LA MADRE DE MI NIETA

“…Imaginaba que sería Delicioso Hacerlo con Usted Don Josué, pero nunca imaginé que lo fuera tanto…”.
LA MADRE DE MI NIETA

Hola mi Querida Comunidad SST. Nuevamente les saludo desde mi MÉXICO LINDO Y QUERIDO, en esta ocasión, para Relatarles una Tormentosa Historia de Amor, Entre Un Padre Atribulado, Su Nuera y Su Nieta, contada por Josué, su Protagonista, (Todos los Nombres y Lugares se cambiaron, por ser ésta una Historia Real). Los dejo entonces con el Relato, que me fue contado por otro de mis Amigos.

“…Hola, mi nombre es JOSUÉ, Tengo 57 años, de profesión Mecánico Automotriz, viudo, desde que Mi Esposa MARIANELA dio a luz a SANDRO, nuestro único hijo, cuando ambos teníamos 20 años. Los hechos que les Relato, sucedieron hace poco más de 17 años, cuando Mi Hijo Había cumplido 20, Y Yo cumpliría 40.

Aún y cuando poseía mi propio taller, y que mis ingresos me permitían darme ciertos lujos, y darle a mi hijo mucho más de lo que necesitaba, casi siempre lo dejaba al cuidado de nanas y sirvientas, pues, tanto mi familia, como la de mi difunta Esposa, vivían en otra ciudad, bastante lejos de donde vivíamos, por lo que eran esporádicas las veces que nos visitaban, o nosotros a ellos.

También por la carga de mi trabajo, era muy común, que trabajara Los fines de semana, siendo pocas veces las que convivía con Sandro.

Por estas y muchas otras razones, mi hijo creció sin ninguna Autoridad Moral, Paterna o Materna, que lo guiara por el camino del bien, y desde la adolescencia se convirtió en un Drogadicto y Un Delincuente, al grado de terminar en el Tutelar Para Menores, por Asalto Con Violencia a los 16 años. Salió, bajo palabra, al cumplir la mayoría de edad (18 años), con la condición de someterse a tratamientos, los cuales cumplía a medias, recayendo varias veces, hasta que, hacía cerca de 2 años, estando Drogado, abusó sexualmente de una menor de edad (17 años, casi 18), El tenía 20.

La muchacha, de Nombre LIDIA, quedó embarazada, y el ofendido padre buscó a Sandro y lo mató descargando su pistola en Él. Fue aprendido y condenado a 20 años de Prisión; su Madre, quién padecía del corazón, sufrió un infarto durante el proceso de su Marido, que duró menos de un año, y falleció cuando Lidia tenía 3 meses de Embarazo. A la fecha en que se dictó la Sentencia De Su Padre, ya tenía 6 meses Embarazada; en esa fecha, me presenté en el Juzgado, y le ofrecí a Lidia cuidar de Ella y de su hijo, hasta que, por sí misma, decidiera que hacer con sus vidas.

Aceptó, más que nada, porque era Hija Única, y ninguno de sus parientes quiso hacerse cargo, por su Estado y porque, Legalmente, ya era Mayor de Edad.

Ese mismo día la llevé a mi casa, después de pasar a la suya por algunas pertenencias, determinando pasar por el resto días después.

Le hice la Promesa de cuidar de Ella y de Su Bebé, y de hacerme cargo de Todos Los Gastos De Su Embarazo, Alumbramiento y Crianza De Su Hija. Supimos Su Sexo En Una Visita Al Ginecólogo, cuando le practicó un ULTRASONIDO.

Ese mismo día, le pregunté si ya tenía Un Nombre para la Bebé, y me Respondió que le gustaba el Nombre De Mi Difunta Esposa: MARIANELA; Y Ella, me pidió que fuera Padrino De Mi Nieta. Yo acepté Gustoso, pensando en que Lidia Sería Mi Nuera, La Madre de Mi Nieta, y, Además, MI COMADRE. Desde luego que, en ese lapso de tiempo, fuimos varias veces a visitar a su Papá, a quien le dije que no le guardaba rencor, pues también Yo tenía culpa de que mi hijo terminara  Mal.

Y así pasaron los días, las semanas y, finalmente, 3 meses después de llevarla a mi casa, se llegó el día en que Lidia dio a Luz a la mas Hermosa Niña que Yo Haya Visto. Cuando salieron del Hospital de Maternidad, Ambas Muy Sanas, Las llevé a casa, y las instalé en la que había sido Mi Recámara Nupcial, Que compartí con mi querida Esposa hasta su Deceso, y que mandé acondicionar con una cama mas pequeña para Lidia (matrimonial, la mía era King Size), y una Cuna para Marianela, además del tocador que ya estaba, y un Sillón Mecedora, en el que La Hermosa Madre pudiera AMAMANTAR A La Hermosa Criatura.

Aquí quiero hacer mención, que Mi Nuera No Posee Un Gran Busto, tal vez un 32 B, pero que, durante el Embarazo, LE CRECIÓ CASI AL DOBLE (36 A), Y aunque siempre que le daba a la Bebé el Pecho, se Retiraba a su Recámara, para Sentarse Cómodamente a Alimentarla, O si estaba en su Recámara, al ver que iba a hacerlo, Yo me retiraba discretamente.

Y Así fueron pasando los días, las semanas y los meses; Marianela iba creciendo con la alimentación y cuidados de su Hermosa Madre. A los 6 meses, Lidia comenzó a darle alimentos sólidos, sin por eso dejar de AMAMANTARLA, y, Como siempre, cuando esto sucedía, Yo Me Retiraba para no incomodar a Lidia.

Pero en una ocasión, Fui a su habitación, toqué la puerta, y Ella me dijo que Entrara; en ese momento estaba terminando de AMAMANTAR A MARIANELA, Y La Bebita, que se quedó Dormida, soltó el Pezón, del cual escurrían algunas gotas Del Vital Líquido Lácteo.

Yo me quedé asombrado, pues tenía ambos Pechos Descubiertos, Y Más, al ver el Gran Tamaño y Belleza De Ellos, pero sobre todo, EL GRAN TAMAÑO DE SUS OSCURAS AREOLAS Y SUS ROSADOS PEZONES, Que Lidia  No Ocultó En Ningún Momento, Por El Contrario, Se Irguió en su asiento, Mostrándome sus Preciosas Tetas En Toda Su Grandeza Y Esplendor.

Me quedé observándolos por Un Minuto Largo, y, Finalmente, levanté la vista, y me volví a sorprender, pues su mirada no expresaba Morbo o Lascivia, sino un Profundo sentimiento de ADMIRACIÓN Y GRATITUD, pero también, vi en sus bellos Ojos, CONMISERACIÓN Y PIEDAD; ADMIRACIÓN: Porque Apreciaba Que No La Hubiese Dejado Desamparada Y No Recriminar A Su Padre El Haberle quitado la vida a mi hijo; CONMISERACIÓN Y PIEDAD: Porque Sabía, o Imaginaba, El Dolor Que Me Embargaba Por El Hecho de haber perdido a Mi Hijo, Y De No Tener Una Mujer En Mi Vida.

Y finalmente, manifestó su GRATITUD como relato a continuación:

Sin cubrirse, se puso de pie, dejó a Marianela en su cuna, y se volvió hacia Mi, mostrándome sus Fabulosas Tetas En Todo Su Esplendor.

Yo me quedé Petrificado, Absolutamente Anonadado, pero al mismo tiempo, se despertó Mi Libido, y sentí como Mi Verga Despertaba Con Una Tremenda Erección De Mis 19 cm.

Lidia, al ver que solo la miraba, se acercó a escasos centímetros de Mí, tomó mis manos con las suyas, y las llevó a esos Deliciosos Cántaros de Miel. Al posarse mis manos en sus Grandes Y Ardientes Senos, sentí como si una corriente Eléctrica recorriera todo mi cuerpo, y se concentrara en mi inflamado Miembro Viril, haciéndolo crecer aún más, o, así lo sentí.

Yo comencé a amasarlos, a tomar sus Erguidos Pezones Entre Mis Dedos, mientras que Ella, me abrazaba por la Cintura Y hacía que Su Vulva sintiera la dureza de mi Tranca, A Través De Nuestras Ropas.

Aún y con todas esas Deliciosas Sensaciones, Yo tuve Un Momento de Sensatez, Y Le Pregunté: “¿Pero que haces Pequeña?”, A Lo Que Ella Respondió: “Por Favor Don Josué, No Diga Nada, No Tengo Como Pagarle Todo Lo Que Ha Hecho Y Hace Por Mí Y Mi Hija, Déjeme Compensarlo Así, De Ésta Manera…”

Yo, Alejándola Con Suavidad, La Miré Y Le Respondí: “…Pero, Pequeña, Yo No Te He Pedido Nada, Y Lo Que Hago Por Ustedes, Lo Hago De Corazón, Porque Amo A Mi Nieta, La Hija De Mi Hijo, Mi Sangre; Y A Ti,  Por Tu Nobleza Y Sencillez, Te Juro Que No Tienes Ninguna Obligación De Compensarme Nada…»

Ella volvió a Tomar Mis Manos Poniéndolas En Sus Tetonas, Y Volvió A Abrazarme, Pero Ahora Enlazando Sus Brazos Alrededor De Mi Cuello, Volviendo A Clavar La Soñadora Mirada De Sus Ojos Castaños En Los Míos, Mirada Tan Profunda, Que Terminó Por Derretirme, Sobre Todo, Por Lo Que Dijo E Hizo A Continuación: “Es Que…, No Lo Hago Solamente Por Gratitud, También, Porque Lo Deseo…”

Y Acercando Sus Labios A Los Míos, Me Dio El MÁS ARDIENTE BESO Que Haya Recibido, Y Que Acabó Con La Poca Cordura Que Aún Tenía, Si Es Que Alguna Vez La Hubo.

Mientras saboreaba su dulce boquita, amasaba sus Grandiosas Glándulas Mamarias, deslizando mis dedos por sus oscuras Areolas, pellizcando sus endurecidos Pezones, que se humedecían con la Leche Materna Que De Ellos Manaba, Y Que Yo Me Llevaba a La Boca, Deleitándome Con Su Dulzón Sabor; Sabor que me Excitó Aún Más, Y Que Me Hizo Llevar Mi Boca A Apoderarse De Uno De Esos Deliciosos Cántaros, Y Sorber El Vital Líquido, Que, Al Saborearlo, Casi Me Hizo Descargar Mi Semen.

Ella me despojó de la camiseta de tirantes que traía puesta, y Yo le bajaba su vestido junto con el resto de su ropa interior, Quedando totalmente desnuda; bajé una de mis manos a su coñito sin depilar, y lo encontré empapado de sus ardientes jugos.

Me llevé los dedos a mi boca, y la rara combinación de la leche materna con sus jugos formaron una DELICIOSOSA Mezcla, que sorbí con gusto, y después se la transmití a Ella, con el Primer Beso que nos dimos.

Fue un beso tierno al principio, con todo el Amor que estaba naciendo entre nosotros, pero, como ya estábamos EXCITADOS AMBOS, Poco A Poco  Fueron Subiendo En Intensidad Y Pasión.

Continuamos besándonos, cuando la tomé en mis brazos, y la llevé a su mullida cama, dónde, suavemente la deposité, y me quedé un minuto largo, contemplando su hermoso cuerpo desnudo, admirando tan portentosa Belleza, y así se lo hice saber: “…Que Hermosa Eres Mi Pequeña, Eres Divina…”, Mientras me despojaba del resto mis ropas, quedando TOTALMENTE DESNUDO, y al quitarme mis Bóxer, Ella se quedó Admirada, al contemplar mis 19cm. En todo el Esplendor De Su Erección.

Me acosté junto A Ella, volviendo a Saborear Sus Dulces y Ardientes Labios, Masajeando Sus Enormes Tetas, y llevándomelas a la Boca una vez más, para deleitarme con la Blanca Y Dulce Lechita, Al Tiempo que una de mis manos se dirigía al centro de su Peludo Coño, introduciendo suavemente uno de mis dedos en El, y encontrándolo muy mojado, por los Ardientes Fluidos que de El Manaban, y que aumentaron cuando, con un Fuerte Estremecimiento, se corrió por Primera Vez, empapado aún más mis Dedos, con los que recogí tan Delicioso Néctar, que me llevé a la Boca, volviendo a Besarla para que También Ella Saboreara Sus Propios Fluidos.

No quise esperar más, Me coloqué entre sus piernas, que Ella Misma Abrió, demostrándome así Su Deseo De Ser Poseída; Con una Mano, Coloqué la punta de mi Miembro Viril en sus Labios Vaginales, y la restregué en su Rojo e Inflamado Clítoris, logrando que, en pocos minutos se volviera a Venir copiosamente, momento que aproveché para hundirle mi Verga de una sola Embestida, Arrancándole un Sonoro Gemido De Placer: “…Aaaaahhhhmmm, Sííí, Así Papi, Asííííí…”; Me quedé por unos momentos Dentro de Tan Ardiente Cueva, Moviendo mis caderas Circularmente, haciendo que mi Tolete tocara cada pliegue y rincón de esa suave funda, para luego sacarla muy lentamente, hasta que solo la cabeza de mi Verga quedara dentro de Ella, punteando el Cada vez más Inflamado Clítoris, con movimientos cortos y rápidos; se la volví a meter con la Misma lentitud hasta chocar otra vez Nuestros Pubis, y repitiendo los movimientos circulares de mis caderas a Derecha e Izquierda y viceversa, haciendo esta Rutina unas Tres o Cuatro Veces; Después de el último movimiento de punteo sobre su Clítoris, comencé un mete y saca de movimientos cortos y rápidos, una Cogida Fenomenal, En la que, Ella, con las Piernas Flexionadas, Se Apoyó en sus talones para mover sus caderas al encuentro de las Mías. Así fue que logré arrancarle Dos Venidas Mas, ligadas una tras otra; Ella cruzó sus piernitas detrás de mis caderas, empujándome con los Talones, como si quisiera que me hundiera hasta perforar su Matriz.

No pudiendo resistir más, aceleré mis Embestidas, hasta que mi Verga Se Inflamó Dentro De Ella y Empezó A Descargar Un Verdadero Río De Blanco y Ardiente Semen, Que Inundó Aún Más Su Ya Encharcada Vagina, logrando Arrancarle Una Venida Más, hasta que, Nuestras Abundantes Venidas Se Desbordaron Fuera de su Ardiente Cuevita, corriendo por su perineo, mojando los cachetitos de sus Nalgas, al correr por el canalito entre ellas, terminando por caer sobre las Blancas Sábanas.

Fueron su Belleza Y Juventud, las que hicieron que mi Verga no perdiera Su Dureza después de Mi copiosa Venida; Me bajé de Ella, La hice recostarse sobre su lado Derecho, me coloqué detrás de Ella, y Alzando su pierna Izquierda, poniéndola sobre la Mía, mientras mi Verga buscaba, una vez más, la Ardiente Entrada de su coño, encontrándola a los pocos instantes, e introduciéndose nuevamente, hasta que mi región púbica se encontró con sus Nalguitas, y mis vellos se restregaron en ellas, lo mismo que mis vellos pectorales en su blanca y tersa espalda.

Metí mi brazo derecho por debajo de su cuerpecito, para poder tomar su pechito que quedó abajo; Ella giró su rostro hacia el Mío, y nos besamos apasionadamente. Ella metió su deliciosa lengüita en mi boca, y Yo la atrapé con Labios y Dientes, y Me Dí un Festín con Ella: La Chupaba, La Mordía, La Enredaba Con La Mía, mientras mi Verga entraba y salía de esa ardiente Cuevita, rezumando Nuestras No Menos Ardientes Corridas; Cuando dejé sus Labios de Rosa, bajé hasta su Teta que quedaba a Merced de mi Ávida Boca, Mientras Ella Gemía Suavemente, y susurraba: “…Imaginaba que sería Delicioso Hacerlo con Usted Don Josué, pero nunca imaginé que lo fuera tanto…”; Dejando un momento su deliciosa Teta, le respondí: “…Y Yo nunca Imaginé el llegar a hacerlo con un Bomboncito Tan Delicioso Como Tú Mi Niña…”

Y una vez más, tomé con mis Labios la deliciosa fuente Láctea que se me ofrecía, mientras mis 19 cm. Taladraban una y otra vez ese coño juvenil y Ardiente, que se abría para recibir cada embestida, con creciente Pasión, y, para sorpresa de ambos, con Cada Vez Más Creciente Amor.

¡¡SÍ…!!! ME ESTABA ENAMORANDO DE MI NUERA, ¡¡¡LA MADRE DE MI NIETA!!!

¡¡¡PERO LO MEJOR ERA: ¡¡¡QUE ELLA SE ESTABA ENAMORANDO DE MÍ!!!

Parecía algo IMPOSIBLE, dado que, Ella, Tenía 18 Años, y Yo 40, (podría ser mi Hija); Aunque, en esos momentos, Ninguno de los dos pensábamos en eso, ni siquiera lo hablábamos, mejor dicho, Eran Nuestros Cuerpos Y Nuestros Sexos los que HABLABAN, Mi Verga Siguió Entrando y Saliendo De Su Deliciosa Cuevita. Sentía en mi Vientre, Mis Ingles Y Mis Piernas La Tersura Y Firmeza De Sus Nalgas Y Sus Piernas, Y En Mi Velludo Pecho La Aterciopelada Piel De Su Espaldita, Sensaciones Que Enervaban Totalmente  mis Sentidos, Percibiendo Sus Estremecimientos, Hasta que Uno  Más Intenso De Todo Su Cuerpecito, Y Las Contracciones De Sus Músculos Vaginales, Me Anunciaron Un Orgasmo Aún Más Intenso Que Los Anteriores, Que Le Vino Cuando Yo Volví A Derramarme Dentro De Su Coñito, con 3, 4 y hasta 5 Chorros de Blanca Esperma, Mientras Nos Fundíamos En Un Agónico Y Pasional Beso.

Seguimos Besándonos durante Un Largo Rato, Yo Aún con mi Daga Dentro De Su Cálida Funda, Cuando Oímos Que MARIANELA despertaba, Reclamando Su Alimento.

Lidia Se Levantó, y Así Desnuda Como Estaba, Tomó En Sus Brazos A La Pequeña y la llevó a la cama, dónde se sentó para Alimentarla. Fue un momento Muy Excitante, Ver A mi Nuera DESNUDA Y AMAMANTANDO A Su Hija, Por lo que No Pude Evitar el volver a Excitarme, mi Tolete Se volvió a Envarar. La Besé una vez más, Me Levanté, y la Ayudé a Hacer lo mismo, me senté a la orilla de la cama, La  acomodé a horcajadas, de espaldas a Mí, poniendo la cabeza de mi Pene, en la Entrada de su Vagina, dejándola ensartarse en mi Inflamada Daga.

Ella, con el morbo de la Situación: Amamantando a Su Hija Y siendo penetrada una vez más, se Vino Nuevamente, al sentirme hasta el fondo de su palpitante coño; y al primero, le siguió una cadena de micro orgasmos, que le venían cada vez que la levantaba y la volvía a dejar ensartarse en mi envarado miembro; Yo hice todo el trabajo, pues Ella seguía Amamantando a Marianela, pero eso no le impidió Gozar plenamente el motivo de Doble EXCITACIÓN: Yo Penetrándola, y Marianela alimentándose, prendida a su pezón. Para completar el cuadro, quedamos de Frente al espejo de cuerpo entero que había en su puerta, y que nos permitía ver lo que estábamos haciendo: Ella y Yo Completamente Desnudos; Yo, Sentado A La Orilla De La a Cama Sujetando A Mi Bella Y Fogosa Amante por sus caderas; Ella A Horcajadas Sentada Sobre Mí, con su Bebita en Brazos Prendida A Su Rosado Pezón, Y Totalmente Ensartada En Mi Daga, Que Rezumaba Los Fluidos De Ambos, Y Que Empapaban Mis Huevos y Muslos: ¡¡¡Ooohhh, Síííí!!! Don Josué, Nunca Me Habían Hecho Gozar, Ni Venirme Tantas Veces Como Lo Ha Hecho Usted, Aaahhhnnn, Me Vengo Otra Vez, Sííííí…; También Yo Estaba A Punto De Correrme: “Yo También Me Vengo Chiquilla, UUUFFF…

Y, por primera vez, nos corrimos los dos al mismo tiempo, en sendos orgasmos: el suyo que la hizo casi desmayarse, y que, si no le hubiera pasado mis brazos al frente para sostener A MARIANELA, la habría dejado caer; y el mío, que me hizo ver, por vez primera, luces plateadas alrededor del adorable cuerpecito que estaba poseyendo, y que, desde entonces, poseo cada vez que ella quiere, y que, por lo menos, es una vez al día.

Así han pasado 17 Años, en este tiempo, Lidia Y Yo Nos Casamos, tuvimos 2 hijos, un par de mellizos: un niño, OSCAR, y una niña LIDIA, ambos 2 años más chicos que Marianela, y tan parecidos a su madre, que, los dos eran su vivo retrato.

MARIANELA Se ha convertido en una PRECIOSA JOVENCITA, y que es el vivo retrato de, mi difunta esposa Marianela, (Herencia por parte de Sandro), y que, cada día que pasaba me provocaba emociones, sentimientos y deseos…, pero…, creo que ese es tema para Otro Relato…

Por lo pronto, les envío Muchos Saludos a ELLOS, Y Muchos BESOS A ELLAS, Desde Mi Querido MÉXICO.

Continuará…