LA REINA DE MI POLLA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Llevo un montón de años cascándomela por Rosa, es con mucho la tía que más me pone, la mayor fantasía de mi vida es ser follado por Rosa.
No se trata de una tía espectacular, más bien es una tía normal, bajita, rellenita y ancha de caderas pero desde luego muy sensual (o por lo menos a mi me lo parece, dado que siempre me ha atraído sexualmente), con unas tetas de buen tamaño y que yo adivino caídas, y con un culo anchito en exceso que me pone, y unos ojos… con una mirada….

Rosa me excita a la menor, es una mujer a la que veo a menudo, pero sobre todo, y no lo puedo negar, me la casco muchísimo por ella. Quizás vea en Rosa el atractivo de llevar un montón de años queriendo follar con ella y es que no puedo negar que la atracción sexual que me transmite es máxima.

Es, …pero con mucho, la tía que más deseo que me pajeé, la mujer que mas ganas he tenido de que me folle en toda mi vida, es con mucho la mujer a la que he dedicado la mayoría de mis pajas,… pero sobre todo es con mucho la mujer por la que siempre deseé ser sexualmente dominado.

Hace tiempo me la estaba cascando en el baño (como de costumbre por ella) y dejé la puerta algo entreabierta a ver qué ocurría,…. y algo sucedió.
Me imagino que Rosa vio la puerta entreabierta mientras limpiaba por casa, y al ver la luz que salía por la misma incluso a sabiendas de que yo estaba dentro se aproximó por el pasillo como si nada, yo oí sus pasos acercándose lo cual me excitó aun más si cabe por el hecho de que ella estuviera ahí tan cerca, de repente sus pasos se detuvieron a la altura de la puerta del baño mientras yo seguía meneándomela.

Eso me hizo imaginar que Rosa estaba observando a través de la rendija de la puerta mientras me masturbaba, durante unos tres o cuatro minutos no se oyó absolutamente nada,… yo, excitadísimo cada vez más por la situación y con mi polla erguida me la seguía meneando, y esto me excitaba cada vez más, cuando pasaron esos cuatro minutos sus pasos volvieron a escucharse alejándose de la puerta.

Dios mío, vaya panorama, yo cascándomela y Rosa espiándome,…..y también ella levantándose la parte baja del vestido tocándose (me imagino) el coño a su antojo mientras me veía.
Cuando se marchó el corte fue total, me vino el bajón pensando que me había visto… ¿y ahora qué…?, dejé de masturbarme pues ella ya no estaba; pero a los dos minuto sus pasos regresaron y volvió a acercarse al lado de la puerta, yo ya no seguía con la faena como disimulando de que si me había pillado antes había sido por casualidad, en efecto ella se fue enseguida (yo pensé para mí que aun seguía con el calentón y se dijo para si misma):
_ Pues si quiere pajearse para que yo le vea… que siga el muy cabrón.

Pero a mi me había venido el bajón una vez que se había largado la primera vez y ya me daba corte continuar meneándomela para ella.

No fue esa la única vez que lo hice con la puerta entreabierta, la siguiente vez que me masturbé la volví a dejar igual y Rosa se aproximó de nuevo como a por un cubo de la limpieza que había dejado al lado de la puerta, esta vez yo me la estaba meneando debajo del periódico que había cogido para disimular para ir al baño, y sorpresón… abrió la puerta un poquito, como unos cinco centímetros, pero se largo al instante. Como había creído que estaba leyendo el periódico, la muy puta se marchó pensando que esta vez no me estaba haciendo una paja. Yo quité el periódico y me la casqué ahora con la puerta ya más abierta, deseando como loco que volviera y me hiciese lo que se le antojara (yo me iba a dejar hacer…).

Que hubiera sido si me la llego a estar cascando como la otra vez, siempre me dije a mi mismo que habría entrado como por casualidad y …… vete a saber (ojala me hubiera follado).

Ya no volví a dejar la puerta entreabierta; pero otra vez que yo estaba con mi faena se oyó el crujir de la madera por sus pasos justo hasta el otro lado de la puerta, allí se detuvo y yo comencé a proferir pequeños quejidos lastimeros fruto del placer que me estaba dando (el mayor era que ella estuviera escuchando al otro lado de la puerta) y allí permaneció hasta que al cabo de unos diez minutos sonó en la cocina su móvil y los pasos sonaron repentinamente alejándose de la puerta para cogerlo.
Me imagino los dos tontos uno a cada lado de la puerta masturbándose el uno por el otro. Ha sucedido alguna que otra vez que jugamos este juego y luego como si nada…

_ Hasta luego Rosa,………………. “hasta luego” dice ella

Rosa me vuelve loco sexualmente hablando, siempre he deseado ser pajeado y follado por ella, y el otro día………..

Mientras yo bebía un vaso de agua en la cocina fui a mirar por la ventana y al girarme y avanzar ….. “zaca”, me golpeé fuertemente en el muslo con la esquina de la mesa, un golpe de esos que duelen un montonazo y luego te dejan un moratón.

_ ¡Ay!, ¡Que golpazo me he dado! -dije quejándome amargamente-
_ ¿Donde te has dado?
_ En la esquina de la mesa (dije retorciéndome de dolor)
_ No bobo…. ¿qué donde te has dado tú?
_ ¡Aaaah!, en el muslo de la pierna, ¡joder como duele! -tocándome el lugar del golpe-
_ Mejor será que te pongas un poco de hielo (dijo ella)

Y abriendo el congelador saco unos cubitos los metió en una bolsa de plástico, se me acercó y me dice:

_ Pero con los pantalones puestos no te va a hacer efecto (exclamando una leve sonrisa picarona)
_ Trae que voy al baño –respondí-
_ Bueno tío…, que no será la primera vez que vea a un hombre las piernas, anda y bájate el pantalón que vea que te has hecho

Yo nervioso del todo me desabroche el pantalón y bajé un poco la parte derecha del mismo por debajo del boxer donde me había golpeado. Ella se aproximó con la bolsa de hielo y me dijo:

_ A ver tío… bájate un poco mas el pantalón y no te de vergüenza, que ya somos mayorcitos….

Ante lo cual le hice caso, quedando al descubierto toda mi cintura e intentando no descubrir el bulto de mi polla que había crecido de manera descomunal hacia el otro lado de la cadera debido a la situación y que procuraba mantener oculto bajando solo un lado del pantalón.

Ella se sentó en una silla al lado de la mesa y colocando la bolsa de hielo donde se observaba la rojez debido al golpe dijo:

_ Ya verás como esto te calma en unos minutos

Mientras había dicho esto me miró a los ojos y yo manifesté un pequeño quejido lastimero y algún comentario que no recuerdo exactamente cual por lo frío que estaba el hielo, pero en realidad era por el estado de alteración nerviosa en el que estaba y porque estaba empalmando que ya no podía más. Rosa restregaba con la bolsa del hielo de forma circular y me dijo que me bajara más los pantalones que se me iban a empapar del agua que chorreaba de la bolsa.

Yo ya no podía más, y la hice caso. Bajé mis pantalones hasta las rodillas y me dije para mi mismo (que sea lo que dios quiera). Yo mientras miraba al techo con los ojos cerrados y mordiéndome el labio conteniéndome por la excitación. Miré hacia abajo y vi como Rosa observaba el bulto enorme que mi polla marcaba dentro del boxer, ella me miro a los ojos y con un gesto amenazante se mordió la paste inferior de sus labios.
_ Vaya, vaya… -dijo volviendo a dirigir su mirada hacia mi polla-
_ ¿Así que esas tenemos….?

_ ¡Dioooos! ¡Aaaaaahhhh! -proferí un chillido enorme-, Rosa acababa de poner su mano derecha sobre mi polla totalmente empalmada por encima del boxer a la vez que con la izquierda seguía con el hielo encima del lugar del golpe.
_ Aaaahhhhhggggg! (volví a repetir en señal de placer mientras ella recorría con su mano mi polla de abajo a arriba y de arriba abajo y la agarraba fuerte y firmemente produciéndome un placer descomunal).

_ Desde luego no está nada mal…. -dijo restregando su mano por encima de mi polla sin cesar-
Volví la mirada hacia abajo y ella me volvió a mirar a los ojos clavándomelos en mi mirada desafiantemente mientras se mordía la parte inferior de sus labios en señal amenazante. Soltó la bolsa de hielo de repente y bajo con su mano derecha de un golpe el boxer negro hasta los huevos de manera que mi polla salto ella sola automáticamente como un resorte, ella la agarró con su mano izquierda fría por el hielo dándome un placer indescriptible.

_ ¡Ahora te vas a enterar capullo! –dijo amenazándome- mientras meneaba lentamente mi polla. De repente cambió de mano y sentí el calor bestial de su mano derecha en contraste con la anterior. Creí que me desmayaba, la cogió con fuerza y empezó a pajearme magistralmente.
Yo la agarraba por los hombros mirándola de vez en cuando extasiado de placer. Deslice mis dos manos lentamente hacia abajo y escurriéndolas por dentro del sujetador me hice dueño de sus dos tetazas (con las que tanto y tanto había soñado)

_Ay capullo… ¡Ya verás tú!….. dijo nuevamente mientras meneaba mi polla ahora con mayor rapidez.

De un golpe con sus dos brazos me saco las manos de dentro del sujetador, me miro de nuevo a los ojos a la vez que desabrochaba los tres primeros botones de su vestido dejando ver como sus tetas se transparentaban totalmente a través de su sujetador negro, sus enormes pezones eran perfectamente visibles con ese sujetador de encaje que llevaba y mi vista se quedo clavada en sus pechos ansiándolos con locura, mientras Rosa continuaba sujetando mi polla solo con la mano derecha y sin dejar de mirarme la dirigió hacia su boca, la abrió sin perderme de vista y cuando la tuvo dentro de la misma la cerró.

_ ¡Ahhhhhhhhhhhh!, -dulce maravilla- ¡Dios mío!… ¿Qué haces?
_ “¡Comerte la polla cabrón”! –e inicio una incesante mamada con sus labios hacia dentro y hacia fuera de manera única- (¡como había deseado yo siempre que Rosa me la comiera…….!)

Mientras me la comía yo chillaba como un poseso y cuando se detenía un poco no dejaba de moneármela con su mano ávidamente. Yo saqué sus tetazas del sujetador y las agarré como pude sosteniendo una en cada mano. Rosa tenía unas tetazas que me encantaban, grandes y caídas por el paso del tiempo

_ ¡Córrete cabronazo!…. Me jaleaba cuando sacaba la polla de la boca y la meneaba incesantemente sin dejar de mirarme.

De repente la empuje por los hombros, me venía la corrida y me daba palo por un lado correrme dentro de su boca y además no sabía como iba a responder y me la quería follar a toda costa (iluso de mi….)

Me agaché entre sus piernas, se las abrí y sosteniéndole la parte baja del vestido se lo levante mientras ella ayudaba levantando suavemente su culazo sobre la silla, desabroche el resto de botones que había hasta donde permanecían descubiertas sus tetas por encima de los aros del sujetador negro que llevaba. La arrimé hacia mi lo que pude con el culo en el borde de la silla, aparte sus bragas (preciosas, de encaje negro a juego con el sujetador) hacia un lateral y descubrí un maravilloso coño con su vello púbico alborotado (como siempre me había imaginado, aunque Rosa lo tenía un poco arreglado, lo cual nunca hubiera adivinado).
Masajeé levemente su clítoris que para entonces estaba bastante humedecido por la excitación, y realizando lentos movimientos circulares con la yema de mi dedo corazón la masturbaba mientras sostenía sus bragas apartadas hacia un lateral con mi mano izquierda.

_Sigue cabronazo!, No pares capullo!…… decía continuamente.

Cuando vi que estaba loca de placer detuve el movimiento de mi dedo y sus insultos fueron increíbles, pero enseguida lo comprendió…., me agaché y abrí sus muslos con las dos manos colocando mi cabeza entre ambos, le tomé la mano y se la acerqué al coño, volví a apartar sus bragas hacia uno de los lados haciéndoselas sujetar con la mano que yo había tomado.
Rosa enseguida comprendió lo que yo iba hacer, la tomé de la otra mano y la insinué:

_ ¡Empieza tu solita! -ella sin dilación alguna comenzó a masturbarse-
Con la misma mano que apartaba sus bragas del coño utilizaba dos de sus dedos para abrir sus labios, mientras con dos dedos de la otra mano se frotaba sin parar:

_ Aaaaahhhh!, Uuuummmmmm!, exclamaba con quejidos lastimeros de placer, mientras yo agarraba mi polla (dura a mas no poder) por la situación tan fascinante de observar a Rosa tocándose el coño.

Me coloque de rodillas frente a ella en señal de sumisión y mis manos comenzaron a acariciar sus dos muslos lateralmente en la zona de las ingles:
_ Ay!, Siiiiiiiiiiiii!, Acariciame!

Sin dejar de acariciar acerque mi cabeza y la introduje entre sus dos ardientes y temblorosos muslos. Ella mantuvo la mano que apartaba sus bragas del coño para dejarme el camino libre y tomó mi cabeza por detrás con la otra mano impulsándome muy levemente hacia ese mar caliente que para entonces era ya su coño.

Con la punta de mi lengua comencé a comerle esa sabrosa maravilla lentamente, muy despacio, muy despacio, donde antes había estado la yema de mi dedo corazón ahora estaba mi lengua recorriendo su clítoris suavemente pero sin cesar, mientras dos dedos de mi mano derecha acariciaban con un ritmo pausado los labios de su coño. Había veces que mi lengua y mis dedos se juntaban y era cuando entonces entraban suavemente en el interior de Rosa haciendo un movimiento suave de entrada y salida continuo. Su coño ardía como lo evidenciaba su cara y sus continuos gemidos, solo el hecho de oírla me excitaba más si cabe.

_ ¡Ahhh, ahhh, ahhhh…!, ¡Mi niño (como me llamaba a veces cariñosamente) no pareees!
_ ¡Siiiiiiiiiiiiiiiii! …. ¡Sigue así!,…… ¡Sigue, sigue asi!, -sosteniendo mi cabeza con su mano para que no cesara mientras mis dedos dibujaban caricias en sus muslos cuando mi lengua descendía hasta la parte inferior de sus labios para comerle el coño de abajo arriba-. Luego mi dedo corazón todo húmedo se aproximó a su culo y se lo introduje levemente, casi apenas…

Mi lengua comenzó a hacerlo entonces un poco más rápido a sus órdenes:
_ ¡Más, más, Ahhhhhh si sigue, sigueeeeeeeeeeeeeee, sigue así cabronazo!.
Yo estaba disfrutando comiéndome su coño sin cesar y metiendo y sacando un poquito de mi dedo en su culo, quería darle placer sin fin y comerle el coño a Rosa me estaba excitando tanto como escucharla gozar como una loca con sus gemidos de placer

Acabó Rosa en un orgasmo que casi me hace correr a mí de sólo sentírselo:

_ ¡Ay Dios! ¡Ahhhhhh sí!,……….. ¡Así, sigue así cabrón!,… ¡Aaaaah Dios!,….. ¡COMO ME COMES EL COÑO! –Gritó hacia el techo echando su cabeza hacia atrás e impulsando con sus muslos y su vientre hacia delante mientras se retorcía en la silla en señal de placer inmenso-

Ella se relajó me miró sonriendo al levantarme con la polla totalmente erecta y me dijó:
_ “Te voy a follar como no te han follado en tu vida …….”.

Se levanto quitándose lo que le quedaba de ese vestido, me sentó en la silla, y me dijo:
_ ¡Menéatela ahora capullo!, ¡Menéatela que yo te vea! –cosa que comencé a hacer como loco mientras ella se desabrochaba el sujetador-. Yo la miré a los ojos y a las tetas ahora ya desnudas a la vez que me la cascaba frenéticamente delante de ella (que tetazas tenía,…. y los pezones… ¡Qué pezonazos!). No es que estuviera buena, pero era Rosa, “El follar de mis sueños y la reina de todas mis pajas…”

No me lo podía creer, me la estaba meneando delante de Rosa, tantas y tantas pajas que me hago por ella y ahora además me lo estaba haciendo para ella. Rosa había introducido sus manos dentro de sus bragas y se frotaba el coño frenéticamente enfrente de mi (lo que había deseado yo siempre verla masturbándose y ahora se estaba haciendo realidad), no me lo podía creer…., sus manos se trasparentaban a través del encaje de sus bragas y….

_ ¡Sigue capullo, no pares de meneártela! –me jaleaba mientras me decía insinuante:
_ Esto es lo que tengo que hacer yo cuando tu te metes en el baño a cascártela…,¡cabrón!

Yo sabia que no iba a durar mucho, el espectáculo era mayúsculo, yo meneándomela justo enfrente de la reina de mis pajas, en definitiva “la reina de mi polla”, por la tía que me había corrido cientos y cientos de veces…

_ Si, si, aaahhhhh!, ¡me corro Rosaaaa!, ¡me corro por tiiiiiiiiii!, aaaaahh!

Y apuntando con la polla en dirección a ella le regalé el fruto de todas las pajas que me había hecho en mi vida por ella, primero los muslos anchos de sus piernas recibieron la primera de las ráfagas, pero ella se abalanzó repentinamente sobre mi y sus tetas recibieron nuevamente, me agarro fuertemente la polla y se la introdujo en la boca sin parar de meneármela dentro se su boca dejando que las últimas y débiles ráfagas descargaran dentro.
Pude observar como Rosa se trago aquellas últimas gotas al ver el movimiento de su garganta, yo estaba con la cabeza reclinada hacia atrás, mareado de placer, sosteniendo su melena y su cabeza suavemente para que no se la sacara de la boca, el placer era indescriptible……

La miré y ella me miró a los ojos sacándose la polla de la boca y sosteniéndola con su mano, su mirada continuaba desafiante y la sonrisa picarona que me dedicaba me hacía presagiar que aquello no se había acabado (gracias a Dios….), porque la deseaba con todas mis ganas.

Rosa mantenía mi polla en su mano, y aunque se había relajado por el corridón que ella me había hecho pegar, la dulce sobada que seguía proporcionándome y sobre todo aquella mirada de zorra clavada en mis ojos hizo que nuevamente mi polla estuviera erguida en pocos segundos, ella la observó y dijo algo que me volvió a poner a mil:

_ ¡Así me gusta cabronazo!. Una buena polla para la follada que llevamos esperando tantos años los dos. Ahora vas a saber lo que es bueno…..

En aquel momento se incorporó, se iba a bajar las bragas y yo le dije:

_ No porfa….. déjatelas puestas… (me excitaba un montón que me follase con las bragas de encaje negras que llevaba puestas y además en muchas ocasiones yo me había masturbado con pasión desenfrenada con sus bragas, cosa que creo Rosa sabía o sospechaba. No pocas de veces me había tocado lavar sus bragas por correrme en ellas).

_ Está bien, tendrás lo que quieres.

Ella se las aparto hacia un lateral sin dejar de mirarme a los ojos y se las metió en la raja del culo por la parte de atrás, me agarro la polla apuntando al techo y se sentó sobre mi introduciendo el capullo de mi polla poco a poco. Me rodeó con los dos brazos cuando la tuvo ya un poco dentro y fue descendiendo lentamente sobre mi polla hasta llegar al final, empezando una cabalgada acompasada y espectacular, yo sentía toda su humedad en mi verga que para entonces estaba más grande que nunca.

_Que polla más rica tienes cabrón -me susurró al oído- mientras no dejaba de follarme moviendo su enorme culo de arriba a abajo y de adelante hacia atrás con verdadera maestría y devoción.
_ ¡Esto es para que te vuelvas a pajear con la puerta abierta mi vida! , ante lo cual yo me ruboricé pero a la vez estaba tan excitado que le dije:
_ Como me tengas que follar por cada paja que me he hecho por ti…..
_ Cuando, y siempre que yo quiera…. me dijo entrelazando su lengua con la mía en un profundo e intenso beso que no cesó mientras me follaba sin detenerse y pasándome todas sus tetazas por mi pecho desnudo hasta que proferí un enorme alarido en señal de que me estaba corriendo dentro de ella

_ Aaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhh, Rosaaaaa, me corro!, me corro!
_ ¡Córrete dentro de mi, mi niño!, ¡Córrete!, ¡Dámelo, dámelo que yo también quieeeeeeeeeeero!. –profirió mientrás clavaba sus uñas en mi esoalda-

Y solté una nueva corrida mayúscula dentro de Rosa, menos mal que me había contenido cuando me la chupó, porque lo que deseaba con locura era verterme dentro de ella; y que nos corriéramos lo dos a la vez fue una maravilla.

Nos quedamos los dos fundidos en un abrazo comiéndonos la boca el uno al otro y yo acariciando sus tetas mientras me rodeaba con sus brazos durante un buen rato, hasta que Rosa decidió levantarse poco a poco hasta salir de mi polla.

Me sonrió y me dijo:
_ ¡Vamos vístete!, que por hoy ya hemos tenido bastante y no hay que abusar, que vas a tener tiempo de resarcirte de todas las pajas que te has hecho por mí, que por cierto…… ¡Ya iba siendo hora….!

Aquella medio amenaza me puso cachondo de nuevo….. y agarrándola de la mano la lleve a la habitación, al entrar la cogí por la cintura y me coloqué detrás de ella acariciándole con la polla la parte baja de su espalda y el culo, la tome por detrás y amarrándola de las tetas la apoyé sobre la pared, me sujeté la polla con la mano y se la metí hasta el fondo, me tenia que agachar debido a la baja estatura de Rosa pero me daba igual, la estaba bombeando sin cesar y ella decía:

_ ¡Aaaaaaayyyy!, ¡Cabrón no pares de darme!, ¡Métemela más¡,……
¡Si si, si, así, sigue así!

Yo no paraba de follarla con todas mis ganas, le puse las manos sobre las caderas y le metía y le sacaba la polla sin cesar, hasta que viendo que me iba a correr me salí..
_ ¡Aaaahhhh, cabronazo no te salgas!, ¡sigue capullo! –m e dijo mirando hacia atrás. Yo me senté en los pies de la cama que había detrás y apoyando mis brazos sobre la cama me expuse con la polla toda empalmada para ella. Rosa lo comprendió enseguida.

_ ¡Ahora verás tú!. Y apoyándose sobre mis rodillas cogió mi polla y se la metió comenzando a botar como una autentica maestra sobre ella. Salía y entraba a una velocidad cada vez más endiablada, mientras la visión de mi polla saliendo y entrando de Rosa y ese culazo enorme botando sobre mi polla me volvía loco, ¡como follaba la muy puta!.
Ya no pude más, me incorporé y la puse sobre la cama, la coloque a cuatro patas como siempre había querido follármela (aquella visión me puso la polla mas dura que nunca… cuantas veces había deseado a Rosa a cuatro patas).

Rosa estaba en ese momento ofreciéndome todo su enorme culo realzado por las bragas negras de encaje que llevaba aun puestas, las aparte sobre uno de sus glúteos y sin pensármelo tomándola de una de sus dos caderas con una mano y dirigiendo mi polla con la otra hacia su coño se la acabé clavando de golpe introduciéndosela hasta donde no pude más…

_ ¡Aaaaahhhhhhhgg! Chillé de placer, y también un poco de dolor, jamás había tenido la polla tan grande. Rosa se relamía…
_Ahi!, ¡Siiiiiiiiiii!, ¡Asi, así, dame así!, ¡Dame fuerte!, ¡Dame más! (yo estaba casi parado, sin moverme apenas, no podía casi de la erección que Rosa me provocaba solo de verla a cuatro patas.

De repente ella comenzó un vaivén con su culo de adelante hacia detrás provocando que mi polla entrase y saliese de ella a su antojo, yo no podía más, me iba a dar un espasmo de placer
_ ¡Toma mi niño!, ¡esto es lo que tu querías! –decía sin parar de moverse lentamente pero de forma muy acompasada.

La tome de las dos caderas con mis dos manos, yo ya no podía más, y comencé a bombear sobre su culo cada vez más de forma más acelerada, yo no quería que aquello se acabase nunca…..
De vez en cuando la daba un azote fuerte en el culo y le decia:
_ ¡Toma puta!. ¡Toma lo que tu quieres! Bombeando sobre ella cada vez más rápido
_ ¡Siiiiiiiiiiiiiiiiiiii, Siiiiiiiiiiiiiiiiiii, sigue así! Me jaleaba a la vez que la follaba desenfrenadamente desde atrás

Yo sabía que no iba a durar ni un minuto más, la corrida que me venía se adivinaba descomunal. Coloque uno de los pies sobre la cama para darle más fuerte y más rápido…., ya no podía más….
_ ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHH!
_ ¡DIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOSSSSSSSSSSSSSSSSS!
_ ¡TOMA PUTA!, ¡TODO PARA TI!, AAAAHHHHHHH

Y sacando mi polla de su interior disparé hacía su espalda, llegándole al cabello primero y luego apuntando sobre su espalda y el culo la bañe con mi semen mientras me la meneaba sin parar sobre ella, mi leche empapaba sus bragas negras de encaje…. Que maravilla de visión…., por fin había hecho realidad mi mayor fantasía…. Follarme a Rosa a cuatro patas y con sus bragas negras de encaje puestas…., tantas y tantas pajas que me había hecho por ella, tantas y tantas veces que me la había cascado con sus bragas, tanto que me había corrido dentro de ellas y ahora lo acababa de hacer con Rosa delante .

No hay nada más maravilloso que tus fantasías se hagan realidad, y la mía se había cumplido.

“Gracias Rosa, por ser …… LA REINA DE MI POLLA”