Las aventuras de las princesas 1

Lindas princesas pervertidas.
Nardy era una preciosa niña rubia de ocho años, su cabello lacio no era muy largo ni muy abundante caía sobre sus hombros cuando lo tenía suelto o sino lo amarraba en una cola de caballo, no era muy alta ni muy delgada estaba en un peso ideal para una niña de su edad y de piel muy blanca, su rostro era de boca y nariz pequeña, su quijada pequeña y bien perfilada y la piel de su rostro con algunas pecas que completaban su belleza, de ojos de un azul pálido y proporcionado con su rostro, de orejas pequeñas y cuello delgado y proporcionado .
A ella desde algunos días antes le gustaba verse al espejo , un espejo grande que tenía en la sala de su casa, era delgada si pero no tanto como para decir que era flaca, sus pechos debían ser planos para su edad pero ya tenían sierto tamaño pequeño que se notaba habían empezado a formarse sus senos , así como una cintura pequeña y unas caderas bien fornaditas, su trasero durito y pequeño pero que ya se asomaba el culo de una pequeña hembrita. Además ella como jugando practicaba el sacar el culito al pararse.
Tenía ocho años pero el veinte de ese mes cumpliría los nueve años y sabía por lo que el señor conserje que era don priscilo un viejo ya con sesenta años a cuestas que se encargaba de la guardiania y limpieza del pequeño colegio que tenía que aser cosas muy importantes pero que no se los contará a nadie ya que era un secreto que él le diría solo a ella, así era esa amistad que tenían don priscilo y nardy , guardandose de que los demás no supieran sus secretitos.
Don priscilo era un viejo canoso y sin ser gordo era barrigón, nunca fue alto solo de mediana estatura y de piel trigueña como la mayoría de gente de este país, jamás estudio una profesión pero si trabajo de todo en su vida, desde oficinista hasta albañil, desde vendedor de libros hasta operario en la selva, nunca se caso pero tubo muchas mujeres en su vida y tal vez sin enterarse el, alguno que otro hijo.
Vivía en la azotea de uno de los tres pabellones del pequeño colegio donde le habían habilitado una pequeña casa que compartía con Juana, que la presentaba como su mujer pero que en realidad no tenían una vida conyugal sino como amigos íntimos pues ambos se ayudaban en todo, Juana era una mujer de cincuenta años gorda y desarreglada, más morena que priscilo pero que le era una gran ayuda en la limpieza del colegio y en la guardiania y también le permitían vender golosinas y refrescos a las niñas pues este era un colegio solo de mujercitas, para Juana era mejor este trabajo que cualquier otro por qué la dirección ni los profesores del colegio se metían con ellos, seguramente por su edad y la seriedad que reflejaban ambos y que tenían todo en orden, la dirección del colegio ya había comprobado que don priscilo y doña Juana resolvían rapidamente cualquier emergencia que se presentaba, como atoros en los baños o a veces algún desmayo de alguna niña o una supervisión de seguridad de algún organismo del gobierno, o cualquier problema de otra índole creando una admosfera de confianza con la dirección el profesorado y los padres de familia motivo por el cual a ambos les daban un poquito más del sueldo básico y así pasaban sus días trabajando en este colegio privado para niñas de primaria, pero todo no eran color de rosas el secreto que tenían ambos era que a ambos les gustaba las perversiones y la vida pervertida y el lograr beneficiarse con ello y además eran muy inteligentes para guardar una apariencia de descencia y respeto.
Nardy vivía con su mamá carmen que era una mujer joven de 32 años rubia y de un metro sesenta de estatura, era una mujer hermosa, de senos grandes de un trasero parado y mediano de piernas bien llenitas sin ser gorda, era una mujer que cualquier hombre quisiera en su cama, vestía con ropas holgadas para no llamar la atención y tenía los ojos de un azul claro, trabajaba en una empresa que prestaba servicios de construcción y mantenimiento en el área administrativa, y con ese dinero mantenía a sus dos hijitas.
La hermana mayor de nardy se llamaba Natalia pero todos le llamaban Naty, tenía catorce años pero también en pocas semanas cumpliría quince, años, una chica delgada de cabellos igual de rubios que su hermana y su mama pero hermosa media un metro setenta casi, era bastante alta, no tenía esos atributos físicos de su mamá pero tenía un bonito rostro Lozano y con algo de pecas como su hermana, de ojos pequeños y boca chiquita, llevaba el cabello suelto o a veces lo recojia con una liga, sus pechos eran medianos tirando para pequeños pero bien firmes, tenía un trasero pequeño pero bien formado, ella no escondía sus atributos de mujer por qué no eran llamativos, el problema de Naty es que tenía la autoestima muy baja, había sufrido de depresión y hasta le recomendaron un psicólogo que la ayudará pero era algo que su mamá había venido postergando desde hacía tiempo por el costo elevadísimo de las consultas.
Naty siempre recogía a su hermanita del colegio a la una de la tarde o a veces media hora después, su mamá era la eterna ausente pues salía a trabajar bien temprano en la mañana y regresaba serca a las diez de la noche los sábados y domingos descansaba pero había fechas en las que también estaba ausente dejándole a Naty la responsabilidad de la casa y el cuidado de su hermanita.
Era viernes, y Naty se había hecho tarde , era ya la una y media y no había nadie en el colegio, habrio la puerta que estaba a medio serrar y pudo ver en la banca del corredor de salida las mochilas de nardy y de su compañera Sofía que era su mejor amiga.
Sofía era una hermosa niña de cabellos negros largos y lacios, era más llenita que nardy pero un poco más bajita que ella , era de piel blanca y usaba lentes , era su mayor solo por dos meses pues resien ella había cumplido nueve años. Cuando Naty entro no las encontró en la parte baja así que supuso que se encontraban arriba donde vivían don priscilo y doña Juana, subiendo por las estrechas escaleras a la parte alta donde se encontró con don priscilo sentado entre la casa y el cubículo que lo usaban como baño privado, el viejo priscilo tenía una botella de cerveza que tomaba disfrutando cada helado sorbo del amargo licor, a un costado la gorda Juana alistaba un par de toallas para las niñas que habían decidido a darse una ducha por qué hacía bastante calor
— jajajaja….hola princesa cómo estás
Le saludaba el viejo con su aspera voz
— bien don priscilo …..discúlpeme por aserme tarde en recoger a nardy
— no te preocupes princesa
Le dijo Juana con esa sonrisa en su duro rostro de mujer luchadora
— las niñas ya acaban de bañarse ahorita las saco de la ducha
Y entro con las toallas y ambas solo con las toallas y descalzas salieron y corriendo se metieron a la casa de don priscilo para cambiarse.
Natalia se sentó a un costado de don priscilo, con su falda escocesa y su blusa blanca. Ya se conocían de algún tiempo atrás y había bastante confianza por eso don priscilo la jalo de un brazo para que se pusiera de pie y la sento en sus rodillas
— hay Naty cada día estás más bonita
Natalia sentía el olor a cerveza y cualquier joven nunca se sentaría así de fácil en las rodillas de un viejo pero ambos tenían esa amistad y la ingenua Naty no veía nada de malo en estar unos segundos sobre las rodillas de este viejo y sonreírle y pararse de nuevo para volver a sentarse a su lado.
Don priscilo como si nada tomo una de las cervezas que tenía al lado y se lo ofrecio pero Naty no acepto
— ya pronto cumplirás los 15 años, ya eres todo una señorita y bien puedes tomar una cerveza
Priscilo empezaba así siempre a platicar con Naty dándole consejos que tenían un sentido cariñoso pero que él lo hacía ocultando intereses propios.
— también tu no tienes por qué estar viniendo a recoger a tu hermanita, ese tiempo lo puedes usar en divertirte y gozarlo con tus novios.
Naty sonrió inocentemente.
— mi hermanita todavía es muy niña para regresar sola a casa y yo no tengo novio.
Doña Juana se sentó al lado de Naty quedando ella entre los dos viejos.
— pero Naty princesa eso no está bien
Le dijo Juana mientras le tomaba de una mano cariñosamente
–a tu hermanita ya debes darle más independencia, y va por los nueve años y tu también ya debes tener novios, no sólo uno sino varios, eres ya toda una mujer, una linda princesa.
Naty se puso un poco rojita por lo que le decian mientras nardy y Sofía acababan de cambiarse
— si princesa tienes que estar practicando sino cuando vas a aprender
Le decía don Prisciliano hablando lo más serio posible.
— también tienes que empesarle a enseñar a tu hermanita , mientras más chiquitas aprendan mejor
Naty en su ingenua mente pensaba en las cosas que decía el viejo Prisciliano como algo correcto pues este señor sabía mucho.
— así es princesa, ya tienes que empesar a abrir las piernas y también enseñarle a tu hermanita a abrir las piernas , y a revolcarte con un macho.
Don Prisciliano a duras penas podía aguantarse su sonrisa por las cosas tan disparatadas que decía su mujer o supuesta mujer.
Juana quería seguir pero fueron interrumpidos por las niñas y Naty junto con nardy y su amiguita Sofía bajaron para retirarse después de recibir un besito de despedida del viejo priscilo y un pequeña nalgada como jugando en el trasero de Naty, la que lo tomo como un juego pero al mirar a la gorda Juana está le guiño un ojo y le sonrió extrañamente, algo que Naty no entendía por el momento.
Los tres bajaron solos quedándose la pareja de viejos arriba, mientras las niñas con Naty corrían a sus mochilas encontrándose con el abuelito de Sofía don carlos, un viejo ya setenton
Flaco y enano, de cabello blanco y la piel muy arrugada y blanca pero quemada por el sol, el viejo Carlos tenía unas gafas de cristales redondos que le ayudaban a ver mejor, cuando vio a Naty el viejo se la comía con la mirada descaradamente algo que la bella rubia no noto pero que si notaron Sofía y nardy que se pusieron a cuchichear al oído.
— buenas tardes don carlos
Saludo muy atenta y con una sonrisa Naty a lo que el viejo aprovecho para asercarse a ella y darle un beso en su carita
— vaya Naty pero que grande estas
Preciosa
Naty sonreía mientras caminaban fuera del colegio, al salir Serraron la puerta y don Carlos hizo subir a Sofía a su viejo auto
— Naty que te párese si les dejo por su casa
La invitación de don carlos entusiasmo a nardy y Sofía subiéndose ambas atrás y Naty se subió adelante al lado del viejo carlos y emprendieron el viaje,.
— ya vas a cumplir quince años verdad Naty?
Le pregunto el viejo carlos
— si don Carlos pero falta solo dos meses
El viejo Carlos mientras conducía rumbo a la casa de las hermanas
Estiró su mano a la faldita escoses de Naty y metió su mano y la subió un poco para poder acariciar sus piernas
— Naty que bien tienes lindas piernas
Se lo dijo mientras le acariciaba por debajo de la faldita tocando con la punta de sus dedos el calson blanco de Natalia justo sobre su vagina, Natalia solo se dejaba, con su carita colorada, ambas niñas atrás miraban atentamente como este abuelo descaradamente manoseaba a su hermana mayor de nardy.
— déjame tocar tus pechos princesa
Se lo dijo sacando la mano de su falda y tocando y amasando uno a uno sus pechos
— ya eres todo una señorita,
Naty no sabía que decirle estaba confundida con las libertades que se tomaba don Carlos y en el asiento de atrás las niñas estaban prestando demasiada atencion a las cosas que pasaban adelante, Sofía sabía lo mañoso que era su abuelito por que a ella también la paraba manoseando y sobre todo su culito por qué Sofía era más culoncita que nardy y las veces que se quedaba cuidándola Sofía tenía que soportar a un viejito caliente, de pronto el vehículo se detuvo en la esquina de una avenida de doble vía, a la derecha se Hiba a casa de Naty y a la izquierda a casa de sofia.
–naty ¿tu mami a qué hora regresa a casa?
Le pregunto don Carlos
— regresara tarde como a las diez de la noche, pero a veces como es viernes se demorará entonces llamará más temprano.
El viejo Carlos sonrió con su arrugada cara.
— hoy los padres de Sofía no estarán y yo me quedo a cuidarla, ya está listo el almuerzo en casa y hay suficiente…….¿.que te párese si almorzamos juntos los cuatro y después les dejo en su casa.?
En la parte trasera nardy y Sofía conversaban al oído
— tu hermana se deja manosear por mi abuelo….seguro mi abuelito le va a aser cosas ricas a tu hermana.
Nardy estaba muy curiosa y conocía a su hermana cuando se ponía timida y a nardy le parecía interesante lo que estaba viendo, como el abuelo de sofia le metía mano a su hermana y le tocaba descadamente algo que su mamá carmen siempre les decía que no debían permitirle a nadie pero que su hermana lo permitía. Y ahora el abuelo de sofia les invitaba a ir a su casa.
— así Sofía………..y
¿que cosas son esas?
Nardy sentía un extraño sentimiento, no lo sabía pero era exitacion, ese calorcito, nardy estaba mojadita.
— no seas tonta nardy yo sé que a ti también te gusta lo que mi abuelito le ase a Naty, ……….que te parece si le ayudamos a mi abuelito.
Fue una idea inteligente de su amiga, Sofía solía ser muy inteligente y nardy estaba exitada con la idea de ver a don Carlos manosear a su hermana sin siquiera imaginarse hasta donde llegaría este caliente viejo.
–si esta bien Sofía pero que Naty no se de cuenta.
Ambas niñas engancharon sus dedos meñiques en señal de alianza.
El viejo Carlos insistía
— que dices Naty……..¿almorzamos en mi casa?
Detrás nardy le jalo del brazo a Naty
— tengo hambre naty vamos a almorzar a casa de sofia……….siiiiii.
Naty no tubo más remedio que aseptar, aún su piel recordaba las manos de este viejo en sus piernas y apretujando sus pechos.
el vehículo doblo a la izquierda en la avenida y en poco tiempo estaban llegando a casa de sofia y don Carlos estacionó el vehículo en la vereda muy junto a la casa y entraron, si bien no era una casa de millonarios era una casa descente, no era grande pero estaba muy bien distribuido, en la parte baja de la casa estaba la sala la cocina el comedor y detrás un pequeño patio, en la parte alta los dormitorios, el cuarto de Sofía y sus padres , el abuelo dormía abajo cuando tenía que quedarse por qué don Carlos no vivía hay solo cuidaba a Sofía cuando sus padres no estaban como ahora.
Sofía y nardy subieron un momento a la habitación de Sofía, mientras Naty esperaba sentada en el sofá que don Carlos tuviera listo la Meza.
Cuando llegó el momento el viejo carlos les llamo a la Meza, Naty solo estaba sentada en el sofá pero como don Carlos no se le había asercado ni dicho nada estaba más tranquila, y nardy y Sofía le llamaron a su abuelito.
— abuelito, nardy me contó que a Naty le gusta el vino pero le da pena decirlo por que todavía no es mayor.
Era una hábil mentira que Sofía y nardy habían preparado, ya habían visto borrachos a sus padres y les pareció interesante ver si podían emborrachar a su hermana mayor.
El viejo Carlos que no era ningún tonto entendió al instante a que querían llegar las niñas y puso su dedo índice en sus labios con una sonrisa dándoles a entender que lo harían en silencio o mejor dicho sin que Naty se entere.
Ya en la Meza dieron gracias y comenzaron a comer, don Carlos abrió una botella de vino y le sirvió un poco en una copa a Naty
— adelante Naty toma…
Natalia nunca había tomado licor
— don Carlos yo no tomo……
El viejo Carlos miro a las niñas y nardy tomo la iniciativa.
— no seas malcriada Natalia don Carlos nos está invitando a comer no le rechases.
Naty un poco apenada miro a todos y tomo la copa y le dio un sorbo, el sabor del vino le pareció muy fuerte pero se lo trago
— vamos Naty acábatelo no seas así
Insistió don Carlos y Naty tomo valor y se lo acabo, cuando puso la copa sobre la Meza el viejo Carlos se lo sirvió llenito, Naty estuvo a punto de protestar pero la conversación paso al tema de su cumpleaños número quince que sería dentro de dos meses,
— una chica ya a los quince años es toda una mujer
Le decía don Carlos
— Naty ya no eres una niña, ya va siendo hora que te comportes como una mujercita y no como una niñita engreída
Era una forma de llamarle la atención muy sutilmente y Naty casi inconcientemente tomo la copa de vino y empeso a tomarlo, su cuerpo al asimilar el alcohol la volvió más deshinibida, había comido muy poco y nardy y Sofía veian como la copa de vino quedaba seca y Natalia tenía esa cara de divertida con las mejillas rojas y todo parecía aserle gracia, al terminar el almuerzo caminaron a sentarse al sofá de la sala y Naty otra vez tenía su copa llena y ya no parecía desagradable el sabor del vino, las niñas ensendieron el televisor a un costado de donde conversaban y tomaban Naty y el viejo Carlos bajando el volumen para escuchar lo que hablaban
— si don Carlos jijiji….mi mamá para trabajando y casi nunca está en casa…..
Le contaba la ya casi borracha rubia quinceañera
— además tengo que estudiar y cuidar a nardy
El viejo Carlos se sentó junto a ella y la abraso llenando su vaso de más vino mientras que con la otra mano le acariciaba por encima de las rodillas subiendole la faldita
— salud princesa
Le dijo el viejo a lo que Naty se llevó el vaso a la boca y se acabó su contenido, el viejo le dio un beso en la carita bajando su boca hasta el cuello de la nena y le empeso a besar el cuello mientras nardy y Sofía ya no veían la televisión sino escondidas detrás del sofá miraban muy juntitas lo que el abuelo Carlos le hacía a la borracha rubiesita que trato de reclamarle
— don Carlos……..no me bese…….yaaa.
Y este al ver que naty volteaba el rostro para hablarle su boca se apoderó de la suya en un beso muy tosco donde la lengua del viejo Carlos abrió esa boquita y entro en ella. Era una mescla de sorpresa y dejarse aser por lo conjundida que estaba, por nunca haber tenido una borrachera, fue un beso que duró un poco hasta que pudo soltarse y despegar su bella carita del rostro viejo y lleno de lujuria del abuelo de sofia, se puso de pie pero le era difícil poder caminar, el viejo la tomo por la cintura sobando sobre la ropa el trasero de Natalia a su dura verga mientras las niñas miraban como el viejo Carlos manoseaba a su antojo a la rubiesita indefensa y borracha, la volteo y la volvió a besar en la boca, Naty no parecía rechazar el beso, estaba abrasada al viejo mientras esté le metía la lengua y se comía esa boquita a su gusto, luego fue a su cuello chupando como loco la suave piel de la nena dejándole marcas.
— mira nardy párese que a tu hermana le gusta lo que le está asiendo mi abuelito
Nardy no le respondió, la niña sentía ese calorcito entre sus piernas, le gustaba ver cómo a su hermana a la que todos trataban con cariño y respeto este viejo la trataba como la más barata de las putas.
Llegó un momento en que el viejo le abrazo de la cintura y la hizo caminar arriba por las escaleras dejando a las niñas abajo la metió a una habitación con cama,.
Abajo nardy miraba a su compañera
— an subido…….seguro don Carlos le va a aser dormir..
Sofía la miró moviendo la cabeza
— no seas tonta nardy, mi abuelito lo que quiere es meterla a la cama para subirse encima de tu hermana.
Nardy no entendía que quería decir Sofía pero está la tomo de la mano y ambas niñas subieron para espiar al abuelo.
Habían tres cuartos en la parte alta de la casa cada uno tenía su cama y los muebles propios de un dormitorio, el abuelo había metido a Naty al cuarto de los padres de Sofía, la cama era más amplia y a un costado de esta había un taburete que ayudaba para que los padres pudieran cambiarse de ropas con mayor facilidad así como un clóset lleno de ropa de los padres de Sofía,
la puerta del cuarto estaba serrada pero no con seguro así que fue fácil que Sofía la abriera, dentro el abuelo tenía a Naty acostada sobre la cama , ambas niñas se metieron dentro del cuarto el abuelo no les prestaba atención y se escondieron detrás del taburete, incrédula nardy veía como el viejo Carlos le sacaba la ropa a Natalia, la blusa la falda, el brasier arrojando lo todo al limpio piso negro del dormitorio, los pechos pequeños y blanquitos de Natalia se veían paráditos, el viejo los metía uno a uno a su boca y los mamaba con desesperación dejándolos mojaditos y rojitos, el sonido de las mamadas del viejo se escuchaban en toda la habitación, y igual sonaban los chupeteos y lenguetasos a la vagina de naty, nardy miraba incredula la cabeza de don Carlos entre las piernas de su hermana que a duras penas movía la cabeza atontada, el abuelo de sofia parecía estar comiéndose el más delicioso de los manjares y los sonidos del chupeteos y las pasadas de lengua a su todavía virgen vaginita con algunos pelitos café que tenía Naty, estaban asiendo efecto, su carita roja de Naty mostraban estremecimiento y se mordía los labios, nardy y Sofía se miraban, ambas tenían sus vaginitas calientes y mojaditas, cuando vieron a don Carlos que se quitaba la camisa y se desabrochaba el cinturón del pantalón quitándose el pantalón y la camisa y vieron como se sacaba el calsoncillo, quedando completamente desnudo, nardy vio por primera vez la verga de don carlos, era gruesa no muy larga y parecía negra en comparación con la piel de Naty, estaba rodeada de abundante pelo negro así como las bolas que le colgaban, si bien no era una verga grande a nardy le parecía enorme y no sabía lo que le haría con esa cosa a su hermanita Naty que con las piernas abiertas esperaba a su primer macho,
— mira nardy…..jijijiji….no te parece chistoso la verga de mi abuelito
Nardy miraba en silencio como don Carlos escupía en su verga ya babeante de líquido preseminal. Y empezaba a frotar el glande de su grueso palo en los labios rosaditos de la vagina de naty, mientras Sofía sonreía nerviosa y nardy miraba hipnotizada
— mira como le va a entrar
Ambas atentas miraban como la vagina de naty una y otra vez rechasaba como si rebotara la verga del viejo Carlos, pero continuo frotando y frotando hasta que los labios se abrieron y empeso a entrar primero la punta y después el resto cuando don Carlos se subió ensima y dejó caer todo su peso sobre la linda rubia quinceañera desnuda, Naty abrio los ojos y empeso a chillar con desesperacion moviendo la cabeza de un lado a otro, la verga de don Carlos la abría sin piedad, nardy miro asombrada a su compañera Sofía que reía como si mirara un juego divertido, tapándose la boca para que su risa no saliera, mientras en la cama don Carlos la sujetaba con fuerza y tapaba sus gritos besándole la boca, el viejo al saberse dentro de la quinceañera no se movió hasta que Naty se empeso a acostumbrar y el horrible dolor de ser desvirgada pasará, nardy y Sofía eran las testigos en primera fila del paso de una niña a mujer, en este caso era el paso de una chica descente a una puta a una callejera barata , a una zorra que le abría las piernas a cualquiera.
En algún momento debía empezar a ocurrir y el viejo Carlos empeso a moverse, primero lentamente a sacar y meter y después agarro confianza mientras Naty borracha todavía , su cuerpo de mujer de hembra que recibía a su macho empezaba a responderle con lentos y suaves gemidos que salían de su boquita que era besada con desesperación por este viejo feo y enano
–aaaahhhhgg…………. aaaaahhhgg,…..aaaaahhhg
Las pequeñas asombradas empezaban a escuchar el disfrute de Natalia
— le gusta nardy, a tu hermana le gusta como se la tira mi abuelito …….yo no sabía que tu hermana era tan facilona
Nardy no sabía que decirle, para ella todo esto, todas estas sensaciones tan intensas eran nuevas,
— si mi amor qué rico mi princesa……!!!
Al viejo y decrépito de Carlos le faltaba brazos para abrasar semejante belleza y ya a ese punto la vagina de naty estaba bien lubricada y recibía en su totalidad las embestidas de la verga del viejo y Naty soportaba todo el peso del viejo sobre ella
— plach!! Plach!! Plach
Era el sonido que se escuchaba por el violento choque de pieles, Naty tenía la carita roja y sudada, tenía los ojos serrados y se mordía los labios abrazada al viejo que no dejaba de penetrarla., El tiempo no se podía calcular pero ya eran casi diez minutos de cojida salvaje que recibía la rubia quinceañera hasta que el ritmo del viejo por un instante se puso más violento y ambos cuerpos se extremecieron y tanto don Carlos cómo Natalia llegaron al orgasmo descargando el viejo Carlos cinco chorros de abundante esperma llenando a Naty de su abundante semilla, en unos momentos el viejo retiraba su ya flácida y empequeñecida verga de la rosada y dilatada vagina de la rubiesita dejándola inconsiente, las niñas se ocultaron detrás del mueble
— dime nardy ¿te gusto lo que mi abuelito le hizo a tu hermana?
La pequeña nardy se sentía exitada y tenía mojadita su vagina
— ……no se…….Sofía no se.
Sofía empeso a reírse
— habla sonsa…..
Naty sonrió y con la cabezita baja y con vergüenza le dijo
— …….si…..me…..gusto.
El viejo Carlos se pasaba una mano por la frente, estaba sudado por el esfuerzo, si bien fue algo exelente la montada que le había dado a la nena fue también un gran esfuerzo físico y el ya no era para nada un jovenzuelo, Natalia tirada en la cama con las piernas abiertas botando la esperma junto con una poca de sangre mesclada fruto de la rotura de su virginidad, convirtiéndose este asqueroso viejo en su primer macho, en el hombre que la convirtió en mujer pero no solo en eso como veremos.
El viejo así desnudo recogió sus ropas y se retiró al baño, y nardy y Sofía se pusieron a juntar la ropa de Naty desparramada por la habitacion.
Natalia dormia profundamente
— no le pongas la ropa dejala así
Le dijo Sofía cuando nardy quería vestir a su hermana, la inteligente Sofía había filmado en su celular la violación de su abuelo.