MAESTROS DEL INCESTO 1. Sexo Materno.

Primera entrega de la nueva saga “Maestros del Incesto”. En este capítulo veremos cómo Jordy se propone a embarazar a su casi cincuentona madre, tarea muy difícil a esa edad, pero no imposible. .
SEXO MATERNO.

 

Escrito por Siremis.

 

Papá había fallecido hacía un mes, preciso cuando mamá quería tener otro hijo él la había abandonado.

Papá era un señor de edad, pues tenía 70 años. El viejo era divertido, fiestero, alegre y alcahueta, para nada era tacaño, al contrario era muy generoso y nos daba dinero a montones, lo voy a extrañar mucho.

Él era un papá muy especial, con mucho sentimiento recordaré cuando me llevaba a donde las putas y al único cine porno que aún subsiste en Bogotá, el Esmeralda Pussycat.

Al viejo le gustaba recordar cuando Bogotá tenía varios teatros de proyección de películas pornográficas, eso lo llenaba de nostalgia, ya que conoció a mamá dentro de uno de esos lugares mientras se hacía la paja.

Lástima que él murió.

Tras su fallecimiento estuvimos tristes un par de días, luego mamá nos animó, nos recordó que papá había pedido que cuando él muriera no estuviéramos llorando y en melancolía sino que hiciéramos fiesta y que nos divirtiéramos.

Mamá nos recalcó que en la familia no se debía dar cupo a la amargura, que el muerto al hoyo y el vivo al baile, así que en lugar de guardar luto hicimos fiesta al tercer día y luego continuamos normalmente en nuestras actividades. Ella siguió como ama de casa y mi hermanita y yo en el colegio, como si nada hubiera pasado.

En dicha fiestecita, mamá se vistió muy sensual y descaradamente y se encerró en su habitación toda la noche con Tobías, uno de los amigotes de papá, el único hombre que se atrevió a hacerle caso a mamá de acostarse con ella en esa ocasión, ya que los demás no quisieron hacerlo por cuestiones morales.

Al otro día, Tobías, entre contento y preocupado por su infidelidad, se fue a su casa, a donde su esposa e hijas lo esperaban, y mamá, decepcionada por no haber quedado en embarazo, ideó otro plan.

Mamá recordó sus tiempos de juventud y, así como puteaba en esos tiempos, se empezó a vestir de manera muy putona y a salir todas las noches a los bares para tratar de ligar a algún hombre. La idea esta vez no era conseguir novio ni amante sino simplemente a alguien que la pudiera dejar rápidamente embarazada y después echarlo, a ella no le importaba sino quedar panzona, pero por su edad no era tan fácil preñarla ya que contaba con 48 años de edad.

A mí me excitaba ver a mi mami en ese plan de puta y la empecé a ver de manera diferente a como un hijo ve a su madre, la muy zorra me arrechaba al verla vestida con esas ropitas tan pequeñas y vulgares y en esa dinámica de ofrecérsele a cualquiera.

En la tarde, en la cual pasaron los hechos que voy a narrar, mi hermanita chiquita, llamada Marianita, y yo, habíamos acabado de llegar del colegio y estábamos acostados cada uno en cada sofá de la sala mirando televisión, no nos habíamos quitado nuestros uniformes de colegio, únicamente hacíamos pereza.

De repente la tetona de mamá salió de la cocina, pasó coquetamente por la sala y subió las escaleras moviendo exageradamente su buen culazo en su estupenda y descaradísima minifalda. Se le vieron los calzones de forma muy bacana.

Mamá parecía toda una puta y a pesar de su edad aún se conservaba muy bien, era una pelirroja hermosa y bastante acuerpada, aparentaba tener menos años.

Ella se iba a disponer a salir, y subió a su habitación a terminar de maquillarse.

Yo me quedé con cara de pervertido contemplando morbosamente cómo movía ese espectacular culote al subir las escaleras y me fijé también en sus bonitas medias con ligas y sus zapatos de tacones altos. No pude evitar agachar la cabeza para verle, de mejor manera, por debajo de esa pequeñísima y provocativa minifaldita.

La cansona de mi hermanita, como es tan sapita y metiche y en todo está metida, me descubrió mirando a mamá e inmediatamente dijo a voz muy alta:

 

 

 

MARIANITA: ¡Uuuyyy!… ¡Pero Jordy, cierra la bocota que se te entran los moscos, morboso! ¡Estás pillado mirando y deseando a mamá!… Jejejeje… ¡Y le miras el culo como si te lo fueras a comer, pervertido!

 

YO: ¡Uuff!… ¡Es que mamá está buenísima!… ¡Tiene un culazo de maravilla, mamasota rica!…

 

MARIANITA: ¡Eres un cochino! ¡Cuando Dios dijo: ¡Hágase la perversión!, te hiciste tú, hijuemadre!…

 

YO: ¡Bah!… ¡Me importa un culo, pulguita!… ¡Además a ti qué te importa si la miro o no la miro, sapa entrometida! ¡Más bien, en lugar de estar fijándote en lo que hago o dejo de hacer, ponte a mirar la novela!

 

MARIANITA: Jajaja… ¡Pero no te enojes!…

 

YO: ¡Así como yo no me meto en tus asuntos tú no te metas en los míos! ¡¿Ok?, chinchecita!…

 

MARIANITA: ¡Ya, calmado, fosforito!… Jejeje… ¡No se te puede decir nada porque te enciendes!

 

YO: ¡Yo estoy calmado, cucarachita!

 

MARIANITA: ¡Pues yo no creo que lo estés tanto! ¡Por la forma en que miraste a mamá aseguraría que se te paró la verga mirándola, así que no debes estar tan calmado que digamos!

 

YO: ¡Tengo la verga como un mástil, insecta!… ¡¿Me la quieres ver o qué? pequeña zorrita!

 

MARIANITA: Jajaja… ¡Tan bobo!…

 

 

 

Me saqué la verga por la bragueta del pantalón y se la enseñé a la chismosita de mi hermanita.

 

 

 

MARIANITA: ¡Huicchh!… ¡Qué vergota tan grande!… ¡Cielos!… ¡Uuff!… ¡Es más grande que la que papá tenía! Jejeje… ¡Juemadre!… ¡Pero se nota bastante que te excitaste mucho viendo a mamá subir las escaleras ¿no? pillín!

 

 

 

Masturbándome un poco, le contesté a mi hermanita:

 

 

 

YO: ¡Así es, piojita! ¡¿Acaso no le viste las tetazas y el culazo que se manda?! ¡Mamá se viste como una puta y está puteando en los bares! ¡Así cómo diablos no me voy a excitar viendo a esa perra!

 

MARIANITA: ¡Wow! ¡Y es que frescamente le dices “puta”, “perra” y de todo!… ¡Qué abusivo!… ¡No respetas ni a tu madre!…

 

YO: ¡¿Pues no la has visto?! ¡¿No sabes acaso lo que ella hace todas las noches?! ¡No es para menos! ¡Es una zorra, una puta, una perra! ¡Acuérdate dónde fue que la conoció papá y haciendo qué!…

 

 

 

Marianita miraba mi atrayente masturbación, y dijo:

 

 

 

MARIANITA: ¡Yo sé muy bien lo que ella hizo en el pasado y lo que ahora hace! ¡Ella solo quiere quedar embarazada a como dé lugar! ¡Pobrecita! ¡Pero yo sé que algún día lo logrará!… ¡Oye, tú te la follarías sin importar que sea tú mami!

 

YO: ¡Obvio, hermanita insectoide! ¡Claro que me la follaría! ¡Ella no es más que una puta que se la pasa puteando por las noches y como tal hay que aprovecharla! ¡Además está muy buena la hijuemadre! ¡Esa perra tiene un culazo de impacto y unas tetazas de ataque!… ¡Y hay que recordar que ahora soy el único hombre de la casa, el macho del hogar, así que tengo derecho al menos en mirarla!

 

MARIANITA: ¡O sea que la podrías embarazar tú!

 

YO: ¡De una, mamita!… ¡Yo la preñaría de octillizos!

 

MARIANITA: ¿Qué le harías a mamá si la tuvieras disponible para ti?!

 

YO: ¡De todo, Marianita!… ¡Le agarraría y le chuparía esas tetotas con muchas ganas!… ¡La agacharía frente a mí y la pondría a mamar!… ¡Luego le clavaría la vergota toda la santa noche por esa rajota y por ese tremendo culazo! ¡Mamacita rica!… ¡Le daría leche a montones!… ¡Uuff!… ¡Me imagino cuánto no gozó papá  a esa puta!…

 

 

 

Mamá había escuchado muy bien toda nuestra entretenida conversación. Bajó moviéndose de manera sumamente sexy, lo hizo con toda la intención del mundo,  me vio haciéndome la paja sin ninguna clase de vergüenza, y sonriendo dijo:

 

 

MAMÁ: ¡¿De qué están hablando? mis amores, que los escucho vociferar!

 

MARIANITA: ¡No, nada, mamá! ¡Solo que Jordy te quiere follar porque ahora es el amo de la casa y tiene todo el derecho de embarazarte!

 

YO: Jajaja… ¡Sapa! ¡Chismosa!… ¡Después me desquitaré, delatora! ¡Va jugando!…

 

MARIANITA: ¡Jordy se está haciendo la paja y también dijo que te clavaría la verga por la raja y por el culo y ya que estás puteando toca aprovecharte! Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Wow!…

 

 

 

Mi sonriente madre me miró y me preguntó:

 

 

 

MAMÁ: ¡¿Es cierto eso? Jordy! ¡¿Me lo meterías por la chocha y por el culo? amor!…

 

YO: ¡Uy, mamá, yo a ti te lo metería hasta por las orejotas! ¡Estás excesivamente rica! ¡Me lo haces parar como nunca!

 

MARIANITA: Jajaja… ¡Jordy es todo un sinvergüenza, mamá! ¡Pégale pa’ que aprenda!… Jajajaja…

 

YO: ¡Ven y me pegas tú a ver si eres tan capaz, pulguita!… ¡Pequeña zorrita!…

 

MAMÁ: ¡Ya, no discutan!… ¡Oye ¿de verdad le clavarías semejante cosota por la chocha y por el culo a tu linda mamita? mi Jordy! ¡¿o lo dices solo por molestar?!

 

 

 

Siguiendo con mi buen pajazo, a plena vista de mi hermanita y mi tetona madre, respondí:

 

 

 

YO: ¡Pues claro que te metería ésta tremenda barra de salchichón de verdad, mamá!… ¡Cómo no si estás tan rebuena y putona! ¡Además es mi derecho ya que ahora soy el hombre de la casa! ¡No te desperdiciaría si me dieras la oportunidad de culearte, mamasota!

 

MARIANITA: ¡Uuff!… ¡Uy, marica! ¡Este hermanito sí es la vaina! Jejeje… ¡Tan pasado!… ¡Muy descarado!… Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Si te digo que te doy la oportunidad ahorita ¿lo harías realmente? mi amor!

 

YO: ¡Sin dudarlo, mami! ¡Te follaría y te rompería ese excelso culote de puta que te cargas con este severo Guamote que ves aquí!

 

MARIANITA: Jajajaja… ¡Qué conversación tan bacana!… Jejeje… ¡Sigan!… ¡Sigan!…

 

MAMÁ: ¡¿Me follarías?!

 

YO: ¡Pos claro!…

 

MAMÁ: ¡¿Me romperías el culo con esa larga y gruesa varota?!

 

YO: ¡Así es! ¡Con muchas ganas, mamá!

 

MAMÁ: ¡¿Me gozarías como si yo fuera una puta candente?!

 

YO: ¡Hasta cansarme, mamá! ¡Te daría con esta vergota como a la puta candente que bien eres!…

 

MAMÁ:  ¡¿Me preñarías? mi nene!

 

YO: ¡Totalmente, mamá! ¡Eso no me importaría con tal de hacerte mí mujer y mi puta!

 

MARIANITA: ¡Uuaaahhh!… ¡Contéstale a todo eso, mamá!… ¡A ver, quiero que le respondas a ese abusivo! ¡Dale una bofetada por grosero y atrevido!

 

MAMÁ: ¡Tranquila, muñequita! ¡Déjame a mí sola enfrentar la situación!…

 

YO: ¡Sí, cállate, culicagada!…

 

MAMÁ: ¡Pues yo no creo que seas capaz ni de besarme en la boca, mi Jordy! ¡No creo que lo hagas como me lo hacía tu padre y menos serías capaz de embarazarme, no han podido los otros mucho menos tú! Jejeje…

 

YO: ¡¿Te lo demuestro? perra!…

 

MARIANITA: ¡Ooohhh!… ¡Qué palabrotas, Jordy! ¡Qué boca tan vulgar!… ¡¿Así tratas a mamá?! ¡¿Con esa boquita comes? hijueputa! Jejeje…

 

YO: ¡Que te calles carajita, hablas como una lora enloquecida, me tienes harto!… ¡Y tú, mamá, cuando quieras te demuestro lo varón que soy!… ¡En la cama soy mucho mejor que papá, yo podría dejarte en embarazo desde el primer intento!

 

MAMÁ: ¡Sí!… ¡Quiero que me lo demuestres, mi macho!… ¡Quiero ver eso!… ¡Quiero ver que te atreves a besarme de lengüa, a follarme y a preñarme!

 

MARIANITA: ¡Uuff!…¡Mamá!… ¡Me sorprendes!… ¡Estás arrecha!… Jejeje…

 

YO: ¡Ven, acércate entonces, puta!… ¡Siéntate aquí y empezamos a besamos para que veas que soy muy capaz!

 

MARIANITA: ¡Diablos! ¡Mamá!… ¡Acércate a mi hermanito!… ¡Yo también quiero ver si ese cretino es capaz de besarte en los labios con todo y lengüa y embarazarte!

 

 

 

Como yo permanecía acostado, me incorporé un poco sentándome en el sofá. Seguía jalándome muy rico la verga.

Mamá, toda pintorreteada de maquillaje y oliendo muy a rico, sonrientemente se desapuntó algunos botones de su atrayente blusita haciendo que se viera aún más piel de sus hermosas y provocativas tetotas y dio unos pasos hacía mí.

 

 

 

YO: ¡Qué tetas!… ¡Eso, zorrita!… ¡Ven, perrita!… ¡Ven!…

 

 

 

La perra no tenía brasier puesto, se me acercó contoneando muy rico todo su esbelto cuerpazo, y, muy coquetamente, se me sentó en el borde del amplio sillón. Me seguí jalando la verga con una mano mientras que con la otra me atreví a sobarle las excelentes piernotas.

Mi hermanita, muy alentada por la situación y con su curiosidad en plena efervescencia, también se sentó a vernos, y, mientras aplaudía y nos animaba, mamá y yo quedamos mirándonos con lujuria por un momento, nos enfocamos en nuestros ojos, estábamos sonriendo a la vez que nos contemplábamos los rostros.

 

 

 

MAMÁ: ¡¿No que ibas a besar a tu madre?, bebé!

 

YO: ¡Ya vas a ver cómo soy capaz de eso y mucho más!…

 

 

 

Mamá miraba impúdicamente y con muchas ganas mis labios.

Yo empecé a acercar mi boca a la suya y, estando demasiado cerca, ella fue la que primero posó sus labios sobre los míos y nos empezamos a besar obscenamente de lengua frente a mi hermanita.

Marianita aplaudió con mayor animosidad y se excitó la muy zorrita:

 

 

 

MARIANITA: ¡Wow!… ¡Braaavoooo!… ¡Uff!… ¡Buenísimo!… ¡Caray!… ¡En serio te estás atreviendo a besar en la boca a mamá!… ¡Y de lengüa y todo, hermanito!… ¡Te felicito!… ¡Uff!… ¡Qué bárbaro!… ¡No puedo creerlo!… ¡Qué tiernos!… ¡Así sí la vas a embarazar a punta de besitos!… Jejeje…

 

 

 

Nos seguimos besando aún con más pasión. Y la pulguita seguía hablando como perico mojado.

 

 

 

MARIANITA: ¡Increíble!… Jejeje… ¡Esto está muy bueno!… ¡Bésense todo lo que quieran, por mí no hay problema!… Jejeje… ¡Yo solo los miro!…

 

 

 

Marianita estaba agitada y excitada, se movía sobre su sofá con gran asiduidad, y yo tocaba y acariciaba las carnosas y gruesas piernotas de mamá mientras la besaba, y ella me abrazaba con deseo.

 

 

 

MARIANITA: ¡Caramba! ¡Vaya manera de chupetearse!… ¡Qué descaro!… ¡Parecen novios!… ¡Se van es a devorar!… Jejeje…

 

 

 

Mamá, con su manita buscó y agarró mi verga y la pajeó encarnizadamente a la vez que me besaba y me abrazaba con su otra mano.

 

 

 

MARIANITA: ¡Mamá!… ¡Pero qué demonios haces!… ¡Acuérdate a quién le estás agarrando el pepino!… ¡Qué inmoralidad!…

 

 

 

Mamá me pajeaba con decisión y nada de vergüenza a la vez que me seguía besando con frenesí.

Su pajazo se sentía como si estuviera en el cielo y sus tremendos besotes no se quedaban atrás, ella me quería devorar la lengüa, los labios y toda la boca con sus exquisitos, sabrosísimos y fuertes morreos.

 

 

 

MARIANITA: ¡Qué pajazo tan sucio!… Jejeje… ¡Debería taparme mis ojitos!…

 

 

 

Mamá me succionaba mi lengüa con su boca, realmente esos besotes eran supremamente riquísimos.

 

 

 

MARIANITA: ¡Wow!… Jajajaja… ¡Juemadre!… ¡Estos dos se van a terminar comiendo!… Jejeje… ¡Y no me voy a tapar mis sanos ojitos porque yo quiero ver eso!… Jejejeje… ¡Ansío ver cuando el Jordy te llene la cuca de verga, mamá!…

 

 

 

Mi hermanita se levantó su faldita del colegio y se comenzó a tocar su entrepierna, por encima de sus cuquitos.

 

 

 

MARIANITA: ¡Al menos tengo mis deditos!… ¡Papá me enseñó muy bien a hacerme la paja!…

 

 

 

No le pusimos mucho cuidado a lo que había acabado de decir la nenita ya que mamá y yo estábamos en lo nuestro supremamente excitados.

Mamá soltó mi verga y se me echó encima haciéndome acostar sobre el sofá. Nos seguimos besando, restregando y revolcando ardientemente.

 

 

 

MARIANITA: ¡Uy!… ¡Juemadre!… ¡Pero qué apetito el de estos dos!… ¡Caramba!…

 

 

 

No pude contenerme y le agarré las nalgotas por encima de la tela de su buena minifalda.

Yo tenía mi verga muy parada.

 

 

 

MARIANITA: Jajajaja… ¡Jueputa!… ¡Van a copular!… Jajajaja…

La nenita se estremecía y se movía alterada de vernos así. Mi cipote invadió entre la faldita de mamá. Le empecé a chuzar, con la punta de mi poderoso y atrevido chorizo, una y otra vez, su humedecida cucaza, por encima de sus calzones, era como si mi potente guamo estuviera golpeando desesperadamente a la puerta de su garosa vulva.

 

 

 

MARIANITA: ¡Mamá! ¡Yo creo que no vas a salir ilesa de esto! ¡De que mi hermano te folla, te folla! ¡Ponle la firma a eso!…

 

 

 

Mi vergota se movía solita, parecía como si mi miembro supiera por sí mismo a dónde tenía que ingresar y, tal cual, como una arrecha sonda en cañería, estaba haciendo todo lo posible por lograr entrar dentro de esa cálida cucaza.

 

 

 

MARIANITA: ¡Definitivamente este mundo es de locos!… Jajajaja…

 

 

 

La zorrita de la Marianita se había hecho a un lado su blanco y tierno calzoncito, en el que figuraba la dulce imagen de Mickey Mause, y ya se estaba metiendo con energías sus delicados deditos en su rosada vaginita, se notaba muy risueña y contenta esa pequeña putita.

 

 

 

 

MARIANITA: Jajajaja… ¡Qué pasados estos dos!… Jajaja… ¡Qué lanzados!… ¡Juemadre!… Jejeje… ¡Aquí va a haber sexo! ¡Lo presiento!… ¡Lo sé!… Jejeje…

 

 

 

Mamá se movía sobre mí como si estuviéramos copulando y yo le levanté su minifalda y le agarré las nalgotas directamente sobre la piel de sus grandes glúteos.

Ella me besaba desesperadamente.

 

 

 

 

MARIANITA: ¡Oohh!… ¡Uff!… ¡Mamá!… ¡Se te ve todo el culo!… Jajaja…

 

 

 

A mamá le dio un poco de risa escuchar a su hijita, y mirándome con morbo, me dijo:

 

 

 

MAMÁ: ¡Con que quieres follarte a tu mamá ¿no? so puerquito! ¡Pues hazlo, hijo de puta! ¡Embarázame que quiero otro hijo igual de loco y de depravado a ti, amorcito!

 

 

 

Mientras ella me decía eso se sentó encima de mí pubis y velozmente se quitó su blusa escotada dejando sus buenas tetas totalmente al aire.

Mi hermana y yo soltamos un sonoro grito de éxtasis, victoria y emoción al ver semejantes tetas vibrar.

 

 

 

MARIANITA: ¡Ooooohhhh!… ¡Diablos, mamá!… Jajajajajaja… ¡Qué tetas tan lindas y grandes tienes!… ¡Uff!… ¡Las mías no le llegan ni a los tobillos! ¡Todavía las tengo chiquitas y sin leche!… Jejeje… ¡Ojalá algún día me puedan crecer las bubis tanto como las tuyas y sean bien lecheras!

 

 

 

Las tetas de mamá eran excepcionalmente hermosas y grandes.

Mamá, moviendo sus puchecas, me las puso en toda la cara.

Me zambullí entre ese buen par de tetas y las baboseé.

 

 

 

YO: ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr!… ¡Tetazas tan ricas!… ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr! ¡Brr!… ¡Brr!…

 

 

 

Apenas podía respirar entre esas buenas y abusivas tetazas, y, soltando sus nalgas, le agarré esas terribles ubres y me puse a lamérselas y a chupárselas.

 

 

 

MARIANITA: ¡Eso hermanito, no te dejes ganar de esas tetotas!… ¡Dales su buen merecido!… Jejejeje… ¡Hércules contra las tetas de mamá!… Jajajaja…

 

 

 

Le di también unas palmadas a esa súper tetotas y se las mordisquié.

 

 

 

YO: ¡Ña, ña, ña!… ¡Voy a embarazar a esta puta!… ¡Estoy demasiado arrecho!… ¡A partir de ahora no respondo por mis actos!

 

MAMÁ: ¡Hazlo cabrón! ¡Embarázame! ¡Eso es lo que quiero, gran pendiolo!… Jejeje…

 

MARIANITA: ¡Uff!… ¡Juemadre!… Jejejeje… ¡Esas son palabras mayores, mamá!… ¡¿En serio te vas a dejar embarazar del bobo de mi hermano?! ¡¿Iré a tener otro hermanito?! ¡Ojalá no salga igual de tonto al Jordy!… Jajajaja…

 

 

 

Me di la vuelta y tumbé a mamá al suelo cayendo yo sobre ella, lógicamente no se hizo daño porque la alfombra es muy fina y mullida.

Apenas los tres soltamos tremenda carcajada.

Me dispuse, inmediatamente, a bajarle y quitarle la minifalda a mi complaciente madre. De la misma manera le hice a sus cucos, la muy puta quedó solo en liguero y en zapatos de tacón alto.

Mamá puso las piernas como cuando se les cambia de pañal a los bebés, pero muy abiertas, y le vi esa golosa y peluda chochota, era hermosa, parecía salida de una de las mejores películas porno que de vez en cuando veíamos la pequeña Marianita y yo en nuestro cuarto.

 

 

 

MARIANITA: ¡Qué esperas, Jordy, chúpale la cuca a mamá!… Jejeje… ¡La tienes todita para ti!… ¡Dale lengüita!… Jejeje…

 

 

 

La pequeña Marianita sacaba la lengua y hacía mímicas de rico lengueteo vaginal.

Con una mano mamá se abría la cuca ofreciéndomela y con la otra se agarraba y amasaba sus increíbles tetazas.

 

 

 

MAMÁ: ¡Hazle caso a la nenita, amor! ¡Mete tu cabeza entre mis piernas y empieza a lamer, chupar y dedear a esta arrecha cucaza!

 

 

 

Mi hermanita se estaba metiendo casi toda su mano a su cuquita y miraba con ansias y esperanza a que yo le obedeciera a mamá.

Obviamente lo hice.

Lamí, chupé y dedeé esa suculenta chochaza con toda mi alma y entrega.

Me supo a rico esa puta cuca.

Mamá gemía, mi hermanita también, y, por supuesto, yo no fui la excepción en soltar ciertos quejiditos de gozo.

 

 

 

MAMÁ: ¡Jordy, mete tu verga en mi concha! ¡Quiero un embarazo para este año! ¡Es el momento oportuno para tener un tercer hijo!

 

YO: ¡Como ordenes, mamá! ¡Para que no digas que nunca te obedezco!… ¡Ahí va tu tan deseado embarazo!…

 

MARIANITA: ¡Dale duro por esa cuca a mamá, Jordy! ¡Hazle un hermanito para mí!… ¡yo quiero un hermanito muy lindo y de ojos verdes!… ¡Quiero ver de cerca cómo le metes la verga en la cuca a mi mami! Jejeje… ¡Deseo ver personalmente cómo es que se fabrica un bebecito!…

 

 

 

La nenita se levantó y se puso de rodillas sobre la alfombra, con una manita se seguía masturbando y con la otra ayudaba a abrir una de las buenas piernotas de mamá, y, como la niña es tan metidita, sapita y curiosita, asomó toda su cabezota para verme penetrar a mamá.

Me agarré la verga, me arrodillé y me metí entre ese par de lindas y suaves piernotas de mamá y sin compasión se la clave por esa golosa y mojada cucaza.

Todos dimos un gritito de pasión e iniciaron los movimientos de poderosa penetración vaginal.

 

 

 

MARIANITA: ¡Eso, Jordy!… ¡Eso!… ¡Dale a mamá!… ¡Hazle un hijo!… ¡Yo quiero que el mocosito sea mono!… ¡Que sea blanco, bonito, inteligente y tierno como yo!… ¡Que no salga como el papá de feo sino más bien como mi mamá de hermosa!…

 

YO: ¡Toma, mamá!… ¡Toma, perra!… ¡Toma prostituta!…

 

MAMÁ: ¡Aaaaahhh!… ¡Qué rico!… ¡Oohh!… ¡Qué delicia de pene!… ¡Aaaaahhhh!… ¡Duro! ¡Duro, amor!… ¡Papi, me encanta!… ¡Esto me gusta, papito!… ¡Aaaahhh!… ¡Aaaahhh!… ¡Oooooohhhh!… ¡Ooohhh!… ¡Mi chocha ruge de placer!…

 

 

 

Era cierto, esa cucaza emitía extraños, acuíferos y excitantes sonidos al ser rudamente penetrada.

 

 

 

MARIANITA: ¡Fenomenal!… ¡Qué cogidota!… Jejeje…

 

 

 

Seguimos follando de esa manera, mamá acostada en la alfombra, con su pubis elevada, poniendo su coxis en mis muslos, y yo de rodillas, entre sus piernas, agarrándoselas, la penetraba con todas mis ganas.

 

 

 

MARIANITA: ¡De modos que así es como se hace un bebé!… ¡Nunca lo había visto en vivo y en directo!…

 

YO: ¡Oohh!… ¡Pues mira y aprende, moscorrofio! ¡Para que lo sepas hacer cuando te toque!

 

MARIANITA: ¡Yo quiero tener un bebecito también!… ¡A ver a cuál de mis compañeritos del colegio le digo que me lo haga!… ¡Quiero embarazarme!…

 

YO: ¡Oohh!… ¡Oohh!… ¡Oohh!… ¡Hermanita, eres una araña, nadie querría embarazarte!…

 

MAMÁ: ¡Aaaahhhh!… ¡No le digas así a la nena!… ¡Mi amor, eres una mujercita hermosa! ¡Espero que pronto tengas la edad de traerme a casa un lindo nietecito!… ¡Aaaaahhh!… ¡Voy a correrme!…

 

MARIANITA: ¡Córrete, mamá!

 

YO: ¡Córrete, puta!…

 

MAMÁ: ¡Aaaaaaggggghhhh!… ¡Aaaaaaggggghhhh!… ¡Aaaaaaggggghhhh!…

 

YO: ¡Eso, mamá!… ¡Ooohhh!… ¡Echaste muchos fluidos!… ¡Me dejaste bañado de tus jugos vaginales, perra !… Jejejeje…

 

 

 

Saqué mi verga de esa palpitante vagina materna para que pudiéramos cambiar de posición.

Mientras me quitaba mis pantalones y toda mi ropa y me seguía masturbando mi hermanita y yo tuvimos una pequeña y entretenida charla.

 

 

 

MARIANITA: ¡Wow! ¡A mamá le pasó como lo que le sucede a las mujeres que salen en las películas porno que tú me haces ver en nuestro cuarto, Jordy!… ¡Mamá se orinó a chorros!…

 

YO: ¡Tonta, eso no es orina!

 

MARIANITA: ¡¿No?! ¡Entonces ¿cómo se llama eso que mamá hizo?!

 

YO: ¡Se llama un squirt, estúpida!

 

MARIANITA: ¡¿Y eso qué es?!

 

YO: ¡Haichh!… ¡Pues eyaculación femenina! ¡¿Acaso nunca la has tenido? tonta!

 

MARIANITA: ¡Aaaahhh!…

 

 

 

Remedando a la boba de la Marianita también le hice: “¡Aaaahhh!”…

 

 

 

MARIANITA: ¡Yo he tenido eyaculaciones, pero no lanzo semejantes chorrotes!…

 

MAMÁ: ¡¿Tú tan chiquitica y ya has tenido orgasmos y eyaculaciones?!

 

MARIANITA: ¡Pues, por ejemplo, cuando me meto los deditos, mamá!

 

 

 

Mamá se puso de rodillas sobre el sofá sacando culo y me pidió que la siguiera penetrando en perrito.

Agarré esas exuberantes nalgotas y le metí mi instrumento sexual nuevamente por la raja.

 

 

 

MARIANITA: ¡Eso hermanito! ¡Haz que mamá tenga otro esguir! ¡Dejó la alfombra mojada! Jejeje…

 

YO: ¡Es squirt, idiota!… ¡Squirt!… ¡No esguir sino squirt, ridícula!…

 

MARIANITA: ¡Por eso digo que es squirt!…

 

YO: ¡Y tú también sigue tocándote a ver si puedes tener un abundante squirt, pequeña putita!…

 

MARIANITA: ¡También mojaré la alfombra!… Jajaja…

 

 

 

 

Mamá y yo seguíamos gimiendo y gritando. Yo le daba tanto vergazos en su panocha como palmadas en sus nalgotas.

Mi hermanita continuaba estimulándose su rajita.

La niña estaba contenta. A pesar de hacerme enojar varias veces, me daba ternura verla pajeándose de esa manera. Al menos la chicuela era alegre y de ambiente, eso me gustaba.

Proseguí en mi misión de embarazar a mamá, me sentí a punto de eyacular, no obstante debía aguantar, pues no era la posición correcta para esperar preñarla.

Ella volvió a venirse en tremendos chorros de fluido y dando grandes gritos y gemidos de gozo. Fue otro delicioso y potente squirt y mi curiosa hermanita no perdía detalle.

Luego nos pusimos en posición de misionero, yo encima de ella en el amplio sofá. Hicimos el amor y ahí llegó mi gran súper corrida preñadora.

 

 

 

YO: ¡Mamá!… ¡Ahora sí me vengo! ¡Me vengo!… ¡Me vengo, perra!…

 

MAMÁ: ¡Hazlo, mi vida! ¡Hazlo!… ¡Todo dentro de mí!…

 

YO: ¡Oohh!… ¡Mamá!… ¡Oohh!… ¡Uuff!…

 

MARIANITA: ¡El tonto del Jordy ya está eyaculando dentro de ti, mamá!…

 

YO: ¡Ooohhh!… ¡Ooohhh!… ¡Ooohhh!… ¡Te estoy dejando todo el semen adentro, en tu útero, mami!…

 

MAMÁ: ¡Échalo todito, papi!… ¡Lecheáme más!… ¡Espero que me embaraces!… ¡Eso!… ¡Sigue dándome semen!…¡Oohh!… ¡Qué abundancia!…

 

MARIANITA: ¡Que lindo estar en el momento exacto en el que se da la fecundación de mi nuevo hermanito, o hermanita! ¡Qué alegría!…

 

YO: ¡Ooohhh!… ¡Ooohhh!… ¡Uff!… ¡Qué delicia!… ¡Oohh!… ¡Y todavía sigo eyaculando, mami!… ¡Ooohhh!… ¡Ooohhh!… ¡Carajo!… ¡Qué lechada!…

 

MAMÁ: ¡Me estás dejando carrotancadas de esperma!… Jejeje… ¡Así hay más posibilidades de embarazo!

 

YO: ¡Mamá, ya te dejé embarazada! ¡Ahora quiero darte por el culo!

 

 

 

 

Saque la verga de esa mojada y voraz cucota y empecé a masturbarme otra vez. Mamá contestó:

 

 

 

 

MAMÁ: ¡Por mí no hay problema! ¡Dale por el culo a tu madre si quieres! ¡Ahí lo tienes a tu entera disposición, amor!…

 

MARIANITA: ¡Rayos! ¡Mami, perdona lo que te voy a decir, espero que no te pongas brava conmigo ni que me castigues, pero con todo respeto y con mucha franqueza debo advertirte que acabaste de hablar como una autentica puta!

 

MAMÁ: Jajajaja… ¡Esta nenita sí me hace reír!… Jejeje… ¡Estás siempre en la jugada!… Jejeje… ¡En efecto, así hablamos las putas!… Jejeje… ¡Si quieres pensar que yo soy una prostituta allá tú! ¡A mí no me importa que pienses así de mí, siempre y cuando yo sea feliz y me hagan gozar! ¡¿Ok?!

 

MARIANITA: ¡Yo solo lo decía porque esas mujeres de la calle hablan así, pero también porque eres muy fácil, mamá! ¡Te le entregas a todo mundo! ¡Te le estás entregando así tan fácilmente a mi hermano, tu propio hijo!

 

YO: ¡Ya!… ¡No molestes, piojosa! ¡Esta tonta si es metiche e inoportuna! ¡Mejor ve a traer el aceite de cocina para lubricarle el culo a mamá antes de clavarle la verga por ese ojete!…

 

MARIANITA: ¡Está bien, ya voy! ¡Pero no te pongas bravo!…

 

MAMÁ: ¡Mi amor, yo tengo lubricante! ¡Mejor usemos el lubricante recomendado para eso!…

 

YO: ¡OK!…

 

 

 

Mientras yo me seguía pajeando, mamá miró a mi hermanita y le ordenó:

 

 

 

MAMÁ: ¡Mira, Marianita, ve a mi alcoba y buscas en el primer cajón de mi tocador! ¡Ahí encontrarás el frasco del lubricante! ¡Es de color blanco y en la etiqueta dice “Durex lubricante”!

 

MARIANITA: ¡OK!… ¡Ya vengo con él!…

 

 

 

La cansoncita de mi hermanita se dirigió a la alcoba de mamá, subió muy contenta, esperanzada y animada las escaleras. Se veía muy bien con su uniforme de colegio, tenía muy corta esa faldita escolar.

Debo aceptar que aunque Marianita es bien fastidiosita, entrometida y chismosilla, la nena le daba un toque de picardía a las situaciones, y, en esta experiencia sexual con mamá, su ingenuidad fue como la salsa que aderezó correctamente a las papas a la francesa.

Me seguí masturbando y dije:

 

 

 

YO: ¡Mi hermanita si es un cuento, mamá!… Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Qué pecadito con la nenita! ¡Hemos sido tan sinvergüenzas de follar con ella presente mirándonos! Jejeje…

 

YO: ¡Eso no importa! ¡Esa perversita también debe aprender para cuando esté en edad de culiar y le toque follar con sus noviecetes!

 

MAMÁ: ¡Bueno, eso sí!… ¡Es cierto!… ¡Es mejor irle enseñando en casa! ¡Tú también deberías colaborar con eso! ¡Deberías enseñarle en lugar de pasártela de vago!

 

YO: ¡¿Lo dices en serio?!

 

MAMÁ: ¡Sí! ¡Enséñale a follar!

 

YO: ¡Wow!… ¡Mamá!… ¡¿Pero a su edad?!

 

MAMÁ: ¡¿Y qué tiene?!… ¡Tu abuelo y tu tío Memo me lo metieron desde los 9 años!… ¡Y comencé a follar constantemente con primo Nacho desde los 11!… ¡Y ahora las nenas follan aún más prematuramente! ¡Antes mi nenita está tardando mucho en hacerlo y eso es preocupante! ¡Ella debe estar preparada para cuando le toque, lo que supongo será muy pronto!

 

YO: ¡Pues no se diga más , mamá! ¡Yo le enseñaré a esa piojita!

 

MAMÁ: ¡Prométeme que lo harás!

 

YO: ¡Sí, mamá, te lo prometo! ¡Tal vez en esta semana le de unas buenas clasecitas de sexo a esa chinita!… Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Me parece muy bien, papi!…

 

YO: ¡Ella es tonta, habladora y fastidiosa, pero procuraré tenerle paciencia a esa bitchita!

 

MAMÁ: ¡Que así sea, mijo!… ¡Oye, y déjame felicitarte! ¡Estuviste genial en nuestra primera follada! ¡Espero que cuando me des por atrás me dejes completamente loca de placer, amor!

 

YO: ¡Así será! ¡Cuenta con ello, mamá!… ¡Pero esta tonta se demoró trayendo el lubricante!…

 

 

 

Mientras mamá me hacía ahora la paja con sus manitas, le gritó desde ahí a mi hermanita:

 

 

 

MAMÁ: ¡Mi amor, ¿encontraste el frasquito?!!

 

 

 

Y desde allá mi hermanita respondió:

 

 

 

MARIANITA: ¡No, mamá!…

 

MAMÁ: ¡Entonces busca en mi bolso! ¡Tal vez lo eché ahí sin acordarme!…

 

MARIANITA: ¡Voy a mirar!…

 

YO: ¡Apúrate, insecta!… ¡Que estoy que no hallo por clavarle mi vergota por el culo a la puta de mamá!…

 

 

 

Desde arriba mi hermanita gritó lo siguiente:

 

 

 

MARIANITA: ¡Uy, mamá!… ¡En tu bolso tienes un vergota gigantesca! ¡Me asustó ese monstruo!… Jejeje…

 

MAMÁ: Jajaja… ¡Déjala ahí, es mi consolador vibrador!

 

YO: Jajajaja… ¡Ustedes dos son unas bandidas!… Jejejeje… ¡No les da pena gritar eso para que los vecinos las escuchen! Jejejeje…

 

 

 

Mi hermana volvió a hablar desde la alcoba:

 

 

 

MARIANITA: ¡Ya encontré el lubricante, mamá! ¡Me tocó sacar todo lo que había en tu bolso! ¡Vuelvo a meter todo y bajo corriendo!…

 

MAMÁ: ¡Bravo, mi vida, lo encontraste!… Jejeje…

 

 

 

Y mirándome a los ojos, mamá añadió:

 

 

 

MAMÁ: ¡Mi nena es un amor!… Jejeje… ¡Jordy, debes enseñarle sobre sexo con mucho cariño, mi vida!… ¡Trátala muy bien!… ¡Recuerda que es tu hermanita y no cualquier putita de calle o de por ahí!…

 

YO: ¡Descuida! ¡Lo haré!… ¡Le romperé el culo a esa putita como te lo voy a romper a ti!

 

MAMÁ: Jejeje… ¡Dame a mi primero!… ¡Y cuando sea el turno de Marianita dale con cuidado!… ¡Ojo!… ¡Mira que yo aguanto porque soy un mujerón de 48 años de edad y con mucha experiencia, pero recuerda que ella es tan solo una delicada nenita!

 

YO: ¡Bah!… ¡Me importa un culo que lo sea!… ¡Conmigo las cosas son drásticas y fuertes! ¡Disciplina militar ante todo! Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Pilas, papi! ¡Ojo con lo que te advertí!… ¡Que el sexo sea placentero y no doloroso!…

 

 

 

Marianita bajó corriendo con el gigantesco consolador en su manita y nos entregó el lubricante.

 

 

 

MAMÁ: ¡Veo que trajiste a mi amiguito, mi amor!… ¡Qué inquieta eres, mi vida!… Jejeje…

 

MARIANITA: ¡Querrás decir a nuestro amiguito, mamá! ¡A partir de ahora también será mío! ¡Porque me lo vas a prestar ¿no?!

 

MAMÁ: Jajajaja… ¡Claro, mija!…

 

MARIANITA: ¡Me demoré un poco en bajar porque lo estaba mirando! ¡Le oprimí este botoncito y vibra y se mueve! ¡De razón se llama vibrador! Jejeje…

 

YO: ¡Es para que te lo claves en la raja o en el culo!

 

MARIANITA: ¡Ya sé!… ¡Debe hacer maravillas en la rajita! ¡Mamá ¿puedo usarlo ahorita?! ¡Di que sí!…

 

MAMÁ: ¡Pero si lo usas esa cosa te va a desvirgar!… ¡Y yo quería que te desvirgara tu hermano con su pollota!

 

MARIANITA: ¡¿Mi hermano?!

 

MAMÁ: ¡Él me acabó de prometer que te va a dar unas cuantas leccioncitas de sexo desde esta semana!

 

MARIANITA: ¡¿Me lo va a meter este mandril?!

 

MAMÁ: ¡Si, mijita! ¡¿No te gustaría?!

 

MARIANITA: ¡Me cae gordo mi hermano, pero bueno, si eso quieres estoy dispuesta a ponerme en cuatro como su aprendiz!

 

MAMÁ: ¡Pero me gustaría que no te metas a nuestro amiguito todavía y esperes a que tu hermano sea el que te desvirgue con su propia poronga!

 

MARIANITA: ¡Ya me he metido los dedos un montón de veces, mamá!… ¡Me he metido hasta pepinos!… ¡No soy virgen!… ¡Además, papá ya me lo había metido algunas veces!

 

MAMÁ: ¡¿Tu papá?!

 

MARIANITA: ¡Si, lo empezó a hacer un par de meses antes de morir! ¡Me pidió que no dijera nada, pero pues como él ya murió! ¡Ahora he sentido gran necesidad de confesarlo y ya lo dije!… Jejeje…

 

 

 

De razón que la nenita había dicho que mi verga era más grande que la de papá, pues aparte de habérsela visto ya se la había clavado.

 

 

 

YO: ¡Ese papá!… Jejejeje… ¡De razón que el viejo me hablaba algunas cosas de la Marianita!

 

MAMÁ: ¡Vaya, eso no me lo habría imaginado! ¡¿Y qué te decía tu papá sobre la nenita? Jordy!

 

YO: ¡Que dentro de muy poco tendría pelitos en la rajita y un buen par de ricas tetotas! ¡Pero no pensé que ya se la hubiera comido!

 

MAMÁ: ¡Marianita! ¡Dime la verdad! ¡¿En serio tu papá te penetró varias veces? ¿Te hizo el amor?!

 

MARIANITA: ¡Solo me metía los dedos en la rajita, me ponía a masturbarlo, a chuparle el pito un rato y me penetraba suavemente la cuca con la punta de su cosota!

 

MAMÁ: ¡¿Desde hace cuánto empezó a suceder eso?!

 

MARIANITA: ¡Eso empezó a suceder desde aquella tarde que te demoraste en el bingo bazar del colegio con Jordy, día en que papá llegó borracho por la mañana después de haber estado bebiendo con Tobías y no te pudo acompañar a ese evento!

 

YO: ¡Vaya! ¡Papá era todo un pervertido entonces!…

 

MAMÁ: ¡Qué bien se tenían guardado ese secretito!…

 

MARIANITA: ¡Pero ahora te lo estoy contando porque veo que nos tenemos una excelente confianza, mami!

 

MAMÁ: ¡Sí!… ¡Está bien, mi bebita, entonces tu papá ya te estaba entrenando en el sexo! ¡Espero que lo hayas disfrutado, hermosa!…

 

MARIANITA: ¡Sí, mami, mucho! ¡Sin embargo me hace falta más entrenamiento! ¡Mi hermano puede dármelo!

 

YO: ¡Como digas, putita, yo encantado!… Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Bueno, después nos sigues contando sobre esa anécdota! ¡Por ahora, pienso que ya tu hermano recargo suficiente leche en sus huevas y ya podemos entrar en acción nuevamente! ¡Quiero tener su verga en mi hambriento culazo!…

 

MARIANITA: ¡Uuff!… ¡Tampoco he visto jamás sexo anal en vivo y en directo!… ¡Qué emoción!…

 

YO: ¡Ponte en cuatro, perra!… ¡Te voy a dejar ese culote como el Pozo de Kola, el agujero más grande del mundo! Jajajaja…

 

MAMÁ: ¡Hazlo, mi amante!…

 

 

 

Mamá se puso en cuatro sobre la bonita y mullida alfombra moviendo excitantemente ese espectacular culazo.

Mi hermanita empezó a mamar el gigantesco consolador de látex de mamá, era muy chistoso ver cómo esa cosota casi no le cabía en su tierna boquita, sin embargo ella se dio mañas de metérsela ahí.

Yo eché lubricante en mi vergota y en ese tentador culazo. Ese ano se movía queriendo verga. Le metí un dedo y la puta gimió.

 

 

 

 

MARIANITA: ¡Wow!… ¡Qué gemiditos, mamá!…

 

MAMÁ: ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Es que tu hermano me mete el dedo muy rico, mi amor!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!…

 

YO: ¡Y ahí te entra el segundo dedo, mamá!…

 

MAMÁ: ¡Es realmente excitante y delicioso!… ¡Aaaaahhhh!…

 

YO: ¡Y van tres dedos, puta!…

 

MARIANITA: ¡Jordy, yo quiero ver cómo le metes la mano entera por el ano!…

 

YO: Jajajaja… ¡Esa Marianita!… ¡Ten calma, nenita!… ¡Apenas la estoy estimulando!…

 

MARIANITA: ¡Espera me meto este aparato en mi cuquita y te ayudo a abrirle las nalgas a mamá!

 

YO: ¡Eso, pulguita! ¡Por fin usas la cabeza para algo bueno! ¡Ayúdanos!…

 

 

 

Marianita se puso ese gran miembro plástico en su cuquita y con él adentro ayudó con sus manitas a abrir las nalgas de mamá.

Agarré mi voraz vergota y se la clave por el ano a mi mami. Al principio lo hice suavemente mientras entraba, y, una vez estando toda adentro, y viendo que no había ningún problema, inicié una fuerte penetración anal.

 

 

 

MAMÁ: ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Dame con toda amor!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Eso, papi, dale a tu mami con energías!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Así! ¡Así!… ¡Eso, amor! ¡Te estás luciendo!… ¡Qué bueno es tener a un hombre en casa!… ¡Aaaagghhh!…

 

MARIANITA: ¡Recorcholis!… ¡Mi hermano te da muy duro, mamá!… Jejeje… ¡Pareciera que tuviera un motor en esa pelvis!… Jajajaja…

 

YO: Jejejeje… ¡Es que esto está muy rico! ¡Le tenía ganas a este culazo desde hacía mucho tiempo y ahora me estoy desfogando con él!… ¡Oooohhhh!… ¡Oooohhhh!… ¡Oooohhhh!…

 

MARIANITA: ¡Qué culiada tan agresiva!… ¡Qué barbaridad!…

 

MAMÁ: ¡Aaaaagggghhh!… ¡Aaaaagggghhh!… ¡Aaaaagggghhhh!…

 

MARIANITA: ¡Sácale la verga a mamá!… ¡Está que le duele!… ¡Está gritando!…

 

YO: ¡No, tonta!… ¡Está gritando de placer!… ¡Oohhh!…

 

MARIANITA: ¡Aaaahhh!… ¡Tan boba yo!… Jejeje… ¡Pensé que gritaba porque le estaba doliendo! ¡Y es que como le das tan duro por el culo!…

 

MAMÁ: ¡Dame más duro, pelao!…

 

MARIANITA: Jajajaja… ¡Sí, no cabe duda, lo está gozando!… Jejeje… ¡Si le estuviera doliendo no pediría que le dieras más duro!… Jejeje…

 

MAMÁ: ¡Jordy, nalguéame!… ¡Nalguéame ya!…

 

YO: ¡Toma, perra! ¡Toma esto!…

 

 

 

Mientras seguía metiendo con rudeza mi gran vergota por ese suculento ano agarré a duras nalgadas a mi propia madre.

La puta gozaba como nunca y mi hermanita, asombrada, no quitaba los ojos de encima de esa fuerte culiada a la vez que con sus manitas ayudaba a mantener abiertas esas nalgotas.

 

 

 

MARIANITA: ¡¿A mí también me vas a hacer eso?! ¡¿Me lo vas a clavar por mi culito de esa manera tan brutal?!

 

YO: ¡Sí!… ¡Así te haré, putita, de esta misma manera! ¡Es así como se trata a las putas como ustedes dos!… ¡Oohh!… ¡Oohh!… ¡Oohh!…

 

MARIANITA: ¡Uy!… ¡Pero!…

 

MAMÁ: ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡No le creas, mija!… ¡Ya le advertí que no te fuera a dar tan duro!… ¡Aahh!… ¡Aahh!… ¡Aahh!…

 

MARIANITA: ¡Pues más le vale que no! ¡Porque si me va a dar así de duro por el culo me va a desbaratar! ¡Desafortunadamente papá nunca me lo metió por ahí, así que no tengo experiencia anal!

 

YO: ¡Tranquila, piojita! ¡Ya verás cómo te voy a dar tus clases de sexo!… ¡Oohh!…

 

MAMÁ: ¡Aaahh!… ¡Me estoy corriendo!… ¡Aaaaaggggghhhh!…

 

YO: ¡Córrete, puta!…

 

MAMÁ: ¡Aaaaggghhh!… ¡Aaaaggghhh!… ¡Aaaaggghhh!…

 

MARIANITA: ¡Oh!… ¡Mi Dios!… ¡Apenas mamá se estremece todita!… ¡Pareciera como si le estuviera dando un ataque! Jejejeje…

 

 

 

Nuevamente mamá se vino lanzando fluidos.

Marianita lanzó un aullido de emoción al ver a mamá eyacular teniendo mi rígida vergota dentro de su estupendo culazo.

Mamá me pidió cambiar de posición. Ahora me senté en el sofá con mamá sobre mí haciéndome chupar sus tetas.

Mi hermanita se sentó al lado a seguir dándose potente consolador por su rajita. Lo encendió ya que era vibrador y funcionaba con una batería recargable.

La pequeña niña empezó a sentir maravillas en su chochito y a gemir de gusto al tener ese vibrador encendido.

Tanto mamá como la nenita se vinieron varias veces. Mamá lo hacía a chorros inmensos y fuertemente propulsados y mi hermanita apenas echaba líquido.

Mamá me dio la espalda y mientras le agarraba las tetas desde atrás la seguía culeando rico. La puta lanzaba tremendos gritos de placer anal. Era una delicia verla y escucharla.

Me corrí en su culo. Internamente la llené de grandes cantidades de espeso y caliente semen.

 

 

 

 

YO: ¡También te embaracé por el culo, mamá!… Jajaja…

 

MAMÁ: ¡Qué delicia!… ¡Mijo! ¡No sé cómo agradecerte lo que hoy has hecho por mí, mi amor! ¡Estoy segura que tú si me preñaste!… Jejeje…

 

YO: ¡Yo sé cómo puedes agradecerme, mamá!… Jejeje…

 

MARIANITA: ¡Déjame adivinar cómo mamá puede agradecerte, hermanito! ¡Dejando que le des más verga y sexo! Jajaja…

 

YO: ¡Exacto chinchecita! ¡Has adivinado, pequeña!… Jajajaja…

 

 

 

Más o menos a las dos semanas mamá se hizo la prueba de embarazo, y adivinen qué… exacto, salió positiva, eso la llenó de alegría, por fin pudo quedar embarazada.

Marianita y mamá me felicitaron, yo fui el único macho capaz de poder preñarla, y lo hice a la primera.

Le enseñé buen sexo a mi hermanita y seguí follando con las dos mujeres del hogar. Como el macho de la casa que soy tengo todo el derecho de follarlas cómo, dónde y cuándo yo quiera.

En otras entregas, es posible que narre las experiencias con mi hermanita y otras con mamá.

 

FIN.

Escrito por Siremis.