la hermanita de mi novia
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En mis 30 años quisiera contar una deliciosa historia que me sucedió teniendo 21, la historia es larga, aviso previo, pero creo que es buena; era mi primer año en la universidad en la ciudad y yo alquilaba un pequeño departamento que mi padre me pagaba.
A los cuatro meses de estar allí, me hice novio de Sandy en una fiesta universitaria. Apenas teníamos dos semanas de novios cuando nos acostamos por primera vez, Sandy era delgadita, con senos pequeños, pero era muy buena en la cama. Asi que seguimos nuestra relación y follando una o dos veces por semana. A los tres meses de novios conocí a su familia, ella me llevó a la casa de sus padres. Conocí también a su hermanita Ingrid, de unos quince o dieciseis añitos, a diferencia de su hermana Ingrid tenía los ojos verdes, dos lindos senos (tres veces el de su hermana) y su cuerpo no era delgado ni gordo, sino lozano, lindas piernas y pies, con un riquito traserito. Desde que la ví me prendí de ella, y creo que yo también le di buena impresión. Después de ese día yo visitaba a Sandy en su casa, solo por ver y platicar con Ingrid, ella también me recibía con una linda sonrisa y de alguna manera me coqueteaba y se veía celosa que su hermana fuera mi novia.
Cierto día domingo, yo le había dicho a Sandy que llegaría a su casa a cierta hora, ella me comentó que saldría a hacer un mandado con sus padres, pero que nomás llegara a su casa que la llamará a su movil. Ese día decidí llegar mucho antes de la hora pactaeda, para ver a su hermana primero. Y sucedió que Ingrid estaba solita en su casa, solo la sirvienta estaba en la casa. Ella me recibió y me dijo que Sandy le había dicho que la llamara cuando yo llegara, yo le pedí que no lo hiciera, que talvez su hermana estaba haciendo algo importante y que además quería estar un ratito con ella. Ingrid estuvo de acuerdo y con una sonrisa nos fuimos a la sala.
Estuvimos en la sala muy a gusto, pláticando y conviviendo, a Ingrid le brillaban sus ojitos verdes, ese día tenía puesta una mini falda de jeans, zapatos abiertos de pequeño tacón, una blusita tipo top, es decir con hombros y ombligo descubiertos. Se miraba muy linda y rica Ingrid. En esos momentos yo no quería saber nada de Sandy.
Convivimos como si nos conocieramos desde hace mucho tiempo atrás. Viendo que el tiempo era enemigo. Le propuse a Ingrid un juego, que dijeramos lo que queríamos y que el otro tenía que cumplirlas. Luego de pensarlo, Ingrid aceptó, yo estaba muy contento, ya tenía una erección en pleno desarrollo en los pantalones.
-Quien empieza??- pregunté
-Yo!! Yo!!- dijo Ingrid, -está bien dale!!-
Se tardó varios minutos decidiendo, luego me dijo, quiero.. que me digas -Que sientes por mi??- Vaya pregunta que me hizo, pero pensé en sacarle provecho.
-Eres la mujer más linda del mundo, siento algo especial por ti, mi corazón late mucho por ti cuando estoy contigo, cuando te veo, y quisiera tener algo contigo a pesar que en este momento soy novio de tu hermana-
Ingrid se ruborizó, se le hizo un nudo en la garganta. Luego de un silenco y de un abrazo que luego me dio, me tocaba el turno.
-Que deseas?- me dijo Ingrid.
-Quiero..darte un beso en los labios!-
Ingrid me hizo gestos negativos con la cabeza, pero le dije que era un juego y que ella había aceptado jugarlo.
-Está bueno!- me dijo después de un rato de estarla casi rogando. Me acerqué, ella cerró los ojos y mis labios tocarón los suyos, mi lengua recorrió sus labios lentamente, instintivamente ella sacó su lengua y por fin se juntaron efusivamente, era notorio que ambos estabamos atraidos el uno al otro y que queriamos darnos un beso desde hace mucho tiempo atrás.
El beso fue de unos dos minutos. Nos separamos y ambos nos pusimos muy rojos.
-Es tu turno!- le dije limpiandome la boca de su saliva.
-Quiero que te quites la camisa, quiero ver tu pecho- Sin perder tiempo me quité la camisa y la puse a un lado del sofa.
Era mi turno, tenía que avanzar para tener a Ingrid. El tiempo pasaba.
-Quiero que te quites tus braguitas y me las des!- dije
– Ahh no eso no!!- contestó Ingrid.
-Tienes tu faldita, no se verá nada!! Le dije -Además tienes que cumplir el deseo, vamos!!-
Luego de volverla a rogar un buen rato, ella se paró y me dijo que me volteara para el otro lado. Asi lo hice. Ingrid deslizó entre sus piernas sus braguitas de color blanco, la sacó y me la dio en la mano.
Yo la tomé y la olí frente a ella, su olor era a cuquita joven. Ella me dijo –qué malo eres- cuando vió lo que hice con sus calzoncitos.
-bueno, te toca!- le dije a Ingrid. Ella se sentó y metió parte de su faldita entre sus piernas como sientiendose más segura, ahora que ya no tenía bragas.
-Quiero besar tu pecho- me dijo, era evidente que mi pecho le atraía a la pequeña Ingrid. Se acercó con mucho recelo y empezó a besar mi pecho, lo hizo unos segundos y quiso retirarse, pero le dije que siguiera haciendomelo, que se sentía bien, ella se volvió a acercar y ahora sus besos era más esparcidos y con más ahinco. Ingrid llegó a mis pezones masculinos y le pasó la lengua, eso me hizo cosquillas en todo mi cuerpo. Además terminó de pararme la verga.
Cuando hubo terminado, ya sabía yo cual era mi siguiente deseo.
-Quiero besarte los pechos!- le hice saber. Ella automaticamente se tapó los senos con sus manos sobre su blusa o top y me dijo que no!
-Vamos, yo me dejé hacerlo!- la traté de chatajear.
Soltó sus manos de sobre sus senos, me acerqué le fui bajando su top hacia su cintura, fueron apareciendo los senos más lindos que había visto en mi vida. Blancos, duros y con pezones color rosado. Se me hizo agua la boca, me avalancé sobre uno de ellos, lo chupé y lamí sus pezones, Ingrid gimió y quiso retirarme con un poco de fuerza, pero yo la tomé por la cintura y seguí mamando sus senos, de uno me pasaba a otro, poco a poco sentí que la fuerza de Ingrid iba reduciéndose. Ya sin fuerza seguí mamando sus senos a mi antojo por varios minutos.
-Te pasaste!, que malo eres!- me dijo Ingrid cuando me retiré de su busto. Pero me lo dijo con una casi sonrisa en sus labios. Yo estaba satisfecho.
-Te toca!- le dije, para romper ese momento de silencio. Ingrid que se veía que estaba un poco asustada, me dijo que su deseo era que le comprara un helado, quería salir de la sala de estar, me pareció divertido su deseo, me imagino que la mamada de tetas la dejo caliente y quería apagarlo con helado. Le dije que estaba bien y salimos a la calle a comprar uno, yo me adelanté y tomé sus braguitas y no le dejé ponersela. Asi que mi pequeña Ingrid salió a la calle con su cuquita al aire. Fuimos a una tienda cercana y compramos dos helados de crema.
Regresamos a la sala, y le comenté que yo quería seguir otro rato con los deseos, ella primero se negó pero nuevamente casi la rogué para que continuaramos.
-Me toca!- le hice saber. Antes había visto mi reloj y era posible que Sandy estuviera de regreso dentro de pocos minutos, asi que había que arriesgarse.
-Quiero que comas mi helado!- le dije, -Qué fácil!- me contestó, yo le mostré el helado, pero frente a ella me bajé el cierre del pantalón y saqué mi verga, que estaba a la mitad de erecta, ella se horrorizó de verla y se tapó los ojos, -que haces!!-, mientras, yo le puse una buena cantidad de helado sobre su gran cabeza de mi miembro y en parte de su tronco, ella me miró como tratando de encontrarar una explicación, pero yo le dije que cerrara los ojos y que asi no sentiría.
Me paré y tomé mi verga con una mano y la llevé a los labios de Ingrid, -Abre la boca- le ordené, ella abrió poco la boca y le puse el helado que llevaba mi miembro. Ella comenzó a lamer el helado y claro que rozaba y tocaba mi verga cada vez que lo hacía.
Cuando se acabó el helado sobre mi verga, la tomé de su cabeza con suavidad y le hice tragarse mi falo, ella primero no hizo ningún movimiento cuando tuvo una parte en su boca, pero luego, lo comenzo a chupar por dentro dandole varios lenguetazos.
-Chupalo como si fuera un bombon de dulce!!- le dije a Ingrid, que ya estaba inducida y siguió mamando mi verga varios minutos más, con los ojos cerrados.
Luego Ingrid se separó, abrió sus ojitos cuando yo ya me estaba guardando la verga en mis pantalones, por lo cual no se alarmó y siguió jugando.
-Ahora.. quiero..(lo decía mientras tragaba saliva), darte un beso yo!- Uyy la nena ya está excitada, pensé, la puse sentada sobre mis piernas y nos besamos como dos novios, mi lengua y su lengua se frotaban con fuerza, ella metia su lengua en mi boca y yo la tomaba con mis labios, fue delicoso realmente.
-Vamos a tu habitación!- le pedí a Ingrid, ella me miró y me entendió, nos fuimos de la mano a su habitación que estaba cerca de donde estabamos. Cerramos la puerta. Nos sentamos en la cama. Ella y yo nos quitamos los zapatos.
-Ahora me toca, quiero… besarte los pies!- le pedí, como ella no llevaba braguitas, levantó su pie con dirección a mi boca, pero se metió la falda entre sus piernas para no mostrar su cuquita que ya debía estar un poco lubricadita.
Le tomé su pie, le pasé la lengua desde el tobillo, hasta las uñas de sus deditos. Le lamí dedo por dedo de cada pie, los cuales eran lindos, regorditos y limpios, cada dedo lo metía entre mis labios y los chupaba, mientras lo hacia Ingrid de nuevo cerro sus ojitos, lo que aproveché para levantarle más el pie que tenía en m boca, dejó descubierta su cuquita, era casi lampiña, poquitos pelitos castaños, con pequeños labios vaginales color rosadito y colorado, hubiera deseado dejar sus pies y lanzarme contra su rajita, pero tenía que esperar y no romper el juego. Además siempre me a gustado lamer los pies de mis amantes, y los pies de Ingrid eran exquisitos, y me excitaba ver su cuquita mientras chupaba sus piecitos. Realmente yo estaba muy excitado y ella también, por los besos, caricias, mamadas y el momento de morbo que vivíamos. Nuevamente, bajé el cierre de mis pantalones y saqué mi verga, Ingrid no me vió porque estaba acostada con los ojos cerrados. Tomé sus dos pies y me masturbé la verga con ellos, las piel de sus dos pies era suave y lozana, que me producía una sensación belicosa cuando apretaba mi verga con ellos. Ingrid abrió un poco los ojos, ya que habrá sentido una sensación inusual en sus pies, me vió, vió mi verga frotarse contra sus dos pies y los volvió a cerrar.
En eso estabamos cuando de repente oímos que se abría la puerta de car port, era la familia de Ingrid!!, el corazón me latía a 1000 por hora, me asusté, pero logré tranquilizarme, aún todavia no habían entrado, le dije a Ingrid que se pusiera su blusa y braguitas, yo no sabía que hacer aún, metí mi verga en los pantalones, me puse la camisa a toda prisa, comenzaron a llamar a Ingrid por gritos, yo le dije a Ingrid, que dijiera que no sabía de mi, si su hermana preguntaba, yo me metí por debajo de la cama con mis zapatos en las manos.
La primera en llegar a la habitación de Ingrid fue Sandy, preguntó por mi, Ingrid le dijo que no había venido ni había llamado. Luego el papá y la mamá la saludaron, la mamá entro a la habitación, mi corazón se detuvo en ese instante, imaginense que me descubriera, sería mi ruina.
Pero no pasó nada. Le hice señas a Ingrid, para que saliera con ellos, para evitar sospechas. Cada cierto tiempo Ingrid regresaba a la habitación para ver como estaba, se veía bien nerviosa e insegura. Era obvio, que pasaría si encontraran al novio de su hermana debajo de la cama de ella. Me dijo que permaneciera allí hasta que sus padres se durmieran, y eran como las 8:00 todavía. La buena noticia era que como era domingo y mañana sería lunes, se dormirían temprano para prepararse al día de trabajo inicial de la semana.
Pasaron dos largas horas, hasta que la última luz se apagó en la casa, finalmente oí que Ingrid les deseaba buenas noches a todos. Cuando llegó a la habitación me comentó que Sandy había estado tratando de localizarme a mi movil, el cual yo tenía apagado desde hace algunas horas.
-Esperemos una media hora y te abro la puerta- me dijo Ingrid. Yo antes ya había pensado que ya que estaba allí en la habitación de esta linda chica, por qué no aprovecharlo. Asi que me subí a la cama, le dije que se calmara que ya todo había pasado, poco a poco la fui besando en su cuello, ella me retiró la cabeza, y me dijo que la habitación que estaba vecina a la suya era de Sandy. No me importó, la seguí besando en el cuello, luego las mejillas, y al poco rato nos sumergimos en un rico beso húmedo.
-Está cerrada la puerta?- le pregunté
-Si, bien cerrada!- me contestó Ingrid.
Mis manos se metieron debajo de su top y comencé a acariciarle sus senos, mientras que nuestras lenguas jugaban un poco en nuestras bocas.
Le quité su top y su faldita tipo jeans, luego su braguita, quedó completamente desnudita encima de la cama, la ví, la saboree, luego me metí entre sus muslos para chuparle su cuquita, la nena brincaba en la cama del placer cuando mi lengua comenzó a explorarle su sexo, para mi fortuna tenía muy sensible su rajita y gemía mientras mordía las sabanas de la cama del placer que le causaba. Le comí su cuquita y la hice venirse con mi lengua estimulandole su clítoris, que rica estaba Ingrid!.
Luego de comerle su juvenil cuquita, me quité la ropa y me hinqué sobre la cama para darle de probar mi verga, ella la tomó y comenzó a lamerla de arriba a abajo, luego la metió en su boca para degustarla, yo tenía también que taparme la boca para no gemir y ser escuchados, ya que Ingrid me dio una rica mamada.
Nos prepararamos para lo mejor, nuevamente le comi un ratito su rajita y poco a poco fui subiendo por su vientre, llegue a sus tetas y se las mamé un par de minutos, luego busque su boca mientras mi verga se iba acomodando entre sus labios vaginales, cuando la besé empujé también mi miembro que fue aperturando su vagina, ella jadeó mientras la besaba cuando sintió mi masculinidad perforarla en su rajita. Yo seguí moviendo mis caderas para empujarla más adentro, ella se aferró de mi cuello, me soltó la boca y gimió fuerte, mi verga la había penetrado hasta la mitad, la tuve que callar para que no hiciera más ruidos, luego con un suave vaivén de mi cuerpo la penetré hasta el final, ella mordío mi hombro, lo cual me excitó hasta casi venirme, algunas gotitas de semen escaparon de mi verga y entraron a su pequeña gruta.
Luego todo fue goce, la pistonié duro hasta que se vino y mojó toda su vagina. Después la puse en posición de ladito, y también la follé con la piernita levantada, lo hice hasta saciarnos; luego la penetré de perrito, su culo era casi perfecto, linda forma de nalgas, la tomé de la cintura y la follé bien profundo, luego cambiamos y ahora ella estaba sobre mi cabalgandome la verga, lo cual también fue delicioso, en cada posición nos llenó de goce sexual y placer infinito.
Hasta que finalmente casi una hora después de haber empezado, le eché encima de su cuerpecito un chorro de esperma que cayó en su espalda. Los dos estabamos cubiertos de una capa de sudor, por esta rica batalla, había estado más que maravilloso.
Luego de descansar, me dijo Ingrid que era el momento oportuno para irme. Volví a la realidad. Como un vil ladrón salí de su casa y me dirigí al centro del pueblo, para tomar un taxi.
Como habrán adivinado, terminé con Sandy y ahora soy novio de Ingrid, aunque por ser muy jóven nuestro noviazgo es secreto aún, su hermana no lo sabe. He tenido a Ingrid en mi habitación varias veces y no me canso de tenerla. Creo que fue la mujer de mi vida.
Saludos.
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