La mujer de mi hermano se me entrega sin condiciones
Nuria tiene 23 años, es una morocha de cuerpo infartante. Sus pechos son dos melones de medio kilo cada uno, y ni hablar de sus nalgas, gorditas, rellenas y muy firmes. Cuando camina con tacos parecen dos pelotas rebotando. Hacía tiempo que yo le tenía ganas. Hasta que se dió..
Como dije yo soy muy pibe para ella que ya es una mujer y encima casada con mi hermano. Ya desde hace un tiempo que yo venía maquinando como poder hacer para que me diera bolilla. Es que mi cuñada está muy fuerte. Es hermosa por donde se la mire. Y a mi me traía loco. De echo me pajeaba a diario pensando en tenerla entre mis piernas. Convengamos que a mis 18 años todo me calentaba. Tenía sexo varias veces a la semana con mi novia, una gordita del barrio que lo único que le interesaba era coger. Cada vez que nos veíamos era una sesión de sexo, donde fuera. Una vez llegamos a hacerlo en el jardín delantero de la casa de mis padres. Convengamos que chupa la verga como nunca nadie me lo hizo, y no solo eso, se banca mi verga que por cierto no es pequeña, y lo cuento por que es el principal motivo de que mi cuñada se me halla entregado. Pero mi aparato tiene una longitud medida de 22 cms y la verdad es que tiene exactamente el grosor de un tarro de aerosol matamoscas. La primera vez que le hice la cola a mi novia, estuvo sangrando por un par de días, ya que se le rajó la telita del esfínter al entrarle la cabeza, es que no teníamos lubricante y la saliva sola no alcanzó para lubricar. Y no aguanté y se la metí toda de prepo, no sólo se la aguantó, si no que a los tres días trajo su propio lubricante. JAJA la gordita Juana es espectacular.
Volvamos a Nuria, todo se produjo por culpa de mi hermano. Se peleó con su esposa por culpa de una compañera de trabajo que le tiraba los galgos y el pavote no supo guardar la distancia. Mi cuñada lo descubrió y se armó flor de lío. En definitiva mi hermano se vino unos días a vivir con nosotros, a la casa de mis padres. La tardecita en cuestión, estaba yo solo en casa, mis padres cada uno en su trabajo, mi hermano había salido a verse con su amiguita, y suena el portero, cuando abro me encuentro a Nuria, me sorprendió como estaba vestida. Traía una calza de lycra que le marcaba su hermoso culo, y también me mostró lo gordito de sus labios vaginales. Y traía puesto un top también de lycra que dejaba al descubierto su panza y hacía resaltar que no traía sujetador, por lo que sus pezones querían romper la tela.
Verla y comenzar a excitarme fue una sola cosa. Me pidió pasar y al hacerlo me dió la impresión que movía en demasía su culo, como queriendo llamarme la atención. Por supuesto que lo logró. Yo al estar solo en casa tenía puesto un short de futbol que apenas contenía mi pija, el bulto sobresalía en demasía. Mi cuñada al darse vuelta y enfrentarme para saludarme no pudo dejar de notar el mismo. Se me aproximó en pose de gata, me abraza y me apoya la pelvis directamente sobre la pija. Para mí fue algo descomunal. E inmediatamente comenzó a frotarse con ganas sobre mi pedazo, yo ni lerdo ni perezoso me adueñé de sus nalgas, se las apretaba y se las abría, ella comenzó a gemir, bajó una mano y se adueñó de mi tronco, lo apretaba y lo tocaba con ganas. Me pregunta si hay alguien más en casa, por supuesto que digo que no. De pronto se separa, se arrodilla frente a mí, me desata el cordón del short y me lo baja dejando libre mi pija que estaba ya a punto de explotar, Nuria al verla se queda contemplándola por un momento, luego me mira directamente a los ojos y sin sacarme la vista de los míos, abre grande la boca y se mete media verga. Inició una tremenda mamada, es toda una experta, pronto me tenía a mil, la tomé por las orejas le incrusté la verga hasta la garganta y mientras hacía arcadas le llené la boca y la garganta de semen con tremendos chorros de leche. Se los terminó tragando todos sin perder ni un poquito. Aprovechándome del momento me adueñé de sus tetas, apretaba sus pezones mientras ella cerraba sus ojos disfrutando de las caricias. Mi verga seguía dura, por lo que la hago levantarse, la acompaño al sillón, me arrodillo frente a ella y le bajo la calza y su calzón dejando expuesta su hermosa y bien pelada vagina que ya brilla por sus jugos de excitación, comienzo a lamerla y ella gime, me toma del pelo y quiere meterme dentro de ella, estoy entusiasmado y muy suelto, busco con mis manos su culo, al encontrar su agujero trasero inserto mi dedo mayor, entra apretado pero Nuria no se queja, lo acepta con ganas, gime más fuerte, pronto está lista para tener su primer orgasmo, me lleva hacia atrás, se acuesta de espaldas en el sillón y me lleva hacia ella, levanta sus piernas abriéndolas y ofreciéndome su concha, toma mi verga la posiciona en medio de sus labios vaginales y me dice, dale, métela toda. No me hago rogar y presionando con fuerza se la entierro hasta topar con su útero, pega un pequeño gritito al sentir el grosor, pero pronto se adapta y se mueve como una anguila, no duró ni tres minutos y tuvo un tremendo orgasmo, yo seguí bomba que te bomba, cada vez más fuerte, y así llegó a su segundo orgasmo, de pronto me separa, saco la verga de su concha, queda en medio de los dos bamboleándose, mi cuñada la observa por un ratito, me pregunta si tengo lubricante, le digo que sí y voy a buscarlo, cuando vuelvo la encuentro en posición de perrito en el sillón y su rotundo culo me mira con su ciego ojo, verla así me pone más dura todavía la verga, comienzo a estimularla, aprovecho y la penetro desde atrás llenando su vagina con mi carne, ella lo acepta con ganas, mientras pongo bastante lubricante en mis dedos y comienzo a abrirle ese culito. Pronto entran dos dedos completos y mi cuñada está totalmente sacada, meto un tercer dedo y cuesta pero entra, ella gime pero no se amilana, por lo que simplemente saco de su concha mi palo, pongo mucho gel en la punta, y en su agujero trasero, y tomando mi verga por el tronco mientras ella se abre las nalgas con ambas manos, se la posiciono en su trasero, la verdad es que mi verga es cabezona, cuesta, presiono y ella se queja, sigo presionando y de pronto su esfínter se relaja y la cabeza pasa su arito, pega un gritito y me pide que se la meta despacio, que es muy gruesa, le hago caso y suavemente la voy penetrando hasta que mis testículos tocan con sus nalgas, ella no se mueve, solo suspira fuerte, pronto ya habiendo adaptado su túnel trasero comienza a moverse, la verdad es que su culo aprieta bárbaro, pero el gel hace su trabajo y pronto la verga va y viene en todo su largo, me desespero por acabar y le doy matraca a fondo, fuerte, ella grita y gime, me pide que se la saque, yo no le hago caso, sigo cogiéndola con mucha fuerza, es más, se la saco toda y se la pongo en un solo movimiento, y pronto estoy por acabar, y comienzo a llenarle el culo de semen, poderosos chorros llenan su ano. Ella gime suavemente, y así de suave le sale una frase genial, cuñadito que hermoso polvo me echaste. Tu hermano nunca pudo hacerme el culo, nunca me la habían metido por ahí, pero a partir de hoy es todo tuyo solo tuyo. Siempre y cuando vos quieras. Obvio que le dije que sí. Hace ya 15 días que prácticamente día por medio tenemos sexo desenfrenado y por supuesto siempre le termino haciendo el culo, que parece ser lo que más le gusta.
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