LAS NIETAS DE NURIA Y LAURA 8

BELEN Y YO NOS CONTAMOS MUCHAS COSAS.
Belén y yo nos contamos aquella tarde muchas cosas, no le dije entre otras cosas que veía a mi madre follar muy a menudo con los chicos de la finca, unas veces eran unos u otros dependía del día, a veces era solo uno y otras varios, eso era lo mas frecuente, le conté cuándo mi hermana y yo, me refiero a la biológica las demás son primas aunque les diga hermanas. A veces se ponía en el sofá desnuda apoyada sobre el respaldo y con el culito hacia atrás y de esa manera pues se acercaban los chicos con sus pollas tiesas y negras y se las metían por ahí . En aquel momento no sabíamos de que iba el asunto pero lo descubrimos cuando lo hablaba con mi otras hermanas nuestras madres todas hacían lo mismo,  otras en el dormitorio se ponía a cuatro patas mirando al gran  espejo que hay allí, les iba yo indicando a Belén como hacían las cosas. En la casa grande de la abuela era ya esto mismo pero a lo grande, algunos sábados nos quedamos todas a dormir allí y las abuelas y madres montaban una fiesta, ellas le decían merienda, nos asomábamos sin que nos vieran y estaban todas desnudas y haciendo cosas raras, no lo entendíamos. Poe ejemplo veía a una de la madres de rodillas y los hombres se acercaban a ellas y metían su pene en la boca, otras bailaban con uno de ellos delante y otro detrás, cuando preguntábamos decían que eran cosas de papas y mamas, en fin cosas así, lo cierto y verdad que por algún momento que entonces ignorábamos nuestros chochitos se ponían muy húmedos, Belén me dijo que ella quería contarme algo así que la deje hablar.

Me conto lo siguiente, resulta que cuando tenia trece años un amigo de su hermano de unos veintitrés años de entonces, ella tenia trece se la follaba. Todo empezó porque a ella el chico en cuestión le gustaba, al principio y por temor a un posible embarazo solo se dejaba por detrás, es decir sexo anal, la primera vez le dolió mucho, fue un bruto nada delicado, ya las siguiente veces dejo de dolerle y se la metía con facilidad, le gustaba pero tampoco sentía nada especial. Si le gustaba como empezaban los encuentros, se ponía de rodillas y metía su polla en su boca, esto si le gustaba sobre todo cuando se decidía a eyacular en ella. Después de un tiempo se presento con un condón y la obligo a tener sexo vaginal, no fue una violación, a fin de cuentas se dejo pero no quería hacerlo por ahí.

Así fue pasando el tiempo ella intentaba siempre empezar con el sexo oral, lo que mas le gustaba en aquel momento, ponerse de rodillas le gustaba y chupársela y conseguir que se corriera en su boca.

Una de esos días oyó una conversación entré este chico y el hermano de Belén en qué le decía que era una puta por la con que hacia y que se dejaba por todas partes, la siguiente vez que vino le dijo que si quería follar eran cincuenta euros, las putas cobran por sus servicios, se negó, aunque tiempo después si traía el dinero pero ya era tarde, Belén ya tenia otro amigo.

Resulta, y esto me lo conto con mucho apuro y vergüenza que un día que estaba sola en casa después de ducharse se sentó en el suelo apoyada su espalda a la cama y con una toalla liada en la cabeza y decidió masturbarse, hasta ahí nada fiera de lo normal.

Tenia su hermano un perro, un pastor belga malinois, muy grandote y macho al cual hacia tiempo que su hermano ignoraba, ella se encargaba de el en todo lo que necesitase. Estaba ella entretenida en el menester de masturbarse y cuando estaba a punto de correrse el perro metió su hocico entre sus piernas y le lamio su vagina y se corrio de forma irremediable. No entendía que habia pasado ni porque habia echo eso, quizás le llego el olor a sexo y se excito pero el orgasmo fue colosal y le gusto, eso estaba mal y era muy feo pero le habia gustado.

Se fue al cine con sus amigas como tenia previsto con una intranquilidad en el vientre que no la dejaba en paz, además tenia su vagina muy húmeda y el deseo a flor de piel. De vuelta a  casa se fue a su habitación, sus padres ya se habían acostado y su hermano estaba fuera de la ciudad, así que le dijo al pastor que fuese con ella al dormitorio y se sentó en el suelo como antes y ya con la bragas quitadas abrió sus piernas, el perro levanto la cabeza y olfateo, se fue directo a su chocho y comenzó a lamer, también le lamio sus tetas y la boca, se dejo hacer hasta que el orgasmo se iba aproximando y lo acallo con la almohada.

En ese momento Belén me dijo que estaría yo escandalizada, para nada, continua, fue mi respuesta con una amplia sonrisa en los labios.

Ella le quería corresponder pero el pene del perro estaba enfundado y no sabia como. así que tomo la determinación de hacer algo mas. Vio en internet lo que era la zoofilia e imágenes y videos que no le desagradaron, la practica igual era mas compleja.

Se la veía a Belén muy agobiada contando esto, le insistí en que siguiera. Así que un fin de semana en el que no habría nadie en casa se decidió a poner en practica el asunto, se desnudo y se lubrico con sus mismos jugos el ano, por si el perro acertaba por ahí, no sabia muy bien como debía hacer. Se puso a cuatro patas y el perro empezó a lamer su vagina y su culo, de pronto saldo sobre ella y con sus patas delanteras la sujeto por la caderas y el pene el perro daba en todas partes hasta que acertó en su ano, fue de golpe, entro de golpe y sopetón, no me lo esperaba que fuese así, sentí que algo gordo crecía dentro de mi recto, me habia anudado, sentir ese pene tan grande y gordo dentro de mi hizo que el orgasmo, el primero de los que tuve aquella tarde no se hiciese esperar, por mis muslos goteaba un liquido blanquzco, era el semen del perro que se salía, aun cuando ya se quedo quieto su pene se movía dentro de mi, se bajo y se quedo pegado a mi, al cabo de unos minutos se soltó y el empezó a lamérse su cipote, estuve tentada de chupárselo yo, lo habia tenido en mi recto, no me pareció.

Un rato después y después del paseo de la tarde con mi perro yo estaba ufana, me sentía bien por lo que habia echo aunque por otra parte pensaba que eso de follar con el perro no estaba bien. Después del paseo el perro seguía con su lamidas de cipote y me tumbe a su lado, sabia que no era como con un chico pero quería hacerlo, sentía que se lo debía. Así que le baje tanto como pude la funda y le pase mi lengua por el cipote, se levanto de pronto y empezó a darme con el hocico en el culo, quería repetir, me lamio con intensidad y cuando me monto puse una mano tapando mi ano, ya puesta quería probar también el sexo vaginal con el. No se hizo esperar, me penetro enseguida y también me anudo, estaba encantada, una vez que ya nos despegamos me volví a tumbar a su lado e introduje su pene en mi boca casi hasta llegar a la bola, estaba morado en ese momento, ahora tenia un amigo fiel que seguro que no me diría puta, esto se repitió con mucha frecuencia hasta que el perro enfermo y hubo que sacrificarlo, sentí una pena muy honda.

Después de esta historia que me conto Belén, le dije que no era para tanto, que aquí esto se practica de forma habitual por todas, abuelas,  madres y nosotras. Quieres que llame algún chucho seguro que acude alguno enseguida y tienes recuerdos.

Vinieron dos daneses y mientras estábamos en el sofá sentadas nos lamieron por todas partes, luego nos fuimos a la habitación grande, la que tiene el espejo y nos pusimos en ella a cuatro patas, los perros se subieron también y nos montaron a las dos, lo pasamos muy bien. Le conté que siempre están atentos a cazar algún conejo que ande solo por ahí, y hoy aquí han cazado a dos.

Sois muy desinhibidas con el sexo tu familia y tu me dijo mi amiga, le conté que en mas de una ocasión hemos follado todas juntas en la misma habitación y nosotras éramos aun menores de edad y follábamos con hombre que podía tener treinta o cuarenta años e incluso mas, si las abuelas organizan alguna merienda pues vamos, seguro que acabamos la noche con veinte polvos cada una, además pues chupar tantas pollas como quieras, a estos hombre les encantan las mujeres sumisas y pasivas como nosotras.

Nos servimos una copa y nos sentamos en el porche ya las dos bastante mas tranquila, de la casa junto a la mis salieron dos de mis hermanas y dos perros, se acercaron a nosotras , los perros también, acababan de follar con ellos, de otra de las casas salieron varios hombres que también acababan de follarse a algunas y esto es a diario. Me dijo Belén que no le importaría nada repetir con los chicos del otro día, algo mejor tengo para ti le dije. Subí cogí el walkie y llame a Pedro, me contesto al momento, cambio de turno en media hora y voy, tráete a Juan si le apetece, se oyó una risa de fondo.

Al cabo del ratito llegaron los dos, Belén se quedo pasmada, son incluso mas altos que tu me dijo, pues las pollas que tienen estos dos son de exposición le comente.

Como yo ya los conocía de antes sabia como tenia que hacer, allí mismo en el porche se sacaron sus pollas y uno de ellos cogió a Belén y la puso de rodillas, le metió la polla en la boca, yo con el otro me puse a su lado haciendo lo mismo, pasaron dos de nuestras madres y algunas hermanas que solo dijeron que os divirtáis. Se corrieron en nuestras bocas, Belén estaba encantada, después nos fuimos adentro y follamos frente al espejo, hubo de todo mas oral, anal y vaginal, al final caímos destrozadas.

Belén me dijo de ir al puticlub al día siguiente, por ver el ambiente, lo hicimos, ya os contare….