Lo que ella queria

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
era una mañana de verano, el calor estaba empesando a molestarme y de pronto veo un anuncio para trabajar en reparto de agua.

llame por telefoneo al numero que indicaba el anuncio y me atendió la dueña de la distribuidora, concretamos una reunión esa misma tarde.

Me duche y fui a mi entrevista, cuando llegue era una empresa familiar, todos muy simpaticos.
El trabajo ya era mio por las referencias que llevaba y mi experiencia en el manejo de camiones.

al día siguiente tenia que estar a las 9.
00 en punto para salir con mi jefe a conocer la ruta y algunos clientes.

cuando llegue a mi nuevo trabajo me dicen que mi jefe estaba enfermo pero que su esposa me enseñaría mis responsabilidades.

era una mujer de unos cuarenta y cinco años, morena pelo largo, con una simpatía y personalidad que dejaba en menos a cualquiera.

de pronto escucho una bocina y que me llaman por mi nombre, (Alvaro), me dijo súbete que estamos atrasados, hoy es viernes y tenemos que entregar todos los pedidos antes de las 17:00 horas
yo manejaba el camión y ella me indicaba las calles las rutas y la forma de tratar con cada cliente.

ella llevaba un vestido azul.

tenia unas piernas hermosas unas caderas de miedo y unos pechos pequeños pero se notaban duritos y cumplidores.

cuando me estacione en el primer cliente me iso estacionar en un lugar apartado y bajamos a una bodega que quedaba en un lugar oscuro y fresco con una temperatura muy agradable.

la señora me dijo tienes que acercarte a esa puerta estacionarte y apagar el motor, asi lo hice
en un momento bajamos y ella me pregunto si tenia algún problema con que hoy me quede a trabajar horas extras, a lo que conteste que no había problemas y que estaba para lo que ella dispusiera, a lo que me miro de una forma muy picaresca y sonriente diciéndome que así le gustan sus trabajadores,
debo de reconocer que desde ese entonces empece a mirarla como una hembra a la que yo tenia que poseer
sus preguntas y conversaciones eran cada ves mas invasivas, note que quería saber todo de mi, a lo que yo intuí como una sondeada al camino antes de abordarlo.

esa mujer me gustaba y me volvía loco pensando en como seria tenerla desnuda y mirarla gemir mientras yo le daba.

pasaron las horas y note que no estabamos trabajando y solo hablabamos y reiamos, hasta que ella se paro en frente de mi y me dijo si le gustaba lo que veía
yo un poco tímido le pregunte si se refería a su vestido y ella respondió, el vestido y el maniquí.

yo respondi que ciego no era y que todo estaba muy lindo y todo bien puesto en su lugar

ella con un movimiento sutil tomo mi mano y dijo si queria probar un poquito de lo que estaba viendo, yo senti como mi verga se endurecia y como ella se acercaba lentamente a mi boca
no aguante mas y la sujete de su cintura tocando suavemente sus labios con mi boca
su lengua suave se encontro con la mia y como si ya se conocieran nuestras boca empesgamos a calentarnos y a despojarnos de nuestras ropas

con una maestria saco mi verga del pantalon y arrodllandose me dijo vas a probar lo que se hacer,.

empeso a lamerme y a mamarme de una forma tan deliciosa que solo una puta sabe hacerlo.

mientras ella mamaba mi verga dura y roja degustando cada centimetro d mi porte yo me dedicaba a acariciarla y a desabrochar su vestido

no usaba sostenes y llevaba una pantaletas blancas con encajes , muy sexy en su piel morena
de pronto le di la instrucción de que se pare y me comí sus pechos y mi mano bajo a su zorra que estaba mojada, muy mojada
la tumbe a una mesa que estaba esperando ser atacada y bajando sus pantaletas comenze a chuparle esa hermosa zorra que goteaba de excitación
su piel era suave y sus nalgas traspasaban mis dedos
note que ella disfrutaba mucho del sexo oral a lo que yo acompañe con pequeñas penetraciones de mis dedos.

esta mujer era realmente una maquina de gemir, era tal el desenfreno que no importaba nada solo gozar
por suerte nadie nos interrumpió, párese que ella sabia bien a donde llevarme.

de pronto me paro y la miro fijamente a los ojos y ella me dice que la penetre con fuerza y así lo hice a lo animal, a lo bestia

su vagina era deliciosa, pequeña y estrecha y mi verga se sentía envuelta e una exquisita masa de carne húmeda y jadeante.

nos pusimos en todas las posiciones que cada uno conocía hasta que de pronto la maldad se apodero de mi.

y la di vuelta apoye sus manos en la mesa y baje a sus nalgas hermosas y bien formadas, comencé a buscar ese orificio anal y ella me dijo no lo hagas, nuna me lo han hecho por atrás

ella convenida de su autoridad pensó que yo desistiría empece a lamer el pequeño agujero y con mi otra mano masturbaba si clítoris haciendo que ella no pudiera mas que gozar

Mientras yo lubricaba con mi saliva ese orificio mi verga esta tan dura que me pare y arremeter entre esas nalgas
ella en un suspiro y con miedo, asustada me dijo, no por favor no.

le dije que ya era tarde, que era mía y que yo haría lo que me de la gana con ella a lo que su excitación aumento mas aun
puse la punta de mi verga y empece a empujar y a penetrar, ella exitadisima y con lagrimas en los ojos me decía , no no lo hagas, no pudo mas , me duele demasiado
cuando sentí que la tenia ensartada entera la abrase y acaricie suavemente mientras ella sola comenzó a moverse,
ese culito estaba probando lo que siempre quiso saber, estaba gozando.

Estuvimos mucho rato haciéndolo asi, hasta que ya no pude mas y desidi salirme suavemente, a acabar afuera, ella notando lo que venia me pidió que acabara en su espalda mientra ella con sus manso se masturbaba
fue genial exquisito,.

Así es la historia de mi jefa y yo en este primer mes de trabajo ya lo hemos hecho 2 veces mas

la historia sigue