La putita del Pastor de mi Iglesia
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Soy Jessica ahora con 25 años, pero en ese momento tenía 15 añitos, no es falta de modestía pero fui una adolescente muy linda, con ojos verdes, cabello rizado castaño, mi cuerpo empezaba a adquirir bonitas curvas, un lindo y pronunciado traserito y mis senos con forma de volcancitos crecían rápido.
Llego un pastor nuevo, de unos 35 años, la verdad es que a todas las muchachas de la iglesia nos agradó, era guapo, alto, con una complexión casi atletica, algo raro en un pastor. Algo que contribuyó a lo que relataré fueron mis padres, quienes eran muy fanáticos de la religión y siempre de pequeños nos inculcaron todo esto. MIs padres solían invitar a cenar al pastor de turno a cenar al menos una vez por semana, asi que conocí al pastor que llamaré Ricardo, en persona era mucho más atractivo y tenía algo que atraía y te sometía. Una noche dijo que necesitaba a un asistente que le acompañara en su giras predicando y que escogería a alguien entre la congregación de aqui. Mis padres rápido voltearon conmigo y me dijeron que le pusiera empeño a las actividades de la iglesia, pues eso sería el requisito para ser escogido o escogida. Yo estaba como ilusionada al oir eso. Pero también notaba que el pastor Ricardo me miraba como interesado en mi, trataba de verme las piernas, pues suelo usar corto y se fijaba en el escote de mi blusa, pues mis senos estaban en pleno crecimiento y tenian bonita forma.
No se si me lo gané o ya estaba planificado por el pastor, pero yo fui la elegida. Asi que llegando las vacaciones escolares, me fui en la primera gira del pastor que duraría un fin de semana, pero habían otras programadas de hasta 15 días fuera de casa. El grupo del pastor estaba compuesto por 11 personas, yo incluida, pero la mayoría eran personas maduras y algunos muchachos mayores que tocaban en el grupo musical.
En ese primera gira, recuerdo que era de noche, yo estaba mi habitación, tenía una sola para mi, en eso el entró y se sentó en mi cama, comenzamos a charlar, me preguntó si tenía novio, le dije que si, porque era asi, yo tenía un novio, pero no habíamos tenido relaciones sexuales aún, pero si teníamos sexo oral frecuentemente, tanto yo se lo hacia a él , como el me lo hacía a mi.
Me dijo que me en ese momento me confesaría a mi, me estuvo preguntado cosas hasta que haciendo una pausa, me preguntó sobre si tenia sexo con mi novio, le dije que era virgen aún, y luego le confesé que mi novio me hacía sexo oral y yo a él, me preguntó si me gustaba hacérselo, me dijo que dijera la verdad, le contesté que si me gustaba.
Luego algo raro, me dijo que para saber la gravedad del pecado, que le describiera como se lo hacía, yo me sonrojé y al principio me negué, pero insistió y le fui contando primero como se lo hacía yo, el pastor se sentó en mi cama, yo lo iba contando con muchas pausas, pero fui notando que cuando le confesaba como se la chupaba a mi novio, el se tocaba el pene sobre el pantalón, lejos de sentir repulsión fui entrando en el juego, yo le contaba con más detalle, hasta abría la boca y sacaba la lengua para contarle, el pastor se frotaba la verga más y más fuerte. Luego me preguntó como mi novio se había comido mi chuchita, yo le fui diciendo como con lujo de detalles, en eso él desliza una de sus manos bajo la sabana y me toca las piernas, su mano manosea mis piernas y sube a mi muslo, yo ya estoy cachonda con todo eso, pero sigo contándole como su la lengua de mi novio se habria paso entre mis muslos hasta llegar a mi chuchita.
La mano del pastor llegó hasta mi braguita, me abrió las piernas estando yo aún sentada en la cama, sentí como sus dedos ingresaron debajo de mi braguita y tocaron mis labios vaginales, yo no pude evitar gemir. Luego él se avalanzó entre mis piernas y haciendo a un lado mi ropa interior se puso a lamer mi chuchita, me decía entre dientes –asi te la chupaba tu novio??- yo le decía -si, sii, siii!!- y el se comía mi chuchita con más ganas, me arrancó casi literalmente mi braguita, y poniendo sus manos debajo de mis nalgas me levantó y mi chuchita le quedó perfecta para seguirla mamando, me arrancó quejidos, gritos y gemidos de placer, yo me corri en su boca unas dos veces, pues fue bastante el rato que estuvo comiéndose mi chuchita.
Pensé que todo quedaría allí, pero no fue asi, se quitó la ropa y subiéndose sobre mi nos besamos con mucho deseo, su lengua y labios me chupaban la boca, el cuello y mis orejas. Yo estaba muy excitada y mojadita. Me quitó la blusa y mis bubis quedaron a su disposición, me las fue mamando una por una, succionaba mis pezones y luego los lamía con la punta de su lengua. Mientras me hacía eso, su mano de nueva cuenta se metió entre mis piernas y me acariciaba mi chuchita y en ocasiones intentaba meterme uno de sus dedos en mi vagina. Finalmente metió uno de sus dedos en mi interior, yo grité cuando presionó mi telita, es decir mi himen, entonces él me dijo -eres señorita todavía??-, yo le moví la cabeza positivamente.
El pastor me termino de acostar y colocándose encima me puso su verga en mi chuchita y la fue empujando hacia adentro, pude sentir como su verga iba recorriendo mi vagina, me iba penetrando algo rapido, yo gemí de dolor y le dije que no, pero él estaba decidido, siguió empujando su verga dentro de mi vagina y rompió la telita de mi vagina y se fue más profundo, en ese momento pasé de niña a mujer. Luego de metérmela casi toda, el pastor me arremetía con mucha intensidad, lo cual me producía dolor y placer al mismo tiempo. Sus movimientos sobre mi eran tan fuertes que yo me aferraba a su cuerpo y abría mis piernas para que no me doliera tanto, los dos empezamos a gemir mucho mientras me follaba sin piedad, él estaba como loco no tenia la menor delicadeza conmigo a pesar que sabía que yo no tenía experiencia, mi cuquita estaba tan susceptible por el desvirgamiento que sentía claramente como su verga me penetraba una y otra vez; para mi suerte, el placer comenzó a ser más que el dolor, pues parecía como si tuviera una herida en mi chuchita.
Luego hubo un momento en que cesó sus embestidas fuertes y se dedicó a besarme las mejillas y la boca, luego buscó mis senos y los mamó, eso para mi fue mejor, ya estaba gozando más ahora y minutos más adelante llegué a un orgasmo rico, el primero teniendo relaciones sexuales. Al verme asi, el pastor aceleró y al parecer buscaba también tener el suyo.
De repente emitió un grito y me dio varias embestidas secas, luego sentí algo caliente recorrer el interior de mi chuchita, el pastor se está corriendo dentro de mi, siguió gimiendo y su verga palpitaba dentro de mi arrojando su leche. Finalmente terminó y sacándomela se acuesta a mi lado con la respiración muy acelerada, -Ven!- me dice y me lleva hacia su verga, me pide que se la mamé, su verga esta impregnada de su semen y de mis jugos incluyendo algunas manchas de sangre y me hace comérsela, yo trato de evitar los lugares donde hay sangre, los restos de mi virgnidad.
Al otro día regresamos a casa. Esa noche marcó todo. Sin embargo debo decir que el pastor era casado, por lo cual al llegar al pueblo todo parecía igual. Pero no era asi, yo estaba obsesionada por él, soñaba con él un mundo irreal. Me pareció una eternidad la siguiente gira, para mi suerte era de una semana completa. La primera noche, como sucedió la primera vez, llegó a mi habitación del hotel donde nos quedábamos, nos abrazamos, nos besamos y caimos en la cama, me desnudó e hizo que me sentara sobre su boca. Mi chuchita y su boca permanecieron pegadas y me corrí como nunca, hasta sentí como la punta de su lengua entro en mi vagina, luego me colocó encima de su verga y lo cabalgué como me indicó, yo misma me hice llegar a un orgasmo increíble, luego él se corrió adentro de mi, a él le gustaba terminar adentro de mi, por eso me hizo controlar mi regla y solamente usaba condón en mis días fértiles.
Bien podíamos coger todos los días de la gira, es más en algunos días lo hacíamos dos o tres veces. Ni él ni yo tocábamos el tema que él era un hombre casado. Solamente me decía en ocasiones, que yo era su asistente privada y que yo era la encargada de satisfacer sus necesidades, para mi eso me bastaba.
El pastor también fue el primero en probar mi agujerito chiquito, esa noche me dijo que probaría algo especial, me untó una crema lubricante de bebe en mi ano y en su verga, luego me puso en cuatro y me pidió que yo misma me abriera las nalgas y luego el me hundió su verga en mi culito, me hizo de nuevo chillar de dolor por un momento, pero luego la fricción de su pene recorrer mi recto me hizo gemir de placer, hasta logré correrme en la primera experiencia anal. Lo cual fue de su muy personal agrado.
También tuvimos giras afuera del país, fuimos a Miami, como era menor de edad, el fue mi responsable, en esa ocasión yo ya con 17 años, me quedaba todas las noches en su habitación. Una noche recibió la visita de un pastor amigo suyo de esa ciudad. Este pastor llevaba dos botellas de vino, las bebimos entre los tres. Luego ya un poco entonados el pastor Ricardo, que lo llamaré asi para diferenciarlo del otro, comenzó a abrazarme y besarme, yo estaba asustada, pues nuestra relación la manteníamos oculta, el otro pastor dijo que por él no había problema. El pastor Ricardo me fue desnudando y me dejó solo en bragas, el otro pastor me miraba lascivamente y eso me asustó, luego el pastor Ricardo lo invitó a unirse a los abrazos y besos, él otro me tocaba mis senos y mi chuchita, yo lo alejaba, pero el no entendía y luego el Pastor Ricardo hizo una bajeza, se puso de pie y abandonó la habitación diciendo que nos dejaba para que nos conociéramos mejor.
El otro pastor era una persona mayor, de unos 40 años. Casi me violó. Pues con lujo de fuerza me beso los senos y se metió en mis piernas para besarme la chuchita, luego me hizo mamársela, me decía que mi novio (el pastor Ricardo), le había dado permiso para tenerme esa noche, le mamé su verga y luego poniéndose encima de mi, yo de espaldas, me penetro con fuerza la chuchita, me bombeó duro sin delicadeza, luego sacó su verga y me la puso en mi ano y también me penetró por allí con lujo de fuerza, yo luchaba por quitármelo de encima pero me dominó su fuerza y me cogió con duras embestidas hasta que eyaculó en mi recto.
Después de esa noche no quise estar más con el pastor Ricardo, regresé a casa y le dije a mis padres que no quería ser la asistente del pastor. Mis padres no lo entendieron y me volvían a mandar, pero ya no lo hice más con él. Para esos días una chica muy bonita del pueblo, de unos 14 años, con un lindo cuerpo, que llamaré Elena, como yo, llegó de aprendiz y ahora era la obsesión del pastor, los encontré teniendo sexo en el auto del pastor. Todo eso hizo que pudiera salir de allí sin objeción.
Después de muchos años, cuento esta experiencia.
Yo armaba grupos de chicos entre 11 y 14 años para campamentos y ahi tuve la suerte de disfrutar a 2, les chupe la verga pero al de 11 al inicio solo eso y al de 12 si ya me lo cogía monton porque en nuestras charlas juntados a tomar algo en las plazas me decia que miraba porno y sabía como hacer y bueno le dimos con todo, hasta que el de 11 ya aprendio y tambien cogimos. Yo en plan «no son gran cosa por ser nenes pero algo es algo» y luego ni con mis ex acabé tanto xD asi como los veias con sus vergas todavia sin pelito me callaron la boca.