La putica de 10
disfrutando una niña de 10 bastante experimentada.
El cuento inicia un diciembre cuando una familia se alojó en nuestra casa en sus vacaciones, ellos eran amigos de mi papa desde hace años, en ese tiempo tenía 28 con una estatura de 1.8mtr, un cuerpo delgado sin ejercitar, piel morena, sin novia y soy de los que se matan a paja una vez cada 24h mientras este solo. La familia que nos visitó estaba conformada por Carlos 47 años, su esposa Olga de 38, su hija mayor Daniela de 10 y el menor llamado igual a su padre y tenía 5 años.
Cuando llegaron por primera vez fue el típico recibimiento, ya conocía a casi todos desde antes, Daniela tenía como 4 años cuando la vi por primera vez y tras 6 años la niña había crecido, pero solo de estatura porque era casi un alfiler, aunque claro no estaba pendiente de otra cosa, ante mis ojos no era más que una chiquilla estirada de piel morena clara, con una personalidad bastante simpática lo opuesto a mí.
Los días pasaron y cada vez nos tratábamos con más confianza y las veces que salíamos juntos éramos más amistoso, pero nada mas no había ninguna cercanía especial. Una noche mientras estaba jugando en la pc había notado varias veces murmullo cerca de mi ventana por lo que me dio curiosidad y medio me asomo tapándome con la cortina y como tenía la luz del cuarto apagada no se daría cuenta si volvían, al minuto vi que vino un niño a esconderse y al poco tiempo salió corriendo por lo que me dio a entender que estaban jugando al escondite así que volví a la pc, al minuto de haberme sentado escucho nuevamente que había alguien cerca de mi ventana y esta vez murmurando por lo que me apresuré con cuidado y al mirar veo a Daniela chupándole la pija un chico como de 12 o 13 que vivía cerca, las mamadas no duraban mucho porque andaban jugando con más gente y estuvieron repitiendo el patrón un par de veces hasta que dejaron de jugar. Cuando llegó la hora de dormir y todos nos acostamos le menciono a Daniela lo que había porque tanto ella como su hermanito dormían en mi cuarto ya que este contaba con aire acondicionado mientras que sus padres dormían en la sala porque el cuarto para visitas se había convertido en un depósito.
Daniela rápidamente me susurra de rodillas apoyada en mi cama me pide que no les diga a sus padres y yo le respondo que se tranquilizara que no le diría a nadie, luego me podría pagar el favor en ese instante había tomado su mano y la puse sobre mi verga e intuitivamente apretó mi verga sobre mi pantalón y se acostó. Horas después me levante para ir al baño y de regreso miro a Daniela cuando le paso sobre para llegar a mi cama, pero en vez de acostarme me agacho y echo a un poco a un lado la cobija y meto mi mano entre sus pantaloncitos hasta tocar su culito apretar sus nalguitas y pasar mi dedo por su culito me prendía demasiado por lo que continué un rato, poco después de tantear su culo meto más la mano ay empiezo a jugar con su coñito entretanto me estaba haciendo una pajita con la otra mano, pero me detengo cuando mi dedo exploraba el interior de su coño y no sintió nada más que lo caliente y mojadito que estaba.
(—no jodas, ya se cogieron a la putica esta—), y por unos segundos entre en una disputa mental, pero me terminó valiendo madres así que con sumo cuidado le quito la manta y ke bajo lo suficiente su pantaloncito con sus braguitas, ya estaba a mil así que me pongo sobre y me ensalivo bien la verga, al mismo tiempo pensaba que si llegaba a penetrarla no fuera a gritar pero mi calentura no me dejaba pensar bien por lo que continué, poco después de que mi verga acariciara su coño procedí a que mi ver la explorara por dentro, en ese momento noté que Daniela apretaba el colchó y me le acerqué al oído.
—¿estás despierta? —, pero no me respondió así que proseguí dando pequeñas punzadas y cada vez más profunda hasta que no aguanté y metí todo lo que podé Daniela suelta un gran suspiro junto conmigo, su coño se había tragado más de la mitad de mi verga. —ay… que apretada estas—, se lo susurré al oído con una voz entre cortada a la vez que y notar que ella había colocado su cara contra la almohada me confirmo que estaba lista y comencé a darle despacio. En el acto notaba como se le escapaban pequeños gemidos y pues no era la única a porque a mí también se me escapaban una que otras veces, su coño reaccionaba al más pequeño roce dándome ligeros apretones en la verga, desconozco el tiempo que me la estuve cogiendo, pero a la final vacié mis bolas dentro de ella, poco después de haberme limpiado y acostado vi como salió del cuarto.
A la mañana siguiente después de haber desayunado como de costumbre me instale en la pc y poco tiempo Daniela entró en silencio y tras un breve tiempo dice: —¿entonces soy tu novia? —. Me quedé tieso por un momento, —¿novia, a que viene eso? —, lo digo acompañado con una ligera risa.
—es que se supone que eso hacen los novios—.
—mi tío—.
(—mmm…, así que fue un tío quien la desvirgó—).
—ok, está bien, pero no le puedes decir a nadie—, antes de salir del cuarto me dio un besito en la boca.
Horas después le pregunto:
—¿tu tío también te lo hace? —, ella se queda unos segundos callada.
—no —, pero esa respuesta sonó muy evasiva sobre todo porque no me miro a los ojos.
Seguí indagando un poco pero no me enteré de nada útil o interesante.
—a la noche jugamos otra vez así que no te pongas nada—, e hice un pequeño gesto hacia abajo y ella sonrió a la vez que se había ruborizado.
Una vez que se hiso la hora de dormir justo la hora que estuve esperando Daniela esperaba en mi cama, —tu no duermes ahí—.
—ay no seas malo déjame dormir acá—.
—¿ella dormirá ahí, entonces tendré toda la cama para mí? —, dice su hermanito todo inocente. Viene su madre y ve a Daniela sobre mi cama —¿Qué haces allí mija?, bájese—.
—abusadora la niña, invadió mi cama—, lo digo de un tono de comedia.
—hoy dormiré con el—.
—por mí no hay problema, hasta podría subir los dos, pero si siento que se mueven mucho con una patada los bajo—, y me echo a reír.
Ya cuando se retiró me acosté con Daniela a ver un rato la tv y mientras veíamos al tv era lo que menos hacía ya que bajo las sábanas mi mano jugaba con su coño a la vez que ella me agarraba la verga y una vez que apagamos la televisión sin decirle nada vi cómo se metió bajo la sábana y sentí como su caliente y babeante boquita cubría mi glande, la muy condenada lo hacía muy bien, lo descubría por completo y daba buenas chupada en la cabeza a la vez que movía su lengua y proseguía por metérselo hasta donde podía, luego de un par de minutos me aparto.
—¿Qué pasó?—, me susurra.
—si seguías me ibas a sacar la leche—.
—¿y eso que?, yo me la trago —, la manera traviesa como lo dijo me puso la verga a mil con ganas de bañarla en leche.
—¿ya lo has hecho? —.
—uh… un montón de veces—.
—eres una puta—, y le doy un besito en la boca, —ahora me toca—, y coloco mi cara en su entrepierna e inicio dándole lamidas solo en los labios externos, pero ella separa sus labios para que lama él interior y sonreí por tal gesto. Y le comí el coño por un buen tiempo, luego de hacer que se retorciera con mi lengua hice que se pusiera boca abajo y me acomodo sobre ella —tss… otra vez dentro de ti—, Daniela apretaba la almohada y escuchaba claramente su respiración. Tenerla así toda sumisa hiso despertar mi lado bestia que quería hacerla gritar cosa que no era nada conveniente así que hice mi esfuerzo para darle despacio pero cada vez que la metía hasta tocarle fondo empujaba un poco más y minutos después sentí que me iba a venir, —ay ya viene—.
—adentro no que luego me tengo que ir al baño para sacarlo—.
ella hace que me haga a un lado y se va a mamarme la verga, apenas siento la primera chupada me empiezo a venir haciendo que se le llenara la boca, sentí como cayó semen en mi pelvis y rápidamente ella trago lo que tenía en la boca al tomo del cabello y me sujeto la verga contra ella para que me sacara hasta la última gota.
—uf, eres grandiosa—, casi sin aliento.
—¿te gustó?—.
—me encantó—.
Tras haber recuperado el aliento volví a ponerme la ropa interior y el pantalón, una vez cerrado los ojos quedé rendido al instante.
Continuará…
Bueno tu relato la nena ya sabía lo que es una verga y tu al verla mamar la verga de los chavitos tu te diste cuenta que ella era una putita con experiencia le preguntaste si su tio la hacia eso ella no dijo nada pero ya no era virgen ya tenia roto la panocha ya en la noche le das de piquetes a su chocho ya mojado pues se ka metes toda ella disfruta de la metida de verga que le estas poniendo continua con tu relato se pone bueno
Estos son los relatos que me gusta exitante
Qué precioso banquete cojerse una florcita así. Ya tienen la concha bien babosa y aprietan que ni ganas da de sacar el chilo, te las cojes haciendo aplaudir la vulva y hasta que salpican la cama y que tal como dice el relato explotas, les vacías las bolas hasta el fondo besándoles riquísimo el útero con tu picho mientras les chupas la boca super caliente con plena lujuria todo el rato. El gran premio de darles caliente y con ternura es que solitas te piden cojer más.
Muuuy rico, me hubiera gustado un monton alguien asi de nena para que me coja o aunque sea chuparle la verga, iba a estar bien atendida y mi niñez y pubertad habria sido super educativa mas alla del obvio morbo pero que ricos calentones que nos sacabamos.