando y pensaba que era su esposo el que tocaba su cuerpo, ella seguía hablándome pero al estar la luz apagada yo solo me límite a callarla con susurros, quería irme pero ella no dejaba de masturbar mi verga en la obscuridad y tuve una idea, puse mi mano en su cabeza y la guíe hasta mi verga, ella semi consiente de lo que pasaba comenzó a hacerme una mamada, era increíble, solo lo había visto en videos pero está sensación era algo nuevo y único, no se cuanto tiempo paso, trate de resistir el correrme mientras una de mis manos estaba en su cabeza llevando el ritmo y la otra acariciaba sus tetas hasta que no pude más y termine corriéndome en su boca, creí que se apartaría pero siguió chupando hasta limpiarme y tomarse todo mi semen, cuando por fin me soltó comenzó a subirse su tanga y leguins y a acomodar su brasier y su blusa mientras me pedía que encendiera la luz yo solo tome mi ropa y salí del baño rápidamente, mi corazón latía muy fuerte mientras me vestía en la sala, cuando escuché la puerta el baño me asome sin que me viera, pensé que iría al patio y le reclamaría a «mi primo» por haberla dejado en el baño y que me descubrirían al saber que el único dentro de la casa era yo pero por suerte cuando salió estaba aún tomada y solo se fue al cuarto, pasaron un par de minutos y decidí ir a verla, estaba dormida en la cama, ni siquiera se desvisto así que pensé que estaba a salvó.

A la mañana siguiente mi primo y su esposa fueron los últimos en ir a almorzar, los dos con una tremenda resaca que no recordaban nada de la noche anterior, en especial Martha que todos le decían en broma que fue al baño y no regreso a la fiesta, ella solo se disculpaba y trataba de recordad pero no podía, mi secreto estaba seguro.

Las siguientes noches cuando se ponían a tomar quise repetirlo pero la ocasión nunca se dió y hasta el día de hoy deseo que algo así se vuelva a dar para poder penetrarla, quien sabe, hay una reunión cada año, espero pronto pueda cumplirlo.

Este es mi primer relato, creo que me extendí mucho en los detalles al principio pero quería revivir hasta el último detalle para que quien lo lea pueda vivir lo que yo viví esa noche.

Pronto publicaré más vivencias, para que me conozcan a través de mi sexualidad y fetiches.

Si alguien quiere contactarme pueden hacerlo en este correo [email protected]