Las hijas de mi vecino – Parte III

Ya las gemelas eran mis socias en esto del sexo, y ahora ya su prima participaba de los encuentros. .
Yo no cabía dentro de mí, en un par de días, había poseído a mis primas y  a una de sus amigas. Pero lo más interesante que María Sol, Marité y Nadine, no parecía que tuvieran problemas  con el sexo, y solo contaban con 10 y 11 años. Realmente me impactó cuando las gemelas me contaron que mi tío, su padre, desde los ocho años las poseía por el culito. Que hacía le mamaran la verga cada vez que estaban solos, mira mi tío. Con lo buena que estaba mi tía, el buscaba que sus hijas lo complacieran. Yo estaba decidido a pincharle el globo, sería yo quien desvirgara  las gemelas, su virgo vaginal sería mi trofeo. Y pronto.

Suena mi celu, y la gran sorpresa, es Nadine, que me cuenta que sus padres se irán por el fin de semana a otro pueblo a visitar la familia, que ella quedará sola en su casa y mis  primas, a las que invitará le harán compañía y que esperaba yo quisiera visitarlas a partir de hoy a la tardecita. De paso cenaríamos todos juntos. Por supuesto que dije que sí. No lo dudé. Por la tarde, de la pileta me fui tempranito a casa para darme un baño, y de paso robarle a mi padre una par de pastillas de las que El usa, son celestes, y yo sé que son Viagra y para que sirven. También descubrí en su mesita de luz gel lubricante, del cual me adueñé, total al otro día lo devolvería a su lugar. Y cuando comenzó a caer el sol, bien peinado y bien vestido encaré para la casa de Nadine, que solamente distaba 500 metros de mi casa. Recuerden que es un barrio cerrado.

Al parecer llegué temprano, me recibe Nadine en traje de baño, realmente estaba muy fuerte esta niña, apenas pasé el vano de la puerta se me abalanzó apretándome contra el marco y me dió un beso de lengua que casi me asfixió, yo me defendí como pude, pero ya mi verga inmediatamente comenzó a ponerse dura, Ella me invita a sentarme en el living mientras se da una ducha, yo espero un poquito y cuando siento caer el agua, me meto al baño, ella está desnudita de espaldas a mi, su culito es una belleza, sus tetitas ya tienen peso propio, y mi verga está a mil. Sin invitación me saco la ropa y me quedo totalmente desnudo con mi mástil totalmente duro. Sin invitación entro a la ducha y le apoyo la verga entre sus glúteos, ella medio se sorprende, pero luego al sentir mi palo entre sus nalgas, echa el culito para atrás y se apoya en mi pecho, entonces me adueño de sus tetas, y bajo una mano para adueñarme de su vagina, Ella abre un poco las piernas para darle mejor cabida  a mi mano, con el dedo mayor penetro entre sus gorditos labios en busca de su clítoris, al tocarlo Ella se retuerce toda, yo apoyo más la verga contra sus glúteos, sin dudarlo Nadine lleva la mano hacia atrás, toma mi palo desde el tronco y lo dirige directamente a su ano, lo posiciona justo en el centro y echa hacia atrás su culito, la cabezota de mi verga se introduce lentamente en su estrecho agujero, sigue empujando y forzando la entrada hasta que la totalidad de mi palo está dentro de ella, se apoya en la pared y se mueve lentamente, adelante y atrás, la tengo tomada de las caderas y fuerzo el encuentro, acelera sus movimientos y de repente, casi cediéndole las rodillas llega a un orgasmo intenso, su túnel late, punza como un volcán, yo no resisto la excitación y lleno su culito de semen.  Ella aguanta a pie firme. Cuando mi tripa comienza a ablandarse se la saco, ella agradecida, girando su cara me da un beso de lengua. Se sonríe y me agradece la cogida. Finalmente nos bañamos y nos fuimos a la cocina a esperar a mis primas que pronto llegarían. Le pedí un vaso de agua y me tomé una de las pastillas de mi padre. La noche sería larga e intensa.

Marité y María Sol llegaron una media hora después, ambas muy risueñas, claro, ya sabían que habría fiesta. Nadine estaba muy callada, lo que hizo sospechar a mis primas, se fueron a la cocina y tanto la apremiaron que terminó confesando que ya habíamos cogido en la ducha, pero que todavía seguía siendo virgen de la conchita. Solo me había prestado el culito. Yo estaba totalmente deshinibido, por lo que sin preguntar nada, directamente me saqué la ropa y me quedé desnudo sentado en el living, ya la pastillita comenzaba a hacer efecto, y mi cipote comenzaba a ponerse nuevamente duro. Las chicas prepararon unas botanas, algo para comer ligero y unas gaseosas, pero Marité descubrió en el bargueño del papa de Nadine unas botellas de alcohol fuerte, principalmente Rhum, con lo que los tragos de gaseosa, salían todos bautizados con esa espirituosa bebida, a la media hora todos estábamos desnudos,  alegres, y yo con la verga totalmente erecta, dura, y cabezona.  Las tres niñas se arrodillaron frente a mi entrepierna, y fue María Sol la primera en tomar en sus labios mi verga, y zas, comenzó con tremenda mamada, luego Marité le arrebató la tripa y se la metía hasta la garganta, les cuento que esa pastillita es mágica, mi verga estaba muy dura, erecta a más no poder, y les aseguro que mediría en este momento unos 19cms X 6cms de gruesa, muy cabezona, pero a las chicas parecía no importarles, al fin ya las tres chupaban y lamían mi tronco con desesperación. Yo previsor, había dejado el gel lubricante en la mesita del living, como era el dominador de la escena, simplemente les ordené a las tres pibas que se tiraran  boca arriba en la alfombra, me hicieron caso, y yo como buen amante inicié una secuencia de chupada de conchas memorables, iba de una a la otra sin respiro, cuando las tuve a las tres ninfas más que calientes, ataqué la concha de María Sol con mi verga, levanté sus piernas hasta mis hombros, posicioné la cabezota de mi pija entre sus gorditos labios vaginales y sin preámbulo alguno, la penetré hasta topar con su himen, ella gritó, yo no le hice caso y seguí empujando, vencida su resistencia me interné en esa cueva caliente y jugosa hasta topar con sus ovarios, ya estaba echo, no era más virgen y estaba totalmente empalada, ella gemía, sollozaba, yo la tenía totalmente sometida a mi verga, lentamente comencé a cogerla, adelante y atrás dale que va, prontamente ella se acopló al vaiven, y dos minutos después era ella la que se ensartaba hasta el fondo, finamente en medio de gemidos, suspiros y grititos logro un potente orgasmo, yo seguía con la tripa como un caño, se la saqué y tomé a Nadine que estaba a su lado y sin pedirle permiso apoyé la cabeza de mi verga en su caliente túnel, ella cerró los ojos, y abrió bien las piernas, yo la penetré directamente hasta el fondo, que virgo ni ocho cuartos, mi tripa perforó su vagina y chocó contra su útero, ella lloró, gritó, me arañó, pero yo ya le había quitado su virginidad, y la estaba cogiendo como un desaforado, es que mi verga parecía un palo, no tenía mayor sensación, y la cogí hasta que llegó al orgasmo, y seguí y seguí dándole duro y le sobrevino un segundo orgasmo y quedó laxa, saqué mi tripa de su caliente caverna y atropellé a Marité, se quiso resistir, pero la dí vuelta, la puse de perrito y desde atrás le perforé la vagina, entró toda de una, ella grito y se salió de abajo, la tomé de la cadera y enfrentándola nuevamente a mi verga la ensarté hasta el fondo, volvió a gritar, pero esta vez no pudo escapar, y la comencé a coger, fuerte, sostenido, ella se tranquilizó con mi tripa adentro, de tanto forcejear, me excite y de repente sin aviso le llené la concha de leche, ella al sentir el calor de mi semen se vino en un tremendo orgasmo, cabalgaba como loca, se la sacaba toda y se la metía hasta el fondo sin tener el mínimo cuidado, y así llegó a un segundo orgasmo. Yo seguí con la verga dura a pesar de haber acabado dos veces. Esa pastillita es mágica y mis primas y su amiga son excelentes para el sexo. Ahora mientras narro los  hechos, entre las tres me están chupando la verga. Disculpen, me parece que voy a acabar. Tengo en mente cogerme a las amigas de mis primas, pronto.