Lilia

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi nombre es Jorge y tengo 44 años, ese día decidí salir a comprar ropa así que cerca de las 11 am me dirigí a un Mall, después de las compras y cerca de la 1 pm ubique un buen restaurante y me dispuse a comer, al entrar al restaurante observé la figura de 2 mujeres jóvenes, por instinto me dirigí los más cercano posible a esa mesa y la mujer que estaba de frente hacia mi le comentó algo a su compañera y esta volteó rápidamente, ahí pude observar que se trataba de Lilia una amiguita de mi esposa, Lilia tiene 26 años de piel morena y un cuerpo precioso donde su mejor atributo son sus nalguita ligeramente cargaditas y unos labios muy sensuales, así que ya con toda la confianza del mundo me acerqué a ellas me presentó a su amiga de nombre Dulce a lo cual yo con toda la confianza le dije "y de verdad eres Dulce" y al momento los tres nos reímos pero hasta ahí quedó el comentario, ya en confianza les dije que si me permitían invitarles la comida y disfrutar de su compañía a lo que ellas rápidamente aceptaron y coloque mi silla frente de ellas para observarlas mejor

Les comenté que andaba de compras a lo que ellas respondieron que hacían lo mismo y que recién terminaban, cuando terminamos de comer Dulce nos dijo que tenía que retirarse a lo que yo rápidamente me ofrecí a llevarla y ella me contesto que mejor yo llevara a Lilia ya que ella no traía automóvil, todavía en el restauran el mesero nos ofreció algo más de tomar a lo cual estuvimos tomando hasta tres cervezas ya más alegres le ofrecí seguir con las compras a lo que ella se puso roja y me dijo que sólo le faltaba la ropa interior, yo le respondí que cuando una mujer compra ropa interior la mejor opinión es la de un hombre, ubicamos un negocio especializado en ropa interior para mujer y la vendedora rápidamente se ofreció para ayudarle sin dejar de dirigirnos una mirada pícara por la juventud de Lilia a mi lado

cuando Lilia se alejó un poco le pedí a la vendedora que le mostrara las prendas interiores más provocativas que resaltaran sus preciosas nalgas y que sin que ella se lo pudiera le escogerá un precioso y sensual conjunto de dormir, yo mientras tanto no perdía la oportunidad de mirar la cara de excitada en Lilia ya al final que escogió sus prendas le pedí a la dependiente que de forma muy discreta y sin que Lilia se diera cuenta cargará todo a mi cuenta, cuando Lilia salió del probador Yo muy sutilmente me acerqué a ella y le dije que necesitaba otra cerveza ya que por la vista que había tenido hace unos momentos me sentía sediento a lo que ella ya con cara de deseo me dijo que igual ella, salimos del lugar y le ofrecí mi brazo a lo que ella titubeando un poco se aferró a el, muy tranquilamente me encamine a la salida del Mall, salimos de ahí y me dirigí a comprar otro paquete de cerveza pero al final me decidí por una bebidas preparadas que se venden enlatadas, me acerqué a Lilia y le ofrecí una bebida a lo cual con cara de asombro la tomó, yo de forma muy hábil aproveche para acariciar su brazo y subir hasta su hombro para acercarla a mi y aprovechar para darle un apasionado beso sintiendo como ella se estremeció al contacto.

Al separarnos le dije "nos vamos" y me dirigí hacia su casa pero ya sabía que cercano a su casa hay varios moteles de excelente calidad a lo cual al pasar por uno de ellos sin decirle nada dirigí el carro hacia el interior y ella con cara de asombro y excitación que dijo "que haces yo nunca he estado en un lugar así", Yo lo contesté "no te preocupes solamente quiero que me modeles la ropa que has compra y nos terminamos nuestras bebidas", ambos sabíamos lo que pasaría, ya una vez instalados ella tomando un poco más de valor me dijo que lo que estaba pasando aquí, aquí se quedaba, yo le contesté que como ella lo deseara.

Modelo su ropa cada vez de forma más sensual y al final le dije que sólo faltaba que me moderará su ropa interior a lo que ella otra vez sonrojándose se dirigió hacia donde estaba sentado, me dio un beso y me dijo que no me impacientara, modelo toda su ropa y al final se puso un calzón cachetero rojo el cual resaltaba su preciosas nalguitas y un brasier semitransparente que me permitía ver sus pezones grandes y morenos, esto hizo que mi verga se pusiera tiesa y no podía ocultarlo así que me levanté y me acerqué a ella a quien ya se le notaba la cara excitación y muy suavemente tome su mano y le hice dar una vuelta para apreciar de cerca todo su cuerpo, la acerque muy lentamente a mi y le planté un beso muy sensual aproveche para abrazarla y recorrer su espalda y cintura sintiendo como se estremecía, al separarnos ella me dice que no ha estado con otro hombre que no sea su novio yo le respondo que hoy será ese momento y que prometí lo disfrutaría al máximo

Le puse de espaldas a mi para poder
acariciar desde atrás sus pechos y le fui besando su cuello y espalda, de a poco bajaba mi mano hasta un poco más abajo de su ombligo para lo cual ella se echaba para atrás y sentía como me apretaba sus nalgas a mi pene el cual estaba deseoso de salir, le desbroche su sostén para dejarlo caer y de forma muy delicada le fui dando besos y besos hasta que la dejé de frente a mi y pude apreciar sus hermosos pechos en todo su esplendor duros y su aureola morenas y grandes pero apuntando al máximo hacia arriba, yo aproveché para llevarla a la cama y mientras yo permanecía de pué al borde comenzar a chuparlos mientas ella con una mano me detenía mi cabeza para no apartarme de ella, yo de forma muy hábil busque su otra mano y la dirigí a mi cinturón, ella comprendió lo que quería y aunque de forma torpe logro abrir mi pantalón y dejarlo a lo cual me fui desprendiendo del resto de mi ropa hasta quedar sólo en calzones, ella me dijo "espera" y se sentó al borde de la cama y deforma muy sensual me fue quitando mi bóxer hasta que mi pene quedó frente a su cara apuntando al techo, se paró frente a mi y me dijo "nunca he tenido un pene en mi boca, así que guíame para que ambos lo disfrutemos" a lo que yo le respondí: este día sería inolvidable para ambos

Me sentó al borde de la cama y se arrodilló frente a mi y tomó mi pene en sus manos y comenzó acariciarlo de arriba a abajo y a pasarle la lengua como si de un helado se tratara lo cual hacía que cada vez se pusiera más largo y duro después de estar un rato así me dijo "acuéstate, quiero subirme a ti y que me chupes mi conchita, nadie lo a hecho así que hazme rico, además he visto las miradas que le das a mi colita, así que disfrútala"

Me recorte y Lilia de pie frente a mi se quitó su calzón y pude apreciar en todo su esplendor esas preciosas nalguitas y su conchita completamente libre de pelos, ella se subió a mi y puso su conchita a la altura de mi boca y se acomodó para alcanzar con su manos mi pene dejando una espectacular vista de esa concha morena pequeña pero con unas labios un poco grandes, comencé dando besos pequeños cercas de su clítoris, y cuando sentí que Lilia volvió a lamerle mi pene erecto me dispuse hacer los mismo con su preciosa conchita mientras mis manos se deleitaban con sus lindas nalguitas, disfrute el néctar de su concha y con mi lengua abrí sus labios para intentar meterla dentro de ella y sentí en ese momento como se volvió a meter la cabeza de mi verga a su boca y chuparla de forma delicada y deliciosa para concentrarme a chupar sus labios y meter mi lengua en su conchita que chorreaba jugos al por mayor, de vez en cuando pasaba mi lengua hasta su ano y sentía como se estremecía y no sacaba mi pene de su boca.

Decidí que era momento de pasar a lo mejor y sentir a esa mujer que ya vibraba en cada lengüetazo, así que la acosté al borde de la cama y de pie frente a ella le puse mi pene duro en la entrada de su concha y comencé a frotarlo de arriba a abajo y lo apuntaba en la entrada de su concha pero sin penetrarla, sólo escuchaba de ella un rico "mmm", en un momento dado ella tomó mi verga en su manos y se la acomodo en la entrada de su vagina y de forma suave la fue introduciendo hasta que la tenía toda adentro, en ese momento se quedó quieta y abriendo sus ojos me miró y me dijo "ahora muévete rico hasta que termines dentro de mi, por nada te vayas a salir".

Comencé un rico mete y saca que la tenía con sus brazos extendidos por encima de su cabeza, con sus ojos cerrados y su lengua saboreando sus labios mientras no deseaba de jadear, estuve asi un tiempo hasta que la acomode boca abajo en el borde de la cama y comencé a penétrala así recostada desde atrás mientras seguía acariciando sus preciosas nalgas y ella con una de sus manos se masajeaba su clítoris de forma suave, de vez en cuando tomaba la base de mi pene y lo acariciaba deleitándome con lo suave de sus manos, yo aprovechaba para meterlo hasta el fondo y masajear sus preciosas nalgas, me recostaba sobre su espalda y mientas besaba su cuello apretaba sus suaves pechos.

Lilia jadeaba y me decía "sigue, sigue, que rico", mientras yo intentaba mantener el ritmo lento y rico en cada embestida, me detuve y la acomode en 4 patas al borde de la cama y eso le permitió subir el ritmo de las embestidas a lo cual me agarre de ese precioso culito, Lilia volteaba y me veía con su cara llena de excitación, hasta que me hizo terminar de forma abundante dentro de ella, se detuvo un poco con mi pene dentro ella y cuando se calmó un poco se despegó de mi pero sólo para tomar mi verga con sus manos y llevarla a su boca para dejarla limpia y nuevamente dura.

Se levantó de la cama y de forma muy sensual me dijo "acompáñame, nunca me he bañado junto con un hombre", así que me dirigí con ella al baño y nos aseamos muy bien, cuando terminamos de lavarnos se inca nuevamente y se metió mi verga en su boca y comenzó a chuparlo de forma tan rica hasta que logró que estuviera listo nuevamente, yo aproveché para llevarla hasta un sillón y ponerla sobre el pero mostrando todo su hermoso trasero empinado, para volver a darle unos cuantos lengüetazos pero concentrándome más en su apretado y moreno ano que se contraía de vez en cuando, de a poco iba mojando mi dedo con sus jugos y lo metía un poco en su culito mientras ella sólo temía y se mantenía con su cabeza pegada al respaldo del sillón, cuando sentí que estaba muy prendida le acomode la cabeza de mi verga en su conchita y la dejé que ella marcará el ritmo de la penetración, mientras con mis manos abría sus nalguitas y contemplada su año, baje mi mano y moje uno de mis dedos con sus jugos y poco a poco le fui metiendo un dedo en su rico culito hasta que este comenzó a entrar de forma fácil, cuando vi que estaba algo dilatada comencé a meterle dos dedos a lo que ella rápidamente se volteó y con cara de excitación me dijo "que pretendes" a lo que yo le respondí, "que disfrutes al máximo, confía en mi que tendré mucho cuidado", ella se volvió acomodar y con mucho cuidado comencé a meter dos dedos en su culito que presentaba un poco de resistencia hasta que poco a poco fue cediendo, mientas sentía como cada vez me mojaba más.

Cuando sentí que estaba lista le saque mi verga de si vagina y le apunté mi cabeza en su ano, Lilia sólo acertó a levantar un poco más su colita para facilitar que la cabeza entrará, cuando hubo entrado la cabeza ella se quedó quieta y comprendí que necesitaba tiempo para acostumbrarse, cuando se sintió lista ella misma comenzó de a poco con el mete y saca de forma lenta, mientras yo sentía que me corría por lo apretado de su culito, cuando se acostumbró por completo sus movimientos los realizaba de forma riquísima, mientras me decía que estaba terminando de lo rico que sentía. Yo aproveché para salirme de ella y acostarla en la cama y metérsela en conchita para nuevamente mojarme en sus jugos, después de una cuántas bombeadas levanté sus piernas y apunté nuevamente mi cabeza empapada en sus jugos hacia su culito, esta vez se fue toda de un envíon mientras ella gemía y decía "que rico, esto se tendrá que volver a repetir", "cuando termines quiero que lo hagas en mi cara", todas estas palabras de ella me tenían al borde de correrme, yo aprovechaba para besar su pecho y chupar cada uno de sus pezones que estaban duros, y veía como de repente se frotaba su clítoris con su mano, como pude me contuve y aproveche para sentarme al borde de la cama y sentarla de espaldas a mi pero seguía dándome por su ano, mientras ellas ya amoldada a mi se dejaba caer de forma rica mientras se movía haciendo círculos, yo acariciaba sus pechos desde atrás, hasta que le dije que me corría lo cual aprovechó para separarse de mi y comenzar a masturbarme hasta correrme frente a ella mientras le mojaba su cara y sus tetas con mi corrida.

Se recostó a un lado mi en lo que tomaba aliento nuevamente, me dijo que necesitaba asearse para que la llevará a su casa, nos metimos a bañar ambos como si de dos novios se tratara aproveche para acariciar nuevamente todo su cuerpo cómplice del jabón y sentir nuevamente como sus pezones se ponían duros. Al salir del baño y por tener semejante mujer frente de mi verga se volvió a poner dura, Lilia se dio cuenta de ello y se acercó a mi y se dedicó a darme lengüetazos de arriba abajo mientras me sobaba las nalgas y se aferraba a ellas, cuando vio que estaba muy excitado la metió toda en su boca y chupo de tal forma que me hizo terminar dentro de su boca sin que ella dejará que me saliera, no me soltó hasta quedar limpio y completamente agotado.
Cuando estábamos por dejar el cuarto de hotel sonó su celular, alcance a escuchar que era su amiga Dulce, ella le dijo con voz muy baja "fue lo mejor del día", luego me dijo "quieren hablar contigo" y me paso su celular a lo cual sólo escuché "en respuesta a tu pregunta, si soy muy dulce", mientras se reía y me colgaba.

Dejamos el motel y me dirigí a dejar a Lilia a su casa no sin antes intercambiar números y quedar que esto tendríamos que repetirlo. Nuestros encuentros se han repetido desde hace 1 año, ahora ella me comenta que se va a casar y que tal vez nuestros encuentros sean menos frecuentes, pero nunca olvidara esa tarde de compras.